El restaurante de la laguna (7)
Y Alicia Lo Dice.... Dulce!... Mmmm!!... Aaaahhh!!... te amo Eres única No te detengas!!... Aaaahhhh!!...
Alicia después de buscar las palabras que sabría no encontraría rompió el incomodo silencio que se había situado en ese antecomedor
Mmm ok, solo te quiero decir algo antes no fue mi intensión y mucho menos fue algo que yo planeara o que supiera de antemano
- Ok venga! Suéltalo!
- Estoy enamorada de Dulce si, Dulce, tu pareja a la que ahora yo ayudo a esconderte y dándote un techo donde dormir no sé cómo, no sé cuándo pero así paso me di esta mañana que estaba en tu casa, faltaron pocos segundos para que le dijera a ella que no había podido verte y decirle que habría alguna manera en la que uds se pusieran en contacto, pero, no podía fallarle a la mujer por la que en ese instante me di cuenta que sentía algo más que un cariño de hermanas
Fernanda se quedo callada por algunos minutos solo mirando el plato, al menos no todas las sospechas habían sido confirmadas su mente había hecho tantas conclusiones diferentes Alicia y Dulce en la cama besándose ellas en alguna relación en la universidad vaya! Que su mente si había volado lejos y ahora solo se había enterado que Alicia estaba enamorada de su pareja
Alicia se había quitado un gran peso de encima, se sentía un poco más ligera después de al menos contárselo a alguien aunque ese alguien fue Fernanda no se arrepintió de hacerlo, el silencio empezó a ser incomodo hasta que fue ella la termino rompiéndolo
- Lo siento, en serio que no sabía que me pasaba esto hasta ese día y las cosas con Saúl no han estado muy bien, tal vez sea que necesito un apoyo y sé que en Dulce lo encontrare
- Mmm ok no te preocupes gracias por la confianza
- Lo siento en verdad no quería lastimarte
- No lo hiciste, mi cabeza empezó a sacar conclusiones mucho más descabelladas
- Bueno, al menos puedo decirte que entre ella y yo solo puede ser una bella y larga amistad por favor no le digas nada a Dulce no sé como lo tomaría y mucho menos quiero perder su amistad
No te preocupes, esto no saldrá de mí, son tus sentimientos y tienes que ser tú la que se los digas y te sinceres con ella
Alicia agacho la cabeza con un dejo de pena y sintiendo que el aire que respiraba era mucho más puro hasta que sintió como unos brazos la rodeaban, se exalto un poco hasta que el calor de Fernanda hizo que su corazón dejara de latir tan fuerte era confuso el sentimiento que se produjo ante esa acción, Alicia termino cerrando los ojos fuertemente y sintiéndose como una niña pequeña empezó a llorar
Fernanda por su parte solo sostenía a Alicia en sus brazos, dejando que el peso del secreto que esa mujer cargaba se esfumara, la chica que había dejado su casa ese día sabía perfectamente todas las dudas y complejos que llegaban en el momento en que te dabas cuenta que eras el ser "extraño" de la familia
Tomaron aire las dos y cada una, después de esa cena tan peculiar se dirigieron a su recamara, sin antes darse las buenas noches como buenas compañeras que empezaban a ser
- Buenas noches Fernanda, espero que te guste la recamara y que tu cuerpo no extrañe tu antigua cama, mañana salgo a una junta que tengo con los accionistas de Londres, te tendré que dejar por algunas horas espero no te moleste
- Claro que no, el que yo me encuentre aquí no quiere decir que tengas que cambiar tu forma de vida, quizás cuando llegues ya me las haya arreglado con algo de la comida
- No tienes por qué hacerlo aunque si es lo que quieres, no te lo prohíbo y quizás también te ayude a distraerte un momento, voy a tomar una ducha cualquier cosa sabes dónde encontrarme
- Ok gracias, buen baño!
