El secreto de mi prima

Un dia llega mi prima a nuestra casa de vacaciones, pero un dia descubro un secreto suyo y caigo en el.

Hola de nuevo. Gracias otra vez por todos los comentarios que ponen en mis relatos, sean buenos o no, y también por los mensajes que me envían felicitándome. Espero seguir escribiendo más anécdotas y que ustedes los sigan disfrutando. Para los que no me conocen aun les cuento que tengo 17 años, soy blanca, cabello castaño lacio hasta los hombros, ojos cafés, delgada, mido 1.70 y me gusta ser coqueta.

Esta anécdota que les contare me paso por sorpresa pero a la vez lo disfrute y aun pienso en como pude hacerlo, pero igual no me arrepiento de que sucediera y haber aceptado.

Todo empezó un día cuando mis padres me comentaron que una prima (Miriam), hija de la hermana de mi madre, venia a visitarnos por unos días, ya que ella vive a una ciudad que se encuentra a unas 4 horas en carro de donde vivimos. Ella tiene 22 y realmente recuerdo que siendo yo mas chica, de unos 11 años, tenia una relación con ella estrecha, nos llevábamos de maravilla hasta que un par de años después sus padres decidieron irse a vivir a otra ciudad, por lo que nuestra relación se había terminado de un tajo y en ocasiones platicábamos por teléfono de nuestras cosas; y el saber que Miriam vendría de nuevo de vacaciones me ponía muy contenta.

En fin, el siguiente fin de semana después de que mis padres me dieron esa noticia llego Miriam. Ellos fueron a recibirla al aeropuerto y yo me quede con mis hermanos en casa haciendo algo de quehacer. Cuando llego a la casa le di un gran abrazo de bienvenida, a lo cual ella respondió de la misma forma. Me sorprendió verla cambiada: la última vez que la había visto era bonita pero ahora era una chica muy atractiva (es morena clara, cabello castaño claro, delgada, de buen cuerpo, todo bien proporcionado, y de ojos color miel, y un poco más alta que yo). Se instalo en el cuarto que le habíamos preparado y después nos dirigimos al comedor. Durante la comida le preguntamos que hacia de su vida y sobre mis tíos, nuestras preguntas parecían bombardeos pero ella muy contenta nos contestaba. Nos comento que estaba trabajando en algo relacionado con relaciones internacionales, referente a la carrera que estudia, y que estaba aquí por un par de semanas porque tenía trabajos que hacer en nuestra ciudad, por lo que me pregunto si podía prestarle mi carro para moverse en la ciudad, a lo que rápidamente le conteste que si, que no había problema, a lo que me dio las gracias. También nos comento que ya tenía como 1 año que se había independizado, que vivía en un departamento muy bonito con una amiga de su trabajo, a unos cuantos minutos de sus padres y que costaba todos los gastos mediante su trabajo en el cual le iba de maravilla. Y luego nos platico que mis tíos se encuentran bien y que los visitaba todos los días.

Ese día salimos todos de paseo para que conociera la ciudad, pues nos había comentado en la comida que ya había encontrado muy distinta la ciudad y que le gustaría conocerla. Estuvimos horas paseando por la ciudad, yendo a los principales sitios y avenidas hasta que cayó a noche y regresamos a nuestra casa. Esa noche me fui a su cuarto para platicar más a gusto con ella a solas, me comento que no tenia novio, que ha conocido a varios chicos pero que ninguno la había cautivado tanto y que por el momento se encontraba bien así. También me pregunto sobre mí; le dije que tenía novio, que teníamos 5 meses de relación y que todo iba bien. Luego ya después comenzamos a platicar de cosas mas intimas. Me preguntó si él y yo ya habíamos tenido sexo. Le dije que si y que disfrutamos de cada momento que tenemos y que mis padres no sabían de eso. Me dijo que no me preocupara, que ella no les diría nada. Le pregunte si ella también ya había tenido sexo y me comento que si, con algunos chicos, ya que le gusta disfrutar la vida y que piensa seguir así hasta casarse. Ya después también hacia comentarios de mi como "eres muy bonita, tienes muy bonito cuerpo para tu edad, de seguro muchos andan tras de ti" .Solo le conteste "algunos, no tantos". No quise decirle que ya había tenido encuentros con otros hombres aparte de mi novio. Seguimos platicando hasta que estaba llegando el amanecer. Nos despedimos y ya cada una en su cuarto nos dispusimos a dormir.

Así continuaron los días, platicando y divirtiéndonos como grandes amigas, solo que ella por las tardes salía y regresaba cerca de las 11 de la noche. Le preguntábamos que por que tan tarde y ella solo nos decía que era por su trabajo. Visitaba a las personas que tenia que ver y que, como en todo negocio, una cena es la mejor forma de cerrarlo. Así siguió hasta que a mediados de la segunda y ultima semana en que ella estaría aquí, en la tarde, le comente que me parecía muy interesante su trabajo y que me gustaría que antes de que ella se fuera me llevara a ver su trabajo. Ella me miro fijamente y me comentó que no lo creía apropiado, pues era en las tardes y que ya regresaba de muy noche, que tal vez a mis padres no les agradaría la idea. Insistí y le dije que no habría problema, que si iba con ella no tendrían por que negarse. Insistí y se lo pedía con sonrisas, pues realmente me interesaba eso y quería ver como era ese trabajo. De nuevo me miro y me dijo "esta bien, mañana me acompañaras".

