El poker de la muerte. Lupe Vargas 3.

El poker de la muerte.

Lupe Vargas 3.

Lupe no sabía cómo atacar a Alan Taylor. Antes no le hubiera importado morir matando, pero había cambiado con el amor de Kate y deseaba vivir. Por eso había aumentado su prudencia, y si bien seguía practicando con las armas, dedicaba casi todo su tiempo a pergeñar planes para poder acabar con su venganza.

Lily les vino a ver. Aprovechó un viaje por vestidos y lencería para quedarse una noche con las mujeres. Durante la cena, las cinco fueron haciendo planes para le escuela y el pequeño albergue. Lupe apenas opinaba, no sabía cual iba a ser su futuro y eso la impedía participar.

Al fin se quedaron solas Kate, Lily y Lupe. Es la dueña del salón, la que abre un botella de güisqui , sirve tres vasos generosos que ofrece a sus amigas, y sentada, mientras bebe, pone en antecedentes a sus compañeras.

-“Alan está loco, el cómo te has cargado a su hermano lo ha trastornado. Es una mezcla de odio y miedo. No sale del rancho, y cuando lo hace, va siempre acompañado de cinco pistoleros. Va a ser difícil atacarle, porque además cambia todas las rutas de venir al pueblo. No hago mas que darle vueltas y no encuentro salida.”-

Lupe bebe un sorbo de licor mientras contesta:

-“Antes de conoceros, me hubiera dado igual. Le esperaría, le dispararía primero a él, y luego intentaría salir. No me importaba morir. Pero ahora quiero vivir. El amor de Kate y nuestro mundo de mujeres útiles me ha dado una felicidad que no creí pudiera tener. Y eso hace que no sepa como encarar el tema. Tengo que tener probabilidades de seguir viviendo este amor que me llena.”-

Kate se levanta y la besa, todo el cariño entre las dos mujeres se muestra en el abrazo, cuando se separan tienen lagrimas en los ojos.

-“Te quiero mas que a mi vida, pero Lupe,  sé  que si no acabas lo que has empezado, vengar la muerte de tu hijo, lo que tendrá un mal fin será nuestro amor. Por eso tienes que matarlo. Hay que pensar en cómo. ¿Hay algo que lo haga bajar la guardia? ”-

• “Ahora que lo dices, sólo hay algo que le puede llevar descuidarse: el poker. Presume de ser un gran jugador.”-

• “Pues habrá que pensar algo. Pero seguro que lo hacemos mejor mañana por la mañana. En la cama cabemos las tres. Y Kate me ha enseñado a ser abierta de sentimientos.”- propone Lupe mientras de un trago acaba la bebida y desabrochando la blusa deja al aire su senos turgentes.

-“¡Que viciosilla te has vuelto! Y que buena idea has tenido.”- Lily la besa mientras acaricia los pechos que responden endureciéndose los grandes pezones.

• “Seguid, mientras me desnudo. Tú, Lily, tienes una lencería que anima  pero yo  soy la que llevo más ropa. Así que voy retrasada.”- anima Kate entre risas.

El sol de la mañana despierta a Lupe, se había quedado dormida agotada físicamente, sus dos amigas le habían provocado un número incontable de orgasmos hasta que prácticamente quedó inconsciente.

Las oye hablar y reír. Se levanta, hace buen tiempo y no tiene frío al andar desnuda.

-“Ya es personita nuestra viciosota. Anda, ven a desayunar que te contamos lo que se nos ha ocurrido a Kate y a mí.”

Lupe se sienta en la mesa, sus compañeras llevan un camisón, ella se cubre con una camisa y espera que le cuenten lo que han pensado.

-“Tu cuñado era o es un cabrón. Digo que es o era porque no sabemos si está vivo. Aunque si lo está, andará culeando alguna mujer por ahí. Pero creía conocerte bastante bien. Decía que eras una fuera de serie con las armas, que tenías una extraña facilidad con las cartas y que hacer el amor contigo era como joder con una muerta. En lo primero acertó. Lo tercero no era cierto, eres una viciosa total para el sexo. No he visto muchas mujeres con tu capacidad de placer. Me gustaría saber  lo segundo cómo es.”- preguntó Lily con una sonrisa.

