El primero fuera de su hogar

El primero fuera de su hogar:

En el atardecer de ese viernes de primavera el sol pintaba de rojo a las nubes en el horizonte, la calma del viento se transformo en un manto para los animales y aves dispuestos a descansar. Allí sentada en los escalones de la casa estaba mirando un día más que trascurría de su vida, catorce años casi quince con su figura grácil bien formada no desentonaba en la quietud y el sereno atardecer. No le extrañó ver a su padre apoyado en la pared mirando al mismo lugar , un escenario increíble y magnifico en vista panorámica, la entrada a la noche con cantos de ave y algún mugido de una vaca no muy cercana . Ese fue el día, la costumbre de bañarse antes de cenar, podríamos decir fue la llave del acto inicial.

Estaba ella cantando en una gran lluvia bajo la enorme regadera, cuando vio a su padre también desnudo en el baño, tapo su sexo y lo increpo por su presencia, lejos de irse, se introdujo con ella bajo el agua tibia con un jabón en mano que acariciaba su piel, la tensión fue aflojando hasta sentir "eso" que después sabría definir como deseo, en ese instante "un sentirse bien" cuando sus entrepiernas eran acariciadas, llevo a su mano cobijando su miembro algo le decía que tomarlo entre sus dedos como veía a su padre hacerlo con las tetas de la vaca, era el movimiento más acorde, el miembro iba tomando cada vez más volumen, sentirlo entre sus cachas mientras el la secaba la asusto, otro sentimiento el que predominaba en su mente cada vez entraba más en su cuerpo, llevada a la mesa de madera de la cocina, en el aire mientras gritaba ¡No! ¡No! sabía bien que su padre estaba totalmente dispuesto y sus ¡NO! ¡NO! Eran solamente escuchados por los perros que ladraban, su madre fuera y el campo era lo suficiente lejano para esconder cualquier llamado a voces, las manos todavía húmedas abrieron sus piernas y ese miembro entro a su virgen vaina, poco a poco penetraba dentro de un liquido ( vaselina) , las palabras que escucho de sus labios le quedo grabada ¡Por fin una virgen! , las sacudidas y embates en su cuerpo terminaron poco después de sentir como se quedaba quieto dentro suyo, no pudo entender como sus talones empujaban apretando sus nalgas y otra vez ese sentimiento extraño reflejado en su cara de satisfacción que iluminaba el ambiente.

Dormir con su padre en la cama grande no le calmo la irritación, tuvo que lavarse varias veces rastros de sangre que caían de su almeja desflorada, el líquido pintaba su vagina calmando y formando en su mente y físico un grato hacer sexual, en la mañana después de varias horas pasado el amanecer se levantó , le costaba caminar normal, verlo desde el porch allá lejos sobre el tractor golpeo en su cabeza, todo el día pensó en lo sucedido, ese mediodía hizo la comida como siempre , y tomo conciencia cuando sus manos acariciaron sus nalgas y volvió a sentir dentro suyo el estremecimiento de la noche anterior, descanso pensando y recibió el atardecer ya no tenia el placer del día anterior, pensaba que deseaba esas caricias ese dolor , a la tarde otra vez esas manos con intenciones de iniciar "eso" la mirada la hizo entrar en sumisión y su horizonte que cubría a todos era el zaguán, casi un grito imperativo pidiendo dejará la puerta del baño abierta la volvió a la realidad, ahora las caricias enseñaban una relajación , su cuerpo disfrutaba , posiblemente sentir que le gustaba lo que hacían le permitió calmarse sus gritos de ¡No ¡ No! Del día anterior eran ¡más despacio, no tan bruto! Ya había encontrado el ritmo ese polvo lo gozo, toda la noche abrazada a su cuerpo acariciándole, la hizo sentirse mujer.

La semana paso rápido y a los atardeceres se les sumo algunas travesuras en el granero, la llamada telefónica de su madre avisando que la fuera a buscar al camino, marco sus rostro, el tiempo que quedaba lo disfrutaron , la niña era mujer. Su madre arribaría muy temprano después de hacer lo aprendido se acostó en su cama, extraño su cuerpo y abrazo la almohada, al despertar un besos de madre la saludaban, no pudo esconder sus celos en su cara, esa misma tarde aprovechando que su madre arreglaba las valijas y ropa del viaje, su padre en un santiamén la brinco en el granero, rápido, la leche salto dentro de ella, sin necesidad de sacarse las bragas , corriéndolas a un costado el cuerpo gozo y supo que esa sería una constante, el mes paso sin mayores variantes, un instante era suficiente, fue una tarde que la obligo a besarlo, lamerlo, abrir la boca y dentro chuparlo, ese juego perfecto le entregó esa leche de gusto raro, con un placer en sus entrañas por el manejo de sus grandes dedos que con masajes creaba músculos y un cuerpo para el placer.

