El señor Casado

Cómo una simple reunión de trabajo con ejecutivos maduros se puede transformar en el momento más excitante y placentero de mi carrera.

El Seño Casado.

Buenos días señores?, así comenzaba la conferencia que había estado preparando hace meses. La empresa en que trabajo me había solicitado crear un plan de negocios para una importante empresa internacional.

Comencé dando la introducción al tema para seguir con el desarrollo de éste. Después de haber expuesto dos horas vino el coffe break. Salí raudamente de la sala de reuniones, puesto que tenía unas ansías enormes de ir a orinar. Me dirige al servicio, y como estaba tan apurado entre y no me percate de quienes se encontraban ahí. Todos los cubículos individuales se encontraban ocupados, como yo no aguantaba más, no me quedo otra que acercarme a los urinarios, no me gustan porque siempre me termino mojando. Baje la bragueta del pantalón y me dispuse a sacra mi miembro para orinar, estaba en lo mejor cuando el individuo que se encontraba a mi derecha me dice: "yo tampoco aguantaba más", di vuelta la mirada y lo primero que vi fue en pene rosadito, con una gran cabeza, de un grosor considerable, que se encontraba igual que el mío orinando, era de buen tamaño, y su dueño le daba movimientos bastante sugerentes. Poco a poco fui subiendo mi mirado y me encontré con el rostro más perfecto que había visto, su perfil era el de un dios griego, su nariz respingada, sus labios carnosos, pestañas largas y ojos almendrados que me provocaban una tremenda tranquilidad.

Disculpa le dije, tú eres uno de los ejecutivos de la reunión.

Sí me respondió, está bastante interesante lo que estas presentando, pero tus ideas son muy sofisticadas y novedosas, no sé si a los otros ejecutivos ya mayores, les irá a gustar, pero a mí me tienes encantado.

Termino de decir eso, sacudió su pene, sacudió su pene lo guardo dentro de su slip blanco y cerro la bragueta. Yo realice la misma operación y lo seguí a los vanitorios para lavarme las manos. Seguimos conversando de la reunión y de lo bien que lo estaba haciendo, pero si quería captar la atención de los otros ejecutivos tenía que seguir ciertas reglas y procedimientos que me comento.

Regresamos al salón y bebimos un café compartiendo con el resto de los colegas.

La segunda parte le correspondí a mi compañero, así que aproveche para reorganizar las ideas y replantear la temática de acuerdo a los consejos que me dio el ejecutivo, para finalizarlas después del almuerzo.

Termino la segunda charla y nos hicieron pasar al salón principal para continuar con un almuerzo de camaradería. No saben la sorpresa que me dio que justo a mi lado se sentara mi querido ejecutivo, de ahora en adelante, Sr. F, aprovechamos de conversar de cosas triviales, nuestras vidas, entre otros cosas, así transcurrió de lo más relajado el almuerzo.

Terminado el almuerzo, los dieron 1 hora 30 minutos para acomodarnos en nuestras habitaciones y tomar un descanso. Estas fueron organizadas para tres personas, ellos eran ejecutivos y nosotros solo 2. Subimos a nuestra habitación mi compañero y yo, una vez en la piezas estábamos comenzando a organizarnos cuando alguien toca, eran otro ejecutivo el más influyente y Sr. F con su maleta en la mano, nos pidieron si Sr. F podía compartir nuestra habitación, debido a que no habían más habitaciones disponibles en el hotel y a ellos les sobraba una persona y por ser él el más joven y rondaba nuestras edades, pensaron si se podía quedar con nosotros, por mi parte no existía ninguna objeción y Enrique, mi compañero, tampoco tenía ninguna.

