El regalo de mi novio
Era tal mi excitación que ya no me importaba nada quería satisfacer a mis jóvenes y complacer sus locuras.
El regalo de mi novio
Me llamo Elsa 44 años y estoy saliendo con Marcos un hombre de 56 años, muy buen amante y para nada egoísta en lo que a sexo se refiere.
Cuando él me expuso su fantasía de organizar una orgía en la que yo fuese ofrecida a dos hombres mientras el miraría y sacaría fotos, me excité tanto que empecé a masturbarme mientras le escuchaba. Aunque se había corrido hacía pocos minutos, el tema de conversación y mi reacción ante su idea le pusieron a tono rápidamente. Pidiéndome que no dejase de tocarme me penetró el culo con delicadeza para acabar follándomelo con todas sus fuerzas.
Tardó más de lo que había pensado en preparar aquella "fiesta" y pasé las semanas de espera en un estado de nerviosismo y excitación constante, pero aún así seguía sin querer conocer ningún detalle.
Cuando todo estuvo preparado y la fecha fijada, me preguntó si estaba decidida a hacerlo; intentaba asegurarse de que aquello no influiría en nuestros sentimientos ni afectaría a nuestra relación. Le tranquilicé, yo le quería, lo pasaríamos bien juntos de una forma distinta y no habría problemas por ello. Me sentía muy valiente, muy decidida.
Había alquilado para ese fin de semana un caserón alejado de la ciudad pero acondicionado con todas las comodidades.
Llegó el día sábado, llegamos al caserón, desde temprano la excitación empezó a comerme, y al caer la tarde me bañe me puse mis prendas recién compradas, llegaron a las 7 de la tarde dos jóvenes, muy guapos y arreglados, uno de ellos Ignacio, un negro musculoso. Los recibí con besito de lengua a cada uno para empezarlos a excitar siendo que la excitada era yo, nos fuimos a la habitación y al llegar me quite el abrigo que tenia y vieron el vestido que traía, su expresión los dijo todo, me querían comer con los ojos, empezamos a tomar vino, y a platicar, les dije que me expresaran que es lo que querían hacer, Rafael me dijo que lo primero que quería hacer era besarme y acariciarme todo el cuerpo, Ignacio me dijo que quería besarme también y apretarme con sus manos mis senos, yo les dije que quería primero que Rafael me besara y empezara a acariciarme sobre la ropa, Marcos mi novio nos sacaba fotos
Rafael, me besaba de forma desesperada, quería meterme la lengua hasta la garganta y fue mas cuando empecé a tocarle la verga sobre su pantalón, el empezaba a meterme a mano bajo el vestido y lo detuve y me di vuelta para ver a Ignacio y me empezó a besar también de una forma desesperada, yo estaba muy excitada pero tenía que controlarme, Rafael me acariciaba la espalda y me tomaba de los senos, me empezó a decir cosas obscenas, y entonces fue cuando ya mi excitación salió de mi control, deje que Ignacio empezara a tocarme debajo del vestido, me di vuelta para ver a Rafael y le dije que si quería cogerme, me respondió con un gran beso, Ignacio metió la mano en mi escote y empezó a acariciarme y apretar mi seno y Rafael hizo los mismo, yo empecé a quejarme de una forma muy excitante y les dije que podían rasgarme el escote del vestido porque quería que me besaran los senos y esto los excitó mucho, y cada uno me empezaron a besarme y mamarme los senos, Ignacio, con tanta excitación metió la mano hasta mi vagina y empezó a acariciarme con su dedo, yo estaba que escurría, le dije que al oído que metiera el dedo en mi vagina y al hacerlo empecé a quejarme más fuerte, les pedía que me acabaran de rasgar el vestido, que me empezaran a decirme cosas obscenas, y al dejarme sin vestido se excitaron más ya que me quede con mis ligeros y en medias como se los había prometido, le dije que quería que me basaran y que me mordieran con suavidad un seno cada uno, y a Rafael que metiera su dedo en mi vagina, yo les sobaba sus vergas sobre sus pantalones, les pedía que siguieran mordiéndome mis senos, al sentir sus dedos inmediatamente, tuve un orgasmo, les dije que se detuvieran, que me dieran más vino, lo tome ya que empezaba a darme más sed. Ignacio me llevo la copa de vino y entonces me abrí de piernas y le pedí que me empezara a ser el sexo oral, le dije que empezara a lamer con su lengua mi clítoris y lo empezó a hacer, y que luego metiera su lengua en mi vagina, Rafael se acerco y le dije que se quitara la ropa y al hacerlo le pedí que me metiera su verga en mi boca, se excito mucho empecé a mamarle su miembro, me detenía ya que quería venirse, pero le dije tuviera paciencia, Ignacio metía su lengua dentro de mí, empecé a sentirme más excitada, y le dije que se quitara, deje de mamarle su verga a Rafael y les dije que quería que me cogieran, se pusieron eufóricos, le pedí a Ignacio que se sentara y me acosté sobre de el y con mis manos coloque su verga sobre mi vagina e hice que me penetrara, al sentirlo dentro de mí empecé a gritar, le pedí a Rafael que quería su verga en mi boca, Ignacio le hace honor a la fama de la gente de color, tenía una buena verga de buen tamaño y grosor.
