El Proxeneta (1 de 7) Le proponen un trabajo

Luciano Martínez era el dueño de una casa de venta de electrodomésticos. Por un hecho fortuito, le proponen un nuevo trabajo

El Proxeneta (1 de 7) Le Proponen el Trabajo

Autor: Ricardo Erecto.

Luciano Martínez era el dueño de una conocida casa de electrodomésticos dela ciudad. Finalizaba uno de los tantos viernes por la tarde su tarea y estaba exhausto. Cheques, cobros, bancos, pagos, etc. Afortunadamente era viernes y pensaba dormir temprano para reponerse. El sábado, sin bancos, no trabajaba.

Regresó a su casa, comió algo liviano, vio un rato televisión y antes de las 11 de la noche se acostó. A las 2 de la madrugada sonó el teléfono. Medio dormido, Luciano atendió:

-¿SeñorLuciano Martínez?-

-Sí, soy yo.-

Le habla el oficial Raimundez de la Comisaría 4. Hemos detenido a una mujer que dice ser prima suya y llamarse Lorena Martínez. ¿Es prima suya?-

-Sí, Lorena es prima mía. ¿Pasó algo?-

-Mire, tenemos dudas que sea su prima. ¿Podría venir a la comisaría?-

-Pero insisto, ¿le ha pasado algo?-

-No, no, ella está bien pero dudo que sea su prima, por eso lo molesto.-

-Salgo para allí-

Así finalizabala comunicación. Justoese día que quería descansar, este llamado extraño. ¿Qué habría pasado? Se vistió rápidamente, sacó su auto de la cochera y se dirigió a la comisaría. Allípreguntó por el oficial Raimundez.

-Sí, soy yo ¿Señor Martínez?-

-Sí. ¿Qué ha pasado con mi prima?-

-Primero quiero saber si es su prima. Aquí tenemos la foto de ella.-

-Sí, es mi prima Lorena.-

-Bien señor Martínez, quizás usted no sepa, pero la hemos detenido por ejercer la prostitución en la calle.-

-¿Prostitución? Debe haber un error.-

-Lamentablemente no hay ningún error.-

-¿Puedo verla? ¡No puedo creer que ella sea una ramera!-

-Puede verla, No es la primera vez que la detenemos por la misma razón. Ésta es la tercera vez.-

-¿Por qué esta vez me llamaron?-

-Para liberarla debe abonar una multa de 500 euros y no los tiene, por eso me pidió que lo llamara. Las dos primeras veces que se la detiene recibe un apercibimiento pero la tercera tiene que pagar una multa o quedar detenida.-

-Puedo abonar la multa, pero primero quiero hablar con ella.-

De inmediato trajeron a Lorena esposada.

-¡Perdóname Luciano! No quería molestarte pero me pasó esto.-

-Me he enterado por qué estás detenida. Me sorprendes Lorena, estabas trabajando en un supermercado. ¿Qué pasó?-

-El supermercado cerró, me quedé sin trabajo y no tenía dinero.-

-¿Y no se te ocurrió otra cosa que meterte a ramera?-

-Perdóname que te he molestado.-

-Está bien, pagaré la multa y ya vamos a conversar. Te llevaré a tu casa. Oficial, por favor haga los papeles. Aquí está el importe de la multa.-

Salieron de la comisaría y apenas subieron al auto, Lorena se puso a llorar.

-Luciano, no quería molestarte para que vinieras a sacarme, pero no podía quedar presa. ¡Necesito trabajar!-

-¿Volver a trabajar de puta para que agarren otra vez y tenga que pagar otra multa? ¿Te parece una buena idea?-

-No sé hacer otra cosa. No hay trabajo. La situación es muy difícil.-

-¡Claro que es difícil! ¿Tu hermana Florencia no está trabajando en una tienda?-

-La echaron hace dos meses. También trabaja en la calle.-

-¿Otra ramera?  No termino de asimilar una que me entero de otra. Espero que no haya más putas en la familia.-

-Julieta también trabaja en la calle.-

-¿Quién es Julieta?-

-Tu hermana.-

Luciano detuvo el auto de golpe.

-¿Julieta también ramera? ¿Hay alguna otra puta? O mejor dicho ¿Hay alguna que no sea puta?-

-No seas duro. A todas nos pasó lo mismo y tuvimos que hacer esto.-

-Mira, estoy muy cansado. No estoy acostumbrado a estar a estas horas despierto. Mañana, hoy en realidad, las espero a las tres en casa las ocho de la noche. ¡No falte ninguna porque si no, esto se sabrá toda la ciudad! ¿Me entendiste?-

-Sí Luciano te entendí. Justamente queríamos hablar contigo y no nos animábamos, pero las cosas se precipitaron.-

-Ahora no tendrás dinero, hoy no pudiste trabajar.-

-Ya me arreglaré. Gracias por pagarla multa. Te lo iré devolviendo tan pronto pueda.-

-Mañana a las ocho, las tres en casa. ¿ESTÁ CLARO?-

-Sí Luciano y de nuevo te pido perdón.-

La dejó en la puerta de su departamento y partió al suyo propio. Estaba mareado, enojado, amargado y el trayecto hasta su casa no hizo otra cosa que putear a todas las putas del mundo. Le costó dormirse, pero al fin el cansancio lo venció.

