El moro peluquero (4)
El peluquero me folla después de haberlo hecho con sus tres amigos, pero yo lo disfruto de lo lindo.
Después de aquella tremenda follada de trasero y boca por los tres tipos que se habían aprovechado de mi situación engritellado por parte de mi peluquero Ibrahima, al que recompensaron económicamente, me relaje un rato esperando a que se dignara a aparecer por allí me desatará y me diera explicaciones.
Mi respiración empezaba a tornar de nuevo a un pulso pausado, todo mi cuerpo empezaba a recomponerse del esfuerzo y tensión, las muñecas y tobillos los sentía entumecidos por los grilletes y el cuello dolorido. Habían pasado unos minutos cuando vi como la puerta se abría y la luz del exterior penetraba a la trastienda, Ibrahima se acercó a mí, se puso delante de mí acaricio mi cabeza con una de sus manos y me preguntó...
qui tal lo has pasado con mis amigos?
eres un cabron Ibrahima, me has vendido tío, sueltame ahora mismo.
ehyyyy.....ehyyyyy....tu tranquilo....ires mi putita, y tu tinir que hacer tobo bien para mi.
yo no soy tu putita, ni soy una zorra a quien vender sexualmente a tus amigos.
tu nirvioso.....siguró que tú mucho bien con tres amigos. Tu pasarlo caliente virdad?
desatame tío, quiero largarme.
tu isperar....primero yo follar a ti. No quiero irme caliente mi casa.
ni se te ocurra.
ti va a gustar qui te folle.
Ibrahima agarró su pollón a través del pantalón, se lo masajeó y balanceo delante de mí cara, yo intenté no mirarlo pero mi morbo me traicionó y mí vista se fue directa a su paquete, la polla de Ibrahima estaba completamente erecta, la recordaba de su última follada y como me hizo disfrutar. De pronto se bajó los pantalones hasta los tobillos, su polla salió disparada y un hilo de precum salto a mí cara, moví mi cabeza que tenía todavía la cara impregnada con los restos de semen de los tres tipos anteriores....
siguró tu no quirer chupar mi pija.
déjame cabron.
si qui te gusta mucho.....si que tu quirer comerme polla ya.
no....yo no quiero tu polla.
Ibrahima me arreo una bofetada moderada, mi mejilla se calentó, y después me dio otra en la otra mejilla, sentí el calor de sus golpes en mi cara, intente escupirle , pero falle.
tu tenir que hacer lo que yo te diga a ti, si yo quirer que mi comas polla tu comer.
eres un cerdo, miserable, suéltame.
si yo soltar, piro dispues follar yo.
Ibrahima trajo un paquete de toallitas húmedas, note como se posicionaba detras de mi, y después como con una de esas toallitas empezó a limpiar mi trasero y mis piernas, sus manos restregaban con presión mi cuerpo , arrastrando los restos de semen que habían dejado sus amigos en mi, lo hacía con delicadeza , tirando de varias toallitas conforme se ensuciaban, notaba el frescor de ellas y tambien una de sus manos acariciando las partes que iba limpiando con suavidad, me extremecia sentir aquella situacion, me sentía como un bebé que su madre lo limpiaba con cariño. Ibrahima se colocó delante de mí, saco nuevas toallitas y me limpio el pelo con ellas y después la cara, su mano escurrió los dedos hasta mis labios y los acaricio con suavidad, pasando sus llenas por ellos, yo estuve apunto de comérselos, pero no quería que notará que me estaba excitando.
Mi morbo era enorme, sentir a Ibrahima limpiando mi cuerpo con cariño y suavidad, acariciándome como nunca, me estaba excitando muchísimo y Ibrahima lo sabía. Puso su polla dura sobre mis labios, yo intenté evitarla de primeras, pero Ibrahima insistió, volví a rechazarla y una bofetada hizo temblar mi cara, una lágrima callo por mi mejilla, abrí mi boca saque mi lengua y relami el contorno de su prepucio, Ibrahima se extremecio de placer y con sus manos agarró mi cabeza y acaricio mi pelo, yo empecé a comerle la polla y el movía su pelvis metiendo y sacando su polla de mi boca, los dos empezamos a movernos de forma que su penetración era mucho más completa, mis labios succionaban todo su tronco, el la sacaba y dejaba su prepucio en mis labios para que yo lo chupara, después volvía a meterla toda , y así estuvimos unos minutos en donde vi vibrar a Ibrahima, suspirar y retorcerse de placer gimiendo como loco......ummmmmm....ummmmmm....ohhhhhhhh......qui rico la chupas.......ummmmm.....siguir, siguir, mi gustas mucho.......
