El mundo y sus vueltas 2

A la mañana siguiente me levante esta vez sin los gritos de Kris, y agradeciendo que justo cuando entre al baño ella apareció, esta vez sí nos saludamos bien sin mal genios ni nada, hice todo mi aseo completo, me puse mi uniforme, Salí coloque música a medio volumen y me senté a desayunar con Kris.

Kris: ¡hey!

Ari: dime

Kris: ¿Queena está soltera?  -sonriendo-

Ari: -riendo- deja de ser pedófila es simplemente una niña, aparte como te digo siempre no le van las chicas  –saque la lengua-

Le digo pedófila echándole broma ya que ella tiene 22 años, a pesar de su edad se conserva muy bien, tiene unos ojos color marrón oscuro, el cabello de color negro, su cuerpo es sencillo, pechos no muy grandes, piernas largas y lindas, no muy flaca pero tampoco gorda, lo más encantador es su sonrisa que es algo tierna para ser de ella.

Kris: ¿una niña? Si ya cumplió los 18, aparte para ser una “niña” –haciendo comillas- como tú dices, esta como quiere, es que nada más con esos ojitos marrones claritos, ese cabello castaño oscuro corto que le hace realzar sus ojos, sus labios carnosos, -suspirando- y si pensamos en su cuerpo tiene unas curvas que haría enloquecer a cualquiera, empezando por sus pechos, terminando por su abdomen y nada como sus piernas bien marcadas por el ejercicio que se la pasan haciendo ustedes –pensando- hay simplemente esta como para mí.

Ari: Kris babeaste el plato –riendo- aparte no tenías que hacerme una descripción de Queena se te olvida que me la sé de memoria, pero también se te olvido decir lo caprichosa que es.

Kris: -riendo- cierto que es caprichosa, pero si me aguanto a Brenda que es nuestra amiga, me aguantaría a Queena como novia

Ari: -riendo- que obsesión mujer

Brenda: -saliendo del cuarto- ¿que hablaban de mí? Buenos días amores.

Ari: emm-termine de comer y aproveche para desquitarme de Kris- bueno no se preciosa pero kris dijo que eras caprichosa, y como yo termine de comer, me voy –sonriendo-

Kris quería asesinarme por la mirada que me lanzo, le lance un beso a cada una y Salí corriendo lo más rápido posible para que Kris no me alcanzara, no había visto la hora para saber si realmente llegaba tarde o muy temprano, camine hacia el colegio y a la primera persona que vi fue a Janna con sus amigas.

Ari: hola hermosa-beso-

Karen: dejen los espectáculos por favor

Ari: hola chicas y Karen.

Todas: hola arianne

Karen: hola –repugnante-

Janna: amor acompáñame al carro que se me quedo algo.

Ari: si vamos preciosa

Nos agarramos de la mano y nos fuimos para su carro, cuando le pregunte que se le había quedado, me dijo que no era en el carro sino en su casa, que si la acompañaba y como negarme a esos ojitos que me había puesto, así que arrancamos para su casa, sabía que realmente no se le había quedado nada, solo quería irse del colegio para pasar la mañana juntas, llegamos a su casa que no era cualquier casa era la CASA en mayúscula, tenía un patio bastante amplio que se dividía en dos secciones una donde estaba la piscina y la otra un jardín en el que se podía caminar y estar en paz, su casa era de 3 pisos, en el piso de abajo estaba una sala lo bastante amplia, la cocina, un baño y el cuarto del servicio con su baño, en la parte de arriba una sala más pequeña, y tres cuartos cada uno con su baño y por último el piso de arriba era un tipo apartamento, donde viven Janna junto con su hermana, tenía una sala pequeña junto a una mini cocina, dos cuartos cada uno con su baño y un amplio balcón, que desde el cuarto de Janna se podía admirar la vista de la piscina y las montañas que se veían a lo lejos, aparte de eso también tiene entrada independiente por unas escaleras.

Janna: amor siéntate en la cama mientras yo busco unas películas para ver ¿si quieres?

Ari: si hermosa dale.