Al día siguiente desayunamos en familia y cuando mis padres y hermanos se levantaron y quedamos Miriam y yo solas le volví a preguntar si realmente me llevaría o solo me había dicho que si para que ya no siguiera insistiendo. Ella me contesto que si realmente quería ver su trabajo que me llevaría, pero que no le dijera a mis padres, pues seria un secreto entre nosotras y que así seria mas divertido. Contenta la abracé, le di un beso en la mejilla y con una gran sonrisa le dije "gracias". Ella solo me miro sonriendo y me dijo "en serio que preciosa eres, antes de irnos te llevo de compras para regalarte algo ¿ok?". Le dije que si y de nuevo la abracé.

Ya por la tarde salimos. Le dije a mi madre que iría a casa de una amiga y que Miriam me llevaría de paso cuando fuera a trabajar y que pasaría por mí en la noche para regresar juntas. Mi madre me dijo que no había problema. Contenta salí con ella y nos fuimos de compras a una tienda de ropa. Yo llevaba jeans y una blusa rosa. Ella llevaba un minivestido negro entallado, de gran escote en la espalda y coqueto por delante. Podía ver que tenía un hermoso cuerpo y su minifalda dejaba ver bastante sus piernas. No quise incomodar con mis miradas y, antes de que ella se diera cuenta de mis miradas, voltee hacia el camino y seguimos platicando de otras cosas.

Llegamos a la tienda, me dijo que como regalo podía escoger lo que quisiera, que ella pagaba. Yo contenta le dije que gracias pero que solo iba a comprar un conjunto, no mas. Ella insistió al igual que yo en mi decisión. Entonces llegamos a un acuerdo: yo escogía un vestido y ella me regalaba otro conjunto. Lo pensé unos segundos y sonriéndole le dije que estaba bien. Pasaron unos minutos, quise apresurarme pues de ahí la acompañaría a su trabajo. Luego de buscar escogí un lindo conjunto: era una minifalda negra, ni ajustada ni tableada, y una blusa blanca, algo parecida al que traía en ese momento mi prima, con un escote grande en la espalda y un escote en "V" adelante. Mi prima al verlo dijo" mmm se ve que eres coqueta y tremenda, con este conjunto te veras como toda una princesa" Reí y agradecí ese comentario. Ella me tomo de la mano y me dijo que la acompañara, que había visto un conjunto que estaba segura que con el me vería hermosa. La seguí y llegamos a ver el conjunto: era una blusa azul cielo de manga larga y botones al frente, y una minifalda tipo escocesa, en cuadros azul, blanco y gris, y algo ajustada, y también calcetas que llegaba a media pantorrilla y zapatos de tacón negro. Me encanto y a la vez me parecía coqueto. Le dije a Miriam que me había encantado y que si, que con gusto lo aceptaba. Me dijo que me fuera a los probadores a ponérmelo a ver como me veía. Ahí me cambie de ropa y me quedo bien la ropa, la minifalda era algo ajustada y llegaba poco mas arriba de medio muslo; al salir vestida así me prima me dijo"te ves tan bonita".Di las gracias y cuando iba de regreso a quitármelo y ponerme la ropa que traía me dijo:

MIRIAM- No espera, déjatelo puesto, ya no te lo quites, te ves bien así.

YO- Pero Miriam, voy a acompañarte y no creo que sea propio irme así vestida, además mira. No traigo sostén y esta tela lo hace notorio.

Acercándose a mí, mirándome fijamente me dijo.

MIRIAM- Te ves muy bonita primita, además esta de moda que algunas chicas vistan así. Aparte si la persona con la que voy te ve así de atractiva, no dudo que cierre el negocio. Vamos, vete así de colegiala, ¿si?

Pensando que había sido un regalo de ella y que podía ayudarla vestida así, acepté. Así que nos dirigimos a pagar y ya salimos al carro, para dirigirnos a su trabajo. En el camino mi prima volteo hacia mis piernas, pues la minifalda se me había subido mas arriba de medio muslo.

MIRIAM- Que piernon prima, que piernon tienes.

YO- Jajaja gracias Miriam, tu también.

Reímos y seguimos chuleándonos, hasta llegar aun hotel muy popular de aquí de la ciudad. Nos estacionamos y al llegar al lobby, los recepcionistas que estaban en la recepción nos miraban y sonreían, mi prima no lo noto, así que solo les sonreí un poco nerviosa. Miriam me dijo que la esperara, que en un rato bajaba.

YO- No, yo quiero ver como es tu trabajo, como te desenvuelves, además me dijiste que si tu cliente me veía hermosa te iba ayudar con tu negocio.

MIRIAM- Así es primita, él ahorita baja por mi, y cuándo te vea le vas a gusta, así ya arriba cerrare mi negocio.

Me acerque de a ella y la tome de la mano.

YO- Andale Miriam, no seas mala, además de aquí a que vuelvas, pueden pasar meses para que vuelvas a venir.

MIRIAM- Ay Melissa, no se..