Fernanda se quedo arreglando las pocas cosas que se habían utilizado en la escasa cena mientras tanto Alicia caminaba hacia su recamara con el bolso de mano que había tomado minutos antes... La mujer que se sentía tan liviana como una pluma después de confesarle el secreto que le oprimía los pulmones y le hacía difícil la respiración busco el pequeño frasco con la crema desmaquillante
Para su sorpresa encontró una nota con la letra que conocía tan bien la de la mujer por la que su corazón palpitaba de manera irregular leyó rápidamente las pocas líneas que tenía ese trozo de papel y con el aun en la mano fue hacia el cuarto de baño y se despojo de la ropa aferrándose a aquel pedazo de papel como si la vida se le fuera en ello
Después de abrir con su mano libre la llave del agua caliente, sin saber cómo empezó a acariciar su cuerpo con las letras de Dulce, eso le producía un placer gigante la habitación empezaba a llenarse de el vapor que salía de la regadera
Despacio se dirigió bajo las gotas de agua, el placer se intensificó al sentirlas recorriendo su cuerpo sentía sus manos, las caricias delicadas por su espalda, Alicia simplemente se dejo llevar por las sensaciones que llegaban a ella gracias a su imaginación .
Su cuerpo se estremecía, sentía los besos transitar por su costado derecho, lentamente abrió los ojos y descubrió que sus pezones reaccionaban ante las caricias que su imaginación producía por si sola
La boca de aquella persona que anhelaba que en verdad fuera dulce llegaron a sus pechos, ahogando el calor que su cuerpo y pezones desprendían, la combinación de la excitación y el agua tomando camino por su cuerpo hacía que los gemidos hicieran su aparición
Las manos de Alicia guiaban las caricias que ella quería sentir, se detuvieron en la cintura, sus reacciones fueron incontenibles, su cuerpo reaccionaba favorablemente, el mimo que recibía su cuerpo iba en aumento, descubría cada parte de su anatomía, no sabía como unas pocas palabras de esa mujer podían ponerla en tal grado de excitación
Repentinamente y sin tener ni la más mínima idea de por qué lugar se encontraban esas manos las sintió en su sexo, acariciando su clítoris y sin esperar nada más se recargo en la pared de azulejo azul, los movimientos de esa mano llevaban el compas del vaivén de su cadera aumentando cada vez mas hasta que sus piernas flaquearon y dejaron de soportar su peso, un temblor grande se apodero de su cuerpo, necesitaba aferrarse a algo y lo único que encontró fueron sus piernas
Las contracciones fueron intensas, su subconsciente aun seguía pensando en que alguien más la acompañaba en el cuarto hasta que lentamente abrió los ojos y descubrió que aquel orgasmo tan perfecto había provenido de la insignificante nota de Dulce
Lleno sus pulmones de aire, el sonido que producían las gotas del agua al caer era su único acompañante cuando ella anhelaba encontrar ese rostro conocido y agradecerle con un beso lleno de pasión y algo más el maravilloso orgasmo que había tenido
Salió del baño contemplándose en el espejo, su cara se encontraba sonrojada, volteo al sentir un pequeño ardor en sus piernas, la fuerza que había aplicado al sujetarlas mientras el placer se daba por terminado había sido grande le ocasionaron pequeños rasguños por las minúsculas uñas que comenzaban a crecer de sus dedos
-Vaya, este día ha sido cansado y ¿Cómo no serlo Fernanda?... Mi curiosidad no ha sido buena, o quizás si hice que Alicia se abriera rápidamente pero no quería ser entrometida, nunca me ha gustado y mucho mas con el prototipo de familia que tengo ahora no puedo esperar gran cosa de mi compañera de departamento o debería decir la persona que me deja estar arrimada aquí?... Sentí pena, demasiada al verla como en algún momento de mi vida me vi yo
Su mirada perdida, el querer gritar que era diferente y que no por eso la deberían llamar "fenómeno", es difícil estar en ese lado pero aun tengo la esperanza de que algún día ella termine de asimilarlo por completo y respetarse tanto a ella como a las preferencias que empieza a tomar su cuerpo
Wow ese abrazo, Dios ¿Es posible demostrar y trasmitir todos los sentimientos por ese contacto tan especial?... Al menos se que gracias a eso ahora no me vera como una rival Al parecer las cosas van tomando buen camino, no espero suplantar el cariño que le tiene Alicia a Dulce pero si hacer lo que esté en mis manos para que ella no sufra lo mismo que yo en este camino -
Cerré los ojos dejando que el calor que producía mi cuerpo bajo las cobijas me inundara, suspire y sin saber cómo quede dormida
El sonido de mi celular me despertó, no sabía qué hora era y mucho menos por que el sueño me venció, con esfuerzos recordaba lo que había pensado la noche anterior, solo llegaban a mi imágenes de los acontecimientos que había tenido mi vida en estos últimos días
El tiempo pasaba rápido y yo caminaba lentamente en el no daba crédito de cómo habían pasado las cosas, en un abrir y cerrar de ojos ya me encontraba en otra casa, una vida diferente y sin ese peso inmenso que llegué a cargar sobre mis hombros
Tome rápidamente el móvil al recordar que ese tono es el que tenia con Dulce era la primera llamada que recibía de ella y yo cantaba plácidamente la canción hasta que mi mente reaccionó y entendí que no era la alarma, mensaje o algo parecido como pude aclare mi garganta y conteste
- Buenos días!
