EL PRINCIPE ¿AZUL? 5 Sin ver y sin tocar
Estaba disfrutando ver como mis dos hijos tenían sexo y no fue la única vez, ya en otras veces los he espiado cuando tienen sexo y para serte honesto eso me excita. entre Julián y yo nos contamos todo y Julián me ha contado que ya se la ha metido a uno que otro hombre, ya sea en tríos con mujeres.
EL PRINCIPE ¿AZUL? 5
Sin ver y sin tocar
- Xavier -
al día siguiente Sali de mi habitación todo estaba en silencio, llegué a la cocina y no había nadie estaba completamente solo fui a ver a mi hermano y nadie estaba en casa, me prepare mi desayuno como pude ya que estábamos acostumbrados a mi mama solo sabía hacer una que otra cosa, cuando escuche que alguien entro, era mi padre que venía con una señora y le mostraba la casa pensé que era su amante pero al salir a ver, me di cuenta que era la muer que nos prepararía el desayuno y la comida, mi padre me la presento.
-Xavier. Cuando me levante no encontré a nadie ¿dónde está Aldo? – tenía miedo a mi padre pues yo estaba seguro de que lo vi en la puerta, cuando tenía sexo con mi hermano.
-Alberto. Aldo fue a comparar algunas cosas para la casa, yo fui a traer a Angela que nos hará de comer de aquí en adelante. – note que mi hijo cuando me hablaba agachaba su mirada tenía vergüenza se le podía notar muy bien.
Xavier. Mi padre no me dio nada así que llegue a la conclusión que solo fue mi imaginación aquel día, las cosas regresaban a su normalidad o a lo que según yo sería la normalidad, mi padre salía de vez en cuando y regresaba ya muy tarde o hasta otro día, así que cuando sucedía eso mi hermano y yo aprovechábamos la oportunidad, un fin de semana mi hermano iría a la playa con sus compañeros y obviamente con su novia, se irían el viernes y regresarían hasta el domingo por la noche, así que me quedaría a solas con mi padre o aun no sabía si también se iría como cada fin de semana a con su amante, las visitas del Rey se hicieron más frecuentes después de que mi madre y mis hermanas se fueran, llegaba por la tarde del sábado platicaba con mi padre se bebían unas cervezas y se marchaban los dos, mi padre regresaba a otro día o hasta el lunes todo crudo y apestoso, pensé que este fin de semana sería igual ya que el viernes después de que salió mi hermano el Rey le hablo a mi padre, escuche a mi padre decirle – si aquí te veo el sábado.
-Alberto. Xavier hoy va a venir Julián, el Rey como tú le dices, estaremos tomando aquí en casa espero que no te moleste, de lo contrario pues te quedas en tu habitación. – observé a mi hijo para ver que reacción tenia, pero solo lo vi hacer una cara de pocos amigos.
- Xavier. está bien como quieras pensé que te irías como cada fin de semana dejándome aquí en mi prisión. -así es como me refería a mi casa cundo le quería hacer un reclamo a mi padre por el castigo que me impuso.
-Alberto. como quieras llamarle te quedaras aquí encerrado, no puedes salir y más te vale que no me hagas enojar estando borracho, porque entonces si veras lo que pasa. – mi intención era asustar a mi hijo para que no me viera blando.
No te preocupes no lo hare, solo saldré a cenar y ya, ¿qué me puedes hacer molesto y borracho? – solo mire a mi padre y este seguía con su cara de serio.
Alberto. No me rete Xavier, que te vas a arrepentir de tus provocaciones. – en tono serio y a modo de amenaza se lo dije a mi hijo.
-Xavier. Ya borracho no haces nada no sirves, así que tus amenazas no tienen valides. – con mi enojo mi intención fue provocar a mi padre para tener una excusa y poder irme con mi madre.
- Alberto. Que bien que tengas valor, ya verás esta noche que este borracho de lo que soy capaz de hacer, porque molesto ya estoy, vete a tu habitación que no te quiero ver aquí, ya me hiciste enojar.
Alberto. Al llegar mi amigo Julián nos pusimos a tomar y a platicar un poco esa noche seria solo borrachera y nada de mujeres como cada vez que salimos a andar de un lado a otro, estábamos ya entrados tomando ya medios ebrios cuando salió mi hijo a tomar su cena, de mala gana saludo, Julián lo invito a sentarse con nosotros un rato, pero mi hijo se negó a pesar de la insistencia de Julián, cuando Xavier se despidió para irse a su habitación Julián y yo seguimos hablando.
