El Mensaje II

El mensaje esperado de ella......

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Entramos en la ducha, su comportamiento cambio sus movimientos eran más sensuales, más cariñosa..... El agua templada empezó a caer en nuestros cuerpos, caricias y más complicidad surgieron en la ducha, cada mirada, cada movimiento era devuelto con más sensualidad, empezó a enjabonarme la espalda bajando por mis nalgas, mis entrepiernas acariciándome sensualmente, bajando por mis piernas cuando me dio la vuelta, mi miembro ya estaba empalmado de nuevo, soltó una risa empezando a enjabonarme jugando con mis huevos, para luego seguir con mi miembro, primero la punta, bajando por mi tronco acariciándome mi pelvis, me masturbaba, hasta que cogio la ducha y empezó ha quitarme el jabón para jugar con su boca deleitándose con mis huevos, primero uno, luego el otro, acariciando mi miembro, hasta que se la introdujo toda en la boca y me agarro las nalgas para empezar a follarme su boca uffff...... Bufidos y gemidos solo salían de mi boca, la agarre de la cabeza echándola hacia atrás porque de continuar así con esa presión con sus labios y esa velocidad iba hacer que me fuera ya mismo, el fin de semana iba a ser muy largo, había que contener las ganas y repartirlas en el fin de semana.....

La levante empezando a enjabonarla, su espalda, bajando a sus hermosas nalgas dándole unas buenas cachetadas, como gusta ese chasquido al golpear contra ellas y el sentir por su boca el hay.....mmmm. Mis manos empezaron a meterse entre medio de sus carnosas nalgas limpiando bien el esfinge de su ano por el cual salían restos de mi esperma, llegando a la vez a su mojada rajita por su flujo, estaba bien cachonda, todas las fantasías relatadas en los mensajes de aquella página se iban hacer realidad, bendita la hora que mi pareja se fue antes de vacaciones al igual que ella mando primero al pueblo a su marido llegando ella unos días más tarde.

Baje mis manos por sus muslos hasta llegar a sus pies, dándole la vuelta y subiendo por todo su cuerpo, estando a la altura de ella empecé jugando con su rajita mordisqueándole a la vez sus pezones tiesos y duros, jugando con mi lengua, masturbándola con mis dedos, en ese momento sentí que su cuerpo se tensaba de nuevo, se ponía de puntillas en la ducha cogio mi cabeza llevando sus labios contra los míos besándonos con la lujuria más depravada que había vivido hasta ese día, su pierna se enroscó en mi cintura su boca cada vez se apretaba a la mía nuestras lenguas iban a una velocidad y fuerza la una contra la otra, sus gemidos eran cada vez más fuertes, hasta que no se contuvo más, empezó arañarme la espalda, dejó de besarme echando su cabeza hacia atrás, empezando a convulsionar y gemir como nunca había escuchado a ninguna mujer antes, fue tan grande su orgasmo que al mismo tiempo se orino, quedando exhausta, abrió los ojos clavándolos en los míos al mismo tiempo que suspiraba y por su boca salía estas palabras... Ahora sabrás lo que es bueno!!

Nos secamos y fuimos jugando hasta llegar al comedor, me sentó en el arnés atándome las muñecas en el mismo, cogio el antifaz y me lo puso, bajo por todo mi cuerpo besándome y mordisqueando cada rincón de mi... Ahora estaba a su merced por mucho que quisiera no podía hacer ni ver nada.

Escuchaba sus movimientos por el comedor hasta que note que algo me ponía en la boca, al abrirla pude saber que era una fresa bañada en champagne, jugó con ella en mi boca dándome permiso para morderla..... Sentí un frío en mi pecho que bajaba por mi cuerpo hasta llegar a mi pelvis llenando mi miembro y mis huevos.... Mmmm que buena está la nata así – dijo Ella. Jugo conmigo con todos los ingredientes que tenía en la mesa, lamiendo y mordisqueando mi cuerpo a cada centímetro, yo mientras me retorcía y gemía de placer, que placentero es sentir y no ver, la mente te lleva a momentos de placer insospechados. Me dio a bebe una copa de champagne, recorriendo sus pechos por todo mi cuerpo hasta llevarlos a mi boca para mordisquearlos y sentir el placer en su voz, bajo su boca a la mía para besarnos.

Mi cuerpo estaba deseado de sentir todo ese placer, cuando de golpe un frío líquido cayó encima mío restregándome ella con sus manos por todo mi cuerpo, era el aceite que había en la mesa, se metió todo mi miembro en la boca empezando una mamada como la que minutos antes me había echo en la ducha, la cual en ese instante no tenía el control..... El control lo tenía ella en todo momento, bajo a lamerme mis huevos y jugar con ellos hasta que note su lengua en mi esfinge al mismo tiempo que me masturbaba, era una sensación nueva para mí...