Janna: mientras salgo puedes buscar en mi closet una ropa más cómoda para que no andes con el uniforme

Me dio un beso y salió del cuarto, me fui directo a su closet que era casi del tamaño de mi cuarto, busque una ropa cómoda y mientras esperaba que ella llegara con la película me cambie, empecé acomodar la configuración del televisor para ver la película, cuando ella entro venía con las manos repletas, en una traía una tasa donde tenía las cotufas y en la otra varias películas, la ayude, al final escogimos una película que ella quería ver, nos tiramos a la cama mientras empezaba la película.

Janna: ¿amor?

Ari: dime hermosa

Janna: sabes que te voy a extrañar cuando salgamos del colegio –puso cara triste-

Ari: no pensemos en eso igual quedan dos semanas aparte ninguna se va a mudar de la ciudad, así que podemos seguir viéndonos todos los días ¿está bien preciosa?

Janna: te quiero amor

Ari: igual yo preciosa

Me abrazó duro y nos quedamos viendo la película, antes de que llegara el final ya se había quedado dormida, como pude le coloque la cobija para que no tuviera frio ya que el aire estaba fuerte, poco después de que termino la película yo también caí rendida. Nos despertamos porque la hermana de Janna había llegado y como siempre lo primero que hacía era entrar al cuarto de ella a molestarla.

Vanesa: vale chicas que perezosas son levántense -saltando en la cama-

Janna: -despertando- Vanesa vete a tu cuarto déjanos dormir

Vanesa: -riendo- no es mi culpa que ayer hayas llegado a la una de la mañana así que párate.

Janna: -se levantó de golpe tratando de callar a su hermana antes que hablara de más- no digas mentiras que yo no llegue a esa hora.

Vanesa: bueno no importa, hola arianne no te había visto, desde hace un tiempo ¿cómo estás?

Ari: muy bien Vanesa ¿y tú?

Vanesa: excelente como siempre, mira hermanita te levantaba porque mamá y papá nos van a llevar a un almuerzo así que vístete, tú no contestabas tu teléfono como siempre.

Ari: creí que solo a mí no me contestaba

Vanesa: a nadie le contesta eso es milagro que lo haga.

Janna: ya no se metan conmigo, Vanesa si me permites me voy a cambiar así que nos vemos en unos minutos.

Vanesa: dale cuídate Arianne

Vanesa salió del cuarto y rápidamente Janna se fue a cambiar para que yo no le preguntara nada sobre el comentario que había hecho Vanesa, mientras me coloque el uniforme para irme también, la hermana de Janna tiene algo muy particular y que se diferencia de ella,  no es tan creída en cambio es súper sencilla será porque tiene 23 aunque le gusta mucho una fiesta y divertirse con sus amigas, es muy tierna, pero más que nada le gusta siempre ayudar como puede a quien lo necesita, en cuanto a su físico, tiene los ojos verdes pero un poco más suaves que los de Janna, una sonrisa que acompañada de sus labios son la pareja perfecta, es rubia también y su cuerpo tiene mucho que envidiarle desde su piel bronceada hasta sus curvas.

Janna se vistió completamente elegante para el almuerzo que tenían con sus padres, el cual lo más seguro es que fuera con alguno de los ejecutivos con los que siempre salían, nos despedimos y le pidió a Vanesa que me llevara a mi casa ya que según janna  todavía le faltaba mucho para estar lista, al llegar frente al edificio Vanesa me hablo.

Vanesa: no creas lo que te dije de Janna, no llego a la 1 realmente fue más tarde, cuida a mi hermana siento que anda en malos pasos y no me quiere decir nada.-dijo eso ultimo con cara de preocupación- por eso te escribí anoche para ver si sabias algo

Ari: gracias Vanesa por confiar en mí, si veo algo raro yo te escribo, disculpa lo de anoche tenía mucho sueño, igual tampoco era mucho lo que iba decirte, lo único que sabía es que estaba en el cine con las muchachas.

Vanessa: eso mismo nos dijo a nosotros, pero hable con ellas y me dijeron que de ahí se había ido con Karen, pero más nada.

Ari: ¿con Karen? será por eso que no me comento nada, sabes que no le caigo mucho que digamos.