• “De siempre, en mi casa, con mis padres, luego con mi marido, y también el tiempo que estuve con Luís, nos entreteníamos jugando a las cartas. Siempre  he pensado que me dejaban ganar por ser la niña de la casa y para que me estuviera contenta.”-

• “No era eso lo que él decía. Sostenía que tenías una suerte fuera de lo común y que encima si no tenías cartas sabías cómo desconcertar al contrario.”- añadió Lily.

-“ La manera de sacar a ese asesino de su guarida es una partida de poker. Hay que poner dinero para ello, pero yo lo tengo, así que sólo habrá que preparar la trampa. Lo hemos hablado las dos y…El sitio para hacerlo el local de Lily, y tú puedes ser una jugadora del Sur, de los barcos del Misisippi que quieres una buena partida. Lily se encarga de organizarla. Seguro que el banquero se apunta y otro aparecerá”- propuso Kate.- “Mientras se monta, tú puedes practicar con  María, su marido era un tahúr que la enseñó todos sus trucos antes de que lo mataran por tramposo. Ella tuvo  que vender su cuerpo  hasta que la marcaron. Y se vino con nosotras”-

• “No me parece mal, es una solución, porque  de todas formas, pierda o gane estaré a solas con él y será mi oportunidad. Gente alrededor y un duelo”

Están en una de las habitaciones del segundo piso del saloon- prostíbulo  de Lily, Lupe nota una extraña tranquilidad. Desnuda , abrazada a Kate, dispuesta a disfrutar la que quizás sea su última tarde de amor, besa a su pareja. Recorre con la boca besando y lamiendo el cuerpo tan amado, la siente vibrar ante su lengua y cuando se alimenta de su sexo, que jugoso se abre a sus caricias, se da cuenta que es una mujer diferente. Lleva a su compañera al final dos veces y cuando la vuelve a besar en la boca, sonríe llena de felicidad.

-“ Ahora me toca a mí”- casi gime Kate cuando sin preámbulos abre las piernas de la mexicana y come su vulva, recreándose en el clítoris que orgulloso se muestra duro y expectante. Le llega el orgasmo rápidamente , tira de su amiga y se quedan abrazadas besándose asustadas por lo que va a ocurrir en las próximas horas.

Lupe se levanta, debe prepararse. Los espejos le devuelven su imagen, no se reconoce. Teñida de rubia, con la piel del rostro oscurecida como si en vez de mexicana fuera mulata. Es el aspecto que debe tener para pasar por Belle Mcain, jugadora de los barcos del Missipi , la que ha propuesto una partida de poker con 4000 dólares mínimos para poder jugar. Un cebo que era difícil rechazar. Y en el que Alan Taylor había caído. A las siete empezaría el desafío. El lugar: el enorme bar de Lily.

No quiere lavarse, prefiere sentir el olor de Kate, se pone  bombachas y medias negras, después la blusa blanca de seda y los pantalones mil rayas.

Su amiga le ayuda a calzarse las botas de media caña. Se coloca la canana con el revolver a la cintura, después la funda sobaquera con un smith benson del 32. Cuando se pone la casaca negra de terciopelo las armas quedan disimuladas.

El sombrero blanco de copa baja y ala ancha es el último toque de Belle Mcain, ni ella reconoce a la pobre mexicana Lupe Vargas con aquellas ropas.

Prueba la rapidez con que puede desenfundar, recoloca el arma del sobaco para que no se vea cuando se abra la chaqueta, comprueba que sigue saliendo bien y se da cuenta que empieza el último acto de su venganza. Besa y abraza a Katy, toma el maletín con los 4000 dólares y sale de la habitación. Baja donde Lily la espera, va hacia la mesa. Allí sentados están tres hombres. Sus ojos son sólo para uno: el jefe de los hombres que mataron a su familia y la violaron. Él no le ha reconocido.

-“¿ Puede darme el dinero?. Yo te daré fichas por su valor. La apertura son 100 dólares.  Las reglas son que uno se retira cuando quiera o pierda todo. Y se juega mientras dos quieran jugar. Hay un descanso de cinco minutos cada hora..”- anuncia la dueña del salón.

La mesa está situada en el medio del local, el público abundante, que les rodea, se encuentra a cuatro metros de los jugadores.

