El Restaurante Parte 4.1

El Restaurante Parte 4.1., la parte 4 es, la parte 3.

Gracias.

Nuevamente están a la expectativa de lo que sucedería, su desinhibición, era total, vivir o morir, poco importaba, lo que sucediera al llegar a casa.... si vivían eso sería otro tema.

Entonces el jefe se dirigió hacia ellos.

• Bueno vamos a esperar, que los chicos se pongan a tono, y vosotras chicas ya sabéis....

Ellas ya sabían que tocaba hacer, un buen lésbico, ahora era Carla la que comía el coño a Marga, mientras que Mar, se besaba con su madre.

Pasaron unos minutos y los hombres tenían sus piezas, nuevamente en forma, a Mario le empezaba a doler, a su edad, le podría dar algo.

-Bueno chicas vamos a hacer lo que yo os diga, también a vosotros chicos.

Indicaron a Borja que se pusiera, estirado en el suelo, y le indicaron a Marga, ella deseaba, que aquella pesadilla acabará, sentía placer, pero mucha verguenza, así que el jefe, la volvió a agarrar del pelo.

• Siéntate  y fóllate esta polla guarra –jefe-.

Ella se preparó, y se sentó encima de aquella polla, no le costó mucho, que aquel miembro entrará en su coño, ella marcaba, los ritmos, Borja, se vino arriba y le empezó a acariciar, aquel par de melones, ella no se negó y empezó a cabalgar, más fuerte, se estaba corriendo nuevamente.

Por su parte las niñas, habían sido obligadas nuevamente a comerle la polla a Mario. Fue entonces que el jefe les dijo.

• Bueno Marga, veté preparando.

• Para qué?

Ella no sabía muy bien que iba a suceder.

• Bueno niñas no seáis golosas, pero vuestro padre tiene una cosa que hacer, a vosotras también os gustará.

Marga continuaba cabalgando aquella polla, entonces, el jefe le dijo a la oreja de Mario.

• Fóllatela por el culo.... es una orden.

El no dijo nada, sus hijas entendieron, lo que iba a pasar, Marga continuaba cabalgando, Mar y Carla, pensaron, en lo que había padecido con un anal, para ahora recibir una doble penetración.

Cuando Marga, quiso darse cuenta, Mario se había puesto detrás de ella.

• Que haces..... no que me vas a romper, por dios no....veté, te lo pido.

• Ahora Mario, dale a tu mujercita, una buena enculada.

Mario no quería pero en parte lo deseaba, así que se empezó a acercar lentamente, le metíó un dedo, Borja, estaba parado, así que esta vez no le costó.

• No Mario no, no lo hagas.

Entonces vino el jefe y la agarro del pelo.

• Tengo paciencia y se me está acabando.

En aquel momento, Mario empezó a meter sus 23 centímetros dentro del culo de su mujer, Mario se paró, la cara de Marga era un poema, su dolor iba en aumento, sabía que con aquellos dos pollones, allí dentro lo acabaría disfrutando, ambos hombres, empezaron a marcar, un ritmo, parecían un reloj suizo, no paraban de darle. Empezó a dar unos alaridos, estaba disfrutando aunque lo negará, orgasmo tras otro venían a ella, ahora estaba entregada, a aquellos mástiles que la perforaban.

• Joder, joder Mario me duele.... pero no pares, por dios...

Aquello animaba, a los chicos, las niñas estaban alucinadas de ver a su madre ser penetrada brutalmente, una vez tras otra.

• Bueno Carla, chúpale, el culo a tu hermanita, es una orden-jefe-.

Ellas ya lo hacían automáticamente, Carla le pasaba la lengua, aquello hacía que Mar, sintiera que su cuerpo, se excitaba, mientras Marga, estaba deseosa, de recibir la leche, de aquellos machos, pero el jefe, tenía otros planes.

• Bueno chicos, cambio de pareja. - dijo el jefe-

Aquello, dejó a Marga descolocada, esperaba que sus hombres se corrieran, ellos la separaron de aquellas vergas, que estaban erectas aún, ella se había quedado a medias, pero los captores, le encontraron un entretenimiento, cogieron a Carla del pelo, y le hicieron que le chupara el coño. Ella necesitaba, tener un gran orgasmo, ya que los chicos, no se lo dieron, alguien se lo tendría que dar.

Mar es tu turno.

• Bueno Mar tu coño para Mario y tu culo para Borja, pero cambiaremos un poco las cosas.-jefe-.

Ahora estaba Borja, debajo, el muy cabrón se la metió en el culo de golpe, ella pegó un leve quejido, Mario lo entendió, i empezó a metérsela por su coño, los ojos de Mar, miraban al cielo, aquello la estaba superando, dos pollas dentro de ella, la superaban, era Mario quien llevaba el ritmo, ya que ella, estaba totalmente superada.

Marga, veía lo que pasaba, pero con los lametazos que le pegaba Carla, poco podía hacer, su hija no paraba, y el orgasmo deseado llegó, así que cogió la cabeza de Carla, para que lamiera todos sus jugos, aquellos asaltantes, lo habían conseguido, había gozado, y todos los presentes, lo habían visto.

