El Reencuentro Con Mi Prima

Durante vacaciones regreso a la casa de mi infancia dónde me reencuentro con mi prima, y recordamos los buenos momentos de nuestra adolescencia y volvemos a tener sexo desenfrenado.

Mi nombre es David, soy alto, 1,78 m., ojos verdes claros, tez trigueña y aunque no soy un galán de cine tengo mi atractivo o al menos así lo considero. Los hechos que les voy a contar sucedieron cuando tenía 19 años.

Para aquel entonces estaba en el primer año de la Universidad y se acercaban las festividades de fin de año, así que opte por pasar mis vacaciones en el pueblo en el que viví durante mi infancia, tenía muy buenos recuerdos de ese lugar y además habían varios amigos con los que ya había quedado para encontrarnos y festejar la ocasión.

Así pues emprendí viaje rumbo a la casa de mi abuela, que vivía en las afueras del pueblo y tenía una gran casa donde muchas veces nos reuníamos toda la familia, hacía ya un par de años que no la veía, y pensar en pasar estas vacaciones junto a ella me emocionaba y me recordaba mi niñez, cuando la gran parte del día la pasaba en su casa jugando de un lado a otro, siendo mimado por ella. Al llegar a su casa se sorprendió gratamente abrazándome a la vez que me regañaba tiernamente por no haberla visitado más seguido.

Después de instalarme en uno de los cuartos salí a recorrer el pueblo, estaba algo diferente a lo que lo recordaba, después de deambular por sus calles durante unas horas y de tomarme algunas cervezas con mis amigos, regrese entrada la noche a casa de mi abuela, ya iba medio borracho tambaleándome. Al llegar me percate que no había llevado conmigo las llaves que me habían dado y tuve que llamar a la puerta, esperaba que mi abuela me abriera la puerta pero mi sorpresa fue mayúscula cuando mi prima Daniela salió a la puerta…

Primito… Que sorpresa verte por acá… - Me dijo a modo de saludo…- Y en ese estado…- La borrachera que llevaba era más evidente de lo que creía…
Hhooo...Hola… Danniii…- Le dije tartamudeando a la vez que la observaba detalladamente… -El sorprendido era yo, no esperaba encontrarme con ella y menos así como estaba, solo llevaba puesto un pequeño short que dejaba a la vista sus hermosas piernas y una camiseta negra sin mangas ajustada que le definía su cuerpo y le resaltaba su belleza…
Pero pasa, entra… No te quedes en la puerta que comienza a hacer frío…- Me dio dos besos en la mejilla y entro rumbo a la cocina donde se encontraba mi abuela.

Tenía razón, afuera hacía un frío espantoso, al contrario del interior de la casa que se encontraba cálida, tal vez por ser una casa antigua con paredes gruesas que mantenían la temperatura al interior. Me dirigí a mí habitación, en silencio, no sé si sería efecto del licor o por que razón no dejaba de pensar en mi prima, estaba realmente hermosa, hacía cerca de dos años que no la veía y estaba más buena de lo que la recordaba, ahora con sus 18 años su cuerpo estaba más definido, unas tetas grandes redondas y firmes por lo que pude observar, una cinturita delgada y una cola de infarto, bien paradita que daba fin a unas piernas largas y esbeltas, una belleza de unos 1,72 m aproximadamente.

Daniela era mi prima favorita, hija única de la hermana de mi mamá. Dani había vivido toda la vida con mi abuela, pues sus papás habían fallecido en un accidente de tránsito cuando ella era muy pequeña. Y como durante mi infancia vivía muy cerca de la casa de mi abuela la mayor parte del tiempo me la pasaba allí jugando con mi prima, éramos como hermanos, siempre no la pasábamos juntos y nos confiabamos nuestros secretos. Mis padres tuvieron que mudarse a otra ciudad y la relación con mi prima se fue disolviendo alejándonos cada vez más hasta solo coincidir en contadas ocasiones.

Sin embargo el hecho de verla de forma tan inesperada, aunque era lógico suponer que ella en vacaciones siempre visitaba a la abuela, me hizo recordar momentos de nuestra niñez, tantas risas y juegos, que durante los últimos años en los que estuvimos juntos se iban convirtiendo cada vez en menos inocentes. Muchas veces con Daniela exploramos nuestros cuerpos ante cualquier descuido de nuestra abuela, y eran estos momentos los que venían ahora a mi mente con tanta nitidez que pareciera haberlos vivido ayer.

...

El primer recuerdo que tengo es, era fin de semana y habíamos quedado los dos solos en la casa, mi abuela había salido al pueblo como lo hacía cada sábado y tardaría casi toda la mañana. En ese entonces la casa de mi abuela tenía un pequeño inconveniente, y era que el baño, o bueno el cuartito que hacía de baño, quedaba un poco distanciado del resto de la casa, y no tenía mucha privacidad, la puerta era una hoja de lata sin ningún tipo de seguro y si con un par de agujeros que permitían una buena visual del interior, además que la ventana que tenía daba hacía un matorral donde cualquiera podría escabullirse a espiar, y para terminar el hecho que hicieran falta ladrillos en algunos lados de las paredes dejaban muy expuesta a la persona que estuviera allí dentro a las miradas de cualquiera que se atreviera a echar un vistazo desde afuera.