Elegimos nuestras camas, Sr. F eligió la de la derecha, Enrique la de la izquierda y yo quede al medio. Comenzamos a desempacar, Enrique se tendió en su cama Sr. F se dirigió al baño, después de 5 minutos escucho: "Roberto puedes traerme una toalla que no hay ninguna aquí adentro". Golpee, me dijo pasa, al entrar me encuentro con un competo adonis todo mojado, las gotas le recorrían todo su cuerpo, tenía algo de panza, pero lo hacían verse aún más sexy, salgo de mi trance y le entrego la toalla, me lo agradece y salgo rápidamente del baño.

Al salir Enrique me dice que no va a poder quedarse y yo tendría que terminar la presentación sólo. Pero que él mañana en la mañana estaría presente para conocer la decisión de los ejecutivos. Su mujer había tenido un accidente y tenía que irse al hospital de inmediato, me entrego las instrucciones y el material de apoyo y se fue.

Al rato salió con la toalla enrollada en la cintura Sr. F y me pregunto por Enrique, le conté lo sucedido y puso una sonrisa más que maliciosa. Se tendió en su cama y se quedo dormido, yo aproveche para arreglar la presentación, plantear las ideas que me había dicho Sr. F y dejar todo listo. Al ver nuevamente a la cama de Sr. F veo que la toalla se había desprendido de la cintura, dejando al descubierto gran parte de su cuerpo, era bastante velludo, pelo por todo el pecho, por alrededor de sus tetillas, hasta más allá del ombligo. En el sector de su entrepierna la cosa no era muy distinta, todo estaba plagado de vellos y en el medio aparecía un pene para nada despreciable descubierto que comenzaba a tomar un mayor tamaño, no se si era eso o yo me encontraba muy caliente, sólo con verlo así.

Me dirigí al baño para refrescarme y prepararme para la presentación. Me desnude y entre a la regadera, me encontraba tan caliente que tuve que empezar a masturbarme para que se me bajara la erección que tenía con el jabón recorría todo mi cuerpo, cada rincón subía y baja, y con sólo pensar que afuera en la cama se encontraba desnudo Sr. K, más me excitaba, pensando que hace muy poco también ahí se había estado bañando él, recorriendo su cuerpo, uyyyyyyy, ohhhhhh, estaba en lo mejor cuando entra el ejecutivo y me dice disculpa es que no aguantaba más, y comienza a orinar, sin despegar su ojos de mis manos que escondían inútilmente mi pene en todo su esplendor. Le pido disculpa todo ruborizado y me dice no te preocupes todo lo hacemos, seca su pene y sale nuevamente como si nada del baño. Yo no pude seguir masturbándome una por la vergüenza y otra porque se me estaba haciendo tarde. Con mucho pudor salí del baño y Sr. F ya estaba casi vestido, me dijo apúrate no querrás llegar tarde.

Su corbata se había desatado y me dijo:

Disculpa me puedes ayudar con esto, es que mi esposa es la que me hace los nudos.

Ningún problema, le dje, y me acerque donde estaba él, un movimiento brusco desata mi toalla y me deja totalmente desnudo nuevamente delante de él.

Hago como si nada hubiese pasado y sigo anudando la corbata, pero siento que me está devorando con la mirada. Me dice que cuando tenía mi edad , tenía un cuerpo parecido al mío y que le pasaba constantemente lo que me estaba pasando a mí, nuevamente mi pene se había erectado y lo trate de cubrir inútilmente con mis manos, y me dijo: "No importa no debes ocultar tu lindo cuerpo, vístete para que bajemos juntos".

Una vez con los demás ejecutivos, Sr. F les explico el problema que habíamos tenido con Eduardo y les dijo que yo iba a continuar con la tercera y última parte de la presentación.

Terminamos a eso de las 7 de la tarde con las preguntas que surgieron y las sugerencias que se plantearon. Dijeron que estaban muy contentos con la presentación y que el día de mañana nos daban una respuesta. Salimos todos muy contentos de la reunión cenamos y teníamos toda la tarde y mañana libre. Me dirigí a la habitación y Sr. F ya está ahí se estaba desnudando y buscando unos bañadores en su bolso, me dijo porque no lo acompañaba al sauna y luego a la piscina, estaba tan cansado, pero seguí con ganas de mirar a este espécimen de macho, así que le dije que me esperara, pero que no había traído traje de baño. Bueno me dijo, bajamos igual, por último me acompañas sólo al sauna.

