El Pozo

Como un pequeño poso de agua puede ser tar divertido.

EL POZO

Me gusta recordar como perdí mi virginidad, mientras vivía en el campo, a los 14 años, que puedo decir que los tenia bien puestos, cada uno de ellos. Acostumbraba ir a un pequeño riachuelo cerca de mi casa a bañarme desnuda, me gusta sentir el sol en mi piel y el aire por mi cuerpo.

Un día oí unas voces y me acerque, eran tres chicos del pueblo, estaban leyendo una revista pornográfica y tocando sus penes, mientras los miraba sentía una sensación dentro de mi justo en mi sexo, era un calor extraño y una picazón interna, ganas de tocarme, sin darme cuenta estaba acariciando mis labios vaginales, los chicos seguían tocando sus penes, uno de ellos empezó a jadear y después boto un liquido blanco de su penen y enseguida los otros dos lo imitaron, decidieron esconder la revista bajo una piedra y se fueron.

Yo seguía detrás del árbol, desnuda tocando mi sexo, me acerqué y saque la revista eran puras mujeres desnudas y hombres con penes enormes metiendo los dentro de sus vaginas, yo seguí tocándome hasta que mi cuerpo se estremeció y sentí que mis piernas ya no podían sostenerme, volví a poner la revista en su lugar y me metí otra vez al riachuelo, esta vez sentí el agua diferente en mi cuerpo.

Esa noche soñé con la revista, que yo era una de esas mujeres con los chicos montados sobre mi, uno a uno, al otro día fui al riachuelo otra vez pero con la intención de ver a los chicos, mientras me bañaba los oí llegar, me acerque con cuidado se estaban tocando mientras miraban la revista, en ese momento decidí dejar que me vieran a mi, regrese al riachuelo, comenzando a cantar en voz un poco alta para atraer su atención, mientras me mojaba con el agua sentí sus miradas y oí sus risas detrás de unos matorrales, me pare y comencé a tocar todo mi cuerpo, separando mis piernas hasta donde podía, metía uno de mis dedos dentro de mi vagina y con la otra mano tocaba mis senos, pronto los oí suspirar.

Me vestí y me fui a mi casa, pero en realidad me escondí y cuando ellos se fueron, regrese para revisar el lugar donde estaban, en las hojas de los arbustos conseguí la marca del semen de los chicos lo toque eras un liquido blanco viscoso y cálido, con ese liquido en mi mano me masturbe pasándolo por mi sexo y mis senos, durante esa semana fui y todos los días al pozo y los chicos también, yo me masturbaba frente a ellos y sentía como ellos lo asían también, pero mi cuerpo necesitaba ser tocado y mi sexo penetrado.

El sábado mis padres salieron muy temprano al mercado para vender las hortalizas y verduras que cosechamos, yo me quede sola en la casa y recordando a los chicos me excite, fui hasta la cocina y tome un pepino lo lave muy bien, en mi cuarto comencé a masturbarme con el pepino metiéndolo dentro de mi vagina, pero como me dolía decidí meterlo en mi trasero, busque vaselina en el baño y me unte bastante entre las nalgas, metí poco a poco todo el pepino por mi orificio anal, el placer era enorme mi sexo estaba húmedo, como si tuviera un tanque de agua adentro derramándose, sentí un orgasmo increíble, pensando que si con un pepino era así con el penen de un chico seria mejor.

Esa tarde espere cerca del pozo, hasta que los chicos llegaron, mientras miraban la revista me acerque parándome justo frente a ellos, cuando me vieron, no dijeron nada, yo sin pronunciar palabras me quite el vestido, quedando totalmente desnuda, me acerque a los chicos, tomando él que tenia el penen mas grande, lo mire y lo metí en mi boca hasta donde pude chapándolo, los otros dos solo miraban, tome sus manos y las puse sobre mis senos, después empezaron a tocar todo mi cuerpo, mis piernas, mis senos, nalgas y vágina.

Cuando uno quiso meterlo en mi vagina dije que no que primero seria el mayor, pero no en mi vagina que lo metería por mi trasero, me incline apoyándome contra uno de los chicos, mientras le chupaba el penen, sentía como el mayor metía su penen dentro de mi ano, el otro me chupaba las tetas, de pronto sentí un golpe en mis entrañas era el chorro de semen del chico, recorriendo todo mi trasero, en cuanto lo saco el otro chico metió el suyo, y de pronto sentí mi boca llena de semen y como mi trasero se volvía a llenar de leche.

Apenas si toque un par de veces mi sexo alcanzando un orgasmo riquísimo, después mientras no bañábamos en el pozo, Ricardo el mayor me pidió meterlo en mi vagina, le conté lo sucedido con el pepino, me dijo que lo aria con mucho cuidado para que no me doliera, dentro del agua me recosté en una piedra grande separando mis piernas lo mas que pude, los chicos miraban, como Ricardo lo metía en mi vagina poco a poco, primero me dolió un poco pero después me excite tanto que no podía parar, mis caderas se movían solas, mientras Ricardo me chupaba los senos y penetraba mi sexo, de pronto lo saco metiéndolo de golpe por mi trasero, sentí su semen recorrer mi interior, cuando le pregunte porque lo había sacado, me explico que si lo dejaba dentro me preñaría y él no quería.

Después vinieron los otros dos, Ricardo les dijo que no me acabaran adentro, como era tarde dije que seria con los dos al mismo tiempo para irme rápido, me senté sobre uno de los chicos metiendo su penen en mi vagina y el otro por mi trasero, al mismo tiempo, ser penetrada por los dos lados era algo increíble, sentía que todo mi cuerpo estallaría, mi orgasmo fue tan grande que pegue un grito y gemidos enormes, nos citamos para el lunes a la misma hora.