Y ese fue el caso de aquella ocasión. Como muchas veces yo iba caminando solo desde mi casa hasta casa de la abuela, y en esta ocasión me encontré con ella a mitad de camino, como mencioné antes ella salía rumbo al pueblo, al encontrarnos ella me dijo que mi prima Dani aún estaba en su cama pero que la puerta posterior de la casa estaba abierta para que yo pudiera entrar. Sin más, seguí mi camino rumbo a casa de la abuela, y cinco minutos más tarde ya estaba entrando a la casa, me dirigí a la habitación de mi prima quería fastidiarla y hacerla levantar, pero al entrar en su habitación estaba vacía, así que la busque en toda la casa sin encontrarla, solo me quedaba buscarla en el baño, así que salí de la casa y me dirigí a aquel pequeño baño. En el camino pensé en darle un susto así que me fui caminando lo más sigilosamente posible, al llegar al baño lo rodee hasta dar a la ventana, he de mencionar que no tenía ni siquiera un vidrio era solo un hueco en la pared en algunas ocasiones cubierto por una cortina, me acerque, corrí la cortina y me asomé al interior del baño, pero antes de hacer o decir cualquier cosa me quedé hipnotizado ante la visión del interior del baño, estaba mi prima completamente desnuda de espaldas a mí, se estaba bañando y no se percató de mi presencia, aunque la había visto desnuda en alguna otra ocasión esta vez fue distinto, algo cambio dentro de mí y no pude evitar mirarla con otros ojos, ya no como casi mi hermana, ver caer el agua sobre su cuerpo deslizándose desde su larga cabellera rubia pasando por su espalda para terminar en su culito, un culito aunque pequeño y blanquito aún sin mayor atractivo a parte del de ocultar ese íntimo agujero que ya tendría la oportunidad de examinar. Después de unos minutos se giró quedando frente a mí, tenía los ojos cerrados por lo que no se percató de mi presencia, pude ver sus incipientes pechos, apenas formados por unos pezones pequeños rosaditos muy duros, mientras ella seguía bañándose disfrutando del agua que recorría su cuerpo, yo no pude evitar fijarme en su coñito, sus labios superiores bien cerraditos ocultando tan maravilloso tesoro con un pubis del que empezaban a salir pequeños vellos rubios casi imperceptibles a la vista. Estando ahí deleitándome ante la visión del cuerpo de mi prima no note el momento en que ella abrió los ojos, solo un grito suyo me sacó de mis pensamientos…

David, me asustaste, que estás haciendo ahí???... - Sin embargo mi prima no hizo ningún intento por cubrirse, tal vez no le pareció necesario por el nivel de confianza que teníamos…
Te estaba buscando…- Fue lo único que pude decirle…
Dame 5 minutos… Me visto y vamos a jugar…

En ese momento me dirigí a la casa sin dejar de pensar en mi prima, en su cuerpo desnudo. El resto del día continuó normal, jugando como siempre con ella, aunque en mi mente seguía la imagen de mi prima desnuda, y yo siempre aprovechaba cualquier ocasión para pegarme más a ella, quería tocar ese cuerpo que horas antes había visto desnudo.

Sin embargo, no se volvió a presentar la oportunidad de volver a ver a mi prima desnuda en un buen tiempo, al punto que lo olvidé. Después de casi un año sin ningún momento destacable se volvió a presentar una oportunidad. Aquel fin de semana lo pasaría en casa de mi abuela ya que mis padres saldrían a algún viaje, así que llegue desde el viernes en la tarde, después de jugar con Daniela hasta entrada la noche mi abuela nos mandó a dormir, como para ella eramos como hermanos no puso inconveniente en que durmieramos en la misma cama, pero ese sería el punto en el que todo cambiaría.

Después de que mi abuela se fue a su habitación, Dani y yo nos dirigimos a su habitación, que quedaba al otro lado de la casa, por lo que nada de lo que pasará adentro se escucharía en la habitación de la abuela. Estando allí los dos solos y mientras yo acomodaba mis cosas que por estar jugando durante toda la tarde había dejado tiradas, Dani se dirigió a su armario y saco su pijama, y sin ningún tipo de pudor se empezó a desvestir mientras hablábamos de cosas sin importancia, por mi lado solo me limité a quitarme el pantalón de sudadera que llevaba puesto, ya que debajo llevaba siempre una pantaloneta y así dormiría. Yo no perdía detalle del cuerpo de mi prima, primero se quitó su camiseta con algún estampado infantil, quedando con un pequeño sostén azul claro o bueno lo que hace de sostén en las niñas que empiezan a desarrollarse, para acto seguido colocarse la camiseta de su pijama, que le tapaba hasta la altura del ombligo, después se quitó muy lentamente su pantalón de sudadera, dejando a mí vista unas braguitas rosadas, al agacharse de espaldas a mi, para terminar de sacarse su pantalón, note que parte de su calzón se había metido entre sus nalgas, a lo que ella sin pensarlo dos veces metió su mano derecha en su culito para acomodarselo, dejándome una vista increíblemente pervertida y morbosa, sin más, se colocó un pequeño short que completaba su pijama. Nos acostamos los dos frente a frente en la cama, después de un rato el cansancio de la tarde de juegos nos venció y quedamos profundamente dormidos.

Al despertarme, salí de la habitación dejando a mí prima aún dormida, me dirigí a la cocina donde estaba mi abuela…

Hola David, como amaneciste…
Bien abuela…
Voy a salir al pueblo, tengo que hacer algunas diligencias y me demoro más de lo normal, regreso sobre las 14:00, el desayuno ya está listo, y en la nevera les dejé bocadillos preparados mientras regreso con el almuerzo… Portense bien… - En ese momento mi abuela salió dejándonos solos con mi prima…

Al llegar a la habitación de Dani ella ya estaba despertándose, le dije lo que me había dicho la abuela y salimos los dos a desayunar, aún en pijama los dos. Después de comer y levantar los platos Dani dijo que iría a bañarse, a lo que sin pensarlo le dije que nos bañaramos juntos. El haberla visto la noche anterior medio desnuda mientras se colocaba su pijama había traído a mi mente la ocasión en la que la vi bañándose desnuda y quería aprovechar que habíamos quedado solos para volver a repetir el momento. Mi prima acepto sin reproches, salimos rumbo al baño, sin decir ni media palabra en el camino, al llegar a la puerta del baño mi prima de detuvo antes de entrar…

Espera, déjame entrar primero que me estoy orinando… - Por miedo a que mi prima se arrepintiera de dejarme entrar y me negara la posibilidad de verla desnuda me rehuse…
Déjame entrar, entremos juntos, no diré nada mientras orinas…- Al final accedió y entramos juntos al baño…

Cerramos la puerta, que para aquel entonces ya tenía un pestillo, y acto seguido mi prima en un solo movimiento bajo hasta sus talones el short de su pijama y sus calzoncitos, sentándose en el inodoro comenzando a orinar, el sonido de su orina chocando con fuerza con el fondo del inodoro, sumado a la visión de mi prima semi desnuda sentada con las piernas juntas, me hizo tener, la que recuerdo mi primera erección. Entre tanto yo me quite la camiseta quedando con solo mi pantaloneta. Cuando Dani termino de orinar se levanto y con sus pies se terminó de deshacer de su short y bragas, llamandome la atención el hecho de no haber secado su coñito, tal vez pensando en que no habría necesidad ya que se iba a bañar, sin esperar más se sacó por la cabeza su camiseta y después su pequeño sostén, yo por mi lado seguía sin moverme, contemplando el cuerpo de mi prima completamente desnudo, hasta que las palabras de Dani me sacaron de mis pensamientos…