Vanessa: pero siéndote sincera, siempre me has caído mejor tu que ella, esa chica no me da buena espina.

Ari: somos dos entonces, bueno me voy, cuídate vane cualquier cosa me avisas por favor.

Vanessa: tú también guapa.

Nos despedimos y subí directo al apartamento, mientras  iba en el ascensor saque mi celular del maletín que en toda la mañana no lo había revisado, pero creo que hubiera sido mucho mejor no haberlo visto, porque tenía como 20 llamadas perdidas de Queena y unas 5 de mi mama, mientras entraba al apartamento decidí llamar a mi mama.

Ari: hola mami bendición

Mama: hija ¿Cómo estás? Dios te bendiga.

Ari: bien mami ¿y tú? ¿Cómo van las cosas en el trabajo?

Mama: pues bien hija trabajando duro como siempre, ¿para cuándo sales de clases?

Ari: la otra semana mamá –iba entrando a mi cuarto cuando veo a Queena sentada en mi cama viendo televisión-

Queena: ¿es tu mama? -asentí- pásamela

-sabía que no era buena idea pero si no se lo pasaba igual ella la llamaba-

Ari: mami aquí esta Queena conmigo quiere saludarte ¿te la paso?

Mama: claro hija para mi es siempre un placer hablar con ella.

Le di el teléfono a Queena con mala gana pues tenía miedo que le dijera que no había ido a clases hoy, no quería escuchar que hablaban así que me concentre en cambiarme el uniforme y ponerme una ropa sencilla para estar en la casa, porque no tenía planes para salir, cuando ya estaba completamente lista Queena me paso el teléfono.

Ari: alo mama

Mama: hija porque no me habías dicho que tenías planes con Queena para ir a Italia en vacaciones.

Ari: -mire a Queena con ganas de matarla y ella solo sabía reírse- ah sí mama no te había dicho nada porque no habíamos fijado fecha ni nada, aparte siempre pensé que eran mentiras de ella por eso no te dije.

Mama: bueno hija a mí me dijo que si es verdad y que te diera permiso, yo le dije que sí, tú sabes que confió demasiado en ella y sé que te va a cuidar, también es una gran oportunidad para ti que conozcas Italia, recuerdo muy bien que desde chiquita has estado enamorada por ir allá.

Ari: si mami lo sé pero tú sabes que la plata.-interrumpida-

Mama: hija ahí veremos, pero como sea te la consigo, igual Queena dijo que no tenías que pagar nada

Ari: lo sé mama pero tú sabes que eso a mí no me gusta.

Mama: bueno hija yo te voy a conseguir algo, por los momentos te dejo porque tengo que servirle el almuerzo a los jefes, te amo hija dios te bendiga, cuídate.

Ari: bendición mami te amo -colgué tirando el celular a la cama y seguido de el yo-

Queena: ¿porque nunca me dijiste que tu mayor deseo era ir a Italia?

Ari: -tapándome la cara con una almohada- porque era solo un sueño.

Queena: quítate la almohada

Ari: -quitándomela- tú sabes que yo no tengo esas posibilidades tan fáciles de ir a Italia y mucho menos tengo el dinero suficiente para ir.

Queena: princesa yo siempre te eh invitado a ir y tú nunca aceptas, creí que era porque no te gustaba o como me decías siempre para pasar esos días con tu mama, pero nunca creí que fuera por dinero, sabes bien que cuando te invito es porque no gastaras nada.

Ari: por eso mismo, no me gusta, yo quiero ir por mis propios medios no como arrimada.

Queena: Arianne Kaylee Quiroga Warner que te pasa no digas eso si sabes que te invito es porque quiero que me acompañes y que pasemos unas buenas vacaciones como lo hacemos aquí pero esta vez será en Italia.