YO- Mira, como dijiste en la mañana, será nuestro secreto, te juro que no se lo diré a nadie, ni siquiera a mi familia.

MIRIAM- ¿Estas segura?-. Me pregunta.

YO- Si, segurísima, te juro que no se lo digo a nadie.

MIRIAM- Mmm, ok Melissa, será nuestro secreto.

En eso baja el ascensor. Abre la puerta y aparece un hombre atractivo, rubio, ojos claros, de unos 35 años. Mi prima sonríe y tomándome de la mano, nos metemos con él

BRIAN- ¿Quién ser ella?- Pregunta el hombre.

MIRIAM- Brian, ella es mi prima Melissa, Melissa el es Brian, es de Estados Unidos.

BRIAN- Hola Melissa, mucho gusto, eres muy bonita. Disculpa mi español, no ser tan perfecto.

YO- Hola Brian, gracias, no hay problema, te entiendo muy bien.

Reímos los tres. Bryan y Miriam se susurraban a los oídos, no escuchaba bien. Solo escuche a Miriam decir "ella quería acompañarme, insistió mucho" A veces los dos volteaban a verme y sonreían; Miriam un poco mas nerviosa. Yo me sentía un poco rara.

Llegamos al piso, salimos al cuarto. Era muy grande. Una sala grande y 2 alcobas. Bryan nos dijo que nos sentáramos. Mi prima y yo nos sentamos en lo que el iba al minibar para ofrecernos algo de tomar. Yo no acepte pero mi prima si, un vaso de coñac. Miriam se paro y se acerco a Bryan cuando en ese momento se abre una puerta de una de las alcobas y sale otro hombre: rubio también, ojos azules, más alto que Bryan y más joven, de unos 30 años. Miriam voltea hacia Bryan sorprendida.

MIRIAM- ¿Él también esta aquí?

YO- Si Miriam, yo no saber que tu prima vendría contigo. Además, el insistió en acompañarme.

Este hombre se acerco, se veía algo tomado, al verme me sonrió.

GEORGE- Que muñeca tan preciosa ¿Cómo llamarte?- me decía mientas me extendía su mano.

YO- Melissa, gracias.- conteste un poco sorprendida y confundida.

GEORGE- Mucho gusto baby, yo llamarme George, soy amigo de Bryan- me dijo mientras tomaba mi mano y le besaba como un caballero.

Al voltear a ver a su amigo y a mi prima, George dijo que solo había salido para servirse un trago, pero que ya se iba de regreso a su alcoba. Al servirse una copa de licor se regreso a su alcoba, no sin antes voltear a verme y sonreírme. Yo le sonreí sin saber que decir. Al meterse ahí volteo hacia mi prima; ella y Brian se miraban a los ojos y se susurraban a los oídos. Tomando sus bebidas y tomados de la mano se dirigen a una alcoba del cuarto. Miriam me mira y sonriendo me dice: Esperame aquí, salgo en una media hora, no tardo". Bryan también me voltea ver y solo me sonríe. Al llegar a la puerta de la alcoba, Miriam entra primero, detrás de ella Bryan quien con una mano le agarra el trasero a mi prima y le besa un oído, para luego cerrar la puerta.

Yo me quedo muda, no podía creer lo que veía: mi prima era una prostituta. Me quedo sorprendida, no sabia que decir ni que hacer. Luego de unos segundos me pare, con la intención de salir de cuarto. En eso sale George de su cuarto.

GEORGE- Ohh el par de tortolitos ya estar en acción. Dijo con una gran sonrisa.

Solo sonreí nerviosa y me dirigí hacia la puerta. George me alcanzo y me tomo de la mano.

GEORGE- Baby, ¿A dónde ir?-. Me pregunto.

Yo- Yo.. –no me salían palabras.

GEORGE- Mira baby, tu sentarte un rato conmigo en lo que salen ¿ok?, platiquemos un rato.

YO- Eh..yo.. esta bien..- conteste aun sorprendida de la situación la verdad accedía quedarme con él por miedo, pues mas fuerte y tomado, no se que haría si no aceptara

Nos sentamos en la sala del cuarto principal. El a mi izquierda. No platicaba solo me veía fijamente, recorriéndome con su mirada. En especial mis piernas, pues mi minifalda de colegiala se subía mucho.

GEORGE- ¿Qué tener baby?, te noto rara- me preguntaba pegándose a mi.

YO- No.. no tengo nada.. – le decía tratando de hacerme hacia el otro lado.

GEORGE-Mmm ¿nerviosa baby?.

YO- No.. no no.. para nada. –parecía que adivinaba mis pensamientos..

GEORGE- Ahh.. ya veo, ser tu primera vez ¿no?

Ese comentario me tomo de sorpresa y solo voltee a verlo mas sorprendida de lo que estaba. Él creía que yo también era una prostituta

YO-¿ Qué?- solo pude preguntar.

GEORGE- Mira, baby, yo no quise hacer esto, no es lo mío. Pero al verte me embrujaste. Así que baby, yo darte 400 por estar contigo-. Me decía un poco tomado.

YO- ¿¿Cómo dice??- le pregunte sintiéndome ofendida.