- Señorita despertando?
- Emm si se nota?
- Solo un poco, mira, no me puedo demorar en la llamada solo para avisarte que cuando salga de aquí, que la verdad será en la tarde a la hora de la comida pienso pasar a verte me invitas a comer en tu nueva casa?
- Claro qué hora es?
- Las 9:45 am tienes el tiempo suficiente para preparar la comida o al menos bajar a algún restaurante y comprar
- Como crees! Nada de restaurante! Yo preparo las cosas y te veo a esa hora ok?
- Vale cariño te amo, te veo al rato!
- Yo también te amo Besos!
Como pude di un salto de la cama tenía que empezar a hacerle la comida a mi mujer al menos el no tener nada que hacer y esta con la chica de servicio en la cocina y ver como preparaba la comida me había ayudado para saber aunque sea pocas cosas con respecto a las artes culinarias
Pensé rápidamente en decirla a Alicia que me ayudara y quizás entablar una plática un poco más fácil para llevar a ella sin que yo dejara mi apoyo a un lado pero pequeño gran detalle, mi mente había decidido recordarme que ese día no estaría en casa por una junta con no sé quien
Ya era costumbre ver un refrigerador lleno con cosas que no sabía si quiera para que se utilizaban, encontré las cosas necesarias para darle a mi damisela la comida que merecía después de un día de trabajo me dispuse a hacer lo necesario para tener todo puesto y solo calentar a la hora de su llegada mientras la pasta se cocinaba fui en busca de alguna cosa para desayunar
Encontré por buena suerte un paquete de muffins de chocolate, mi delirio encendí la cafetera sabia que con eso era suficiente para tener al menos algo en mi estomago, aun seguía sin soportar mucha comida por el mal habito que había tomado en el tiempo de la corta depresión en la que había caído
Después de unas dos horas aproximadamente fui hacia la laptop que se encontraba en mi habitación, busque algunas canciones que me gustaran y ponerlas a reproducir mientras buscaba la ropa que me pondría después del baño fui directo al closet y encontré las prendas que Dulce me había prestado las tome entre mis brazos y las abrace con fuerza aun guardaban su olor
Busque lo más parecido a una ropa casual y fui directo al baño con la voz de los "Black eyed peas" en mis oídos el baño era relajante, mis músculos por fin podían descansar sin estar tensos de que en cualquier momento entrara alguien a la habitación a gritarme pestes
Salí y eran las 2.30 pm tiempo suficiente para arreglarme y que Dulce me viera mucho mejor que la ultima vez, tenía poco maquillaje pero sé que a Alicia no le molestaría si iba a su habitación y le tomaba algunas cosas sin importancia para que mi aspecto fuera un poco mejor ya no quería seguir viendo al espejo a una mujer que no reconocía que en el fondo sabía que era yo y que si estaba con ese aspecto era porque así lo decidí
Arregle mi cabello, acomode la ropa, humecte mi piel con la crema, y solo esperé alguna señal para ir a abrirle la puerta de ahora mi casa a la mujer que había hecho que mi mundo cambiara en pocos instantes
Fui hacia la sala dejando la estela de el perfume que había tomado de la casa de mi pareja y me senté en la sala, en el sillón que se encontraba justamente frente al televisor, estaba desubicada, no sabía en qué día vivía y me enteraba de el horario por que en cada cuarto de ese departamento se encontraba un reloj
Tome el control remoto, busque algún canal interesante para matar el tiempo, estaba ansiosa por volver a contemplar los ojos de Dulce me dejaban sin aliento cada que descubría que me miraba con ese dejo de amor
Empezaba a desesperarme cuando escuché el celular ahora estaba segura de que el tono que sonaba era la alerta de mensaje nuevo estiré mi brazo, alcance a tomarlo de la mesa de centro y leí rápidamente
"Puedes abrirle la puerta a la mujer que mataría por ti?"