Ari: hay Queena para que le tenías que decir a mi mama

-No quería que Queena hablara con mi mama porque sabía que la convencería de dejarme ir a Italia, mejor dicho mi mamá estaría tan contenta porque yo fuera a cumplir mi sueño, que me dejaría ir sin importar nada, pero nunca me ha gustado que los demás paguen las cosas por mí, cuando yo puedo hacerlo, pero ya en este caso no puedo, porque mi situación económica no me da para esos lujos-

Queena: porque cada vez que te digo a ti te me haces la loca o me evades por eso, ahora si nada te va a salvar, dale por favor di que si vas a ir conmigo y prometo ser menos caprichosa –haciendo pucheros-

Ari: -muerta de la risa-  eso si tengo que verlo que seas menos caprichosa haría mi vida mejor, pero está bien Queena vamos a ir, con la condición que si me antojo de algo lo pago yo ¿va?

Queena: lol se princess sogni

Ari: ¿qué dijiste?

Queena: que si princesa como tú digas

Queena se acostó a mi lado y al rato cuando se fastidio empezó hacerme cosquillas, estuvimos así hasta que me pude zafar de sus dedos y salí corriendo de mi cuarto hasta la sala donde estaban las muchachas sirviendo el almuerzo.

Ari: -riendo- y eso que compraron comida.

Kris: porque tú te fuiste y me dejaste con la pelea de Brenda armada, tampoco avisaste si ibas a llegar temprano para hacer el almuerzo.

Ari: que si acabo de llegar.

Brenda: dile a Queena que también hay para ella que venga.

Queena: ya voy déjenme robarle ropa a anne –gritando desde mi cuarto-

Todas nos colocamos a almorzar entre risas, chistes y cualquier payasada que se le ocurría a Brenda, esta vez la que repitió fue Kris junto con Queena, Brenda se retiró después de almuerzo, porque tenía que ir a estudiar, Kris hizo lo mismo pero esta tenía que ir trabajo.  Yo me fui a mi cuarto no entiendo por qué motivo me sentía cansada, Queena se puso a ver televisión mientras yo me quede dormida.

Cuando desperté Queena seguía a mi lado viendo televisión, me levante directo al baño, me cepille los dientes y decidí darme una ducha fresca que la verdad lo necesitaba. Cuando salí no vi a Queena sabía que no se había ido así que salí a buscarla, se encontraba en la cocina, me acerque para ver que hacía, cuando note era el dulce de leche que tanto me encanta, mi mama siempre tenía la costumbre de hacerlo desde que yo era pequeña, ella sonrió y me sirvió un poquito para que comiera, coloque un poco de música y probé del dulce que le había quedado realmente bueno ya veo que mi mama le había enseñado muy bien a Queena hacer el dulce.

Queena: ¿Cómo dormiste hermosa?

Ari: bien, no sé porque me sentía tan cansada

Queena: si me di cuenta caíste de una, así que decidí hacer el dulce que tanto nos gusta, también hable con mi papá para que nos cuadrara él viaja a Italia, ya todo está listo nos vamos a quedar un mes ¿está bien?

Ari: ¿un mes?-sorprendida-

Queena: si quiero que conozcas Italia a fondo y aparte mi mamá quiere que compartamos un buen tiempo con ella, ya tiene todo listo en la casa para cuando nosotras lleguemos.

Ari: bueno y ¿cuándo nos vamos?

Queena: quería irnos la semana que viene antes de terminar clases, pues lo único que nos queda de clases es nada realmente no son calificadas ya que el viernes entregamos todos los trabajos faltantes no sé tú me dices ¿si quieres? Incluso nos podemos ir el domingo después que tu mami venga

Ari: está bien, te digo que si por una sola cosa ya no quiero ir más a clases, este domingo nos vamos para Italia al fin la conoceré –más contenta que nunca-

Queena no me había dicho pero había pedido permiso para quedarse con nosotras también a las muchachas como siempre ella planea todo sin que yo me dé cuenta, estaba limpiando las cosas que habíamos ensuciado cuando sonó mi teléfono, queena me lo paso y conteste.

Ari: ¿diga?

Janna: sal un segundo estoy en el parque del edificio

Ari: ¿llevo algo?

Janna: si trae un plato y unos vasos

Ari: ¿Qué tienes planeado?

Janna: -riendo- baja y deja la curiosidad

Ari: voy, deja que busque las cosas –colgando- me asustaste –volteada-

Queena: ¿A dónde vas?

Ari: al parque que janna está esperándome ahí

Queena: ¿Qué quiere?