GEORGE- Ok baby, tener razón tu, vales mas que eso, te doy 500 por un rato contigo.

Hice un gesto de más sorpresa, no podía creer lo que me decía. El debió notar mi expresión.

GEORGE- Ok baby tener razón, tu valer mucho mas.

En eso saca su cartera y me dice:

GEORGE- Darte 600 corazon, para que tú estés conmigo. No ser lo mío esto, pero por ti pagar lo que sea.

Me quede sorprendida, ¡él había puesto en mis muslos 600 dólares! Volteo a verlo y me mira con ansias, su mirada se clavaba en mí. Comencé a pensar que era demasiando dinero, mas de $6000 pesos y que seria la forma más rápida de ganarlo. Estaba confundida, veía los billetes y pensaba que hacer. En eso George saca otro billete y me lo da en mi mano. ¡ Ya eran 700 dolares!. Me sorprendía puesto que el no estaba tan borracho como para no saber lo que hacia. Estaba prácticamente en sus 5 sentidos. George pone una mano en mis muslos y los acaricia.

GEORGE-Come on, baby, no ser así, mira que tu gustarme demasiado, solo media hora.

No tuve mas dudas, de ninguna otra forma ganaría mas de $7000 pesos en media hora; además, por la forma en que me miraba y me acariciaba me hacia sentir deseada. Voltee a mirarlo.

YO- Está bien- le dije.

Sin decir más se acerca y me besa en los labios; primero tiernamente, luego nuestros besos fueron subiendo de tono, aunque yo aun estaba un poco nerviosa. Nuestras lenguas comenzaban a encontrarse mientras su mano subía por mi muslo, llegando a mi nalga derecha, la que acariciaba suavemente, mientras lo tomaba con una mano de su cabeza, entregándonos en esos besos y caricias. Podía saborear el licor que había bebido en su lengua.

Unos segundos después él se para y me toma de la manos, levantándome, y nos dirigimos a su alcoba. Al entrar me toma de sus brazos, me pone frente a él y de nuevo nos fundimos en un beso candente, lleno de pasión. Ya con menos nervios y sintiéndome muy ardiente, me abrazo de su cuello mientras con sus manos me acaricia la espalda, hacia abajo, y toma mi minifalda, levantándola para acariciarme directamente mis nalgas en su totalidad, pues traía una tanga con hilo dental. Sus manos se daban lujo masajeando mis glúteos mientras nuestras lenguas se enredaban dentro de nuestras bocas. Luego se para detrás de mí, volteándome hacia él, y se sienta sobre la cama, en la orilla.

GEORGE- Mmm baby, que linda colegiala tu ser, quitate tu blusita sexymente.

YO- Lo que tu mandes.

Obedeciendo comienzo a moverme sensualmente, moviendo mi cuerpo, mientras comienzo a desabotonarme mi blusita. George pone sus manos en mis muslos y los acaricia con más deseo mientras ve como me muevo y desvisto. Sus manos suben mucho, levantándome gran parte de mi minifalda, lo que me ponía excitada. Logro desabotonarme mi blusa, abriéndose y dejando ver mis senos desnudos. George sonríe al verlos.

GEORGE- Mmm que delicia bebe, que delicia.

Ya en ese momento me sentía una puta.

YO- ¿Quieres probarlos?_. Le pregunte sonriéndole, mientras me acariciaba mis pechos.

GEORGE- MM si baby, quiero comer de esos pechitos tan tiernos que tu tener.

Inclinándome un poco pongo mis pechos en su rostro. George no tarda y lleva sus manos a mis senos, los aprieta y masajea, lo que me arranca dos suaves gemidos, para después llevar su boca a mis seno derecho. Me lo lame suavemente, con movimientos circulares en el pezón que alcanzan la aureola y parte de afuera, para llegar mis mi pezón y lamerlo y darle chupetones. M e sostenía con mis manos en sus hombros y gemía al sentir como me lamía y chupaba el pezón con verdadera hambre. Mi pezón erecto se movía fuerte antes tales lamidas lo que me producía tremendo placer.

YO- Mmm ahhh asi… -le decia.

GEORGE- ¿Te gusta princesita?..

YO- Ahh.. sii.. me gusta como lo comes.

GEORGE- Tenerlos muy antojables baby. Tus pezones muy parados. Eso gustarme.

YO- Ahora chupame… ahhh el otro pezón.. se va a poner celoso..ahh.. de que no lo consientas.. ahh.

George lleva su boca a mi otro pezón, dejando el primero bañado de su saliva y tan duro como una piedrita. Ahora mi otro seno y pezón, son consentidos por esa lengua y boca que hacia maravillas. Me lo lamía y chupaba, a veces tan fuerte que creía que mI pezón iba ser arrancado del seno, lo que me hacia gemir mas fuerte. Podía escuchar los ruidos que hacia con su boca en mi pezón, como lo disfrutaba.- Ah ahh.. mm .. ahh- gemía yo.

Luego de varios segundos de deleitarse con mis pezones, baja su lengua por mi cuerpo, llegando a mí ombligo. Me lo lama varias veces mientras con mis manos le sostengo su cabeza, aprentandolo contra mí, dejando caer mi cabeza hacia atrás, disfrutando de sus lamidas en mí cuerpo, mientras sus manos volvían a subir por mis muslos, acariciando mis nalgas debajo de mi mini, y tomando mi tanguita, me la baja, haciendo levantar mis pies para quitármela y guardarle en el bolsillo de su pantalón, lo que no me importo.