Por su parte cuando llegó Lorena, Florencia no había regresado aun de su “trabajo”. Llamó a Julieta que acababa de regresar, también de su “trabajo” Le contó rápidamente lo sucedido.

-Por suerte tu hermano pagó la multa y nos citó a las tres para mañana a las 8.-

-Pero a esa hora tengo que trabajar.-

-¡Olvídalo! Tenemos que ir a la casa de tu hermano. No tenemos alternativa. Por otra parte recuerdas que queríamos hablar con él pero no nos animábamos.-

-Si no queda otra alternativa, iremos. ¿Estaba muy enojado?-

-¿Enojado? ¡Estaba a las pueteadas! Debemos estar preparadas para el sermón. No sé si podremos pedirle lo que teníamos planeado.-

-Déjenme que sea yo la que hable. Después de todo es mi hermano.-

Así finalizaba la comunicación telefónica. Lorena esperó a que llegara su hermana Florencia que lo hizo poco después. Nuevamente contó lo sucedido y que las esperaba a las ocho de la noche.-

-Sobre llovido, mojado. Una noche sin trabajar.-

-No tenemos alternativa.-

Así finalizaba el diálogo entre ellas y se acostaron a descansar.

Al día siguiente (ese mismo día sábado) a las ocho en punto las tres mujeres entraban en su departamento

Lorena era la mayor, de 23 años, Lindas formas en general y lo destacable era su culo respingón. Posiblemente salía a su madre, de muy buen cuerpo también. Florencia, hermana de Lorena, de 21 años. También muy buen culo, cintura ajustada, y unas tetas muy firmes que querían escapar del corpiño.

Finalmente Julieta, hermana menor de Luciano, de 23 años. Quizás la más linda de las tres, con una cara redonda de aspecto inocente ¿inocente? También con un culo paradito, muy firme, unas tetas turgentes con destacados pezones y unas muy buenas piernas. Uno se podía imaginar que unas rameras de esas características no son frecuentes en la calle.

Luciano las recibió con cara de pocos amigos.

-Pasen y ubíquese allí. He pedido comida para que luego podamos cenar.-

-Resulta que anoche me enteré que mis primitas y mi hermana son unas rameras que trabajan de noche enla calle. Julieta, no lo puedo creer. Si se enteran nuestros viejos, le das un infarto a los dos.-

-No tienen por qué enterarse ¿o es que lo vas a publicar en los diarios que tu hermana y tus primas tienen que prostituirse porque no tienen otro trabajo?-

-Esto tenemos que guardarlo como un secreto y buscar rápidamente una solución. Tienen que buscar un trabajo decente.-

-Ser ramera no es ningún trabajo indecente. Es una tarea como cualquier otra.-

-Retiro lo de trabajo indecente. Hay que buscar otro trabajo. En la próxima semana se dedican TODO EL DÍA a buscar trabajo.-

-Pero Luciano, eso implica no trabajar de noche y ninguna de nosotras podemos darnos ese lujo. Ya es un esfuerzo no trabajar hoy.-

-¿Cuánto ganan por semana en el trabajo en la calle?-

-Entre 150 y 200 euros por semana. No alcanza para nada.-

-Yo les doy150 acada una y se dejan de poner excusas y se dedican a buscar trabajo.-

-¿Crees que no hemos buscado trabajo? ¿No te has enterado que el paro es alto y no hay trabajo? Luciano, te pido que seas realista. Hemos estado en lugares donde ofrecen uno o dos puestos de trabajo y hay cien personas postulándose.-

-¿Y qué solución proponen?-

-De eso era que queríamos hablarte mi querido hermano.-

-Mi querido hermano… ¿Qué te traes entre manos Julieta?-

-Nosotras podemos ganar mucho más y de forma más segura si nos ayuda un representante. Alguien que ofrezca nuestros servicios en hoteles y otros lugares de turismo.-

-¿Y por qué no van ustedes directamente?-

-Porque un representante, por ejemplo, puede disponer de tres o cuatro rameras. Por otra parte es distinto el trato que recibe un representante al que si se presenta la ramera y dice “quiero que me llamen cuando me necesiten”-