Y es que tú te vas a bañar así…
Estaba esperándote… - Atiné a decirle…

Me quite la pantaloneta y los boxers que llevaba puestos quedando al igual que mi prima completamente desnudo, mi polla tenía una pequeña erección que pasó desapercibida para mi prima, no se le hizo raro verme desnudo, o al menos eso pensé en ese momento…

Nos metimos bajo el agua de aquella regadera y comenzamos a jugar mientras nos bañamos, tome el jabón y en un acto de perversión me ofrecí a enjabonarla. Dani acepto y con mis manos temblorosas comencé a recorrer su cuerpo, primero su cuello bajando por sus tetas, que aunque pequeñas ya empezaban a formarse, dure unos minutos en sus tetas, tocando enjabonando y disfrutando sin saber bien por qué, mi prima había cerrado los ojos y se dejaba hacer, yo sentía y veía que sus pezones estaban cada vez más duros e hinchados, seguí bajando por su abdomen para llegar a su pubis, al sentir el contacto del jabón y mi mano por primera vez sobre su pubis dio un salto y con una mano me detuvo, sin insistir en su coño, la gire dejándola de espaldas a mí con el fin de ejabonar su espalda, de nuevo comencé por su cuello, bajando por su espalda, haciendo círculos que llevaba por debajo de sus axilas hasta rozar sus pechos, mi prima empezaba a suspirar cada vez más fuerte sin decir palabra y soltando algún pequeño gemido de vez en cuando. Seguí bajando hasta llegar a sus nalguitas, las amase y apreté a mí antojo sin recibir oposición, mientras con mi mano izquierda separe sus nalgas, con la mano derecha comencé a pasar el jabón por su culito, hasta llegar al inicio de su vagina, a lo que mi prima daba pequeños suspiros. En un determinado momento, mi prima me detuvo diciendo que era mi turno, tomo el jabón en su mano y al igual que yo lo hice con ella empezó a pasármelo desde el cuello hasta llegar a mi pene, en el que se esmero por cubrir milímetro a milímetro, sin descuidar mis bolas, yo solo la miraba de cuclillas frente a mí, observando mi pequeña verga que se había vuelto a poner tiesa, yo estaba sintiendo un placer inimaginable hasta ese momento, sentía que estaba en el tope de la excitación y en ese momento mi prima se detuvo y se incorporó. En silencio nos terminamos de bañar, no sabíamos ni entendíamos lo que nos estaba pasando solo sabíamos que nos gustaba, se nos veía en la cara, no había necesidad de palabras.

Al terminar de secarnos y antes de que mi prima se colocará su bata de baño, en un reflejo de morbosidad, la rete a una carrera desnudos hasta la casa, ella acepto y recogiendo cada uno sus prendas salimos corriendo desnudos hasta la habitación de Dani, verla correr desnuda a través del pequeño patio me llevo de nuevo al máximo de excitación. Estando allí nos vestimos y salimos a la sala a ver televisión, comimos algo de los bocadillos que nos había dejado la abuela, nos pusimos a ver un programa muy conocido sobre médicos y procedimientos quirúrgicos, eran cerca de las 11:00 cuando el programa se acabó, y en ese instante mi prima me propuso que jugaramos a los doctores (médicos), yo acepté pero le dije que era mejor jugar en su habitación por qué estaríamos más cómodos.

Volvimos a dirigirnos a su habitación, cerrando tras de nosotros la puerta, cómo si supiéramos lo que iba a pasar. Le dije que yo sería el doctor y ella mi paciente, Dani no se negó y ahí empezamos a darle rienda suelta a la imaginación. Simulamos que a Dani le había ocurrido algún accidente y que llegaba al hospital en busca de ayuda urgente, recreando el programa que acabábamos de ver, y tal cual como habíamos visto en la televisión, empecé a realizar labores de reanimación a Dani, le levanté la blusa que se había puesto tal cual habíamos visto, pero Dani fue más allá y se la quito por completo quedando con un top blanco que le cubría sus pequeños pechos, yo seguí oprimiendo su pecho aprovechando cada momento para amasarle y agarrarle sus tetas cada vez con más descaro, le dije que aún estaba en peligro y que debía quitarle su top para que pudiera respirar, esa era mi teoría en ese momento por lo que veía en la televisión, ella sin pensarlo dos veces se quitó su top quedando desnuda de la cintura para arriba. Volví a agarrar sus pequeñas tetas está vez tocandolas directamente, después de unos segundos acerque mi cabeza a su pecho diciendo que iba a escuchar su corazón, ella me dió permiso y pegue mi oreja derecha sobre teta izquierda dejando la derecha muy cerca de mis labios, después de unos segundos entre risas y susurros le di un pequeño beso en su pezón derecho.

Ya está todo bien, ya estás a salvó… - Le dije en un tono heroico…
Gracias doctor, me salvó la vida…- Me respondió ella siguiendo con el juego
Ahora solo falta revisar que no tengas más lesiones…- Ella me miró a los ojos y asintió…

Comencé haciendo cosquillas en sus axilas y su vientre, después baje a sus piernas cubiertas solo por una pequeña falda gris que le llegaba a medio muslo, comencé a tocarlas y recorrerlas, desde su pies subiendo lentamente.

Señorita debe quitarse la falda para que la pueda seguir examinando…- Le dije en un tono serio…
Cómo diga doctor…- Dani que estaba recostada en la cama levantó la cadera permitiendome a mi bajarle su faldita hasta sacarsela por lo pies… Quedando solo con unas braguitas blancas tipo cachetero…

Volví a hacerle cosquillas, diciéndole que estaba bien, mientras ella no paraba de reir, en un momento dado observé una pequeña mancha en sus braguitas, me detuve deje de hacerle cosquillas y lentamente lleve una mano hasta esa manchita…

Y esto?...- Dije a manera de pregunta mientras comprobaba la consistencia de la humedad, por su lado Dani dejo de reir y se quedó en silencio…- Debemos revisar de dónde viene esto, puede ser una fuga de líquido amniótico…- Dije recordando el programa…
…
Debo quitarte las braguitas… estás de acuerdo???...- Dani solo se limito a asentir con la cabeza…

