El robo de tangas y brasieres
Ahora les relatare mi afición por las prendas intimas femeninas, desgraciadamente mi mama me detectó el mueble donde las guardaba pero eso no es lo bueno, lo mejor de este relato es como me las robaba y las peripecias que tuve que sufrir para obtenerlas.
Ahora les relatare mi afición por las prendas intimas femeninas, desgraciadamente mi mama me detectó el mueble donde las guardaba pero eso no es lo bueno, lo mejor de este relato es como me las robaba y las peripecias que tuve que sufrir para obtenerlas
Mi afición por este tipo de prendas sucedió a la edad de 16 años aproximadamente cuando era adolescente me atraían las prendas de mi madre y de mi hermana, aclaro me gustan olerlas y pajearme con ellas, no soy gay ni nada por el estilo, sino todo lo contrario me encanta oler una cuca femenina y poder lamer los jugos que quedan en una tanga o el olor característico de un brasier después de un día de trabajo.
Cuando mi hermana se metía a bañar yo enseguida que terminaba de asearse yo me metía como cazador al baño y como enagenado buscaba sus ropas femeninas y las olía y les restregaba mi lengua en la parte donde esta el culo y la cuca lo que me provocaba una gran excitación y acto seguido me bajaba los shorts y me pajueleaba hasta que me corría abundantemente para después limpiarme con los calzones o los brasieres de mi hermanal algunas veces me ponía el calzón de mama sobre la cabeza y el calzón de mi hermana como mascara de luchador sobre la nariz y lamía y olía al mismo tiempo, era un festín disfrutar esos olores y sabores.
Cuando me canse de los calzones de mi hermana que por cierto en ese entonces tenia como 19 años era el olor muy penetrante hasta el punto de que a veces sentía desmayarme porque tenia un olor muy característico como el de los mariscos.
La primera prenda ajena a mi familia era la de una vecina que vivía arriba de nuestro condominio ella era morena con un cuerpo fabuloso, un día estaba viendo yo la t.v cuando de repente vi cuando mi vecina estaba tendiendo su ropa y yo al verla en su short corto y su tanga de hilo dental hizo que me pusiera muy caliente, y al momento me hice la puñeta y cuando sentí que sus ropas estaban secas fui al mecate donde tendió su ropa y le robe un brasiere el cual aun tenia el olor característico de unos melones.
Al llegar a mi casa me chaquetee sin recatamiento y guarde el brasier en un cajón del armario, pero mi hermana lo descubrió y pensó que era suyo y después lo uso ella y ya lo deje de usar pues desapareció el olor de mi vecina.
Así poco a poco le fui quitando las prendas a mis primas vecinas, cuñadas, familia, tías, conocidas , cada vez que visitaba una casa me metía al baño o a los cuartos de las muchachas a buscar las prendas olorosas recién usaditas.
Cuando las descubría se los juro que mi corazón latía mucho y me excitaba sobre manera.
Al final de la visita vía a mi casa y vaciaba mis jugos sobre la prenda hasta que me cansaba.
Un día un amigo me invito unas cervezas y su esposa una mujer morena de cuerpo exuberante no estaba en la casa cuando mi amigo se quedo en la sala yo fui al baño y descubrí el brasier y las tangas de la esposa de mi amigo y me robe un par de cada una, me latía el corazón muy fuerte amigos se los juro imagínense si me hubiera cachado.
El gusto me duro hasta que mi mama hizo limpieza en mi cuarto y descubrió las mas de 100 prendas que tenia escondidas en un ropero las cuales fueron tiradas a la basura, también mis revistas de galería erótica fueron a parar al bote, pinche basurero o pepenador se ha de ver rayado con el paquete que le dio mi mama.
Bueno si les gusto me gustaría que me mandaran relatos parecidos al mío mi mail es celia25@terra.com.mx
Uso este mail ficticio para que mis amistades no me descubran
Besos