Ya después se acuesta boca arriba, subiéndose más a la cama y, con sus manos se desabrochaba el pantalón y se lo bajaba junto con su rota interior, hasta las rodillas. Un pene muy parado y duro quedaba al descubierto, y la verdad deseaba probarlo.

GEORGE-Ven baby, querer sentir como lames mi pene, quiero que tu darme una mamada.

YO- ¿Quieres que te lo chupe como una rica paletita?- Le pregunto mientras me subo a la cama y me hinco entre sus piernas.

GEORGE- Mmmm ¡si bebe!, mámamela.

YO- Mmm George, con lo que me gusta chupar las paletitas.

Sin decir más, tomo su pene con mi mano y comienzo a chuparsela. Sabiendo como le gusta a mi novio que se la mame, se lo hago de la misma manera. George lleva sus manos debajo de su cabeza, recargándose en ellas. Comienza a gemir, al sentir como mi boca se traga su pene y le chupo también su cabeza, dándole lamiditas, mientras con la mano lo masturbo suavemente. Saco y meto su pene rápidamente de mi boca, lamiéndole también a veces el tronco de su pene, haciéndolo gemir mas, para luego volver a chuparle la punta, dándole leves lamiditas ahí.

GEORGE- ahh baby ahhh… que rico lo haces… se ve que tienes.. ahhhh… experiencia.

Sus palabras me encendían mas, haciéndome sentir como una prostituta profesional, por lo que ahora mis mamadas y chupadas en su pene son mas fuertes, metiéndomelo a veces hasta la garganta, mientras mi mano lo masturbaba mas rápido, arrancándole a George varios y fuertes gemidos, mientras imaginaba que mi prima en esos momentos hacia lo mismo que yo. George estaba a punto de venirse, cuando le aprieto su pene con mi mano, fuerte, deteniendo su eyaculacion.

YO- ¿Ya te quieres venir papi?, ¿no quieres probarme tu a mi?

GEORGE- Ahh ahhh si- decía George entre gemidos y agitado- Que bárbara baby, tu ser muy buena en mamadas..

YO- Gracias George-le dije haciéndole un guiño- te dije que me gusta mucho chupar… paletitas.

George me toma de las manos y me jala hacia él, para besarnos de nuevo. Con sus manos me quita me blusita, quedando yo ya solo con la faldita y las calcetas puestas.

Luego de varios besos intensos, George me acuesta junto a él, boca abajo, poniéndose rápidamente sobre mí, quitándose su camisa, quedando semidesnudo. Mi pierna izquierda quedo flexionada, por lo que el lado izquierdo de mi cuerpo estaba un poco más elevado. George comienza a besarme la espalda, también acariciándomela con la lengua. Me hacia estremecer y mi piel se ponía chinita con tan deliciosas lamidas. Sigue bajando mas, hasta que ya no siento nada. Siento que se mueve George para después sentir sus manos en mis calcetas, quitándomelas. De nuevo siento su lengua, esta vez en la parte trasera de mi pierna estirada, en la pantorrilla, mientras con sus manos toma mi faldita y me la sube hasta la cintura, quedando mi trasero al aire, expuesto a él. Lama mi pantorrilla, suavemente, subiéndola despacio, lo que me hacia gemir levemente. Sube su lengua hasta llegar a mi nalga, la cual lama, besa y muerde con suavidad, arrancándome algunos gemidos. Luego lleva su lengua hacia la parte trasera de mi otra pierna, la que tengo flexionada, y me lame el muslo, igual despacio, subiéndola hasta llegar a mi nalga, la cual solo lama, dejándomela tapizada de su rica saliva. Después con sus manos amasa mis nalgas, apretándolas con fuerza.

GEORGE- Que hermoso trasero tener baby, me encanta- decía George. Y que rico oler.

Yo no podía decir nada, sus lamidas y caricias me tenían muy excitada. Con mis manos debajo de mi cuerpo, bajo mis pechos, apretaba la sabana mientras gemía leve. Después vino lo mejor: con sus manos abre poco mis nalgas Y siento su rostro entre ellas, sintiendo de lleno su lengua en mi ano, el cual lame y chupa con verdadero deseo. Su lengua hacia maravillas ahí, se movía de arriba abajo, lamiendo toda la línea que separa mis nalgas, para después concentrarse en mi ano, metiendo su lengua ahí, pues estaba algo abierto gracias a sus manos.

YO- Ah ah que rico.. ah ah.. que bien siente.. ahhh ahh sigue … ahh- le decía entre gemidos.

Su lengua parecía llegar mas adentro de mi ano. Sentir su lengua meterse mas por ahí me producía fuertes gemidos, tanto que hundía mi cabeza en la almohada para que no se escucharan tan fuertes. Mi ano era victima de esa lengua maravilla que me hacia estremecer con sus lamidas, dándome un delicioso placer.