-Julián (el Rey) tu muchacho se está poniendo grande no parece que sea de la misma edad que mi hijo Víctor, se ve alto. – cuando vi a Xavier que salía a la cocina intenté animar a mi amigo, ya que me ha contado como se porta Xavier con él, pues después de su divorcio, me ha contado que su hijo lo culpa de todo.
Alberto. que te diré, junto con su crecimiento los problemas, hace días cuando entre a mi habitación pase por la de Xavier y lo encontré teniendo sexo con su hermano. – Julián me interrumpió sin dejarme terminar lo que le quería contar.
Julián (el Rey). ¿y cual fue tu reacción te molestaste cual fue tu reacción con eso? – no sabía que decirle a mi amigo pues él se veía tranquilo al decirme eso.
Alberto. estaba disfrutando ver como mis dos hijos tenían sexo y no fue la única vez, ya en otras veces los he espiado cuando tienen sexo y para serte honesto eso me excita. – entre Julián y yo nos contamos todo y Julián me ha contado que ya se la ha metido a uno que otro hombre, ya sea en tríos con mujeres o solo con un vato.
Julián (el Rey). ¿pero solo te excita o quieres participar de algún modo con ellos? – curioso pregunte a mi amigo en saber qué es lo que sentía
Alberto. no he intentado nada por miedo y por qué son mis hijos, pero si me he excitado viéndolos. – le quise proponer algo a Julián, pero no sabía si hacerlo o no, después del que mi hio me retara quería hacer algo con que chantajearlo.
Julián (el Rey). a mí me paso lo mismo cuando vi a mi hijo con el tuyo, cuando tenía a tu hijo con la verga hasta el fondo. – ese día se me puso dura cuando los vi ahí teniendo sexo, pero ahora que le confesé a mi amigo no sabía cuál sería su reacción
Alberto. no me he atrevido a decirle nada a mi hijo, ese día que los viste solo te excitaste o también le quería meter la verga a mi hijo? – le pregunte a Julián, la cosa estaba algo caliente pues de solo pensar en ver cómo le meten la verga a mi hijo me ponía caliente.
Julián (el Rey). no te vayas a molestar, pero la neta si se me antojo meterle la verga a tu hijo. El día que encontré a mi hijo y a Xavier, me puse caliente tan solo de pensar en ensartarme a ese morito.
-Alberto. pues que le puedo hacer si le gusta la verga es su pedo, y si alguna vez se la metes me dices para ver cómo se la metes y recordar viejos tiempos jajajajaja. – cuando jóvenes entre los dos nos metíamos con la misma vieja, de hecho, a nuestras exesposas las intercambiábamos los dos les dábamos verga a veces yo con Amelia su exesposa y el con Dalia mi exesposa, aun después de casados lo seguíamos haciendo por ello había tanta confianza entre nosotros.
Alberto. Yo sabía que ese mismo día Julián intentaría hacer algo con mi hijo y eso me ponía caliente solo de pensar en ver a mi hijo ser penetrado por alguien más, después de varias cervezas y platicas de viejos tiempos entre otras, Julián quiso ir al baño, le indique donde estaba y seguí tomando.
- Julián el Rey –
Camine en busca del baño tanto Alberto como yo estábamos muy ebrios, pero yo ya no buscaba el baño buscaba a Xavier, mientras caminaba saque mi verga y toque a la puerta de su habitación, Xavier abrió la puerta y se quedó petrificado cavando su mirara en mi verga que la tenia de fuera.
- Julián (el Rey). A disculpa Xavier ando buscando el baño, vengo a tirar el agua. – yo no dejaba de tocarme la verga como haciéndome una paja y Xavier no dejaba de ver mi verga morena de 19 cm algo delgada.
-Xavier. El baño está más adelante señor. – estaba impresionado de ver a ese señor que creía tan serio.
- Julián (el Rey). ¿Te gusta lo que vez he quiere tocarla? – mordía mis labios y con mi cabeza le hacía señales a Xavier para que la agarrara.
-Xavier. ¿que pasara si mi padre me ve agarrándole la verga? no sé qué podría hacerme. – no era tanta la necesidad de tener sexo, pero la oportunidad de vengarme de mi padre y quitarme la calentura sí, pero que pasaría si mi padre me vira tan solo que se la agarre.
- Julián (el Rey). no te preocupes tu padre está bien dormido no pasa nada, te gustaría que hiciéramos algo. – en lo que yo le preguntaba si quería hacer algo, Xavier ya estaba agarrando mi verga.