Con una sonrisa que solo podía sacar ella caminé hacia la puerta para presionar el botón del intercomunicador para permitirle el acceso al edificio deje entreabierta la puerta y volví a tomar asiento en el sillón
Sabía que no tardaría mucho en llegar, no es de las personas que acostumbran a subir escaleras y lo más seguro era que tomara el ascensor, pensaba eso cuando su voz me distrajo
- Serias tan amable como para ayudarme a abrir bien la puerta?
- Ah!... si voy!
Por poco me voy de espaldas al ver a Dulce con bolsas de ropa, cosméticos, artículos de higiene personal y Peluches y flores?... Vaya esta mujer no se trajo a los vendedores porque esos no se los dejan!!...
- Amor emm no era necesario todo esto estoy bien con las cosas que trajimos de tu departamento
- Lo sé, pero debes de tener al menos la mitad de las comodidades que tenías en casa
- Esa no era mi casa tenía todos los lujos que quisieras pero jamás se comparara con lo que estoy viviendo ahora junto a ti
Me abalance hacia ella con un grande abrazo y las dos volvimos a caer las cosas que había traído se encontraban dispersadas en el piso y yo sobre ella una vez más me moví ligeramente y me acomode para que mi peso no fuera demasiado y me quede ensimismada contemplando sus ojos ella se acerco y nos besamos
El beso fue tierno y con entrega me levante y la ayude a levantar ella recogía las cosas que se habían caído al piso y yo iba en dirección a la cocina para calentar la comida que había hecho horas antes con dedicación para ella
Escuché como se dirigía a mi recamara, supuse que era para dejas las bolsas con las cosas que había comprado, prepare los platos y preferí dejar las cosas en la mesa de centro no quería estar con ella en el comedor, lo sentía muy formal lo mejor era están sentadas sobre la alfombra de la sala recargarnos en el sillón y comer
Tomé asiento en el piso esperé a que llegara y empezamos a comer despacio, como era mi costumbre las platicas eran triviales dejamos medio plato de comida cuando empecé a darme cuenta de que mi mirada cambiaba
El calor del clima sumado a nuestro calor corporal al estar demasiado juntan hacían una combinación mortal, comencé quitándome la chamarra de mezclilla lo cual hizo que quedara expuesta a sus ojos, la mirada de dulce también cambio sus ojos me decían que estaba loca por mi cuerpo, mientras yo estaba loca por el de ella
Con unos compas lentos y sensuales nuestras manos acariciaban el cuerpo de la otra
La sentía tan cerca de mí como pocas veces, se encontraba frente a mi esperando algo o simplemente que yo hiciera algo, lentamente me acerque mucho mas a ti deseando perderme en tus besos, moría por tenerlos simplemente no podía estar sin sus labios por mucho tiempo la bese y Dulce parecía estar feliz al de nuevo rosar mis labios con los de ella juntas de nuevo para poder hacer algo de lo cual yo no era muy experimentada
No me importaba el entorno en el que nos encontrábamos, los rayos del sol iluminaban cada centímetro de su piel al descubierto, me acerque a ella mucho mas, besándola, acariciándola, como si de un momento a otro esto se esfumara, como si fuera a perderla de nuevo, le bese el cuello en su totalidad en su incompleta desnudes
Dulce estaba sobre mí, dejando que solo la alfombra y los muebles de ese departamento fueran los testigos y cómplices de las locuras que compartíamos besándonos con un grado de intensidad mas fuerte alcance a meter una de mis manos a su blusa alcanzando esos senos que me enloquecían, sabía que el acariciarlos hacían que ella se excitara, con la destreza que pocas veces logre pude desabrochar su sostén
Una de mis manos acariciaba su espalda y con la otra tomaba tu nuca tratando de acercarla más a mí para que el beso fuera más intenso Ella sobre mí y yo con delicadas caricias en sus senos desnudos