Al verme en el espejo, mi excitación salió de control, al ver mi piel blanca con esas medias y la verga de color de Ignacio me excitó mucho, no había sentido esa excitación antes
Estaba demasiado caliente, seguían haciendo lo que querían de mí, era tal mi excitación que ya no me importaba nada quería satisfacer a mis jóvenes y complacer sus locuras, Rafael me preguntó si estaba dispuesta a que me metieran su verga los dos en mi vagina, le conteste de forma muy caliente y desesperada que me podían utilizar, se detuvieron, Rafael salió de la recamara, mi negro me dijo que me volteara por que quería metérmela de nuevo, no quería de dejar de usarme, Rafael entró nuevamente corriendo vi también que traía el gel, le dijo a Ignacio que me la sacara y que se pusiera el lubricante, Rafael me puso en mi vagina y de forma amenazante me dijo que me iban a violar de forma que nunca imaginaría, les dije por que se estaban tardando, que era suya y que deseaba sus dos vergas, Ignacio me dijo de forma textual "te la vamos a meter y vas a comerte dos vergas cabrona", Ignacio se acostó boca arriba y me coste de espaldas sobre de el, me dijo que me metiera su verga y así lo hice, y lo pude hacer ya que como se los había dicho tenía una buena verga, entonces Rafael me dijo que ahora le tocaba, se puso frente a mí, y empezó a tratar de metérmela, yo gritaba, le decía que lo hiciera, pero la verdad no pudo, ya que no tenia mi vagina lo suficientemente grande, estábamos los tres como locos, queríamos satisfacernos, Ignacio dijo, que me levantara, me dijo que si no podían metérmela por la vagina, que me la meterían por el culo, yo les dije que sí pero no sabía como, me dijo que lo metiera en mi culo, Rafael me puso lubricante y la verga de mi negro entro fácilmente, y luego Rafael me trato de penetrar, lo hacia despacio, yo sentía dolor y gran placer, y poco a poco me lo fue metiendo, el dolor que sentía no era un dolor desagradable, era una sensación más que todo de que mi ano se estaba dilatando más, y la verdad sentí placer muy profundo, me gustaba sentirme usada, sentía muy rico la penetración de ambos y cuando la verga de Rafael entro por completo empecé a gritar como no la había echo toda la noche, les decía que así, que se movieran, ellos me decían cosa muy excitantes. Me sentía violada de forma voluntaria, les pedía que no pararan, les decía que me mostraran su hombría, que eran unos machos y que podían coger conmigo las veces que quisieran, seguimos así hasta que me dijeron que locura quería hacer yo, les pedía que ambos me llenaran de semen mi ano, ellos se empezaron a mover más rápido e Ignacio se empezó a venir, sentía como me escurría el semen, se detuvo, le dijo a Rafael que se moviera por que se quería levantar, se quitó Rafael, Ignacio se quitó pero yo le dije a Rafael que me la siguiera metiendo y de forma brusca me la metió nuevamente, le dije que quería sus semen en mi culo, seguía moviéndose hasta que su semen me lleno mi culo. Se quitó yo no había podido tener mi orgasmo, sentía mi ano muy dilatado y adormecido, Ignacio me tomo de la mano y me dijo que era el sueño de un mucho echo realidad en la cama, pero yo le dije que quería más, lo basaba de forma desesperada, le masturbaba su verga para que se pusiera dura otra vez, y empezaba a dar resultado, les dije que hicieran que me viniera, Me monte de Ignacio con su verga casi erecta me la metí, me empecé a mover de forma fuerte, le decía que hiciera que me viniera, volteé a ver a ver a Rafael y le dije que lo quería dentro de mi, también tomándolo de la verga, también se empezó a excitar y sin decirme nada me dijo que dejara de moverme yo y mi negro, me pidió que me agachara, y me la metió por el culo nuevamente ya sin trabajo y me dijo que si quería otra vez adentro a los dos y así los tenía nuevamente a los dentro de mí, una verga en mi vagina y otra en mi ano, yo me movía con ellos, quería terminar, me pedían que gritara como lo estaba haciendo, lo hacia y seguimos moviéndonos hasta que mi ansiado orgasmo llegó.