Pasó un rato y Mar comenzó a notar el ritmo, y comenzó a jadear... ahora había salido la golfa, que llevaba dentro de ella.

• Joder chicos no paréis, más.... más.....

Mar quiso que su padre la besará, él pareció negarse, no paraba de jadear, y su padre por miedo a reprimendas, la beso, notó su lengua dentro de él, era brutal, ellos veían que aquello no iba a durar mucho, los chicos no parecían poder aguantar más se habían follado a Marga, Mar ya no aguantaba tanto.

• Hijita me voy a correr

• Si papi, si por favor

• Yo tampoco aguanto-dijo Borja.

Y casi al unísono, Mar soltó un grito, parecía que la habían matado, pero sentir como dos hombres llenaban sus agujeros, la llevo al límite. Parecía importarle poco que su padre y su novio la hubieran follado, le encantaba el sexo y lo demostraba.

• Bueno chicas, limpiadle los agujeros, venga es una orden- dijo el jefe.

Ellas como si estuvieran poseídas, empezaron a sorber, aquellas gotitas que salían de su culo y su coño, lo que la llevo a ella a un nuevo orgasmo.

Mario y Borja, sabían lo que venía Carla, sería la última pero sus pollas, parecían estar flácidas, pero aún les dolían.

Los asaltantes obligaron a Carla a chuparles la polla a Mario y Borja, y que las pusiera bien duras, pasados 10 minutos, aquellas pollas estaban bien duras.

Ella sabía lo que le tocaba hacer, Mario, se estiró en el suelo, ella, ya se había acostumbrado a aquella herramienta, Borja, sin ningún miramiento, la ensartó.

La pobre era una marioneta, su dolor, se transmitía, Borja la estaba reventando, solo su padre, parecía mirarla con ojos cariñosos, ella no paraba de suspirar, esperando que aquel momento acabará. Ellos continuaban, por su parte ellas volvían a hacer un 69, allí había sexo y más sexo, lo importante era follar, después ya verían que pasaría, ahora ya ellos notaron que no aguantarían más, Mario quería no correrse dentro de su hija, sabía que no tomaba anticonceptivos, pero su calentón era superior, así que ninguno de los dos, lo pudo evitar, y vaciaron sus pocas reservas de semen, dentro de Carla, la cual se desvaneció, sobre su padre.

Sin tiempo a nada, los secuestradores, se fueron hacia la puerta y dijeron.

• Bueno chicas,  creo que hasta aquí, hemos llegado, me he fijado que por sobrevivir hacéis lo que os piden, así que espero que de la jornada de hoy, hagáis aprendido una lección, que la gente que no tiene dinero no se la puede pisotear.

Apagaron las luces, tan rápido como pudo Borja, las encendió, se habían ido, la verguenza de mirarse a la cara era total, todos habían disfrutado a su manera, Marga no se podía ni mover, entre sus hijas la ayudaron a levantarse y a vestirse, no quedaba nadie en aquel restaurante, eran las 5 de la mañana, habían pasado casi 7 horas allí metidos, ellas llevaban el pelo totalmente alborotado casi no se dirigieron ni la palabra, fue en aquel momento que Mar se dirigió a Borja.

• Sabes una cosa niñato, mi madre, no es una puta como le has dicho, mientras se la intentabas meter por el culo, y te digo si tú hablas mal de nosotros, yo hablaré mal de tu hermanita y sus novios, así que no te quiero ver más, me entiendes.

• Eres una zorra y lo sabes-Borja-.

• Tú no sabes lo que soy capaz de hacer por mi familia.

El chico se fue, por la calle en busca de su coche.

Marga y Mario alucinaron de como su hija después de tales acontecimientos, había despachado a su novio

Poco a poco, ya que no podían caminar muy deprisa fueron hacia el coche: Carla y Mar se pusieron el cinturón y casi al momento se quedaron dormidas, aquella noche, habían sobrevivido pero pagando un precio muy alto.

Sus padres se las miraron y Marga, le dijo.

• Lo que ha pasado hoy, no tiene que volver a pasar, sé que en parte los hemos disfrutado  y no lo podemos negar, pero son nuestras niñas, hemos dado lo mejor de nosotros, y para que la desvirgue otro, más vale tu cariño.

Por el camino, tuvieron que parar, a buscar una píldora del día después, pararon en una gasolinera para acicalarse, y fueron a una farmacia a buscar una píldora del día después para Carla, no querían tener sustos después de 9 meses.

Llegaron a casa y aquella noche, la borraron, de su mente, la familia, se ducharon y se fueron a la cama, aquella experiencia, les ayudo a pensar en los que menos tenían y en que tenían que hacer el bien, ayudando a los más necesitados.

Mario y Marga, recuperaron su pasión por su matrimonio y una vez a la semana, ella recibía, su sesión de sexo anal semanal.

Carla, se convirtió en una estudiante modelo.... y bisexual, a nadie le sorprendió  y Mar, consiguió ayudas de dinero a la fundación, siempre y cuando hubiera una buena ración de sexo a cambio.

PD: Se aceptan opiniones, son mis primeros relatos, y aún estoy, aprendiendo, gracias por vuestra comprensión.