Lentamente le quite sus braguitas dejándola completamente desnuda, de nuevo ante mi, Dani no pudo evitar sonrojarse, era la primera vez que la veía tan descolocada, su reacción fue cerrar firmemente sus piernas y con una mano taparse su pubis, por primera vez sintió vergüenza y pudor al estar desnuda ante mi. Yo no paraba de maravillarme ante su hermosura, y con cuidado le quite su mano de encima de su pubis, viendolo ahora con mayor detenimiento, ni siquiera en el baño me había tomado el tiempo de detallarlo, vi unos pequeños vellos rubios cubriéndole su monte de Venus, que aunque aún eran pocos y muy finos eran más de los que recordaba haberle visto la primera vez que la vi bañándose... Lentamente le separe las piernas dejándoselas flexionadas una a cada lado de la cama quedándome en medio, acerque mi mano derecha a su tesoro jamás profanado, una pequeña mancha de humedad se notaba sobresalir de su coño haciendo brillar sus labios superiores, pase un dedo desde su ano hasta llegar a su clitoris, Dani dio un salto y soltó un gemido que ahogo con su mano, a su vez pude ver que la humedad que salía de su coño aumentaba… Me detuve de inmediato, creyendo haberle hecho daño, Dani se incorporó y me dio un besito en los labios, no fue más que por fracciones de segundo, pero se sintió muy bien…

-Gracias doctor, me ha salvado… - Me dijo mientras terminaba de levantarse y se empezaba a vestir…

Nos terminamos de arreglar y salimos a jugar afuera de la casa, al poco tiempo llegó mi abuela sin sospechar nada de lo que había pasado. El día siguió normal hasta que llegó la hora de irnos a dormir, de nuevo nos fuimos a la misma habitación como lo habíamos hecho siempre.

Doctor me siento mal, necesito que me vuelva a examinar…- Me dijo a penas cerramos la puerta de su habitación.
Claro señorita, dígame dónde le duele…
Aquí doctor… - Me dijo señalando su coñito…
Eso puede ser muy grave, voy a revisarte, pero necesito que te quites la ropa…
Doctor, por favor ayúdeme a desvestirme…

Me acerqué a ella y comencé a bajarle su faldita mientras Dani se encargaba de su blusa. Pero antes de que comenzara a quitarle sus braguitas escuchamos un ruido, era nuestra abuela que se acercaba, corrimos rápido a la cama y nos tapamos antes de que pudiera vernos. La abuela nos dio las buenas noches y salió de nuevo rumbo a su habitación, el susto que nos había dado no nos permitió continuar con el juego, nos quedamos los dos en la cama en silencio. Después de unos minutos me pegue a mí prima y la abracé en cucharita, posando una de mis manos en sus tetas mientras apoyaba firmemente mi verga en su culo.

El domingo nos despertamos muy temprano, a penas con los primeros rayos de sol, mi prima fue la primera en levantarse y se dirigió a su armario a buscar la ropa que se pondría, y sin ninguna pizca de vergüenza comenzó a desvestirse en frente mío, primero se quitó su top blanco dejando sus pequeñas tetas al aire por unos segundos, pero en el momento en el que se iba a colocar un top rosa limpio que acababa de sacar de su armario la detuve diciendo que la retaba a estar todo el día sin ropa interior, a lo que ella accedió siempre y cuando yo prometiera volver a examinarla esa noche, a lo que accedí encantado. Una vez firmamos nuestra promesa Dani se colocó una camisa blanca sin mangas con un pequeño escote que permitía ver, si alguien se fijaba, que no llevaba más nada puesto. Después se quitó sus calzoncitos para reemplazarlos por solo unos shorts con estampado de flores. Por mi lado también me cambié de ropa ante la mirada fija de mi prima, colocándome solo una pantaloneta y una camiseta.

Salimos de la habitación y mientras desayunamos junto con la abuela, nos dijo que esa mañana volvería a salir al pueblo, que iría como de costumbre a la misa dominical, aunque en ocasiones la acompañabamos esta vez preferimos no hacerlo, ya tendríamos mejores cosas que hacer. Sin más, la abuela salió diciendo que volvería cerca del medio día, para nosotros entre más tiempo tardará mejor.

A penas creímos que la abuela estaba lo suficientemente lejos como para que ya no regresará de imprevisto corrimos hacia la habitación de Dani, necesitábamos seguir examinando nuestros cuerpos, sin decir palabra los dos nos desnudamos por completo, Dani se recostó en la cama con las piernas separadas, por mi lado me senté junto a ella a la altura de su cintura y comencé a tocarle y amasarle sus pequeñas tetas, prestándole especial atención a sus pequeños pezones rosas que a cada segundo se hacían más gordos y duros, después de jugar unos minutos con sus tetas y ver la reacción de Dani a cada cosa que le hacía me dirigí a su coño, primero pase uno de mis dedos a lo largo de la entrada de su vagina, pero quería más y sentí el deseo de probar ese manjar, deslice mi lengua desde el huequito inmaculado de su coño hasta llegar a su clítoris, el olor y el sabor de su coño eran esquisitos, embriagadores, su vagina sabía a una mezcla entre dulce y salado, incluso a restos de orina pero eso no me molestaba, quería más, así que pase mi lengua una y otra y otra vez, me recreaba en sus labios superiores pues para aquel entonces los inferiores no sobresalían mucho, mientras con mi mano separaba sus labios, dejando completamente expuesta la entrada de su coño, con mi lengua la penetraba lo más que podía para después pasar a ese pequeño botoncito que hasta el día de ayer había descubierto y había notado era muy sensible, pues a cada lamida o pequeño mordisco hacia que Dani se retorciera de placer y dejara salir uno que otro gemido, al cabo de unos minutos sentía como todo su cuerpo se tenso y una descarga eléctrica recorrió todo su cuerpo para terminar en su coño, del que empezaron a salir jugos que yo no dude en lamer y absorber.

Una vez Dani se recuperó de lo que después supe era un orgasmo me dijo que ahora era mi turno, muy suave tomo mi verga dura con una de sus manos y comenzo a hacerme una paja, aunque al principio era algo brusca e incluso dolorosa no tardó en tomar el ritmo adecuado para hacerme una buena paja que me hizo correrme en minutos. Salimos desnudos hacia el baño, necesitábamos darnos un buen baño para refrescarnos y borrar las evidencias de nuestros nuevos juegos, de nuevo nos enjabonamos uno al otro poniendo especial dedicación a las zonas donde mayor placer sentíamos. Nos cambiamos Dani cumpliendo la promesa que me había hecho en la mañana. Con lo que yo aprovechaba cualquier descuido de la abuela para meterle mano por entre su escote para acariciar sus tetas y hacer que sus pezones se pusieran duros o por entre su short para comprobar la humedad de su coño.