- Esto no es justo - pudo decir Dulce con su respiración agitada
- ¿Por qué? dije sin dejar de acariciar su anatomía
- Porque tu puedes tocarlos y yo aun no-
Vi su sonrisa al mirarme como pude me quite la blusa que tenia sin quitarla de encima mío
- Tómalos, son tuyos- Dije en un susurro
La mirada de dulce dejaba ver la lujuria y el amor que llevaba en su interior, en esos momentos era cuando yo me sentía amada y deseada al mismo tiempo
Con la habilidad que la caracterizaba retiro mi sostén, me acariciaba lentamente lo cual hacia que me volviera loca, no dejo pasar un minuto más y sus labios fueron hacia mis pezones los que ya se encontraban sensibles al tacto que ella tenía
Después de los mimos que había tenido con mis senos, se quito la blusa se levanto para hacer más fácil ese movimiento, aparentemente ella se retiraría de mi, iba a regresar cuando me levante y la abrace coloque mi cabeza junto a su vientre y lo bese el balanceo de su cadera era notable, era fascinante el sentir la suavidad de su piel bajo mis labios
De nuevo sobre esa alfombra besándonos con locura, el ambiente cambio y se hizo el indicado para este momento de intimidad que anhelaba que fuese con ella Mi Dulce la lentitud de sus besos eran indescriptibles, yo no podía creer que esto estaba sucediendo en verdad, todo era perfecto ella sus labios.. Sus besos sus caricias era regalarle una vez más mi alma
No quería imaginar que esto se tendría que acabar en unas cuantas horas sus besos eran mucho más frecuentes sus manos me recorrían desesperadas entrelazaba mis piernas a las suyas, aun con nuestro respectivo pantalón en su lugar, el rose de nuestros cuerpos aumenta la temperatura la misma temperatura de la sala que seguía su ascenso con nosotras
- Yo Ya no aguanto más- Dulce hablo con su cuerpo temblando
- De que amor?- Mi voz cambio el tomo a preocupación
Se levanto y empezó a quitarse el pantalón, se recostó de nuevo a mi lado, recorrió mis senos, mi vientre lentamente y sin prisa, sin darme yo cuenta llegaste a mi sexo ya húmedo y esperando tus caricias Dulce sonrió y me miro a los ojos mientras yo no podía alejar la vista de los de ella sus manos hábiles tocaron lugares que solo ella había descubierto, mi espalda, mi cuello, no dejaba ni un centímetro de su rosa sutilmente pasaba sus uñas la mismas que me excitaban de sobremanera Ella lo sabía y lo intuía
Mi rostro mostraba un placer inigualable y en el rostro de ella aun podía ver esa sonrisa, me mostraba su expresión de placer y felicidad, me tenía a su merced sus caricias aun tenían ese toque de temor lo hacía delicadamente y con precisión, sabía exactamente como evitarme más de lo que ya me encontraba
Aun en la excitación de mi cuerpo y mis manos podía sentir el amor que me profesabas, podía sentir a través de sus manos en cada caricia un te amo en los besos que me daba podía decirme sin hablar que era su vida escribías una carta sobre mi cuerpo, dabas la forma de un tatuaje en mi ser que jamás nadie será capaz de borrar
Sabiendo que mi cuerpo se encontraba sobre esa alfombra podría jurar que volaba llegaba a la misma luna, aquella que algún día nos ilumino y termino viéndonos juntas delicada y sutilmente quito lo último que quedaba cubriéndome y me tuvo de nuevo desnuda ante ella, haciendo una danza con nuestros cuerpos, nuestras manos, piernas y cadera
Sentí como entraba primero delicadamente uno de sus dedos que yo antes había tenido en mi boca, excitada y vulnerable ante estas manos que me llevaban a la gloria, de nuevo perdida en sus ojos, sintiendo su entrada Dulce excitada pero feliz continuaba, haciendo que yo me embriagara de placer, sin que yo no escuchara nada más que su respiración acompasada con la mía me rodeaba con su brazo derecho alcanzando uno de mis senos