Volvió a subir con su lengua lamiendo mis huevos y el tronco de mi miembro hasta introducírselo lo más adentro que podía, teniendo arcadas hasta que consiguió metérselo hasta lo más profundo tocando mis huevos con sus labios, se puso de pie, encima mío ha horcajadas jugando con su rajita por encima de mi miembro con su profesional movimiento de cadera, su flujo caía por encima de mi miembro y mi pelvis, mi miembro estaba duro como una piedra a cada movimiento el roce era más fuerte, llegándose a introducir mi capullo en su rajita que a cada movimiento se dilataba más y más, sus nalgas se estaban llenando del aceite que hacía varios minutos me había echado por todo mi cuerpo, estaba concentrado en todos sus movimientos, sus roces, sus caricias, cuando se golpe se ensarto mi miembro hasta lo más profundo de su ser quedando encima mío y los dos colgados del arnés empezando un movimiento con el vaivén del mismo a la vez que empezaba un movimiento de cadera frotando su clitoris contra mi pelvis y apretando sus paredes vaginales contra mi miembro, nuestros cuerpos empezaban a sudar, de golpe puso los pies en el suelo empezando a subir y bajar con sus piernas follandome ella a mí por completo, estaba maniatado y lo único que podía mover eran mis caderas haciendo un poco de presión hacia arriba.... Me quito el antifaz su cara era un poema de pura pasión y lujuria, me desató las muñecas pudiendo coger sus pechos y pellizcar sus pezones, ya estaba siendo libre para poder devolverle el placer que tanto me había echo sentir, apretaba sus nalgas con fuerza atrayéndola hacia mi, nuestras pelvis chocaban con fuerza, sus caderas se movían como nunca había sentido ayudadas a patinar por el aceite, su cuerpo se volvía s tensar, sabía que iba a tener otro orgasmo porque cuando se tensaba sus pies se ponían de puntillas, le azote en las nalgas un par de veces, cogiéndole los pechos fuertemente y apretando sus pezones, pase un brazo por detrás de su nuca atrayéndola hacia mi para besarla y sentir sus gemidos en mi boca, su respiración se aceleraba cada vez más y más, su cuerpo no paraba de tensarse, nuestros cuerpos sudaban y llego el orgasmo arqueando su espalda hacia atrás y tensando todo su cuerpo......

Salió de encima mío pudiendo salir del arnés, la cogi por la cintura dándole la media vuelta y colgándola del arnés pero esta vez boca abajo dejando su encanto trasero a mi merced, quedaba totalmente al aire, las piernas bien abiertas, cogi el bol de aceite y se lo dejé caer por encima de su trasero llenándolo de aceite y esparciéndolo por todo su culo y mi miembro, se la ensarte de un golpe estaba tan cachonda que no le costó ser penetrado, me quedé inmóvil besando y mordisqueando la espalda mientras con mis manos de aceite le acariciaba la barriga y los pechos que al estar boca abajo parecían más grandes.

Puse mis manos en su cintura, haciendo que su cuerpo fuera hacia adelante y hacia atrás al estar colgada del arnés, la postura era muy cómoda ya que quedaba completamente a la altura de mi cintura pudiendo penetrarla sin ningún problema, los movimientos eran fuertes y rápidos, esa posición me encantaba veía todo su esplendor y su espalda, me encanta ver una mujer de espaldas y las curvas de sus nalgas......

Deje de moverla dejándola quieta contra mi pelvis, pasando mi brazo por debajo llegando a su clitoris y rozandolo con mis dedos, al mismo tiempo que mis embestidas eran más fuertes contra su culo, gemía y gritaba, de su interior no dejaban de salir flujos, mi cuerpo empezaba a tensarse junto con mi miembro, cerró sus piernas apretando y cerrando su esfinge presionando mi miembro, le hice saber que me iba a correr, sus palabras fueron ya lo estoy notando, lléname mi culo que tanto deseas de leche y no pares que yo también me voy a correr.

No estuve ni dos minutos más cuando mi orgasmo llego al momento que ella también se estaba corriendo, esta vez fue como en la ducha su gran corrida, empezó a orinarse al mismo tiempo que se corria, esta vez no deje de tocar su clitoris masajeandolo fuertemente, chillaba y gemía, no paraba de retorcerse,correrse una y otra vez, se meaba paraba, como no deje de frotarla en ningún momento volvía a mearse y chillándome no pares de frotarme, como me estoy corriendo!!!!

Quedamos exhaustos yo apoyado encima de ella y ella colgada en el arnés, cuando nos recompusimos nos levantamos, nos besamos y nos acabamos el champagne, acostándonos en el sofá para descansar un poco, quedándonos dormidos.....

Continuará........