Después de un rato Ibrahima soltó mi cuello de la guillotina, descanse un montón y mi boca pudo trabajar mucho mejor mi felación, el puso sus manos en mi cuello y note como lo masajeaba con suaves caricias que me proporcionaban un gran placer y sobre todo una relajación tremenda.
Después Ibrahima se colocó detrás de mi, sentí como se agachaba, como metía su cara entre mis nalgas, las separaba con sus manos, y después de escupir sobre mi ano varias veces, introdujo su lengua en mi culo. Mi ano empezó a dilatarse y vibrar con cada lameton, y mis suspiros y jadeos empezaron a salir de mi boca.......ummmmm.....ummmm.....ohhhhhh.....ummmmm.....ahhhhhh....no pares tío , sigue, sigue.......ummmmmm. Ibrahima palmeaba mis nalgas y las estrujaba mientras su boca y lengua lamían y mordisqueaban mi culito, yo sentía como mi ano se expandía, empecé a notar los dedos de Ibrahima acariciarlo, profundizar sus llenas dentro de él y después meterlos hasta dentro y empezar su follada.
Yo en aquel momento solo suspiraba, gemía e Ibrahima escupía y metía un dedo , luego dos y después unió todos sus dedos empujándolos todo lo que podían entrar dentro de mi, me hacía algo de daño , pero aquello duró poco porque el peluquero escupió sobre su mano, frotó su polla con ella y la dirigió metiéndola entre mis nalgas. El roce de su capullo húmedo contra mi ano me estremeció, un escalofrío recorrió mi columna y después un pequeño dolor placentero fue el preludio de una penetración de una profunda embestida. Su polla se clavó dentro de mi e Ibrahima empezó a culearme, a embestirme agarrado a mis hombros, notaba sus pelotas golpear mi culo y como el cogía impulso para volver a darme por detrás con fuerza, lo podía oír jadear, como suspiraba, como sus manos se deslizaban por mi espalda y me agarraba de las caderas y seguía propinándome embestidas secas y profundas que me hacían sentir un placer lujurioso.
Yo le pedia más y más y el se esforzaba por dármelo, me daba con más rapidez y con más contundencia, note como su pecho se deslizaba por mi espalda con su polla dentro, agarró los grilletes de mis brazos y los abrió, sentí una gran liberación , me frote las muñecas y mis brazos se posicionaron en otra posición con la que podía incorporar mi tronco y arquear mi culito para sentir mejor la penetración de Ibrahima.
Mi trasero lo movía en círculos, mientras el peluquero metía y sacaba su pollón de dentro de mi , los dos gemiamos, note como entonces me desataban los grilletes de los tobillos y estaba libre por completo, podía haber salido corriendo, pero ni mucho menos quería dejar de sentir los pollazos del moro dentro de mi. El me agarró me dio la vuelta y me acostó sobre la tabla , tiro de mis piernas y volvió a clavarmela, ahora su pecho y el mío estaban casi juntos y nuestras miradas se clavaban la del uno con el otro. Ibrahima suspiraba y jadeaba agarrado a mis piernas encorvadas, su polla seguía follandome con contundencia, ahhhhhhhh.....ummmmmm......ohhhhhhhh...ummmmmmm....qui rico culo.....ummmmmm....ohhhhh. yo le decía que siguiera dándome fuerte, que no parará, que me gustaba mucho, sus manos se agarraron a mis pechos, estrujandolos, empezó a pellizcar y estirar de mis pezones tiernos y duros en ese momento , me retorcia de dolor y grité.....ahhhhhh....ahhhhhh...pero al moro lo excitaba verme quejándome y me culeaba con más fuerza, su dedos tiraban de ellos hasta hacerlos el doble de grandes, sentí como una de sus manos se agarró a mis quijadas y las apretaba con fuerza, la otra seguía estrujando mi pezón, mientras su bombeo era incesante, su pollón salía del todo y se volvía a meter sin resistencia alguna.
Después de un rato Ibrahima me levanto de allí, me llevo junto a una pared y me hizo poner los brazos en alto, después abrió mis piernas con uno de sus pies ,
presionó mi espalda de forma que mi culo quedó inmejorable para taladrarlo , metió su mano entre mis nalgas, metió dos o tres dedos y empezó a follarlo , para después sacarlos y meterme la polla del tiron, se agarró a mis hombros y empezó a darme caña, sentía como su falo se metía y salía de mi culo con rapidez , como golpeaba mi próstata y como cada empujón me estampaba más contra la pared, sus manos me rodearon y empezó a culearme con rapidez , su boca se puso en mi cuello, empezó a morderme , a comerme las orejas, sus dientes presionaban mi carné hasta hacerme daño, tenía que gritar para que el dejara de hacerlo, se agarró a mis pechos y entonces sus dedos presionaron mis pezones, mientras su boca mordía mis hombros, Ibrahima estaba caliente, super excitado, solo hacia que gemir y suspirar cuando dejaba de morder, sus manos no dejaban de pellizcar cualquier zona , mi polla estaba apunto de estallar, le dije que me follara fuerte , y así lo hizo y no tardó más de unos segundos en comprobar cómo chillaba y gemía de placer mientras mis huevos descargaban leche ardiendo de una forma que nunca había tenido tal éxtasis. Casi caigo desplomado de placer, pero Ibrahima me sujetaba y follaba y creo que al sentirme gemir y gozar le provocó también una excitación que supuso su explosión dentro de mi, se agarró con fuerza, bombeo rápido, gimió, suspiro y su leche se esparció dentro de mi culo en tremendos trayazos de su polla , Ibrahima convulsionaba, se retorcía agarrado a mi , sudados, gozosos y con ganas de que aquel placer nunca terminara.