Se encontraban totalmente vacías las dependencias, así que entramos solamente con las toallas al sauna, una vez adentro seguimos conversando de nuestras vidas. Me dijo que a sus 40 años aún le faltaban cosas por vivir y que su esposa era media reacia a innovar en cuanto a la cama se refería, me dio un poco de pena, pero a la vez una luz de esperanza que podá llegar a pasar algo con mi nuevo amigo.

Tenía que insinuarme, solté mi toalla y me costo de estómago en ella, esperando ver la reacción del Sr. F, este soltó su toalla, y comenzó a acariciar su miembro, ¿Quién estaba seduciendo a quién?, poco a poco este comenzó a ponerse duro, sin llegar a su máximo esplendor, este ejecutivo era todo un semental, me dijo que hace tiempo no tenía sexo con su señora y que hace mucho más que no se masturbaba y verme en la tarde a mí, le había recordado sus años de juventud, me acerque más a él y le dije tranquilo, todos lo necesitamos alguna vez. Le tome su pene y este pego un respigón, sólo comenzó a llegar a su estado máximo, el vapor del ambiente hacia más fácil la tarea, baje mi boca hasta su pene y lo comencé a recorrer, tenía las venas hinchadas, ya salía precum por su uretra, a la vez tocaba sus testículos, grandes y peludos para estimular más la acción. Tomo mi cabeza y comenzó a posicionarla sobre su pene, le dije tranquilo, yo sé cómo hacerlo, déjame a mí, que te voy a mamar como nunca antes te lo han hecho, no necesitas obligarme a nada, tú sólo déjate llevar, pero dijo aquí alguien nos puede ver, si tienes razón vamos a la habitación, pero antes debemos bajar nuestros penes, así que salimos del sauna y nos metimos a la ducha con agua fría, que poco a poco fue regulando nuestro temperatura y dejando flácidos nuestros penes, unas ves listos nos fuimos a la habitación.

Una vez allí la poca ropa que traíamos puesta la arrancamos de nuestros cuerpos. Lo bese como nunca antes se lo habían hecho, tome sus manos, bese su cuello, comencé a morder sus tetillas, estás se comenzaron a endurecer, baje por su pancita, que no era mucha, es más estaba bastante tonificada, luego jugué con su ombligo, me picaban sus pelos, pero totalmente excitante, baje y baje hasta llegar a sus grandes bolas, las metí una a una en mi boca, intente meter ambas, pero me produjeron arcadas, al volver a mirar para arriba su miembro estaba completamente erecto, debía medir unos 16 a centímetros, bastante grueso y con una cabecita bastante particular, muy gorda, la recorrí desde el troco a la cabeza, jugué con mi boca y la punta de su pene, entraba y salía, lo estaba haciendo llegar a otra dimensión, las palabras que me dice y los sonidos que emitía demostraban que lo estaba gozando, nunca antes había sido mamado por un profesional, subía y bajaba, dejaba que entrara por completo en mi boca, aunque era difícil por su grosor, pero no imposible, jugaba con sus testículos, recorría con mis manos su culo, apretadito y virginal, no quería asustarlo, pero quería que llegará al placer, así que poco a poco fui metiendo un dedo en él, al principio se resistió, pero poco a poco se fue excitando más y más y no se daba cuento como iba entrando sin ningún pudor dentro de él. Comenzó acelerarse a monear sus caderas más rápido, no quería correrse aún, pero le dije, esta noche te vas a correr las veces que quieras así que entrégame toda tu leche, que estoy ansioso de probarla, así que aumento los movimientos, seguí con mi lengua y mis dedos hasta que un grito agudo y masculino me dicen me vengoooooooooooooooooooooooooo, ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, uyyyyyyyyyyyyyyyyyy, oohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, y repleta y boca y mi cara con su leche calentita, saboreo la que queda en mi boca y suelto poco a poco su pene, quitándole hasta la última gota, subo hasta su cara, le beso en los labios, hago que pruebe su néctar y lo obligo a que lame y cara y quite los restos de su leche, al principio no quería, pero la calentura lo envolvió y su sabor lo atrapo. Nos seguimos besando y nos dirigimos juntos a la cama, sin separarnos, y lo tire sobre ella, y me acosté encima de él, besándonos y comiéndonos la boca.