La llegada de la noche se nos hizo eterna, o al menos a mí, ya quería cumplirle la promesa a mi prima, pero al fin llegó la hora de irnos a dormir. Una vez en la intimidad de la habitación de Dani comenzamos a jugar de nuevo a los doctores.

Doctor por fin lo encuentro, necesito que me examine… - Me dijo mi prima mientras se sentaba en la cama
Dígame qué le duele…
Todo doctor, me duelen mis teticas…- Dijo agarrándoselas por encima de su camiseta…- Me due..
Vamos por partes…- Le dije interrumpiendola … - Veamos a ver…
Doctor no sabe cómo me duelen…
Por favor quitese la ropa mientras voy por el material para examinarla..

Asi lo hizo, se quitó su blusa quedando su torso desnudo, entre tanto yo fui a la mesita que había junto a la cama y tome un pote de crema, estando de nuevo frente a Dani tome un poco de la crema en cada mano y comencé a estregarsela por sus tetas dejándoselas todas cubiertas de crema, Dani había entre cerrado los ojos y ya comenzaba a jadear.

Muy bien, ahora como las siente… - Le dije después de unos minutos de masajearle las tetas…
Mejor doctor…
Eso seguro es porque te están creciendo, tus tetas necesitan que las toques y las masajees todo el día…
Doctor también me duele aquí… - Me dijo señalando su coño… A la vez que comenzaba a quitarse su short que ya demostraba una pequeña mancha de humedad.
Aún sigue la fuga de líquido.. - Le dije riéndome…- Primero tendremos que recogerlo…

Comencé a lamer su coño, su sabor cada vez me tenía más enloquecido, se me había vuelto mi obsesión, después de dejarle todo su coño mojado tanto con mi saliva como con sus jugos me detuve…

No pares David, por favor, sigue sigue… - Me dijo mi prima ya perdida de la excitación…
Ningún David… Soy el doctor Gómez…- Le dije continuando con nuestro juego…
Doctor, doctorrrr… Por favor…
Está bien, pero ahora necesitamos tapar esa fuga…- Dani me miró a los ojos sin saber bien a lo que me refería…

Acomode mi verga entre sus piernas, a la altura de su coño, Dani me miraba expectante, la deslice lentamente a lo largo de su vagina, untandola con sus jugos que seguian saliendo del interior de su coño, era el momento, nuestros juegos iban a atravesar el umbral, un punto más allá de lo moral y convencionalmente admitido.

Con todo el cuidado posible empecé a meter mi verga en el interior de Daniela, aunque los dos teníamos miedo de que nuestras abuela llegará de imprevisto y nos sorprendiera, la excitación nos podía más, ella había cerrado por completo los ojos y sus manos se aferraban fuertemente a mi espalda enterrandome las uñas, su cara dejaba ver una expresión de dolor, y apenas había entrado la cabeza de mi pene…

Dani, si te hago daño me dices y nos detenemos… No quiero lastimarte…
Confío en ti… - Nuestros ojos se miraron fijamente, en los de ella veía amor, confianza, y sobre todo lujuria…

Seguí empujando lentamente, hasta llegar a su himen intacto, me detuve de nuevo, Dani volvió a abrir los ojos como diciéndome que continuará hasta el final, y asi lo hice, di un nuevo empujón logrando que mi verga atravesara esa barrera, Dani no pudo evitar soltar un gemido que sonó más como un quejido, dos lágrimas corrieron por sus mejillas, volví a detenerme, Dani me abrazo fuerte y acercando su boca a mis oídos me dijo algo que me hizo comprender lo que estaba viviendo…

Te amo, por favor no me dejes sola, eres lo que más quiero…
Yo también te amo…- Logré decirle después de unos segundos procesando toda la información…
Si no fuera por la abuela y especialmente por ti no tendría razones para vivir sin mis padres… - No pudo evitar sollozar… - Nunca te apartes de mi…
Nunca lo haré… Siempre vas a poder contár conmigo… Cuando me necesites ahí estaré… Te lo prometo
Hazme el amor David, hazme tuya…

Lentamente reanude el movimiento, metiéndole mi verga cada vez más profundo… Al poco tiempo volví a sentir como una descarga eléctrica recorría todo el cuerpo de Dani, mientras su vagina palpitaba como queriendo exprimirme, su coño apretadito iba a provocar que me corriera muy pronto, y así fue, segundos después de que Dani terminara me corrí dentro del coño de Dani inundandoselo de mi leche. No habían sido más que un par de minutos pero lo habíamos disfrutado mucho. Nos dormimos abrazados juntos, desnudos.

Muy temprano en la mañana mis padres vinieron a recogerme y poco a poco me fui distanciando de Dani, desde ese día no volví a pasar una noche en casa de la abuela, es más salvó contadas excepciones volví a coincidir con Dani, ya casi ni hablábamos cuando nos reuníamos en familia. Hasta esa noche en que regrese de vacaciones al pueblo…

...

Ahí estaba tumbado en mi cama recordando aquellos momentos tan maravillosos con mi prima, recuerdos que sumados a la visión que acababa de tener de mi prima hicieron que mi polla formará una tienda de campaña en mis pantalones, cuando senti que golpeaban a la puerta de mi habitación…