Pero después, George quita su lengua de mi ano, siento como un dedo comienza a meterse ahí, arrancándome un gemido fuerte, haciéndome levantar mi cabeza y sacando una mano debajo de mi cuerpo, me tomo de los tubos de la cabecera, apretándolo con fuerza. Su dedo entraba y salía con gran facilidad, completamente. Mi cuerpo se estremecía cada vez que la punta de su dedo tocaba fondo dentro de mí.

YO-Ahh ahhh ahhhh..

GEORGE-¿Gustarte baby?- me pregunto excitado- sabes deliciosa.

YO- Ahh ayy sii ahh ahh.. mucho.. ahh

GEORGE- Pues espero que esto gustarte mas.

Ahora George me metía un segundo dedo ahí, abriendo mi ano como nunca imagine que se podría. Sus 2 dedos se metían por completo, rápidamente, penetrándome de manera extraordinaria mi ano. Mis gemidos eran más fuertes. Hundía mi cara en la almohada para que se ahogaran ahí mis gemidos, pero George me tomaba del cabello y me lo jalaba, haciéndome levantar mi cabeza, para escuchar como gemía. Mi mano se apretaba y tensaba con el tubo de la cabecera. Mis dos piernas se movían de placer, flexionando levemente la que tenia estirada. Un gran placer me producía sus dedos ahí. George no dejo de dedearme el ano hasta que me vine, teniendo un gran orgasmo y mi cuerpo convulsionándose gracias a los dedos de George en mi ano, que ya estaba muy dilatado y abierto.

George tomándome de la cintura me voltea y veo como mete unos de sus dedos que tenia en mi ano en su boca, se lo lame y chupa. Una vez que se lo chupa, lleva el otro dedo a mi boca y me pide que lo chupe. Lo mete y lo chupo, probando un sabor que me gustaba y lo lamía como una paletita. Luego lleva su boca a la mía y de nuevo un gran beso nos damos, probándonos nuestras lenguas, entre chupadas, haciendo de nuestros cuerpos uno solo. Sus manos acarician los costados de mi cuerpo y las mías su espalda, disfrutándonos unos segundos mas así

YO- Gracias - le decía contenta y agitada, entre besos- gracias por lo que me hiciste sentir.

GEORGE- Aun no acabo baby.

YO- ¿Ah no?- le contesto sonriendo.

Como respuesta George baja por mi cuerpo, lamiendo y besando de nuevo mis pezones, que están completamente duros y erectos, sacándome suaves gemidos. Continua bajando mientras sus manos abren mis piernas.

Llega su cabeza a mi sexo, pero antes lame y muerde suavemente la parte internas de mis muslos, lo que me gusta. Después ve mi sexo húmedo por mis jugos y sopla ahí, produciéndome una deliciosa sensación, haciendo arquear mi cuerpo y que gima un par de veces entrecortado – ahh ahh-. Continua soplando mi sexo mientras va acercando su boca ahí, hasta que comienza a lamer mi clítoris. Suaves lamidas me producen un calor en todo mi cuerpo; levanto mis manos y me agarro de los tubos de la cabecera, aferrándome fuerte ahí. Con manos debajo de mis piernas flexionadas me toma de la cintura, agarrándose de la minifalda que traigo puesta enredada ahí. Su lengua se mueve con mucha experiencia, recorre mis labios vaginales, con movimientos de arriba hacia abajo, de mi clítoris a mi ano, para concentrarse de nuevo en mi clítoris, dándole lamidas y chupadas. Mi cuerpo se estremece, arqueándose poco, mis gemidos son intensos de nuevo, sintiendo mi clítoris dentro de su boca y como su lengua me lo acaricia con gran destreza, produciéndome ricos escalofríos. Mis muslos presionan levemente su cabeza, y el al sentir esto, se aferra a mas a mi clítoris y vulva, intensificando mas sus lamidas y chupadas ahí. Mis manos aprietan con gran fuerza el tubo de la cabeza de la cual me agarro y mi cuerpo se arquea hasta donde pueda, moviendo mis caderas para que su lengua pueda lamer también mis labios vaginales.

YO- Ahh si asi ahhh que delicia ahhh ahhhhh mmm ohhh mm que .. rico.- le decía entre gemidos

El apoya su lengua y labios en mi clítoris y comienza a mover su cabeza rápidamente a los lados, lo que me mata de placer, convulsionándose mi cuerpo y haciendo que me ahogue en mis intensos gemidos y mi respiración sea muy fuerte y entre cortado, varios segundos, hasta que llega mi segundo orgasmo, saliendo mis jugos los cuales George bebe y traga sin dejar gotas en mi, limpiando mi sexo con su lengua. Mi cuerpo se estremece con cada lamida que me da, haciéndome gemir.

Parte del rostro de George queda bañado de mis jugos, pero el se lo limpia con mi vientre, sintiendo rico la humedad de mis juegos en mi cuerpo.

