El perreo se nos fue de las manos

Historia en la que el tío hetero que me volvía loco en los cuatro años de universidad hace que me ponga cachondo sin ninguna intención y sin saber que estaba a punto de correrme hasta que el morro salta por los aires

Hola, buenas, antes que nada pediros disculpa y deciros que vuelvo a subir el mismo relato porque esa vez cuando lo escribí no tuve tiempo de revisarlo y era verdad que por culpa del corrector había palabras sin sentido y no podía permitir eso.

Como sabréis de mis anteriores relatos, me llamo Lucas y esta historia es independiente  a las otras, aunque he de decir que han pasado dos años, puesto que en su día tenía 20 años y cuando me pasó esta experiencia tenía 22. Para recordar, soy de complexión  atlética,  ahora más que antes porque voy más veces al gimnasio, pero mi cara de niño sigue siendo la misma.

Resulta que estaba en el último año de carrera de magisterio, ya estábamos haciendo las prácticas en un colegio, pero los fines solíamos  salir a un pub a beber haciendo reservado y luego a una discoteca. Y este último  lugar fue donde se descontrola todo... El tío que me ponía  a mil desde los cuatro años de magisterio  y que el no sabía porque pensaba que yo era hetero se llama Manu. Tiene 26 años, cuatro años más  que yo. Es de mi misma estatura y tiene fibrado todo el cuerpo ya que se pasa las tardes en el gimnasio. Lo que más  destacó de él  son sus brazos musculados, sus gemelos y su culo respingón. Siempre me he masturbado con un video que subió en tiktok en el que hacía flexiones y se le marcaba todo el culo.

Pues aquella tarde  me estaba duchando y preparando para salir, pues habíamos quedado a hacer un reservado su grupo con el que hacía los trabajos de la universidad y mi grupo, nuestros amigos. Yo esa tarde estaba más  cachondo de lo normal, pero no me masturbé y me eservé  por si ligaba con alguna tía, o algún tío  quien sabe,  ya que soy bisexual. Solo había probado una polla en mi culo y esa experiencia me encantó,  así  que no me importaría  repetir, es más,  esa noche notaba duchandome que mi ano estaba bastante dilatado y yo cachondo perdido.

Ya listo, me pasó  a buscar en coche un amigo con el que iba al reservado. Recogimos a dos personas  más, pero Manu iba con su grupo y ya estaba esperándonos allí.  Cuando llegamos entramos y ya estaban preparadas nuestras botellas y nuestros sitios, y ya estaban dentro el grupo de Manu y Manu. Iba con una camisa clara de rayas que hacía que se le marcase sus  brazos musculosos pues estaba ajustada, luego llevaba unos pantalones  vaqueros claros y tambien ajustados que hacía que se le marcasen las piernas musculosas tanto del gimnasio como por haber estado jugando al fútbol toda su vida. Saludé  a todos con un abrazo o con un choque de manos y me senté en esos sofás  justo al lado de él.  3stuvimos hablando de cómo nos iban las prácticas en el colegio hasta que ya empezamos a beber. El hecho de tenerlo al lado hacía que pudiera tocar sus piernas con mis piernas y sentirlo caliente. A veces cuando me incorporaba para echarme una copa ponía como excusa para coger impulso el poner mi mano en su pierna y de manera "inocente" apretarla. Él no se daba cuenta porque no veia intención  ninguna.

Ya cuando terminamos las botellas del reservado entre todos nos fuimos a la discoteca que está al lado de ese público. Allí  ponían todas las canciones que nos gustaba, pero en especial hubo una en la que Manu decidió  hacer lo típico que hacen los heterosexuales con sus amigos al bailar, perreaba con ellos y hacían como si estuvieran follando. Eso me hizo ponerme cachondo y la polla se me puso morcillona. Pero no me di cuenta que lo estaba mirando fijamente hasta que me dijo:

Manu: Lucas, quieres que te de caña a ti también? Acompañado de una sonrisa pícara

Lucas: jajaja, no no, sigue dando caña a tus amigos

No quería ponerme en esa misma situación  con él,  o qué  coño, claro que quería, pero me iba a notar lo empalmado que estaba.

Pues en ese momento siento que alguien me abraza por detrás y mueve sus caderas al ritmo de la música y simulando una follada. Miré de reojo y era Manu. Mi polla estaba que iba a explotar.

Manu: anda ven aquí, si estabas deseando bailar conmigo jajaaja

Lucas: Noo, es que era porque estaba ligando con una tía en la distancia y por eso no quise bailar.

Así  si descubriera que estaba empalmado tendría  mi excusa.

Manu: Bueno, pues déjate de chavalas y disfruta con tus amigos coño

En ese momento sigue el ritmo de follada en mi culo con ropa. Notaba cierto bulto  aunque sería mi imaginación.  El seguía y seguía y si no fuera por llevar vaqueros, esa polla estaría dentro de mi culo follandome, ya que tenía mi ano muy dilatado y cachondo. Siguió hasta que me dio la vuelta y me empezó a perrear rozando nuestras pollas. El seguía  en un vaivén que por cojones tenía que notar mi polla dura en su polla.

Manu: que, no te esperabas que bailara tan bien?

Eso me lo dijo susurrandome en el oído e hizo que me pegara aún más a él  inconscientemente.