David, Soy yo, puedo pasar…
Sigue Dani, está abierto…
Cómo has estado, no esperaba verte…- Me dijo sentándose a mi lado mientras yo me incorporaba para quedar sentados uno al lado del otro…
Muy bien, la verdad yo tampoco esperaba encontrarme contigo… Pensé en venir a visitar a la abuela y de paso reencontrarme con unos amigos, pero debí suponer que era lógico que tú estuvieras aquí…
A decir verdad llegue unas horas antes de que tú llegarás. Cada vez que puedo vengo a visitar a la abuela, tu sabes lo mucho que la quiero por todo lo que hizo por mi…
Claro, fue ella quien siempre te cuido…
Ella y tú, o ya no te acuerdas de cuando éramos niños?...-
(Claro que me acordaba de cuando éramos niños, pero no creo que sea lo mismo lo que recordamos) Hmmmm- Dije pensativo simulando recordar
Ya se te olvidó que tú siempre me defendías de los niños que me molestaban por ser huérfana…
Y como no te iba a defender si eras como mi hermana…
Cómo tu hermana?... Ajammm... Pero después de todo terminaste alejándote de mi y olvidándome, como todos…
Claro que no me olvidé de ti…
Y de la promesa que me hiciste?...
Cuál promesa?... La de siempre estar a tu lado, y que siempre puedes confiar en mí… Nunca la he olvidado y aún sigue ahí…
Y entonces por qué te alejaste después de esa noche?
Creí que te habías arrepentido de lo que hicimos, como nunca más volviste a mencionarlo…
Es cierto que al principio me dió vergüenza, cuando entendí lo que había pasado… Y me costaba mirarte a los ojos, pero cuando sentí la necesidad de hablar contigo y de decirte lo que sentía tu ya no estabas…
Pero ahora estoy aquí y te vuelvo a reafirmar mi promesa, siempre vas a poder contar conmigo, solo llámame y ahí estaré, eres como la hermana que nunca tuve… - Nos dimos un fuerte abrazo y Dani no pudo contener las lágrimas.

Aunque no había parado de mirarla, de observar su hermoso cuerpo, sus piernas junto a las mías, el canalillo que formaban sus tetas y que se veía por encima del escote de su blusa, la conversación que habíamos tenido me había tranquilizado y mi verga había vuelto a su estado de reposo.

Dani estás bien, te sucede algo…
No es nada... tranquilo…- Notaba tristeza en su rostro, sus ojos no reflejaban ese maravilloso brillo encantador de hacia unos años y que tanto me enloquecía…
Si puedo ayudarte en algo dímelo… Aunque hayamos estado alejados por años te conozco y sé que algo te pasa…
Puedo dormir esta noche contigo?…
Ehhhh… - Me quedé con la boca abierta, no sabía a dónde quería llegar mi prima…

Pero pensar en tenerla tan cerca a mi y con lo buena que se había puesto me había hecho tener una nueva erección…

Olvídalo… Mejor me voy…- Dijo levantándose de la cama y dirigiéndose a la puerta…
Espera… - Le dije sujetándola de una mano…- Claro que puedes… - Dani se giró y me abrazo volviendo a sollozar…
Por favor abrazame fuerte… Necesito sentir tu protección…
Dani… Dime que te sucede…
…
Confía en mi…- Le dije sintiendo su indecisión, algo muy delicado le debería estar pasando…
Estoy destinada a siempre estar sola… A que todos me defrauden… Está mañana me enteré que el idiota de mi novio… bueno ex novio … me estaba engañando con mi mejor amiga…
Que imbécil… No se cómo puede engañarte si estás tan hermosa…
Por favor déjame continuar… Está mañana antes de salir para acá fui a despedirme de él, pero al llegar a su casa lo encontré en la cama con mi amiga… Y al reclamarle antes me echó a mí la culpa, aunque tal vez tenga razón, pero lo peor fue que se atrevió a darme una bofetada…- Mi prima no pudo seguir hablando, la voz se le quebró y un par de lágrimas volvieron a correr por su rostro...
Si tuviera a ese imbécil acá le partía toda la cara...- En ese momento sentí una gran irá contra ese imbécil, como fue capaz de golpear a mi prima después de haberla engañado…
Por favor prométeme que no vas a meterte en problemas por mi culpa…
No te puedo prometer eso… alguien te debe protegery hacerte respetar…
Prométemelo…
Está bien, te lo prometo… Pero dime, se atrevió a algo más...
No, salí corriendo y me vine directo para acá…
Yo te voy a proteger siempre, te lo prometo… No voy a permitir que te vuelvan a lastimar…
No sabes cuánto te quiero…
Y yo a ti…

Seguimos abrazados unos minutos, yo le acariciaba su cabello y su espalda mientras ella recargaba su cabeza en mi hombro y se iba tranquilizado poco a poco…

En serio te parezco bonita…- Me pregunto después de un rato…
Cómo?...- Le dije algo asustado separándome un poco de ella…
Que si en verdad te parezco bonita o solo lo dijiste por hacerme sentir bien…
Claro que me pareces hermosa… Siempre has sido muy bonita, pero ahora te has puesto increíble…
Eres tan lindo y tierno, por eso te quiero tanto primito…

Nos volvimos a sentar en la cama, pero está vez uno frente al otro. Dani con las piernas cruzadas sobre la cama, volviendo a dejarme una visión magnífica.

Dani, te puedo preguntar algo…
Si, dime
Por qué dices que tú tienes la culpa de lo que ocurrió?
Es que…- Dani agachó la cabeza y guardo silencio unos segundos- … Nunca tuve sexo con él, y por eso dijo que había tenido que buscar en otro lado lo que yo no le dí… Tal vez si yo hubiera accedido a tener sexo con él nada de esto hubiera pasado…
Eso no justifica lo que te hizo ese imbécil…
Pero era mi obligación, era mi novio… Debí haberme acostado con él…
Si no quisiste él debió respetar tu decisión, tus razones habrias de tener...
Nunca tuve el deseo de hacerlo, no me despertaba ningun tipo de excitación, es más me daba miedo, siempre me trataba de una manera brusca, tosca…
Y entonces por qué estabas a su lado, por qué seguías siendo su novia?
Te puedo confiar un secreto
Claro, dime…
Siempre me ha costado trabajo hacer amigos y el fue mi primer novio... Creí que él me brindaría el amor y la protección que necesitaba.
Y entonces…
Cuando estaba cerca de él sentía era miedo y asco, nunca fue cariñoso y tierno como lo eras tú y por eso nunca accedí a tener sexo con él ni con nadie… Después de ti no he tenido sexo con nadie…
Me lo dices en serio… Yo he sido el único hombre en tu vida?…
Si, solo contigo me he sentido amada y protegida, capaz de hacer lo que sea…
Pero en ese entonces eran solo juegos de niños, la primera y única vez que lo hicimos ni siquiera llegamos a disfrutarlo…

Seguimos hablando otro rato de cosas sin importancia, de la universidad, de nuestras metas, de nuestros planes esas vacaciones. Sobre las 23:00 decidimos que era hora de irnos a dormir, pues deberíamos madrugar al día siguiente…