La llamada de la tía (hermana de la madre) desde Buenos Aires ofreciéndole que fuera a estudiar, dado que era una lástima que no siguiera nada siendo tan inteligente, el entusiasmo por su futuro perturbo su presente. Le extraño que ambos no pusieran algún pero, allá fue a la gran ciudad, la camioneta los llevo hasta el pueblo de allí un colectivo enorme , la dejo en Retiro, sus tíos con sus primos, Carlos (20) y Vicente (18) estaban esperándola, un dormitorio con baño para ella, su tía contenta con tener a una "hija" , el tío era callado, no decía palabra, al otro día ir a un colegio especial para recuperar estudios perdidos, que terminado el verano la habilitaba para rendir libre, inicia a Claudia en la vida de la ciudad, extrañaba el atardecer, su padre , los dedos y jabones en su vaina mientras se bañaba no eran suficientes, mirando televisión en el living, la presencia de Carlos , no le llamo la atención, sentado a su lado, platicaron de sus vidas, la pregunta ¿sos virgen? Le hizo recordar el grito de su padre, sabía que no , pero lo negó, ¡Si! Contesto con soltura, Carlos siguió con sus preguntas intencionadas, esa noche se contuvo pero no dejo de darle esperanzas morigerando sus gestos, transcurrían los días en paz, cuando sin darse cuenta se encontraron solos, sus manos en la entrepierna fueron el preludio de lo inevitable, llevarla a la cama y servirla fue un instante, empujones buscando lo inexistente, la hicieron sonreír, mientras el consternado dijo por lo bajo ¡ ¿No hay más virgenes?!, satisfecha de recibir lo perdido, se dejo amar , los minutos pasaron fuera del alcance de sus mentes. Quedaron dormidos en la satisfacción del sexo.

Cuando el padre entro a la pieza, escándalo mediante , llegaron madre e hijo, los retos sobre Carlos fueron terribles, ¡DEGENERADO! ¿ No ves que es tu prima? ¿Que es menor? , una cara de inocencia en el rostro de la pretendida virgen, dejo atónito al muchacho. El grado de desesperación de los tíos , era tal que se escondió bajo la ducha pensó ¡ ¿Como llegar a presentarse ante la tía? ¡ , en todo tipo de excusas, ¡mentiras! , sin reconocerlo la suerte estaba echada, ella era la victima, en las manos de su primo que la había violado, recordó esas palabras de su tío y se extrañó lo fácil que le era hacer el papel de victima .

Acostumbrada a jugar a las escondidas en el entrenamiento dado por su padre, las oportunidades se siguieron presentando, Carlos sobrado de ganas y más de lo prohibido, era cómplice y pocos minutos como a su padre bastaban para gozar.

Fue un martes, un vómito súbito ,descompenso su cuerpo, llamaron a la emergencia , las dudas de la médica se confirmaron ! Embarazo! la tía y tío amarrándose con sus manos en la cabeza, le gritaban a su hijo ¡ imbecil , te tienes que casar o ir preso!

Fue el comienzo de su vida de casada, la presencia de sus padres en una reunión familiar, la autorización del juez de menores, todo , pasaba rápidamente, el poco carácter de los consortes, era lo que hacía posible en esa la riada , un viaje a la adultez de involuntarios personajes, el chico nació a los ocho meses, muy parecido al abuelo materno, ella estudiaba y recupero los años perdidos, gracias que "la abuela paterna" que cuidaba al niño, ya su hijo tendría dos años cuando en una tarde al cruzarse con su cuñado en el pasillo su cuerpo quedo al desnudo ante sus ojos, ese abrir de la salida de baño, las hormonas de ambos puso un fuego de deseo donde sus cuerpos ardieron , las pastillas que tomaba y toma en la actualidad la protegían de embarazos no queridos, sabiéndose solos, una nueva etapa comenzó, la penetración, era acompañadas de insultos y besos .

¡PUTA! ¡ Mil veces puta! ¡Tienes un cuerpo infernal y el sexo brota por todos tus poros! , el goce de ser cogida a lo bruto quedo en sus manos mientras se duchaba y pensaba de lo bien que lo paso, las escondidas con Vicente, el buen sexo con su marido, formaban a su cuerpo con esas formas de maja, los meses pasaban mientras terminaba sus estudios, quizás por casualidad, ambos hermanos se fueron a trabajar de administradores en la estancia de unos amigos de la familia , el chico (Pablo como su "padre") crecía en las manos de la "abuela" algo en la mirada del abuelo escondía intenciones, ella sentía esos ojos en la nuca, en su cuerpo, fue una tarde con una timidez borrada por los deseos de ese hombre que todo se precipito , sentir su mano sobre su muslo , la llevo a mirarlo , al percibir esas ganas en sus dedos, un mohín descolgó el último prurito y lo indujo a avanzar, ella no conocía los otros lugares para el sexo que los de esa casa y su hogar , sin palabras entro al auto que introduciéndose a un edificio , no le llamo la atención lo fácil que fue entrar a esas habitaciones chillonas de colores y espejos , se saco su ropa , recibiendo las caricias del todavía tímido tío, en el baño una ducha la recibió, recordó a su "padre" ver a su suegro desnudo, con su miembro ya levantado, le mojo sus labios vaginales , apoyada en la pared soportaba la presión en su cuerpo, ahora estaba completo, corrió en sus entrañas leche de esa barra que seguramente mamaria , mientras las manos firmes , producían un éxtasis , las barreras morales ya rotas por ella y sus amantes, envainada ahora sabía que no podía estar mucho tiempo sin sexo, sin satisfacer ese deseo, reconocía en su cuerpo ese goce y satisfacción de las primeras veces con su padre, distintos al vigor de los chicos, una cadencia sensual, la enloquecía, penetrada hasta el tope gritaba por más y más.

