El mejor polvo de mi vida hasta hace poco tiempo

Una noche de caza como cualquier otra, las nenas y yo a ponernos las botas... no imaginaba que fueran a follarme de aquel modo tan placentero.

En este relato os voy a contar el mejor polvo de mi vida...

Como todas nuestras noches de fiesta, saliamos las tres zorras inseparables (Lore, Tere y yo)... nos encantaba ir de "caza" y siempre haciamos apuestas, buscabamos un objetivo y decidiamos ir las tres a por él para ver quien se lo llevaba y así continuamente. Pues bien eso era lo que haciamos todas nuestras noches, éramos demasiado ninfómanas para ser reales...

Siempre ibamos arregladitas a casa de Lore, allí nos maquillabamos todas de manera muy seductora y personalizada a cada una por las otras dos. Ese sábado fuí a casa de Lore como cualquier otro, allí estaban ellas dos esperandome, nos maquillamos y hablamos de los polvos de las noches anteriores.

-¿Qué tal con Alejandro tía? (le pregunté a Lorena)

-Pues tia, nos fuimos a dar una vuelta por la playita y paramos en un sitio y le hice una comida de campeonato, pero el cerdo de mierda después de correrse en mi boca me dijo que estaba cansado y se iba a dormir. (Lore)

-¡¡¡Será hijo de puta!!! (Tere y yo)

-¿Qué tal tu con el malagueño? (Lore a Tere)

-Pues de puta madre tía, tenía una polla increiblemente grande y me dejó bastante bien (Tere)

-¿y tu con el tio ese? (Lore a mí)

-Pues yo mejor no hablo, jajaja, nos pusimos en la escalera de un edificio a echar un polvo y nos pilló un matrimonio que entraba, así que nos dimos el piro rápidamente cuando nos llamaron la atención.(yo)

-jajajajajaja, tu siempre la lias tia, mira que te mola joder en sitios públicos (Lore)

-Dejala que disfrute coño (Tere)

Todas empezamos a reir y emprendimos nuestra nueva búsqueda, nos retocabamos en el espejo del ascensor y comentabamos locuras pasadas, y como siempre en el portal todas el grito en el aire y diciendo ¡Esta noche toca!.

Empezamos la ruta en el bar de siempre, cubatazos, chupitos con los camareros que ya nos tenian caladas y siempre brindando por ¡SIFO! entre risas y miraditas de la plantilla del bar (para los que no lo pilleis por si follamos). Nos poniamos a tono e ibamos a nuestros pubs de siempre, donde bailabamos a nuestra manera (según todos los tíos, donde follabamos con el aire) así era nuestro baile, contornearnos de manera sexual y calentar al personal. Siempre montabamos corros alrededor.

Esa noche empezó genial, me puse a bailar con Tere a nuestro modo y se me acercó un chico que nos interesaba bastante en esas noches, un chico gordito, feillo y con cara de atontado, ese tipo de tios (tipo M, también llamados tipo mierda) los pillabamos por interés, empecé muy simpática con él, le mentí en mi nombre, en mi edad y en todo, (para que no me volviese a buscar nunca claro). Me propuso ir a la barra y nos invitó a unas copas, a mí y a mis nenas, cuando empezaban a calentarse los chicos del tipo M pues yo realizaba mi estrategia descarada. El chico empezó a moverse cerca de mí, de manera patética por cierto, al notar tantisima grasa a mi lado, me acerqué a su oido rozando mis labios con la lengua y le dije ¿¡Tu para estar tan gordo no sudas tanto no!?. De esta manera me deshice de él, así era como me deshacía de todos los chicos del tipo M.

Fuimos a otro pub y vimos unos chicos alucinantes, les propusimos jugar al billar y allí estuvimos con ellos, fijamos un objetivo para Tere y al rato ya estaban en el baño dandose caña. Quedabamos Lore y yo,  divisamos la situación pero no vimos nada en claro, salimos a la calle que por allí por los bancos siempre habia algo interesante y en un momento vimos la luz llegar a nuestra mano. Estaban pegandole los porteros de los pubs a unos chicos que estaban como un puto queso, que poca vergüenza, vi al chico casi en el suelo y me dirigí hacia el portero con muy mala ostia, le aparté como pude y empecé a hablar con el chico.

-¿Estás bien? (yo)

-Si tia, gracias (Pablo creo que se llamaba)

-Joder, es que encima de que hay pocos tios buenos y que los destrocen... para eso los destrozo yo. (yo)

El chico se sonrojó y bajó su mirada, su colega estaba peor, con la boca partida y totalmente hecha polvo, sentado y agonizando. Vino una ambulancia y se llevó al amigo que estaba fatal, Lore y yo fuimos a buscar un taxi para el chico y nosotras que iriamos al hospital con ellos. Cuando vi al amigo que estaba mal, entrar en la ambulancia me di cuenta de que todavía estaba más bueno que Pablo y joder, me tenia que decidir, pero como de momento solo estaba Pablo... pues Pablo, que también estaba de muy buen ver.