Los besos que recibía mi nuca eran únicos, me derretía en el momento de sentirte dentro de mí con esos justos y excelentes besos, sus dedos llegaron a mi clítoris, inmediatamente mi excitación subió al por mayor, salían pequeños gemidos de mi garganta intentaba aferrarme a algo más que no fuera su cuerpo
Mis corto gemidos subían de intensidad y se hacían más constantes no podía creer el tocar las estrellas en ese departamento que no me pertenecía las contracciones fueron intensas, mi cuerpo tembló y mi cadera se levanto de sobremanera
Mi respiración regresaba a la normalidad la mirada de mi amada era de placer y satisfacción al saber que había llegado a tan ansiado orgasmo
Mis manos cobraron vida y empezaron a recorrer su cuerpo, deseaba complementarla y lo iba a hacer
- Si quieres puedes bajar cuando quieras- Dulce con voz entrecortada había dicho las palabras mágicas
- Amor tranquila que a eso voy- dije besándole en cuello
Con tranquilidad seguía excitándola, haciendo que su imaginación volara, dándole los besos que jamás se acabaran inmediatamente baje besando su vientre primero, después me entretuve en su ombligo para que a los pocos minutos llegara a ese tan deseado punto del cual no era necesario humedecer mas mi mujer se encontraba a punto de explotar en excitación ahí me encontraba, acomodándome para poder darle el mayor placer de la vida
Mi lengua y mis manos intervenían, las caricias que recibía con mi lengua en su sexo hacían que se humedeciera al punto máximo, saboreaba cada centímetro de él era como si fuese agua de la cual tenía una sed incontrolable Dulce se encontraba ensimismada de placer no podía existir más que el ahora tu y yo
Sus gemidos eran constantes y prolongados mientras yo la manipulaba, introduje dos dedos mientras mi lengua seguía en su clítoris, el vaivén se acelero exageradamente tomo mis hombros y los presiono con fuerza sabia que faltaba poco para que ella llegara al mismo mundo del cual yo ya había regresado sus gemidos se convirtieron en una respiración agitada y gritos asfixiados
-Te amo- un gemido se transformo en orgasmo, tenía su cuerpo agitado en mis brazos, vulnerable a mi tacto sabia que ella estaba dispuesta a dejarme contemplarla así se encontraba feliz pero mucho más feliz me encontraba yo por ser la única que pudiese verla en ese estado tan delicado, hermoso y sutil
Su corazón latía fuerte y temblaba de excitación, temblaba en mis brazos y con sus brazos rodeándome mientras me abrazaba rogaba por que el tiempo se detuviera
Nunca olvidare las experiencias que he vivido con ella uno de los momentos en los que yo fui suya y ella fue mía completamente esa entrega en la que aparte del corazón, alma y espíritu se entregaron también lo hizo el cuerpo una de las veces en las que nuestros cuerpos escribieron poesía sobre nuestra piel
Sentí como su pecho se expandía por la gran bocanada de aire tome sus manos y le dije
- Estas bien amor?
- Mejor no puedo estar es lindo estar así contigo, sabias?...
- No, no lo sé pero no creo que sea tan lindo como los sentimientos y sensaciones que haces que tenga para ti
- No quiero que esto acabe Fernanda, me da pánico el saber que algún día no estaré a tu lado
- No hay que pensar en eso sí?... no quiero que nos adelantemos a los acontecimientos que tengan nuestras vidas solo me importa el aquí y el ahora contigo lo demás, se verá con el tiempo
Si fuese posible en ese mismo momento le entregaba lo más preciado que tuviera una cosa contradictoria, porque en ese instante lo único que me importaba y lo que sabía que era lo más importante era ella Sus ojos se posaron en los míos y sonreímos nuestras manos se juntaron y cerramos los ojos por pocos minutos hasta que el teléfono del departamento sonó
Vi como Dulce tomaba su ropa rápidamente y se vestía yo solo la contemplaba como si en eso se me fuera la vida, fue hacia el teléfono inalámbrico que se encontraba a pocos metros de nosotras y contesto
- Diga?