Julián (el Rey). Lo deje un rato que me agarrara la verga me la pajeara luego tome su cabeza y lo dirigí para que me la mamara, pensando en la forma de meterle la verga y que Alberto nos viera pensé en taparle los ojos, así que le propuse que se tapara los ojos.
- Julián (el Rey). ¿Xavier te han metido la verga con los ojos vendados? Sabes es una de mis fantasías me gustaría intentarlo contigo ¿te gustaría complacerme? – se me ocurrió esa idea de esa forma Alberto podría ver todo sin estar a escondidas.
-Xavier. nunca lo he hecho si me gustaría, pero me da miedo. – la idea del Rey me estaba poniendo más caliente pero igual me daba miedo.
- Julián (el Rey). descuida seré cuidadoso y en cualquier momento que no te sientas a gusto me dices y lo dejamos ¿Qué dices aceptas? – quería que los tres disfrutáramos de ese momento.
-Xavier. está bien lo hare, pero vamos a cerrar la puerta por si despierta mi padre no nos valla a ver. – a pesar de mis deseos de venganza me daba miedo la reacción de mi padre.
- Julián (el Rey). está bien tapate los ojos, yo iré a asegurarme que tu padre siga dormido y me regreso, cuando llegue quiero que estés desnudo y con tus ojos vendados. – una parte del plan no planeado estaba hecho seguía la segunda parte.
-Xavier. está bien en lo que ve a mi padre yo me preparo. - Me desnude cerré la puerta sin seguro y saque el frasco de lubricante que tenía mi hermano.
- Julián (el Rey). Alberto vente podrás ver sin esconderte, solo permanece en silencio y disfrutaremos, ¿aun quiere continuar verdad? – Alberto se veía incrédulo y emocionado.
-Alberto. claro que quiero que sigamos, pero que has hecho. – sé que Julián es un carbón en esto, pero no creí que fuera tan rápido o mi hijo tan fácil de convencer.
Julián (el Rey). Nos fuimos al cuarto de Xavier Alberto y yo. entre primero para asegurarme que Xavier tenía sus ojos vendados y efectivamente tenía sus ojos vendados y acostado de lado en la cama, le hice una seña a Alberto para que entrara y cerrara la puerta, vi que dejo un frasco de lubricante me acerque a Xavier lo puse de lado al borde de la cama, y con mi verga le empecé a dar golpecitos en su carita Xavier buscaba mi verga a ciegas con su boca, mientras Alberto no perdía detalle de la escena, metí mi verga en la boca de Xavier para que empezará a mamármela, tome el frasco de lubricante unte en mi dedo índice y lo lleve hasta su culito fui acariciando suavemente y sentía como se retorcía de placer, Alberto se mordía sus labios y se acariciaba su verga, luego de un rato le hice una señal a Alberto que participara, pero este no se veía con muchas ganas de participar, (Albero y yo nos sabemos varias señales para indicarnos sin palabras lo que queremos que haga uno u otro) le pedí a señas que jugara su dedo en el ano de su hijo, Alberto se animó lubrico su dedo y empezó a jugar con el culito de su hijo, Alberto estaba metiendo su dedo en el ano de Xavier dilatándolo así estuvimos hasta que Xavier me pidió que lo penetrara, le pedí que esperara un poco, con señas le pedí a Alberto que se acercara para que Xavier le mamara la verga, Alberto se acercó y yo le dije a Xavier,
Julián (el Rey). mámamela un poco más y te la meto pero sin tocar, solo con tu boquita nada de meter las manos, Xavier acepto, Alberto guio su verga a la boca de su hijo y este la empezó a mamar Alberto aguantaba los gemidos mordiéndose los labios, yo me puse a dilatar el culito de Xavier era tanta mi calentura que me dio por mamarle el culito, Xavier se retorcía de placer estaba disfrutando de la verga de su padre y de mi lengua en su culo pedía a gritos ser follado, Xavier saco la verga de Alberto de su boca y pidió ser penetrado, siguió mamando un rato después Alberto se retiró sacando una vez más la verga de la boca de Xavier, puse a gatas sobre la cama a Xavier, lubrique mi verga y se la empecé a meter, Xavier dio un pequeño grito entre dolor y placer, Alberto no dejaba de pajearse y acariciar a su hijo.