Continué tonteando con él, cuando salió el otro chico de urgencias eran ya casi las siete de la mañana,los chicos nos propusieron ir a su apartamento y tomarnos unas copas allí. Fuimos hacia allí y no paraban de darnos las gracias, Lore estaba de tonteo con el otro chico y yo seguía con el tal Pablo, pero el otro chico y yo (a este le decían Lamas),  no parabamos de mirarnos de manera totalmente lasciva. Subimos al apartamento y nos pusimos a tomar unas copas entre risas con ellos, nos contaron que eran de Madrid, que habían venido a la costa a pasar las vacaciones, que eran militares del ejército de aire... (a mí los militares me ponen cardíaca). Lamas tenía novia en Madrid, la edad no me acuerdo de la de ninguno, la verdad es que no me interesaba tampoco.

Yo estaba sentada en el sofá encima de Pablo y Lore estaba sentada en una silla al lado de Lamas, fuí hacia el pasillo dirección al baño y Lamas me hizo una mirada de "quiero follarte" totalmente indiscutible, yo le miré igual y le rocé descaradamente. Al momento llegó otro amigo de ellos, preguntó que donde habían estado (eran tres), el otro era muy normalito pero no paraba de tirarme al cuello y yo le daba juego, acabé sentada encima de el "nuevo", con toda la polla apoyada en mi culo y me estaba poniendo cachonda por momentos, Lore continuaba tonteando con Lamas y yo a la vez que tonteaba con los otros dos miraba a Lamas con deseo y él me correspondía. Empecé a besarme con el último chico que había llegado, Pablo miraba mosqueado y Lamas me sonreía, sabía que no era eso lo que yo queria realmente y que yo estaba actuando a mi manera (pura estrategia).

Lamas se levantó y fué hacia el baño, yo fuí a la cocina (estaba al lado del baño), cogí un cubito de hielo y fuí al baño, se lo puse a Lamas en el ojo que lo tenía un poco hinchado y me miró de nuevo con esa cara, me lancé sin tapujos y le comí la boca, Lamas me levantó a pulso y me colocó sobre el lavabo, me comió las tetas salvajemente y cogía mi cuello fuerte y con decisión, apretando su paquete contra mí. En ese momento apareció el chico con el que me había besado en la puerta, miró y se largó cerrando de un portazo. Yo me quedé en tensión al verle y Lamas se quedó con cara de atontado, nos cogimos de la mano y volvimos al salón, mi gran amiga tampoco habia perdido el tiempo y estaba liandose con Pablo al intuir el percal, yo decidí no molestar y fuí a la cocina a por hielo para la bebida; Lamas me siguió hasta la cocina, me estampó contra la nevera besandome y yo me subí a la encimera sintiendole otra vez apoyada contra mí, nos magreabamos a saco...

-¿Tienes condón? (yo)

-Si, fué a una habitación y sacó un montón que tenian en el cajón, trajo 3 ó 4 y dejó uno al lado de mí, me agaché y se lo puse con la boca haciendole una mamada. Estaba flipando, no se lo esperaba,  me levantó con fuerza y puso mis piernas sobre sus hombros, comiendome el coño de pie, poco tiempo pero me quedé atontada, nunca me habían hecho algo así, no me lo esperaba. Me tumbó en la encimera y me la metió sin compasión, tenia una polla muy grande y dura, me llenaba totalmente y estaba venga a jadear sin parar.

La puerta de la cocina estaba abierta, la ventana de par en par también y vimos comos dos vecinos (una pareja) miraban atontados hacia el apartamento, seguiamos a lo nuestro, aunque al parecer les estaba dando morbo, miré con cara de zorra hacia el hombre de la ventana que estaba con su mujer mirandonos, comencé a tocar mis pechos de manera depravada a la vez que lamas me hincaba toda la polla hasta el fondo, el hombre de la ventana empezó a acariciarle los hombros a su mujer a modo de masaje y la mujer le miraba excitada (¡vouyerismo al poder!). Se empezaron a besar pero la muy cabrona bajó la persiana y no me dejó ver más, así que, me eché hacia atrás y disfruté del momento, me follaba con decisión, con poder, era muy bueno.

Nunca hasta ese día me habían dado tanta caña, en un momento de gloria para mí, volvimos a oir la puerta, era el otro amigo. Lamas paró de follarme y se quedó mirandole, éste con cara de no muy buenos amigos se acercó hacia él y le asistió un puñetazo en el otro ojo. Lamas se quedó flipado, se subió los pantalones y fué tras él, oí la puerta cerrarse y me quedé loca... Fuí al salón y vi a Lore hablando con Pablo, no podia creerlo, Lorena no estaba follando???, aquí pasaba algo. Pablo le había dicho que solo estaba intentando ponerme celosa a mí, joder, no podia creerlo, los tres cabrones detrás de mí. Lore estaba mosqueada con el chaval, (claro está que yo no tenía la culpa). Pablo se puso a chillarme a modo de novio...