Nuestros cuerpos se unieron, mi pene duro chocaba contra sus piernas, su pene ya se encontraba en estado normal, me dijo quiero seguir probando cosas nuevas, como tú aún estás muy caliente y yo voy a tardar un poco en volver a endurecer mi miembro me gustaría que me enseñaras a mamar el tuyo, dicho y hecho, sin más preámbulos, me subí sobre él mi me senté sobre su pecho, debe mi pene duro a la altura de su boca y este comenzó a acariciarlo con sus manos, era la primera vez que tenía un pene adulto entre sus manos, sólo había tocado en de su hijo pequeño para ayudarlo a orinar, así que lo recorrió todo con sus grandes manos, luego innatamente se lo fue llevando su boca, comenzó con la punta del glande al sentir su lengua sentí una corriente eléctrica por todo mi cuerpo, se lo tragaba como si fuera un chupete dulce, poco a poco lo introducía, al principio me raspaba con sus dientes, pero después fue tomando el rimo, yo no decía nada, no quería romper el momento, sólo me limitaba a suspirar y emitir sonidos, ohhhh, ahhhhhhhhh, sigue así….. vamos papito me estas mamando muy bien.

Se estaba transformando en un experto en la primera sesión, no me di cuenta cuando ya tenía mis 16 centímetros metidos en toda su boca, y no era fácil, porque es de un grosor considerable, pero él se estaba transformando en un maestro, no había nada que enseñarle, mientras seguí mamando bajo sus manos hasta mis glúteo, los comenzó a masajear, los apretaba, los recorría, luego llegó hasta el lugar prohibido, comenzó lentamente a abrirse paso por mi esfínter, un dedo muy lentamente, la actividad y excitación del momento, permitían que se lubricara, esto y el aumento de la mamada, me empezó a excitar aun más sentía que ya estaba llegando al clímax absoluto, introdujo un segundo dedo y mis caderas empezaron a taladrar su boca estaba a punto de eyacular, le quise sacar mi miembro de su boca, pero no me dejo, me vengo, ya voy …yaaaaaaaaaaaa, ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, empecé a convulsionar de la excitación, estaba depositando toda la leche que tenía acumulada desde la tarde cuando me sorprendió en la ducha. Se tragó hasta la última gota, su boca se encontraba pegajosa y aún con rastros de leche me baje y lo bese y saboree mis líquidos y su aliento.

Poco a poco comencé a recobrar la calma, me acosté a un costado de él, en una cama single y me apegue a su cuerpo. Lo bese nuevamente y me di cuenta que ya se encontraba listo para la acción nuevamente, le dije que primero debía lubricarme un poco más antes de seguir, pero antes que le dijera eso, el ya se encontraba ensalivando mi culito, sus dedos se fueron introduciendo muy lentamente, cada vez que los sacaba me lubricaba nuevamente.

Sube hasta mi cuello y comienza a besarme, se acerca a mi oído y me dice:

"ahora vas a sentir a un hombre de verdad, a todo un macho en celo".

Hazme todo tuyo, estoy listo para recibirte.

