El Semental y la Doncella

EL SEMENTAL Y LA DONCELLA

Huyendo de las preocupaciones diarias, fui al campo den búsqueda de la paz necesaria…..la tarde caía y me encontraba en un claro, rodeada de un mar de trigo, cuyas mieses eran mecidas por el viento, semejando el oleaje marino; todo era paz: el canto de las aves que esparcían sus dulces notas, regalándome un concierto magistral, digno de la más regia sala musical.

A lo lejos se oye el rumor de un trueno y en el aire se percibe un olor a humedad, a tierra fértil fecundada por el agua…….poco a poco el cielo se oscurece y es cubierto por un manto de oscuras nubes que presagian tormenta; la suave brisa se transforma en un ventarrón que levanta polvo y hojas a su paso.

Repentinamente los cielos se abren, dejando caer grandes gotas y desatándose un diluvio que me emparama totalmente, mis ropas se pegan a mi cuerpo como una segunda piel, haciendo que una sensación de extrema frialdad me invada……trato de guarecerme bajo las copas de unos árboles cercanos, pero son inútiles mis esfuerzos ante la muestra de la fiereza de la naturaleza.

El temor me invade pues la lluvia arrecia y no consigo un refugio, trato de huir y buscar cobijo, caigo varias veces en el barro pero no cejo en mi empeño….en medio de la oscuridad nocturna se ven y oyen relámpagos, lo que me permite distinguir a la distancia la abertura de una caverna….corro hacia ella y al llegar allí sacudo mi cuerpo y mis ropas, en un vano esfuerzo para alejar el frío que me invade, al fondo vislumbro una tenue luz y la sombra que produce un fornido cuerpo moviéndose alrededor…….me acerco sigilosamente y puedo verte a plenitud: te has quitado la ropa mojada, la cual estás poniendo a secar cerca del fuego, eres muy alto, tu fuerte cuerpo está cubierto por una capa de vello suave, produciendo en mi un cosquilleo por mi columna, haciendo que la piel se me erice y que los pezones erectos se me noten a través de la mojada vestimenta.

Un sonido, producido por mis movimientos, hace que te voltees en posición de alerta, tensando tu cuerpo….tu espléndida desnudez me excita enormemente y también me atemoriza, pues además de estar muy bien dotado, tus ojos tienen un frío brillo, semejante al de una fiera dispuesta al ataque….al notar mi presencia te relajas, pues notas que no represento un peligro para ti y extiendes tu mano, invitándome a acercarme al fuego, al ver que estoy temblando me estrechas en tus brazos, envolviéndome con el calor de tu cuerpo, vas quitándome la ropa mojada y colocándola al calor de la hoguera.

La sensación de tu piel junto a la mía, hace que mis instintos despierten repentinamente: mi respiración se agita, no puedo evitar el pasar mis manos por tu velludo cuerpo y pegarme lo mas que pueda a ti, para absorber todo el aroma que emana de ti…..levanto el rostro y busco tu boca desesperadamente, me engolosino con tus labios y tu lengua que no tarde en responder a mi caricia. Lentamente mi boca va bajando por tu garganta, continuo en tu pecho deteniéndome en tus tetillas que me tientan a lamerlas, chuparlas, morderlas, un gruñido sordo sale de tus labios apretados, indicándome que el animal que vive en ti está despertando.