David, de verdad me puedo quedar a dormir aquí contigo?...- Me pregunto mi prima esperando que yo no hubiera cambiado de opinión…
Claro, no hay ningún problema… Volveremos a hacerlo como cuando éramos niños…- Dani me volteo a mirar con una sonrisa pícara… - A dormir… A dormir…- Dije cayendo en cuenta de mis palabras…

Los dos nos reímos inevitablemente. Dani se levantó de la cama y diciendo que le daba pereza ir hasta su habitación por su pijama me preguntó si veía algún inconveniente si ella dormía asi como estaba, aún estaba con su camiseta negra sin mangas y su pequeño short de jean…

Por mi no hay ningún problema, si te sientes cómoda asi no tengo inconveniente…
Me quito el short y listo… Quedó cómoda y lista para dormir…

Y así lo hizo, se desabotono su short y dando media vuelta para quedar de espaldas a mi, comenzó a bajarselo muy lentamente, dándome una increíble visión de su culito oculto solo por una tanguita blanca con pequeñas flores rojas. Al enderezarse puede ver lo potentes que se habían puesto sus nalgas, grandes, redondas y bien paraditas…

Wow prima, si que estás buena…
Ayyy tonto… Mejor vamos a dormir…

Nos acostamos cada uno a un extremo de la cama, retirados cómo si después de todo nos diera miedo dar el siguiente paso… Por mi lado no quería incomodar a Dani, o que sintiera que me aprovechaba de su situación después del percance que había tenido en la mañana... Hasta que Dani tomo la iniciativa…

David, tengo frío, me puedes abrazar…
Claro…

Me pegue bien a ella pasando una mano por su cintura para situarla justo debajo de sus tetas, por encima de su camiseta. Mi verga tambien se la pegue bien en su trasero, acomodándola justo entre la mitad de sus nalgas. Lentamente comencé a masajear sus tetas aún por encima de la tela, pero sentí la incomodidad de Dani, no estaba segura de hacerlo, así que decidí parar, acerque mi boca a sus oídos y le susurré que estuviera tranquila, que lo mejor era dormir, y que siempre la iba a proteger. Le dí un beso en su cuello y me volví a recostar pegado a ella tomando su mano derecha con la mía. Así nos dormimos, sintiendo la tranquilidad con la que Dani dormía…

Cuando desperté Dani ya no estaba, me levanté y fui a la cocina, allí estaban las dos, mi abuela y mi prima. Mi abuela como era costumbre los domingos, salió rumbo al pueblo dejándonos solos como cuando éramos niños, Dani aún estaba con su camiseta negra pero se había puesto un pantalón de pijama rosado, no iba a andar en tanga delante de la abuela. Mientras desayunaba junto a Dani no podía evitar mirarle sus tetas, sus pezones estaban duros y se notaba a través de la tela, parecieran que querían atravesarla. Estoy seguro que Dani se daba cuenta, pero no me dijo nada, al contrario, aprovechaba cualquier instante para inclinarse y dejarme ver la profundidad de su escote, yo ya estaba con una erección que me dolía dentro de mis bóxer.

Voy a bañarme- Le dije, quería darme un baño con agua fría a ver si me bajaba la calentura…

Dani no estaba preparada para tener una nueva relación y yo no iba a insistir, además éramos primos y lo que había sucedido eran juegos de niños nada más, la situación por la que estaba pasando Dani la había hecho susceptible y había provocado que sus pensamientos y emociones se enredaran, y debíamos acabar con esa situación…

Espera…- Me dijo ella levantándose también de la mesa… - Te reto a una carrera… Desnudos como cuando niños…

No tuve tiempo de responder, Dani comenzó a quitarse su pantalón quedando de nuevo con su camiseta negra y su tanguita blanca con rosas…

Rápido o te voy a ganar… Como siempre… - Me dijo sonriendo…
Pero que vamos a apostar…- Le dije comenzando a desvestirme…
El que pierda le toca ser el paciente…

Quede sin palabras, mi prima iba a por todo, quería que volviéramos a jugar a los doctores como cuando éramos niños, eso no lo esperaba, hasta hacia unos minutos pensaba dejar las cosas hasta ahí y seguir con una relación normal entre primos… Pero Dani tenía otros planes…

Mientras estaba con mis pensamientos Dani se sacó por la cabeza su camiseta, dejando a mi vista sus hermosas tetas, grandes, redondas y firmes, con unas aureolas rosaditas más bien pequeñas y unos pezones grandes y gordos que abarcaban casi toda la aureola… Hacia varios años que no le veía sus pechos y definitivamente si que le habían crecido. Solo había quedado con su tanguita, era la visión más excitante que había tenido en mi vida.

Listo primito?...
Cuando quieras…- Para ese momento yo estaba aún con mi pantaloneta solo me había quitado mi camiseta…
En sus marcas, listos… - Y antes de decir fuera mi prima salió corriendo… - Fuera…
Eres una tramposa… Pero te voy a ganar…

Salí corriendo detrás de ella, verla correr por todo el patio, prácticamente desnuda era realmente delicioso, una escena que enloqueceria a cualquiera. No me explicaba aún como el idiota de su novio no la valoro… En fin, seguimos corriendo ella delante mío, hasta un par de metros antes de llegar al pequeño baño, Dani se detuvo y me dejó ganar.

Entramos los dos al baño y cerramos la puerta. Dani se deshizo de su tanga dejando a mi vista un coño cubierto por una mata de pelo considerable, incluso me extraña no haberlo notado antes, pero esto no me molestó, al contrario me calentó más, si eso era posible. El contraste con la imagen que venía a mi memoria de su coñito la última vez que lo ví y como lo tenía ahora me iba a provocar un infarto. Me quite mi pantaloneta y mis bóxer de un solo movimiento quedando completamente desnudo.