Sin más preámbulos me embistió de una sólo estocada introdujo todo su cabecita, yo plante un grito de dolor y excitación, pero eso no le importo siguió metiendo centímetro a centímetro, con fuerza sin piedad, yo le pedía que parara un poco, pero no hizo caso siguió más y más, para calmarme tomo mi pene que estaba completamente duro nuevamente y comenzó a masturbarme, cada vez que bajaba el prepucio, me metía aún más su tranca, hasta el final, después de un rato, ya mi orto se había acostumbrado a su nuevo extraño y pedía más, su mano estaba llena de precum y más rápido se movía, sentí como sus vellos tocaron toda mi cola.

Dejó de lado mi pene y tomó mis caderas para manear mejor la situación, no sé qué tipo de movimiento realizó, pero ahora me encontraba con las piernas totalmente abiertas y el debajo de mí, con su mástil por completo dentro de mí. Comenzó a bombear se dejaba llevar, así era como se follaba a su esposa, así era como le gustaba gozar y ella se negaba, no podía entender como ella se negaba a tal placer, este hombre era todo un semental, que me estaba partiendo en dos y yo lo gozaba como toda una puta, pero recordé que soy un macho, así que tome sus manos y cada vez que el me estacaba, yo acercaba aún más mi culo a su miembro, con el fin de que este entrara aún más adentro. Después de un buen tiempo en esa posición, me dijo que me parara y me apoyara en el umbral de la puerta, luego él comenzó a introducir nuevamente su miembro dentro de mí, comenzó el mete y saca aún más rápido, era una imagen para inmortalizar, yo ahí siendo ensartado por un semental y con el pene completamente duro, comenzó a bombear más fuerte, tomo mi pene y comenzó aumentar los movimientos, yo movía locamente mis caderas sobre su base esto, aumento aún más el erotismo hasta que el no aguantó más y siento como su miembro se empieza agrandar dentro de mí, su cabeza se prepara y se ensancha aún más y comienza a llenar todo mi esfínter de leche, por mi parte y pene lanza desesperadamente líquidos de semen que llegan a la pared, su pene comienza a salirse lentamente de mi culo, sus manos aún no dejan libre mi miembro, me doy vuelta y lo brazo, beso sus mejillas coloradas, sus labios húmedos y seco las lágrimas que van saliendo de sus ojos.

Me agradece que le haya entregado mi culo, y me cuenta que siempre él había soñado con culearse a alguien, pero su esposa no lo dejaba, porque era muy católica, por eso las lagrimas en sus ojos, además del tremendo orgasmo que le había provocado. Yo por mi parte estaba lleno, muy contento, estaba hecho un hombre completo. Lo conduje a mi cama y nos acostamos de costado, lo abrace por detrás y le besaba su cabeza, poco a poco nos fuimos relajando y quedando dormidos en esa posición.

Suena mi celular, es Enrique me dice, que llegará al hotel cerca de las 11 de la mañana para conocer el resultado de los ejecutivos, veo la hora y eran recién las 5 de la mañana, le dije que no había problemas que ya tenía todo listo, le pregunte por su esposa y me dijo que estaba mucho mejor, y que disculpara la hora que recién había llegado a su casa, había pensado en volver al hotel, pero como debía llevarle algunas cosas a su esposa había tenido que volver. Le dije que no se preocupara y que descansará un poco y a las 11 nos veíamos.