-¿Y quieren que busque un representante? Algo así como un proxeneta.-

-¿Qué es un proxeneta?-

-Julieta, que poca cultura. Un proxeneta es un chulo, un hombre que maneja a las rameras.-

-Exactamente eso es lo que buscamos. Tiene que ser una persona de mucha confianza. Además de nosotras tres hay una amiga que también se puede sumar.-

-¿Y cómo busco una persona de confianza?-

-Hermano, hemos pensado en ti. Estamos seguras que no nos traicionarás.-

-¿Están borrachas o qué?-

-Luciano te pido que nos ayudes. Puedes manejar cuatro rameras ofreciéndolas en hoteles, agencias de turismos, fiestas privadas, bares con desnudistas, etc. Nos harías un gran favor. Trabajar en la calle es peligroso y estamos expuestas a las multas. Así no podemos seguir.-

-Nunca hice semejante trabajo.-

-Tú eres muy inteligente y capaz. Puedes ahora comenzar a hacerlo.-

-¡Linda tarea! Ofrecer a mi hermana y a mis primas como putas.-

-Te insisto en una cosa. No seré tu hermana ni ellas serán tus primas. Simplemente seremos las putas que tú manejas, eso es todo.-

-En mi vida he tenido muchos desafíos y siempre los he encarado, no me he amilanado, pero de allí a proxeneta…-

-Te lo pedimos por favor. Acepta nuestro pedido.-

-Supongamos que acepto. Solamente haciendo las cosas bien me meto en este asunto. Lo  primero será una consulta médica de las tres bien a fondo.-

-¿Podemos llamar a Laura?-

-¿Quién es Laura?-

La cuarta chica de la cual te hablamos. Seríamos las cuatro rameras que tú manejarías.-

-Llámala que venga enseguida.-

-Puede que esté trabajando. Le pondré un mensaje con la dirección.-

Así lo hizo Julieta. Mientras tanto Luciano meditaba cómo manejarse. Cuando Julieta terminó de enviar el mensaje, su hermano continuó.

-Hay un amigo que es gerente de la cadena de hoteles South. Lo consultaré para saber cómo contratan a las prostitutas.-

Minutos más tarde llegaba Laura. Julieta la recibía.-

-¿Qué pasó que me llamaste tan urgente? Tenía un cliente que me esperaba pero lo rechacé.-

-Ésta es la casa de mi primo Luciano. Quiero que te conozca. Estamos convenciéndolo que sea nuestro chulo.-

Julieta presentó a su amiga Laura a Luciano.

-Ésta es Laura, la chica que también puede trabajar en el grupo.-

-Es un gusto conocerte Laura. ¿Cuántos años tienes?-

-Diecinueve, señor. En dos meses cumplo veinte.-

-¿Diecinueve? Eres una chiquilina para este trabajo.-

-No tengo alternativa. Apenas me alcanza para comer. Por eso necesito alguien que me represente.-

Laura era una joven más bien baja, bastante delgada pero con muy buenas formas. Tetas chicas, lo mismo que su culo, pero con unos ojos hermosos claros, labios sensuales y un cabello negro intenso.

-Julieta será el centro de coordinación por ahora. Me ocuparé de buscar el médico y un fotógrafo para que les tome fotos para presentarlas.-

-¿No quieres tomarnos fotos tú mismo? Ninguna de nosotras tendrá inconveniente en desnudarse.-

-Tiene que se un profesional. Buscaré uno y le daré la cita a Julieta. Las cuatro tienen que estar listas para estas entrevistas. Ninguna de ustedes saldrá a trabajar.-

-Luciano, no podemos estar una semana sin trabajar.-

-Ya les dije. Les adelanto ciento cincuenta euros a cada una pero no se mueven de sus casas ni salen a coger por allí. Luciana, ¿puedes calentar la comida? Está todo enla cocina. Túconoces la casa.-

Lorena, Florencia y Laura quedaron en la sala con Luciano

Lorena fue la que dialogó con Luciano. Laura miraba de manera incrédula

-Luciano, sé que se paga mucho por los servicios en hoteles. Quizás podamos alquilar un departamento las cuatro, que así saldrá más barato. Tú podrás indicarnos a cada una de nosotras dónde ir a cumplir el servicio.-

-Deberé usar bastante tiempo para manejar todo esto. Veremos cómo hacerlo.-

-Tú cobrarás la mayor parte de los producido, Así es como se manejan los chulos. Deberemos rendir cuentas de nuestro trabajo y de las propinas que también se deben compartir.-

-.Tienes mucha más información de lo que suponía.-

-Hace bastante que estoy en este trabajo. Quizás Laura no sepa muchas cosas. Hace solamente dos meses que comenzó.-

Poco después y luego de cenar se despedían de Luciano.

Fin Capítulo 1