Perdona lo descuidado, pero como no lo había usado no había visto la necesidad de depilarme…
Me fascina así como está…
Siéntate ahí, quiero intentar algo… - Me dijo señalando el inodoro…

Así lo hice me senté expectante de lo que iba a hacer mi prima, no tuve que esperar, Dani se sentó en mis piernas frente a mi, dejando mi verga apoyada en su vagina pero antes de que se la metiera, Dani me detuvo y comenzó a orinar encima mío, sentir el chorro de su orina en mi verga y mis huevos, sumado a un pequeño movimiento de sus caderas masajeando mi polla con los labios de su coño me hizo correrme inevitablemente, llenando su pubis y su vientre de mi leche…

Una vez nos recuperamos nos levantamos y nos metimos en la ducha, y como la primera vez yo me encargue de enjabonar cada centímetro del cuerpo de Dani, mi prima disfrutaba de mis movimientos, de cada pellizco, mordisco, magreo y golpecito que le daba, no le fue difícil llegar al orgasmo y eso que no llegue a enjabonar ni su culito ni su coño… Cuando llegó mi turno Dani no espero ni un segundo para agacharse y meterse toda mi polla en su boca, lo hacía con una maestría nunca jamás pensada, el masaje que me daba en los huevos y su constante mamada me estaba llevando a la gloria, pero el hecho de haberme corrido hacia solo unos minutos hizo que mi orgasmo se demorará en llegar, así que la detuve y poniéndola de pie a la vez que yo me agachaba me dedique a devolverle el favor, comencé a comerme su coñito peludo, desde la entrada de su vagina hasta su clítoris en el que me esmeraba, repasaba y disfrutaba de cada pliegue de su sexo, mientras con el jabón en mi mano derecha me dedicaba a estimular su entrada trasera… No tardó mucho más en correrse cayendo sentada en el plato de la ducha, exhausta pero feliz como hacía tiempo no la veía.

Terminamos de bañarnos y salimos desnudos rumbo a la casa, cogidos de la mano y disfrutando cada paso…

Dani me llevo a su habitación cerrando tras de nosotros la puerta…

Hora de cumplir la apuesta…- Me dijo mientras se sentaba en el borde de su cama…- Doctor necesito que me examiné…
Muy bien señorita, dígame qué le sucede…
Doctor me duele mucho el pecho… Justo aquí… - Señalando su pezón derecho…

Me acerque a ella y con mimo comencé a lamer su pezón para terminar metiéndomelo en la boca dándole pequeños mordiscos mientras con mi mano me encargaba de acariciar su otra teta…

Estás muy caliente… Puedes tener fiebre… Vamos a tomarte la temperatura…- Dani solo me miraba esperando que le iba a hacer...

La tumbe en la cama y le separé las piernas dejando su coño peludo expuesto… Tome mi índice derecho y se lo lleve primero a la boca, quería que lo mojara con su saliva para hacer más fácil su incursión, aunque no hacia falta, su sexo parecía una fuente de la que salían sus jugos a chorros, sin más demora metí mi dedo en su agujerito, lentamente, no quería lastimarla, estaba muy apretado y a pesar de que Dani estaba muy mojada mi dedo tuvo que batallar para entrar, era verdad que Dani no tenía sexo hacia mucho tiempo.

Dani soltaba pequeños quejidos a medida que mi dedo se adentraba en su coño, y ni que decir cuando comencé a moverlo en su interior, metiendolo y sacándolo cada vez a mayor ritmo…

Parece que no hay fiebre, pero para estar seguros vamos a usar otro termómetro… - Le dije agarrándome la polla…
Doctor ese termómetro está muy grande, me va a hacer daño…- Me dijo Dani con algo de miedo…
No tienes nada de que preocuparte… Soy un experto, tengo experiencia en el tema…- Creo que no debí haber dicho eso, Dani me recriminó con la mirada, pensaba que si ella no lo había hecho con nadie a parte de mi, yo seguramente tampoco lo hubiera hecho… Aunque no pronunció ni una palabra con su sola mirada me lo dijo todo…

Tome mi polla y comencé a pasársela por su coño, untandola con sus jugos, después de unos segundos de restregarsela y golpear con ella su hinchado clítoris la puse en la entrada de su vagina, Dani dió un suspiro y fue ese el instante en que le metí toda la cabeza, antes de seguir me detuve un poco, quería ver la reacción de Dani que me imploraba por más…

Sigue, sigue… No pares…- Asi lo hice, se la metí toda aunque con algo de dificultad, su coño apretado era como si me abrazara mi polla y no la quisiera soltar… Comencé un mete y saca lento pero profundo… Y a medida que Dani me pedía más le iba aumentando la velocidad hasta llegar a un ritmo desenfrenado…

El sonido provocado por mis embestidas contras su coño inundado se escuchaba en toda la habitación e incluso en gran parte de la casa… Ver sus tetas balancearse al ritmo de mis embestidas me estaba enloqueciendo, sus gemidos cada vez más fuertes eran música para mis oídos. Dani no tardó en correrse pero yo aun queria más, así que baje un poco el ritmo mientras Dani se recuperaba, me acerque a su boca y le di un beso apasionado en el que nuestras lenguas jubagan y luchaban en nuestras bocas, bese su cuello y sus tetas, lentamente fui aumentando la velocidad siempre con Dani recostada en la cama, en la típica posición del misionero… No demoraba en correrme y así se lo hice saber.

Dani me corro… me corro
Aguanta un poco más… Me falta poco … Ahhhhh

Nos corrimos casi a la vez quedando exhaustos pero felices…

Dani te amo y te prometo siempre estar a tu lado y hacerte la mujer más feliz del mundo…
Ya lo soy primito ya lo soy… Te tengo a ti y es lo único que quería…- Nos dimos un beso tierno aunque largo.

Dani se levanto de la cama y salio a bañarse, una vez Dani hubo salido del baño yo me dirigí también a bañarme, cuando salí del baño ya había llegado la abuela, así que nos controlamos hasta llegada la noche, de nuevo Dani llegó a mi habitación, está vez con un baby doll semitransparente que no dejaba nada a la imaginación, se veía aún más sexy que estando desnuda, pasamos casi toda la noche teniendo sexo, y así cada vez que podíamos…

Un par de noches más adelante Dani me pidió que se la metiera por el culo, quería que yo fuera quien le inauguraba todos sus agujeros y que fuera el único dueño de toda ella. Aunque esa noche el miedo de Dani no permitió que lo hiciéramos por su culito si lo logramos la noche siguiente. Así duramos todas las vacaciones teniendo sexo como conejos, a cualquier hora y en cualquier lugar, alternando con salidas a tomar con nuestros amigos. Ahora Dani se mudo conmigo y vivimos como novios, ya que en la universidad nadie sabe que es mi prima, y lo disfrutamos enormemente. Incluso Dani en varias ocasiones me ha ayudado a llevarme a otras chicas a mi cama, hecho que ella disfruta, pero eso sí dice que yo soy el único que puede tener sexo con ella y que prefiere hacerlo con una mujer antes de un hombre que no sea yo. Definitivamente me gane el cielo con Dani y siempre voy a estar con ella.

FIN