Menos mal que no había vuelto al hotel, porque me habría encontrado completamente desnudo junto al Sr. F y como le iba a explicar tal situación. Sentí que mi adonis se acomodaba en la pequeña cama y se acurrucaba en mi, aproveche la oportunidad para acariciarlo sin pudores recorrer su cuerpo y cuál fue mi sorpresa que al llegar a su entrepierna su pene se encontraba algo morcilloso, ya comenzaba a despertar nuevamente, y eso que sólo hace dos horas habíamos terminados de amarnos, era todo un fogoso este ejecutivo aún dormido. Baje mis manos hasta su culito virgen y se encontraba a mi entera disposición, apretadito rosadito al igual que su glande, lo comencé a masajear y no sé si entre sus sueños o la realidad, Sr. F comenzaba a pedir más y más, lleve mi dedo a mi boca y le di una gran porción de saliva, comencé a introducirlo lentamente por su ano, el ejecutivo comenzó a suspirar y a balbucear que le diera más, así que aproveche el momento y volví a meter un segundo dedo, me estaba abriendo paso en un culito completamente apretadito, me levante de la cama con mi pene completamente erecto y fui a buscar un poco de crema para después de afeitar, era lo único que tenía a mano para seguir dilatando mi tesoro, cuál fue mi sorpresa, que al regresar Sr. F se encontraba en 4 patas listo y dispuesto a seguir experimentando conmigo, eso me excito aún más y mi pene salto de la emoción, ya lo había dilato un buen poco, así que unte un poco de crema y comencé a meter los dos dedos, él desesperadamente me pedía más, así que me anime a introducir un tercer dedo, el grito de placer, jugaba con mis tres dedos adentro de su ano y mi amigo desesperadamente se da vuelta y me grita, métemelo de una vez y hazme tu hembra, le dije no te voy a ser mi macho, unte un poco de crema en mi pene puse en la punta de su culo, Sr. F se encontraba desesperado por ser penetrado así que me agarro y me tiró a hacia él y de una metí completamente mi miembro adentro de él. Tuve que tapar su boca para que el grito no se sintiera en todo el hotel, deje que se acostumbrará su esfínter a mi pene poco a poco comencé el mete y saca, al principio fue lento, no quería provocarle daño, pero su insistencia fue mayor, así que comencé a follarlo más y más fuerte, usaba un vocabulario de lo más vulgar cuando lo estaba taladrando, lo que me calentaba aún más y me hacía metérselo más a fondo. En un momento me detuve para descansar y aprovecho de cambiar posiciones me acosté boca arriba en la cama y el de una se sentó dentro de mi pene, me produjo un dolor/placer indescriptible que ambos lanzamos un grito que lo callamos con un beso, comenzó a cabalgarme desesperadamente, mi pene se endurecía cada vez más dentro de su culo.

Comenzó a realizar un vaivén de viene y va, al parecer lo había visto como las mujeres se metían y cabalgaban a los hombres en las películas porno, era un experto, aunque era la primera vez que lo hacía, lo había visto tantas veces que ya tenía toda la teoría, sólo le faltaba la práctica, lo tome de sus caderas y lo ayude para que pudiera estremecerse como él quisiera que supiera que en mis brazos nada de iba a pasar.

Bajo sus manos hasta mi ano y comenzó a meter y sacar sus dedos, más en placer que estaba provocando en mi pene, era totalmente de otro mundo, tome su pene y lo empecé a masturbar fuertemente cada uno acelero los movimientos y siento como un chorro de leche llega hasta mis labios, el ejecutivo estaba eyaculando nuevamente y en cantidad desorbitantes , callo eche por todo mi pecho, lo que a su vez provoco, que apretará al máximo su esfínter y este estimulará aún más mi miembro, este comenzó a hincharse para posteriormente desparramar todo mi semen dentro de mi amado, estábamos completamente exhaustos, se acomodó nuevamente sobre mí, me beso los labios y nuevamente nos quedamos dormidos.

A las 8 de la mañana suena el teléfono eran de recepción para informarnos que el desayuno ya se había comenzado a servir desde las 7 de la mañana y era hasta las 9, además el debíamos dejar la habitación antes de las 10 de la mañana. Así que desperté a Sr. F y me fui a la ducha, estaba enjabonando todo mi cuerpo cuando aparece nuevamente él con una tremenda erección y me dice:

Me puedes bajar está erección, si sigo así no podré ponerme nada y todos se darán cuenta que ando muy caliente.