Los hombres piden güisqui, Lupe café. Abren el mazo de cartas y comienza la partida.

Al primer descanso, a Mike Todd , el banquero le quedan 2800 dólares, a Fred Cooper, dueño de la línea de diligencias, 3100. Han ganado Alan Taylor  1100 y Lupe 1000. La mexicana está totalmente fría, al principio pensó en acabar con su enemigo enseguida, pero sabe que tiene tiempo, y se ha dado cuenta que además de matarle le apetece poder humillarle en el juego. Cuando más alcohol beban sus compañeros de mesa, más torpes se volverán y tendrá mas oportunidades de ganarles.

Aprovecha el descanso para acercarse donde, alejada, espera Katy, apenas se tocan las manos. Las mujeres sienten la complicidad del amor.

Al segundo descanso llegan ganando Taylor y Lupe, cada uno tiene ante sí casi 6000 dólares, Fred Cooper es el que más ha perdido apenas le quedan 900, Mike Todd se ha recuperado con un poco más de 5000.

-“Si pierdo una mano más me retiro con lo que me quede.”- anuncia Cooper.

Se vuelven a sentar. No es en la primera es en la segunda cuando el jugador anuncia que se levanta. Sólo Lupe le despide dándole la mano y deseándole mejor suerte en otra partida, mientras le consuela.

-“ Hoy, no ha tenido buenas cartas. En este juego, mucho es la suerte y la ha tenido en contra, pero es un magnífico jugador. Gracias por su compañía.”-

• “ Nena, esto del poker es saber jugar. Ha perdido porque no las sabe sujetar. Deja de hacerte la señora, que está claro que eres una puta mulata con suerte ”- suelta Taylor con una sonrisa lobuna, mientras sus ojos recorren el cuerpo de la mujer.

-“Soy una mulata que antes fue puta y que se ganó la libertad jugando a las cartas. Así que no me has ofendido, sólo has demostrado lo torpe que eres.”- contesta Lupe adoptando su postura de jugadora de otro color. Comprende que sigue sin reconocerla.

El local está lleno hasta rebosar, la importancia de la partida ha hecho que todas las mesas estén ocupadas, rodeadas de espectadores de pié hasta por las escaleras que suben a las habitaciones. El alcohol corre, Lupe piensa que su amiga Lily debe estar haciendo un buen negocio aunque las chicas del local no tengan clientes.

Sigue la partida, Mike va perdiendo cuando llega al final de la hora, sólo le quedan 1200 dólares. Sabe ser un señor en las perdidas, dueño del banco local , agradecido a Kate por como se lo vendió a la muerte de su marido, apura el último güisqui al levantarse.

-“Ha sido un placer jugar con una señorita tan bella y tan buena con las cartas. Perder con usted es uno de los lujos que debe poder permitirse un hombre en la vida. Yo me retiro”- dice al recoger sus fichas de la mesa.

• “Jugar con un caballero siempre llena de alegría a una dama.”- le contesta Lupe que le despide posando sus labios  en la mejilla, tras que el hombre le bese la mano.

-“Este beso compensa la pérdida.”- son las palabras de Todd cuando se retira hacia la barra, pide una botella de champagne y llama a una de las chicas para que le acompañe.

A Lupe se le pasa por la cabeza desafiar a Taylor pero le ve tan seguro, con sus 7300 dólares que decide continuar. Se sienta , se ha abierto la casaca y sus pechos  turgentes parecen querer romper la camisa blanca de seda. El hombre la devora con ojos lascivos.

Traen un mazo nuevo, barajan. Taylor da las cartas, sonríe. Dos ases y un rey, junto a un siete y un ocho. Pone 2000,  mira a la mujer, le pregunta que cuantas quiere. Ella pide dos y  empuja las fichas cubriendo la apuesta, se las da, la observa mientras se descarta y se sirve otras dos. Los ojos de la mujer denotan frialdad, los de él alegría. Tiene full de ases reyes.

-“Van otros 2000.”- dice la mujer, Alan cree notar un cierto nerviosismo en su voz.

• “Puta , si quieres verlas tiene que ser el resto.”- suelta empujando todas sus fichas en el tablero.

-“ Las vemos.”- contesta igualando la apuesta.