- Ahorita?!... No que eran quince días?!... Qué hacemos?!...
- Vale eso espero gracias por llamar Bye
Volvió hacia mí y me dijo en un tono de preocupación
- Amor tenemos que arreglar esto rápido e ir a tu recamara marco Ali para decirme que Saúl, recuerdas a Saúl verdad?... su esposo le marcó para avisar que venía en camino del aeropuerto estamos como a 45 min de distancia aunque depende como maneje el por qué no se le ocurrió venir otro día?!?!?!
- Mmm. y por que la preocupación?... es malo que me encuentre aquí?
- No lo creo pero no me gusta que estés aquí cuando ellos 2 están juntos
- Vale vamos a arreglar esto, nos vamos a mi recamara y vemos que pasa después si?... lo peor es que tenga que vivir contigo y este medio secuestrada pero como es lo que más quiero no me opondría
- Estas loquita amor anda vamos a arreglar
Me ayudo a vestirme y entre las dos arreglamos la sala mi imaginación no podía evitar el imaginarme algún día en su casa o al menos en algún lugar donde viviéramos las dos y tuviéramos que hacer las cosas del aseo juntas
Tomo mi mano y me llevo hacia la recamara lo único que me apetecía era estar sólo con ella, recostada en su pecho intentando ponerle más atención a algún aparato electrodoméstico aunque supiera que eso era casi imposible sabiéndola a mi lado
-Aun podía escuchar el palpitar de mi corazón al colgar la llamada con Dulce "cómo es posible que Saúl llegue sin previo aviso" reclamaba en alta voz mi cuerpo temblaba de manera irregular, "calma Alicia calma!" pensaba una y otra vez -
Tomé las llaves del auto y rogando por qué no hubiera demasiado trafico a esa hora de la tarde manejé como desesperada llegué al departamento con un ansia desmedida tomé el elevador
El departamento no daba señales de vida no sabía que había pasado, quizás Dulce se había ido con Fernanda hasta que escuche un par de risas en la habitación de huéspedes
No se habían ido yo conservaba aun esa esperanza, no quería que Fernanda pudiera ver cómo era nuestro trato, no era el mas cálido en el mundo, aunque un poco extraño para ser esposos todo se había estado acabando desde hace tiempo, me encontraba como una persona que aparentaba tener una vida espectacular fuera de este lugar y dentro del solo éramos un par de desconocidos
Toque delicadamente la puerta, la escena que vi me causo gracia Dulce le hacía cosquillas a su niña no pude evitar sentir celos y envidia de la misma daría cualquier cosa por ser yo la que se encontrara en ese lugar
No pude hacer más que quedarme sentada en la silla que se encontraba frente al pequeño escritorio y ver como mis amigas se divertían como chiquillas empezaba a volar mi mente cuando escuché como alguien obviamente Saúl abría la puerta del departamento
Mis nervios se pusieron de punta, sabía que Dulce se encontraba igual que yo pero ella siempre había sido mucho mejor en ocultar las cosas nos miramos las 3 al unisonó y por inercia fui a el encuentro de mi esposo
- Saúl Como te fue en el viaje?
- Bien, gracias por preguntar y dime que hacías en el cuarto de huéspedes?
- Ah estaba con Dulce, la recuerdas?... mi amiga de la uni y con otra amiga que conocí gracias a ella se llama Fernanda nos distraíamos un poco
- Y el trabajo?
- Quería estar aquí para recibirte y cenar con ellas, te molesta?