Sin darme momento de descanso, George, se quita su pantalón y trusa, sacándose un condón de su pantalon, para ponérselo. Luego se acomoda sobre mí, besándome y saboreo mis juegos de su lengua, para después acomodarse y meter suavemente su pene dentro de mi vagina. Comienza a penetrar suavemente, apoyándose con sus manos sobre la cama por los costados de mi cuerpo. Lo tomo de sus hombros y nos miramos a los ojos, sintiendo su penetración cada vez más rápido y fuerte. Cierro los ojos y gimo al sentir como empieza a acelerar. Mi cuerpo se arquea y aprovecha él eso para besarme y lamer mi cuello mientras bombea más. Lo suelto y con mis manos me agarro de la sabana, a mis lados, apretándolo fuerte. Su penetración se intensifica más al igual que mis gemidos. Abro mas mis piernas para sentir su pene lo mas profundo de mi, causandome un tremendo placer y un calor que invade todo mi cuerpo al sentirlo tan dentro de mi. Mi cuerpo se estremece y mi respiración se hace más fuerte y agitada, y mis gemidos aumentan, ante su fuerte penetración, abriendo mi interior con facilidad, dándome gran placer.

Luego saca su pene de mí, y se acuesta a un lado, boca arriba, volteándome a ver.

-Come on baby, montarte en mí, montarte en mí-. Decía agitado

-Si papi, lo que pidas.

Me levanto y me monto sobre él, frente a frente, hincándome suavemente sobre su pene, hasta sentir que mi vagina se lo ha comido en su totalidad. Ahora soy yo quien comienza a moverse. Mis caderas hacen movimientos hacia delante y atrás, y arriba y abajo, mientras George con sus manos me toma los pechos y los aprieta, en especial los pezones, los cuales pellizca y tuerce, jalándomelos. Me arranca con eso un fuerte gemido, siento rico que me haga eso. Aumento mis movimientos de caderas, llevando mis manos a mi cabello, levantándomelo y jugando con él.

GEORGE- Ahh que hermosa verte así baby- decía gimiendo George mientras seguía con sus manos haciendo lo que quisiera con mis pechos.

Ahora no solo yo me muevo, también él. Levanta varias veces sus caderas, haciendo la penetración más intensa y placentera. Pongo mis manos sobre las suyas, en mis pechos, y dejo caer mi cabeza hacia atrás, disfrutando ese placer tan grande que siento con esa increíble penetración. Ahora él con una mano me acaricia el pecho, el cuello y la parte que esta entre mis pechos, sintiendo yo tan ricas esas caricias y penetraciones que me daba. Nuestros cuerpos se movían rápidamente y con mucha pasión. Sentía mi vagina abrirse por completo por ese pene que me mataba de placer, tocando cada rincón vaginal.

Ambos comenzamos a gemir muy fuerte, nuestros gemidos se unen, desahogando en ellos el enorme placer que nos estamos dando, apoyándome ya con mis manos sobre su torso, rindiéndome ante tal excitación y mi cuerpo estremeciéndose y llenándose de un delicioso calor placentero. Así estuvimos unos segundos más hasta que de nuevo me toma de la cintura y nos dejamos caer hacia un lado, para acomodarse de nuevo él sobre mí. Pero esta vez el se hinca sobre mi vientre, apoyando su enorme y duro pene entre mis pechos, luego de quitarse el condón.

GEORGE- Melissa, baby, masturbarme con tus pechos, vamos Melissa-. Me pedía con gran placer.

Con mis manos tomo mis pechos y con ellos aprieto su pene, mientras el lo movía entre ellos, aflojando sus brazos a los costados de su cuerpo. Lo miro a los ojos y veo como disfruta de eso, sintiendo la punta de su pene chocar varias veces en mi cuello. Sentía muy rico como su pene se frotaba entre mis senos, realmente yo también disfrutaba eso.

GEORGE- Ohh baby, oh baby , me vengo.. Meli.. yo ya venirme..

En ese momento toma su pene y apenas lo saca de entre mis pechos y se viene. Un chorro salpica mi pecho, mi cuello, mi barbilla, y parte de mi cara, sintiendo su semen tan caliente sobre mí. George se deja caer a mi lado, hacia mí. Volteando mi rostro hacia él y nos besamos. Esta vez es un beso menos intenso pero aun así las puntas de nuestras lenguas se acarician. Luego el se levanta y se empieza a vestir, yo iba hacer lo mismo, pero no quiso.

GEORGE- No Melissa, aun no vestirte, me gusta verte así, desnuda y con semen mío en tu cuerpo.

Me volví a acostar, poniendo mis manos a los costados de mis hombros, dejando que George me viera desnuda, bañada de su semen. De repente se abre la puerta de la alcoba. Eran Bryan, vestido, y mi prima, en una pequeña bata transparente, acomodándose el cabello. Ambos nos miran asombrados, en especial Miriam a mí, al verme tendida sobre la cama así, como estaba.

BRYAN- George, ¿Qué pasar aquí?- pregunta sorprendido Bryan.

GEORGE- Nada amigo mío, solo yo divertirme también- dijo George saliendo de la alcoba-. Es hora de irnos.

Brian lo ve y despidiéndose mi prima con un beso en la boca sale de alcoba, no sin antes voltear a mirarme con una gran sonrisa. Al salir de la alcoba Miriam y yo nos miramos a los ojos y escuchamos como la puerta del cuarto se cerro, quedando así nosotras 2 solas.

MIRIAM- ¿Qué hiciste Melissa?- me pregunta sorprendida.