Ari: a su novia –riendo-

Queena: payasa ándate

Me fui muerta de la risa a mi cuarto, busque un mono porque estaba en short, las cosas que me pidió y baje, al llegar estaba ella sentada en una de las bancas con unas bolsas de comida, nos saludamos y nos colocamos a comer comida china, le conté los planes del viaje, al principio su cara se tornó un poco triste pero luego acepto que me fuera y más que nada disfrutara, sabía que un mes fuera iba hacer difícil pero no dejaríamos de comunicarnos, luego de esa conversación, empezamos hablar de nuestro futuro y las demás cosas mientras estábamos abrazadas por el frio que estaba pegando, cuando ya se estaba haciendo muy tarde me acompaño hasta la entrada, nos despedimos y se montó en su carro, yo subí al apartamento, cuando llegue las chicas estaban comiendo las salude y me senté al lado de ellas hablar un rato, de ahí nos quedamos en la sala escuchando música y hablando de cualquier cosa hasta que nos fuimos a dormir, queena andaba algo repelente pero luego se calmó cuando hablamos del viaje hasta que nos quedamos dormida.

Esa semana paso de lo más normal entre una que otra salida con Janna, molestando con las muchachas en el apartamento, asistiendo a clases y presentando las últimas pruebas ya todo estaba listo, mi maleta de viaje, los pasajes, y los permisos que necesitábamos, había llegado el sábado por fin podía ver a mi madre estaba muy contenta, siempre me hace mucha falta no tenerla cerca así fuera para que me peleara, me pare algo temprano hice el desayuno de las muchachas y como siempre las levante colocando música.

Kris: anne ya sabemos que estas contenta porque viene tu mami pero bájale a la música que nosotras queremos dormir.

Ari: ¿nosotras quiénes?

Kris: Brenda y yo

Ari: ¿qué? no me digas que estas durmiendo con Brenda

Kris: estás loca –reaccionando- digo porque ella está en su cuarto y yo en el mío.

Ari: boba si Brenda se levantó temprano y se fue, por eso creí que estabas con alguien.

Kris: -riendo- no sabía, pero ya que me levantaste dame comida tengo hambre.

Le serví y mientras ella desayunaba me fui al balcón a admirar un rato la vista, me encantaba estar ahí y mucho más sentarme en la hamaca a despegarme un rato de todo mi alrededor, no sé cuánto tiempo estuve hipnotizada en la vista, que incluso me quede dormida, desperté en el momento que una mano un tanto áspera y suave me acaricio la cara, luego el cabello, sabía que la única persona que hacia eso para luego darme un beso en la frente era mi mamá, al abrir los ojos ahí estaba ella como siempre sonriéndome, lo primero que hice fue tirármele en los brazos y caerle a besos de verdad la extrañaba, ella me abrazo fuerte y se sentó a mi lado, nos pusimos hablar de todo un poco, le conté todo lo que había hecho esta semana, de lo contenta que estaba por irme a Italia, y muchas cosas más, ella lo único que hacía era sonreír  escuchando con atención cada cosa que le decía.

Siempre que venía mi mamá, las chicas compraban comida para que por nada del mundo se le ocurriera cocinar, así aunque sea tuviera un día de descanso, lo único que la dejábamos hacer, solo porque si le decíamos que no salíamos peleando y aun así ella nos ganaba, por lo que nos tocó acostumbrarnos, y era que siempre hacia un postre cada vez que venía, Queena también venía a quedarse, ya que  mañana partiríamos al aeropuerto después que mi mama se fuera a trabajar, pasamos toda la noche viendo películas y después hablando de todo un poco, las chicas le pedían consejos a mi mama, así duramos hasta que nos cansamos todas y nos fuimos a dormir. A la mañana siguiente mi mamá se despidió de todas y nos dejó el desayuno hecho, me dio una plata, un gran abrazo, la bendición y se fue deseándome suerte en el viaje.