Mamarlo hasta volverlo a poner erecto , jugar en entrar y salir en cuclillas a su lado, la hacían feliz, escucharlo maldecir por ser tan débil, le hizo pasar un susto, ¡Este es nuestro secreto! Le increpo, no me podes fallar, a mi me gustas vos, una mentira tras otra salía de su boca, con gusto a esperma.

No falto la oportunidad de hacerlo en la casa, quizás la promiscuidad, elevada por su goce, con su cuerpo sobre el suyo , era un juego de sexo , los meses y cinco años pasaron , ya en el primer año de medicina, mujer, su figura era la de una modelo 1,70 de altura, en verdad una mujer en todo, pocos sabían que tenia un hijo, marido y los avances continuos de sus compañeros eran rechazados sistemáticamente, en verdad su marido que había retornado a un trabajo cerca suyo, satisfacía esos deseos que hervían en su sangre, si bien no dejaba pasar la oportunidad de hacerlo tanto con su suegro como el cuñado, ella ahora desde hace poco comprendió que no había posibilidad alguna de que ese hijo fuera de su marido y que era de su padre, eso y el amor natural habían sofrenado su inicial y alocada vida sexual, si bien activa ni siquiera había pensado en volver a amar a su padre.

Todo llega, sabía que ese hijo era de su padre, pasaron años en su vida promiscua guardada en la familia, la adolescencia rebelde no se marco en ella, tener un marido envidiable , buen amante y para más acompañado en sus deberes fue su tía quién le contó que su verdadero padre era un desaparecido del gobierno militar, o sea su padre era el padre del hijo pero no el abuelo, una sonrisa de alegría cruzo su cara, no se sabe si eso fue el desencadenante u otro, pero el cambio se produjo.

Las preguntas a su madre fueron el tema del encuentro, explicar lo inexplicable, su ocultamiento embarazada en el pueblo lejos de esa gran ciudad, la oferta de casamiento de su "padre" la posibilidad y tantas decisiones bajo presión fueron la resultante, nada dijo a su madre, de como era su vida, de su marido, sobrinos, cuñado . Un vendaval de ganas de hacer lleno su mente, todas le pedían nuevas cosas, fue un compañero de la facultad que la invito a una fiesta estudiantil, la excusa del estudio con otra compañera, produjo la noche.

Allá estaba ella como lo que era una adolescente en una reunión estudiantil, su compañero más que contento por su presencia, la unió al grupo de amigos, chicas y chicos conversando , guitarra , cuentos, relatos, algunas manos jugaban en esa danza conocida por ella , un beso de él fue correspondido suavemente, sus manos en su cintura la invitaban, la casa amplia cobijaba un escondite perfecto , le fue fácil entregarse a ese hermoso chico, el miembro erecto apretado en sus pantalones, salto cuando ella lo desabrocho, quizás él no esperaba ese movimiento , avanzó , en una cama individual desnudos en un santiamén recibió ese falo que con un manejo suave, cuidadoso, fue tomando fuerza el comprendió que esa niña , sabía de sexo y mucho, acabaron en un clímax de goce total, el preservativo colgaba cómicamente del falo ya erecto nuevamente, lo tomó en sus manos hizo un nudo ante los ojos atónitos, que respondió al pedido de pararse frente a ella, mamar desde los testículos, lamer sintiendo como cedía a sus chupadas , algo la llevaba, comenzó lamiendo su glande y pintando con saliva toda su barra, cada movimiento parecía dirigido , pero en verdad era natural, el gozo reflejado en sus ojos, la llevo a chupar con sus labios masajeando con su lengua esa barra, la acabada fue tragada por ella con deleite, recordó a su "padre" comparándolo, el vigor de su amante la llevo a abrirse de piernas invitándolo otra vez a su cueva, sin pensar en nada la barra se hundió una y otra vez hasta largar toda su leche dentro de su cuerpo.

El joven varón extenuado le juraba amor a esa mujer que lo enloqueció, poco a poco el sexo reinaba a pleno en sus cuerpos, ella escuchaba sus palabras ausente, ahora sabía lo que era gozar a pleno de un extraño, era el primero fuera de su hogar.