Sin decir palabras le doy la mano y lo introduzco a la ducha, me arrodillo ante él, y comienzo a mamarle nuevamente su rosadito miembro, me y saco, al parecer estaba bastante caliente, porque no tardo mucho en llenar mi boca con su leche, me paro y lo beso, nos bañamos mutuamente, para no seguir perdiendo tiempo porque estábamos un poco atrasados. Nos vestimos y antes de bajar, abrimos una ventana, y echamos un poco de nuestros perfumes al ambiente, porque olía a sexo por todas partes.

Éramos los últimos que estábamos desayunando, los demás ejecutivos se encontraban leyendo en el vestíbulo, mientras que otros estaban ordenando en la sala de reuniones y el resto estaba ordenando los bolsos. Desayunamos rápidamente, pero yo tenía un hambre tremenda, después de tanta actividad, mi amigo al parecer también porque ambos devoramos nuestros paltos y fuimos a buscar más comida, una vez listos, subimos nuevamente la pieza, el olor a sexo había bajado un poco, pero aún persistía nuestro olor, ordenamos cada uno nuestros bolsos, sin decir ninguna palabra, echamos otro poco de perfume a la habitación nos alistamos y salimos, tomamos el ascensor el cual iba vació sabíamos que hasta aquí había llegado nuestro encuentro, por lo menos por ahora, así que nos abrazamos y nos dimos un largo beso justo antes de que se abrieran las puertas y llegáramos al vestíbulo, dejamos la llave en recepción y los bolsos ordenado, nos dirigimos a la sala de reuniones donde ya estaban casi todos los demás ejecutivos, eran como las 10 así que ordene el material de apoyo y me dispuse a conversar con el resto de los ejecutivos, mientras algunos discutían y entablaban conversaciones paralelas. A las 11 en punto llegó Enrique para comenzar la reunión y saber si después de esta larga y gratificante exposición ya habían tomado una decisión, el mayor de los ejecutivos Don Víctor tomó la palabra y agradeció nuestra exposición y el trabajo entregado, lo que le había parecido el proyecto. Una vez que expuso todo lo que tenía que decir, dijo que como cada uno sabía tenía diferentes opiniones iba a dar su voto públicamente si aceptaba o no el proyecto y tenía que argumentar las razones de su decisión.

Estábamos empatados 2 a 2, sólo quedaban tres votos, don Víctor dijo que apoyaba el proyecto e íbamos 3 a 2, otro ejecutivo, muy terco y un poco antipático lo rechazó quedando 3 a 3, sólo faltaba un voto y era el de mi hombre, que iba a decir, quería seguir trabajando con nosotros o dejaría todo hasta aquí y no nos volveríamos a ver nunca más, lo pensó y dijo:

Creo que el proyecto es muy innovador, incluso para el pensamiento de nuestro de nuestra compañía, pero si a través de las condiciones actuales no hemos sido capaces de remontar en los números y hemos contratado a estos jóvenes para que nos entreguen alternativas nuevas desafiantes e innovadoras, creo que lo mejor que debemos hacer es arriesgarnos y apostar por ellos, si ustedes creen que a lo mejor no están dispuestos a tener una renovación más fuerte y juvenil, yo me encuentro en las condiciones de llevar a cabo el proyecto y supervisar de cerca a estos dos muchachos.

No se dijo más y nuestro proyecto había sido aceptado, le di la mano a Enrique felicitándonos sobre lo acontecido y a cada uno de los ejecutivos agradeciéndoles su confianza y que no los íbamos a defraudar.

Antes de salir don Víctor y Sr. F nos llamaron para que nos pusiéramos de acuerdo como íbamos a llevar a cabo el proyecto, intercambiamos números, mails y direcciones, para que todo se fuera realizando de la mejor manera.

Antes de irnos Sr. F me entrega un papel el cuál decía:

"Hay algunas cosas que no me quedaron muy claras, me gustaría plantearte mi punto de vista, nos vemos en el café, e estaré esperando a eso de las 8 pm, no faltes, y trae ropa liviana, y si es posible sin ropa interior."

Un abrazo que estén muy bien.

noche.de.fuego@hotmail.com