Queena y yo ya estábamos completamente listas y montadas en el avión que nos llevaba a Italia, en todo el camino Queena me fue dando un poco de clases de italiano por si me perdía tenia aunque sea la mínima técnica de hablarlo, también intento enseñarme a entender el idioma pero como  ella misma dice a ratos me tapo demasiado y no entiendo nada. Al llegar a Italia sentía como si me fuera a morir de la alegría y Queena lo había notado ya que apenas llegamos le brinque encima, agradeciendo por haberme traído.

Alquilo un carro y nos fuimos para un hotel ya que estábamos en roma, pero la casa de los padres de Queena está en Nápoles, mientras ella hacia todo lo del registro yo me puse a dar vueltas para admirar el hotel y toda la gente que había a mi alrededor, algunos hablaban inglés, otros francés incluso creo que escuche un grupo hablando en español, cuando ya iba de regreso para la recepción, porque me había distraído caminando bastante, estaba buscando el camino cuando me tropecé con alguien por estar mirando hacia atrás en vez de por dónde caminaba.

Ari: scuse

–no sé porque pero la palabra que más me había enseñado queena era la de disculparme creo que ella es bruja y sabía que algo así me pasaría, o mejor dicho sabe que soy muy torpe-

Chica: Non tranquilla fortunatamente non caduto (tranquila afortunadamente no nos caímos) -dijo aquella chica mientras se acomodaba la ropa y recogía su bolso que se le había caído-

Yo me quede ahí sin saber que responder, por dos motivos no saber el idioma y que me había perdido en los ojos más hermosos que haya  visto, eran de color café rallados de verde, nunca había visto unos así eran realmente impactantes pero más que nada esa mirada tan tierna hacían el complemento perfecto, solo que en este caso no solo irradiaba ternura sino también un toque de preocupación, en ese momento me arrepentí de solo haber aprendido a disculparme, a saludar, y como pedir las cosas para cuando este en un restaurante del resto queena se había obstinado en el avión porque yo no le paraba a lo que me decía, pobre la entiendo soy borde a veces.

Chica: ¿Questi vi ha colpiti da qualche parte? -cara de preocupación-

Por su cara creo que me ha preguntado que me pasa pero yo no sabía que hacer o como responderle, estaba aún ahí sin reaccionar, sus ojos me tenían paralizada, si no es porque queena me jalo del brazo sin darse cuenta que aquella chica me estaba hablando, yo seguía tan ida por los ojos de ella que no me di cuenta en que momento habíamos pasado de la recepción y ya estábamos en el cuarto, incluso queena se estaba desvistiendo para darse un baño.

Ari: ¿Dónde estamos?-saliendo del trance y mirando a su alrededor-

Queena: en la habitación princesa ¿Qué tienes?

Ari: nada creo que la emoción me afecto un poco

Queena: ya veo –pausando- por cierto ¿cuál chica? ¿De quién hablabas? Desde hace rato te estaba hablando y tú solo decías, que una chica, su mirada y sus ojos.

Ari: no nada, ninguna chica olvídalo princesa estoy loca, ¿qué me decías princesa? –Distraída-

Queena: que estaremos aquí una semana para que conozcas roma, porque mi mama esta en Milán haciendo unas cosas, y que me des tu teléfono

Ari: está bien amor, lo que tú digas princesa, el celular búscalo en mi cartera

Queena: bueno ahorita lo busco, me daré un baño y después tú te das uno para salir a dar unas vueltas para comprar una línea y activar la mía. -entrando al baño- ah por cierto también tenemos que practicar más tu italiano porque uno nunca sabe -cerrando la puerta-

Ari: si princesa por favor me serviría mucho –gritando-

Yo me tire a la cama a pensar en aquellos hermosos ojos café rallados con verde que me habían encantado tanto, me reprochaba una y otra vez no haberme propuesto aprende hablar italiano antes o aunque sea a verme propuesto  prestar un poco más de atención cada vez que queena me quería enseñar y así haberle respondido más que un simple “disculpa”...

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Aquí está el siguiente capítulo, lo iba a subir este lunes pero estuve muy ocupada, aparte que recibí una mala noticia respecto a mis clases, pero bueno, la ventaja es que ahora me da más tiempo para escribir un poco más, espero que les guste cualquier cosa me pueden decir, el próximo lo subo este lunes.

Besos y abrazos desde Venezuela xD