Alberto –
Deje que Julián continuara metiéndole la verga a mi hijo Xavier, escuchar los Gemidos de ambos, me excitaba demasiado quería volver a meter mi verga en la boca de mi hijo, pero este se daría cuenta. Xavier gemía como toda una nena siendo poseída por su macho, cuando Xavier estaba cómodo con la verga de Julián, Xavier empezó a mover sus caderas clavándose la verga de Julián metiéndola por competo, la sacaba casi por completo para metérsela de nuevo de un solo movimiento, esto me tenía a tope, Xavier apoyaba sus manos en la cama y se movía con ritmo clavándose la verga de Julián una y otra vez sin parar de gemir.
- Xavier. aauuuu aayyyyyyummmm que rico dame más, dame fuerte quiero que me des tu lechita papi auchh asiiiii ummmm siiiii oooo que rico me lo haces mi Rey.
Alberto. Julián no se quedaba atrás, Julián le preguntaba. ¿te gusta chiquilla quieres más verga quieres que tu Rey te folle duro? ummmm que rico culito oooo siiiiii auuuuu yeee siiiii ¿quieres más verga chiquilla quieres que tu Rey te meta toda la verga? Los gemidos y lo que se decían el uno al otro era música para mis oídos y excitación, luego Julián lo coloco al borde de la cama de lado y se le volvió a meter toda la verga, la sacaba y metía lento, después rápido y de repente despacio, yo veía como la verga de Julián se introducía en el culo de mi Hijo Xavier, yo estaba que reventaba de placer mi verga dura como el fierro y mis huevos calientes llenos de leche. Julián me hizo una seña para que me acercara a él, me dijo que le metiera la verga a mi hijo, no me resistí tenía tanto deseo que no lo dude, Julián le dijo a Xavier que se colocara a gatas al borde de la cama y que no metiera las manos, lubrique bien mi verga y la fui deslizando por el ano de mi hijo, lentamente observando como entraba cada centimito de mi verga en su culo, Julián al ver como hacia muecas porque estaba a punto de venirme, me dijo que eyaculara dentro de Xavier, solo me limitaba a hacer gestos y ahogar mis gemidos abría mi boca sin emitir sonido, de vez en cuando se me salía un soplido leve pero me aferraba a las caderas de mi hijo dando envestidas fuertes tratando de meter lo más que se pudiera mi verga, cuando me vine envestí fuerte a mi hijo dándole toda mi leche, dejándosela dentro de su recto. quería gritar y gemir de placer pero no debía hacerlo, Julián me sustituyo metiéndole de nuevo la verga a Xavier, yo estaba de espectador cundo Julián empezó a gemir y gritar, haaaa me vengo haaaa hayyyyyy ooosiiiii y al mismo tiempo dando envestidas la sacaba despacio y le dejaba ir toda la verga de una sola envestida sé que daba clavada al culo de mi hijo, luego volvía a separarse un poco de Xavier y la volvía a meter, fuero tres o cuatro repeticiones, que separaba un poco y la volvía a meter de golpe.
Julián se quedó con su verga dentro de mi hijo y le pregunto si se quería masturbar, mi hijo no respondió solo empezó a pajearse hasta sacar toda su leche, Julián le pidió que se quedara tirado en la cama sin quitar la venda de sus ojos, saco su verga del culo de mi hijo abrió la puerta y yo salí sin hacer ruido.
Julián -
vamos Xavier que tu padre está despertando quítate la venda y vístete, ¿dime te gusto como lo hago? - Yo estaba ya vestido y preparándome para salir
-Xavier. si me gustó mucho estoy algo adolorido y me tiemblan las piernas, pero bien satisfecho. – no podía creer, lo adolorido y tembloroso que estaba, pero estaba contento de haber experimentado esa forma de tener sexo.
Julián (el Rey). pero estas bien y lo disfrutaste tanto como yo verdad? Mira me iré a ver a tu padre descansa ya nos veremos en otra ocasión, me ha gustado tener sexo contigo espero que a ti también. – por poco y se me salía decirle los disfrutaste tanto como nosotros.
Xavier. estoy bien valla con mi padre que no valla a sospechar que paso algo. – esa noche caí rendido no podía creer la metida de verga que me había dado el señor Rey.
Julián (el Rey). Cuando regresé a la sala donde estaba esperando Alberto al vernos los dos una risa de complicidad, le conté lo que platicamos Xavier y yo después de que el salió, me escucho atento y ambos brindamos por lo sucedido y por un buen sexo de esa noche, pues teníamos tiempo sin hacer algo así, sin que compartiéramos un culito tan sabroso, aunque fue a escondidas los tres la pasamos bien.