YO- A eso me trajiste ¿no?, sabias lo que hacías y aun así me trajiste, cuando me podías haber dicho a que te dedicabas-. Le dije enderezándome y recargándome con los antebrazos en la cama, solo con mi minifalda enrollada en mi cintura.

MIRIAM- Por eso no te quería traer, no quería que me vieras así, pero tú insististe tanto. A Bryan lo conocí en mi ciudad hace un mes, andaba de paseo en la ciudad. Me habló hace 2 semanas para decirme que venia aquí y quería que viniera para verlo.

YO- ¿Y George?- le pregunte.

MIRIAM- El estuvo también con él esos días, pero a él no le interesaba eso, y cuando lo vi hace rato que llegamos me sorprendió. Y mas aun que lo haya hecho contigo. Melissa, yo..

YO- No hay problema Miriam -la interrumpí- no te cuestiono, supongo que has de ganar bastante bien, si es que te pagan como a mi.

MIRIAM- ¿A que te refieres?- me pregunta.

YO- A esto- le dije sacando del buró que estaba al lado de la cama el dinero que me dio George.

MIRIAM- Melissa, tu.. ¿Aceptaste?

YO- ¿Por qué no Miriam?, es la manera mas rápida que he conseguido dinero, y aunque será la ultima vez que haga algo así, lo disfrute. Y estoy segura que no se lo dirás a mis padres, es nuestro pequeño secreto ¿.no? Jajaja "relaciones internacionales" ¿no?

Miriam sonríe y se sienta aun lado mío.

MIRIAM- Claro primita, será nuestro secreto –dice viéndome mi cuerpo- Ahora hay que quitarte el semen.

YO- Ok Miriam, tráeme papel para quitármelo.

MIRIAM- No hace falta papel.

YO- ¿Cómo no? Entonces, ¿con que me lo quito, con mi ropa?

MIRIAM- No

YO- ¿Entonces?.- vuelvo a preguntarle

Sin decir nada se agacha a mí y con su lengua quita el semen de mi pecho.

YO- ¿Pero Miriam, que haces?- le pregunto totalmente sorprendida.

MIRIAM- Van a pasar algunos días sin vernos primita-. Respondió- Además solo te estoy limpiando.

Siguió con su lengua limpiándome el semen, hasta llegar al poco semen que había caído en mis pechos. Igual con su lengua me lo quitaba, lamiéndome muy bien mis pechos.

YO- Miriam, no..

MIRIAM- Shhh, ya casi acabo.

Con sus manos junta mis pechos y su lengua ahora me lama mis pezones, los cuales vuelven a endurecerse. Los lame y le da varias chupaditas. Aun recargada con mis antebrazos, no aguanto y dejo caer mi cabeza atrás, gimiendo.

YO- Miriam, ahí no ..ayy .. ahi no tenia semen..ahh

MIRIAM-Lo se, solo quise chupartelos, se ven ricos-, decía entre lamidas.

YO-Ahh ¿te gustan.. mis pechos?.. ayy..ahhh.

MIRIAM- Los tienes muy antojables primita, mas con tus pezones tan duros.

Me dejo caer sobre la cama, mientras su lengua sigue entretenida en mis erectos pezones, succionándolos varios segundos más, arrancándome mas gemidos. Luego sube por el resto de mi pecho, llegando a mi cuello, limpiándome el semen que tenia ahí, mientras arqueo mi cuerpo ligeramente. Sube a mi barbilla y lo limpia con su lengua, hasta llegar a mis labios. No supe por que, pero correspondí su beso. Abrí mi boca y deje que su lengua entrara ahí, encontrándose con la mía, fundiéndonos en un beso lleno de amor, mientras me abrazaba a ella de la espalda. Es beso duro un par de minutos, sin decirnos nada, solo besándonos, escuchando el ruido que producían nuestros labios, lo que nos excitaba más.

Luego Miriam aparto sus labios de los míos, quedando un hilito de saliva entre ellos, y me mira los ojos.

MIRIAM- Te quiero mucho primita, eres mi primita especial-. Me decía mientras me acariciaba el rostro con una mano.

YO- Yo también te quiero Miriam , y no sabes cuanto.

Tras decir esto de nuevo nos besamos, para después Miriam pararse y decirme que era hora de irnos, ya era tarde. Me pare y ambas nos vestimos, ayudándonos una a la otra, entre risas. Salimos y al subir al auto mi mano acariciaba sus muslos y ella con su mano hacia lo mismo en los míos, sin decirnos ninguna palabra. Llegamos a casa, mis padres nos recibieron. Comentamos que habíamos tenido mucha suerte con los clientes, que habían quedado muy satisfechos con el negocio, y que nosotras nos habíamos vuelto más unidas que antes., cosa que así era. Mis padres estaban contentos por eso, sin saber a lo que nos referíamos en realidad.

Durante 2 días Miriam y yo nos veíamos y sonreíamos, sabiendo el secreto que teníamos, pero ya sin comentar nada. El fin de semana siguiente se fue Miriam a su ciudad. Ya no ha venido, pero seguido hablamos por teléfono, más que antes, y seguimos diciéndonos cuanto nos queremos y que somos las primas mas unidas de la familia, unidas por un gran y hermoso secreto.