Hay un silencio espectral en todo el local. La gente ha dejado de beber, sólo hay ojos para la partida que se decide en aquella mano.

-“ Mira, negra. Un as, otro as, y otro, y además dos reyes.”-

-“ Mira hijo de puta, violador y asesino. Una reina, dos reinas , tres reinas y cuatro reinas. Las mujeres ganan.”-

Taylor se queda petrificado.

-“Sabía que te ganaba imbécil. Tenía las tres reinas de mano, y me descarté de un rey y un as, así que no podías ganarme  más que con una escalera de color, algo casi imposible. Y ahora te recordaré lo mierda que eres. El 11 de septiembre de 1880 asesinaste a un niño y a un hombre y violaste a una mujer. Ellos eran mi hijo y mi marido y yo soy esa mujer: Lupe Vargas.

La que te va a matar.”

-“ Perra, voy a acabar lo que no hice entonces.”- su mano se lanza al revolver, lo comienza a desenfundar cuando una bala le entra entre los dos ojos destrozándole el cerebro. Cae sobre la mesa.

Lupe mira desafiante a los espectadores.

No puede ver  que en la escalera un hombre saca un arma para matarla. No llega a disparar, una bala de rifle le destroza el brazo.

-“Todo el mundo quieto. Yo tengo 14 balas, y esa preciosidad 11, porque lleva un revolver en la sobaquera. Ha sido legítima defensa, esa cabrón intentó desenfundar antes, pero mi niña es mucha niña.”- en una mesa cerca de la puerta, Lupe reconoce emocionada a su cuñado con un Winchester en las manos y una pierna en cabestrillo

Es Mike Todd el que primero levanta la voz en el silencio sepulcral del salón.

-“Nunca me gustó ese tipo. Señora, creo que puede guardar el arma. Si alguien intenta algo, sabe que lo colgaremos. Y corre un ronda de mi parte”

• “ Deje que pague yo, que he ganado,me parece que a nadie le molestará que les invite una mujer.”-

• “La primera corre a cuenta de Lupe Vargas, la segunda a cuenta de la casa y la tercera por parte de nuestro banquero, mientras esperamos que llegue el sheriff.”- añade Lily.

Las ocho personas están desnudas. Tres hombres : Mike, el sheriff y Luís. Y cinco mujeres: María, Jane, Lily , Kate y Lupe frente a una mesa donde sólo quedan restos de comida , y botellas vacías de un espumante californiano.

Lily y María van a por otras dos botellas a un barreño con hielo donde queda todavía bebida para continuar.

• “La verdad que estáis bien dotados.”- suelta Lily entre risas cuando toca las vergas de los hombres desnudos con la mano libre.

-“ Ha salido todo bien. No se puede pedir más. El rancho de los Taylor explotado por el pueblo, con lo que no hay ninguna queja por sus muertes. Al revés , aplausos. Luís se ha hecho cargo del ranchito de Lupe, que es pequeño pero ideal para lo que vosotras queréis. Un sitio donde los niños se puedan formar una vez dejen las escuelas que dirigen  Kate y Lupe. Y…”- dice Mike con una copa en la mano.

• Y no sólo eso, Mike .Tú y el sheriff podéis estar juntos tranquilos, sólo con venir y pedir que os acompañe yo, no hace falta que simuléis que sois unos machos invencibles. Ahora que somos amigos de verdad, aquí está vuestro lugar de encuentro. El degenerado de Luís , que parece incansable, hoy ha dado cuenta de nosotras tres, en el rancho tendrá visitas de mamás complacientes….. Aunque si no vienes a vernos por acá, esa cicatriz que tienes en la pierna no es nada con la que te vamos a hacer en la pija. Y sobre todo, vosotras podéis ser felices. Kate  cuida mucho a Lupe, lo necesita. Por todos nosotros un brindis.”- Lily declara con voz solemne.

Parados , desnudos, con las copas en alto, brindan y apuran la bebida.

• “ Por favor , Lupe, no estés triste. Vamos a poder cuidar a muchos niños, que serán el homenaje al tuyo que asesinaron.”-  Kate abraza a la mexicana, y seca a besos las lagrimas que corren por sus mejillas.

Este relato consta de tres capítulos: La razón de una venganza. La horca de la justicia y este con el que acaba la historia.