Lucas: que va, uff bailas de puta madre

El sonrió,  y su movimiento de perreo con su polla junto a mi polla a través de los vaqueros iba en aumento, con más intensidad. Seguía y seguía, y ni el perreo ni la canción  acabacan. Justo llegó el momento en el que ya no pude aguantar más, y mi polla estalló  dentro de mis calzoncillos y de mis vaqueros. Manu seguro que notó las palpitaciones de mi polla, porque mientras me corría, instintivamente me abracé a él y repetí sus movimientos de follada para tener el máximo roce posible. Ya de perdidos, al río.

Lucas: uff Manu que bien bailas cabrón.

Cuando acabó  la sensación  de extasis mire a mi alrededor para ver si los demás se habían dado cuenta de algo, pero ellos iban a su rollo, así  que miré  a Manu que miraba hacia abajo y luego me miraba a mi sonriendo.

Manu: vamos al servicio que está gente no se entera de nada.

Corriendo fuimos al servicio y no tuvimos que esperar cola ni nada. Allí dentro como no hay pestillos,  Manu me puso contra la puerta de modo que la bloqueo para que nadie entre.

Manu: tan cachondo te he puesto que no has podido aguantarte la corrida?

Lucas: ehhh, yo es que con tanto movimiento pues mi polla se descontrola

Manu: si si ya. Vamos, que ahora mismo si vieras mi polla no te pondrías cachondo?

En se momento se la sacó  y estaba a tope. Me llevó mi mano a su polla y me la resfregó.

Manu: te gusta o que? Pero mira como vuelves a tener la polla, y te has corrido hace cinco minutos, te la noto hasta debajo de tus vaqueros. Anda liberala y así estamos todos más cómodos.

Lucas: uff Manu es que me pones mucho, desde que te conocí  en la universidad, pero es que yo no quería...

En ese momento me coge la polla y me la empieza a masturbar, al igual que yo a él .

Manu: anda callate y disfruta.

Yo estaba disfrutando de la paja que me estaba haciendo pero mi instinto hizo que bajara y se la comiera. Tenía unas ganas tremendas.

Manu: uff Lucas, no es tu primera vez, verdad? Lo haces de fábula.  Ahora

Yo seguía y seguía, el llevó  su mano a mi culo y llegó a mi dilatado y cachondo ano mientras se la estaba chupandp. Mi polla estaba de nuevo que iba a estallar en cualquier momento.

Lucas: uff Manu follame

Manu: qué? Quieres que te pegue una follada? Pues tiene que ser rápida que ya hay gente tocando a la puerta. Tienes cordones? Porque yo no.

Lucas: si si, aquí lo tengo en mi cartera

Manu: pues pónmelo

Lo saqué rápidamente,  se lo puse en su polla y le ofrecí  mi culo hambriento de polla

Manu: espera así no, primero los deditos

Se fue ensalivando sus dedos mezclandlolos  con mi saliva, y me metió uno a uno. El primero no costó  nada meterlo, el segundo tampoco y me producía un placer inexplicable. El tercero costó  un poco más, pero no  se sentía dolor, estaba extasiado. Cuando ya llegó  al cuarto y los tenía todos metidos, empezó  a realizar movimientos circulares dentro que me hacían gozar y gemir sin poder controlarme.

Manu: ahora si

Y acto seguido me cogió  en brazos frente a él, me empujó contra la puerta para que no entrara nadie y en esa postura me empezó a meter su polla. Me la metía despacio, poco a poco iba abriendole paso. Yo no era dueño de mis actos

Lucas: ufff Manu metemela entera ya y follame fuerte.

Manu: ummm que culo tienes. Así que re gustan los cañeros eh.

En ese mismo momento me la sacó  entera y me la metió  de golpe. Eso hizo que gimiera descontroladamente. Y empezó  a darme has embestidas salvajes  que cada vez que llegaba al fondo su polla, mi polla palpitaba del placer

Manu: uff que culo tienes,  vas a hacer que me corra.

,ucas: si si correte dentro

Yo aprovechaba las embestidas y rozaba mi polla contra sus abdominales y pecho aunque tuviera su camisa puesta. Cada vez más fuerte, cada vez más intenso, casa vez más rápido, hasta que...

Lucas: uff Manu bajame o si no te voy a poner la camisa perdida de lefa

Manu: ni se te ocurra  bajarte porque... ahhh me corro cabron, correte en mi camisa me da igual ahora mismo ohhh, ufff que culo y que orgasmo

Yo acto seguro me corrí con su polla dentro y encima de él. Mi lefa le pringa tosa la camisa e incluso le cayeron algunas gotas en sus labios.  En ese momento  le bese y le quite mi corrida de sus labios.

Manu: ufff,venga Lucas va ponte decente que tenemos que salir y estar con los demás. Que pedazo de follada uff

Tiró el condón lleno de semen y me puse rápidamente los vaqueros y al salir nos encontramos  con un montón de tíos esperándonos en la cola del baño, incluso nuestros amigos.

Manu: es que nos había dado un apretón

Me miró  y me guiño un ojo

Lucas: si si, algo habremos comido que nos ha sentado mal a los dos, perdonad.

Tras aquello, psamos toda la noche bailando con nuestros amigos, y un amigo de Manu,llamado Joaquín, le pregunta:

Joaquín: illo Manu, de qué te has manchado la camisa?

Manu: ehh de una copa que se me derramó  antes.

En ese momento lo toca y se lo lleva a la nariz. Ambos se echan una mirada, que me pareció que Joaquín sabía lo que había pasado y que estaba acostumbrado a encontrar esas manchas a Manu, porque tras eso Joaquín empezó  a bailar con normlidad. Y la noche siguió  con normalidad,  pero yo más aliviado.

Fin del relato,  espero que os haya puesto cerdos esta historia.