Mis erectos pezones van precediendo el camino que recorre mi húmeda lengua por tu vientre, el cual se tensa y los vellos que lo cubre se erizan….mi respiración se hace mas profunda y agitada a medida que voy acercándome a tu erecto pene, el cual se encuentra enhiesto y tembloroso, ofreciéndose como una golosina a mis sentidos……..no puedo evitar el admirarlo, pues se presenta ante mis ojos de forma majestuosa y tentadora, cubierto por una fina capa de liquido que no dudo en recoger con mi lengua, catando su peculiar sabor……voy lamiéndolo por todo alrededor, sintiendo en mis papilas toda su textura, sus venas hinchadas y palpitantes, su piel aterciopelada al tacto….de rodillas lo coloco entre mis pechos para iniciar con ellos un movimiento de vaivén, que hace que tu glande se acerque y se aleje de mis labios ansiosos…..con mi lengua voy acariciando juguetonamente cuando está a mi alcance, recogiendo las gotas de semen que comienzan a salir de ti…….Tu cuerpo se tensa repentinamente, haciéndome saber que estás muy cerca de eyacular , por lo que te introduzco en mi boca, sorbiendo ese inmenso chorro que no puedes controlar………gimes y tus manos me aferran por los cabellos, marcando el ritmo que deseas sentir, me inundas la boca con la explosión de tu semen, el cual bebo como un sediento al encontrar un oasis….estamos inmersos en una vorágine de sensaciones, en donde nuestros instintos se han desatado de forma incontrolable, aumentando nuestro placer y nuestras ansias.

Con tu pene aún en mi boca, te tomo de las manos y hago que te sientes, tus piernas temblorosas siguen mis indicaciones y me coloco entre ellas arrodillada, pues me he transformado en una lujuriosa hembra, que desea exprimir en su totalidad a ese semental que el destino ha puesto en su camino, por las comisuras de mis labios escurren gotas de ti, que caen en mis pechos ardientes…..con una mano esparzo tu simiente por mi cuerpo, cubriéndome con una fina capa que me llena de tu olor a macho cabrio……….esto me excita enormemente, haciendo que mi vagina destile sus jugos, ardiendo de ganas de tenerte dentro de mi, temblorosa de pasión, con una mano te ubico en la estrecha y húmeda entrada, tus manos en mi cintura va introduciéndote lentamente, causándome una sensación de ardor y placer de forma simultánea, ya que tus dimensiones son extraordinarias ante tan estrecha abertura…..sin poder evitarlo, me dejo caer súbitamente, el dolor de tenerte totalmente dentro me paraliza por un minuto, cuando me sobrepongo al mismo, la sensación palpitante se ha transformado en una hoguera de deseo que hace que inicie un movimiento de vaivén a lo largo de tu erguido ariete, me aferro a tu cuello y nos fundimos en un ardiente beso, que se confunde con nuestros gemidos…..hemos perdido la noción del tiempo, solo estamos conscientes de nuestras pasiones desatadas, saciando nuestros sentidos en esta vorágine de placer que sobrepasa cualquier tipo de control…….lágrimas fluyen de mis ojos, que tu limpias con tus labios, sabiendo que son producto del extremo placer que me haces sentir, juntos llegamos a la cima del placer fundiéndonos en un solo ser que se disuelve y se integra simultáneamente.

Aun temblosos ambos por el esfuerzo, haces que nos acostemos en el frío suelo de la caverna, tú encima de mi, yo cruzando mis piernas por tu cintura……te incorporas y empiezas a embestirme furiosamente, haciendo que nuestros cuerpos dejen una huella en la tierra que nos sostiene….el placer vuelve a inundarme como una ola enfurecida, pidiéndote, exigiéndote que me llenes de ti, mis manos tienen vida propia, pues recorren tu pecho y tus brazos, primero con las palmas y luego con la uñas, dejándo rojos rastros sobre tu piel ardiente……..tus movimientos se hacen mas fuertes y violentos, haciendome sentir traspasada por una espada de fuego que me quema en mi interior, pero que me hace sentir violentos espasmos de placer…….ambos nos sumergimos en este huracán que la casualidad ha desatado, temblando incontrolablemente y gritando simultáneamente al alcanzar la cúspide del mismo.

Con los cuerpos sudorosos, lentamente nos separamos y quedamos envueltos en un estrecho abrazo, recuperándonos del esfuerzo realizado…….me acurruco a tu lado y bajo el influjo de tus caricias mi ser es invadido por una lasitud, que hace que mis ojos se cierren y mi cuerpo se relaje……nos miramos a los ojos y podemos ver un extraño reflejo que nos ilumina a los dos…….