Después de unos minutos relajandonos, su polla se desincho dentro de mi poco a poco, la sentí escurrirse fuera de mi culo y después un reguero de esperma salir de mi culito. Ibrahima me soltó , se sentó en un sillón y me llamo con uno de sus dedos para que me sentara a su lado.....
ti gustar mucho a mi, mi gusta follarte mucho a mi. Tu sier mio y quirer tu culito siempre.
Ibrahima, tú me gustas, me gusta como me follas, quiero que me lo hagas siempre, pero no sé si yo soy tuyo.
tu tienes qui ser mío, dijarte hacer lo qui yo quiera.
bueno, pero si me vendes tienes que avisarme. Vale? No quiero que me des a otros sin saberlo yo.
viale...ti lo diré.
Ibrahima acaricio mi mejilla, después acercó mi cabeza a su cuerpo, Nos quedamos callados, su pecho estaba junto a mi boca, mi lengua empezó a jugar con su pezón, el me aparto, pero volví a insistir, entonces se dejó, se puso los brazos por detrás del cuello y aproveché para sentarme sobre sus piernas, note su polla en mis nalgas flácida , Ibrahima había cerrado los ojos, mi boca y mi mano empezó a masajear y chupar sus pechos, sus pezones, su rabo empezó a tomar consistencia de nuevo, empecé a mover mi culito y se la pajeaba entre mis nalgas, mi boca succionaba sus pezones e Ibrahima empezo a temblar, a vibrar a suspirar, cogí su polla con mi mano y la dirigí a mi culo, me la metí de nuevo y empecé a moverme dándole placer, Ibrahima se dejaba, mi boca busco su cuello y mis labios empezaron a darle chupetones, note como se estremecia, y como suspiraba tranquilo , relajado , su polla entraba y salía despacio de mi culo, ahora acariciaba su cuerpo, es la primera vez que me dejaba tocarlo, estaba abducido, inmóvil, pero su erección y los vellos erizados delataban su placer. Empecé a mover mi trasero más contundentemente , saltaba sobre su polla y está entraba y salía deprisa, mi boca entonces busco sus labios carnosos, lo agarre por los pelos y lo bese metiendo mi lengua en su boca, se apartó deprisa, pero le estire de su pelo rizado y lo atraje de nuevo a mí boca, lo volví a besar y este ahora se dejó, mi lengua chocó con la suya y mis labios succionaban los suyos, lo besaba húmedamente y empecé a galopar más deprisa, sentía una excitación muy grande el empezó a suspirar me agarró por las caderas y su follada se hizo más rápida, su boca empezó a reaccionar y empezó a comerme la mía, me daba su saliva, me comía los labios, se había vuelto loco lamiendome cara , cuello y tragándose mi lengua, empezó a jadear a suspirar y se volvió a desbordar sin control dentro de mi. No paraba de deslecharse en mi culo , casi que gritaba y su boca no dejaba de besarme y chuparme por todos los lados. Ibrahima era mi amo, pero ahora yo también lo controlaba, había hecho que por fin su masculinidad, su hombría y esa fama de macho que quería mostrarme se fuera a pique, pero aún así no pensaba hacerselo creer, quería que Ibrahima fuera mi macho, mi amo, y que me vendiera a quien quisiera siempre y cuando estuviera de acuerdo
Y hasta aquí este nuevo capítulo con mi peluquero. Espero que lo disfrutéis leyendo, calientes, con el rabo en la mano y pajeandoos, y que tengáis una buena corrida. Os espero y os leo por aquí o por mi Instagram vlcpedro22, siempre contesto. Bueno y nada muchas gracias por leerme y pasar felices fiestas amigos. 🎄🎄🥂🥂🎅🎅😘😘♥️♥️🔥🔥🔥🔥. Y si lee algún valenciano de España , por favor se ponga en contacto conmigo. 😜😜.