- No, tiene tiempo que no veo a Dulce sería bueno platicar con ella y aprovechando conocer a Fernanda
- Vale les hablaré
Fui hacia la recamara y mis amigas se encontraban ya de pie, arreglándose la ropa que se había desacomodado gracias a sus juegos tenía que aparentar que el matrimonio era lo mejor que me había pasado así que cuando pudimos estar juntos los cuatro sin algún señalamiento besé en los labios a Saúl
El beso como siempre había sido frio, solo una vana contestación del que yo le había dado, no esperaba nada mas, así han sido solo quería seguir con la farsa frente a Dulce
Llegamos al comedor y gracias a Fernanda teníamos cena, no había podido probar el sazón de la chica, la verdad cocinaba bien una barrera mas que había roto con respecto a ella uno toma ideas medio exageradas cuando tienes en cuenta de que la persona es hija de una familia con dinero
La comida transcurrió entre pláticas triviales, chistes comunes y acontecimientos en los años que no teníamos comunicación con Dulce después de terminar la comida y estar en la sobremesa con un Café Royal Frappé en mis manos no pude evitar ensimismarme con Dulce
Es que esa chica era hermosa tanto exterior como interiormente sus valores educación voz manías vicios gestos no pude dejar de contemplarla por un largo rato el mundo se me detuvo, no me importaba más que ella, el escenario se esfumo y yo viajaba a su alrededor hasta que la voz de Saúl a mi oído distrajo mi pensamiento
- Si no dejas de verla la vas a deshacer- lo dijo en un tono serio y prepotente
Parpadeé rápidamente para que mi vista cambiara Saúl se dio cuenta de mi mirada!... no podía hacer gran cosa si quiera hablar sin tartamudear lo único que hice fue acercarme al hombro de mi aun esposo y decirle con palabras entrecortadas
- Lo siento creo que el alcohol empieza a hacer efecto .
Pasaron pocos minutos hasta que Dulce se despidió de nosotros en el tiempo que estuvimos platicando pusimos al tanto a Saúl de que Fernanda se quedaría unos días en el departamento mientras encontraba algún lugar donde vivir no pudimos decir toda la verdad y más en cambio solo dijimos que había llegado de Puebla y había localizado a Dulce
Nos despedimos con un beso en la mejilla y un gran abrazo, por obvias razones no podía besar a Fernanda en los labios así que solamente la abrazo, le dijo una pequeña frase y con otro abrazo un poco menos emotivo le dijo un hasta luego a Saúl
Las tres personas que se encontraban en el departamento simplemente se sonrieron, cada una tomo su rumbo, Fernanda fue hacia su recamara para arreglar las cosas que había dejado su pareja mientras tanto a Saúl empezaba a hacerle mucho mas efecto el alcohol y se encontraba acariciando a Alicia de manera lujuriosa
Estando Saúl y Alicia en la recamara, ella empezó a quitarse la ropa, no encontraba ningún pretexto para ir al baño a cambiarse y negarle la vista a su esposo se puso la ropa para dormir se recostó y sintió la mano de Saúl acariciándola no le provocaba nada y eso hacia frustrante la situación
Podía sentir la mano de su marido en sus pechos, los besos en el cuello, una de sus manos recorriendo su vientre y bajando poco a poco a su sexo
Con un gran suspiro Alicia abrió la boca
- Saúl!... Entiende de una buena vez que yo no soy tu juguete!!... si quieres sexo busca tu mano o a alguna prostituta!!...Aparte!, siempre que permito que pase me dejas con ganas de más!, más que tu no me das!!!... NI PARA ESO SIRVES!!
Saúl se quedo con la boca abierta estaba acostumbrado a tener a su esposa sumisa, aquella que siempre lo complacía en todo no entendía que había pasado, después de pocos minutos el seguía en la misma postura y ella dándole la espalda
Alicia se encontraba dormida, habían pasado varios minutos después de la última vez que hablo Saúl empezada a dormitar hasta que escucho un ruido que hizo que abriera sus ojos
Los movimientos de Alicia eran intensos sus gemidos eran fuertes y delicados al mismo tiempo Saúl no podía creer lo que escuchaba fingió dormir para no interrumpir a su compañera de cama hasta que escucho esa frase que retumbaba en sus oídos
- Dulce!... Mmmm!!... Aaaahhh!!... te amo Eres única No te detengas!!... Aaaahhhh!!...