-¡Las cosas no se hacen como tu las has hecho! (Pablo)

-¿Tu que eres mi marido? (yo)

-No tia, pero si tonteas con uno, pues no te vayas con otro (Pablo)

-Yo me follo a quién me da la gana te enteras (yo)

-Ya lo sé, pero joder... yo quería contigo y Marcos también (Pablo) /"supuse que Marcos sería el otro tio"/

-Pues yo acabo con el que me da la gana y ni tu ni nadie me teneis que decir lo que debo hacer(yo)

-¡Esa es mi niña! (Lore)

Pablo cogió la cara de Lore y la besó, ésta se apartó y le dió una ostia...

-Ahora te quedas sin el pan y sin el perro (Lore)

-Eh tia, perdona joder (Pablo)

Me bajé y los dejé que discutiesen, en el portal del edificio me encontré a Marcos y a Lamas discutiendo, Marcos me miró y se acercó hacia a mí poniendome una mano en el culo.

-Dame un beso (Marcos)

-Pues no... ¿de que vas? ¿a que santo le das un puñetazo a tu amigo por follar? (yo)

-Es que me molas tia (Marcos)

-Pues tu a mí no corta-rollos, yo no tengo firmado contigo un contrato matrimonial así que dejame en paz (yo)

Mientras discutiamos, Lamas había salido del edificio, salí tras él y le dije que yo no tenia una relación con Marcos, que podia follar con quien me diera la gana. Lamas me miró y me dijo...

-Tienes razón, pero yo si tengo un contrato con él y es un contrato de amistad (Lamas)

Eso me llegó, me subí para coger mis cosas del piso y largarme, Marcos intentó besarme en la puerta y le empujé, entré en el ascensor y se metió conmigo, corriendo llegaba Lamas y pusimos el pie para que no se cerrara la puerta, entró en el ascensor con Marcos y conmigo.

-Lo siento tio pero me encanta esta tia (Lamas)

Me cogió fuerte del brazo llevandome hacia su cuerpo, me levantó la falda y me quedé mirando a Marcos bastante alucinada, me puso contra la pared del ascensor y empezó a follarme otra vez, yo estaba muy caliente y no me importaba nada que estuviese Marcos mirando, es más, me excitaba. Noté como a Marcos se le empalmaba, el bulto en su pantalón era evidente, metió su mano en el pantalón y se sacó la polla, empezó a masturbarse y llegabamos ya al piso, así que, Marcos iba dandole a botones de otros pisos para que no parase todo esto, me corrí viendo a Marcos como se masturbaba y se corria delante de nosotros, Lamas al momento de verme correrme se fué él también, la sacó de inmediato y llenó las paredes del ascensor al igual que Marcos habia hecho antes.

Bajamos al piso los tres mirandonos flipados, entramos en el apartamento y Lore estaba tumbada en una cama to ciega, Pablo seguía en el sofá (estaba viendo la tv), me acerqué a Marcos...

-Ataca Marcos, la conozco (yo)

-Gracias (Marcos)

Marcos se metió en la habitación con Lore y era evidente que iban a follar, yo cogí un par de condones del cajón y enganché a Lamas de la camiseta metiendole en el otro cuarto conmigo, le tiré en la cama y me puse a modo de 69 para poder comernos los dos, le chupé la polla con destreza y muchas ganas, él me comía el coño realmente bien. Al rato, se revolvió...

-Para tia que voy a follarte más, me encanta tu coño (Lamas)

Puso mis piernas levantadas entre su cabeza y me folló, no podía parar de correrme, no podia creerlo, nunca me habían follado así, estaba llorando de gusto y parecía que hasta meandome, porque no paraba de tirar flujo y correrme encima de su polla, después de llorar un buen rato por lo bien que me follaba ese mamón, me coloqué encima de él, por una ventana chiquitilla podia ver a Pablo en él salón, yo brincaba sobre Lamas, observando a Pablo que miraba sin parar hacia nosotros. Lamas se volvió a correr otra vez, le quité el preservativo y lo tiré, se echó sobre mí.

Era ya muy tarde yo tenía que irme pero me lo habia pasado de puta madre, me vestí rapidamente y cuando fui a abrir la puerta de la entrada al apartamento... llegó Lamas cogiendome por detrás, me la volvió a meter desde atrás contra la pared... miré hacia un reloj de pared y vi que eran las seis de la tarde, le dije que me tenia que ir.

La saqué dejandole a medias, jajaja, me encanta cuando no pueden remediar el volver a llamarte por dejarles con ganas de ti. En la puerta del ascensor me miraba desde la puerta con más ganas, yo le eché una de mis miraditas y le hice un gesto de acercarse, vino ansioso y empezó a besarme, volvimos a follar en el ascensor otra vez, ésta vez sin mirones, era menos morboso... la verdad. Llegamos a la planta baja, se abrió la puerta y continuamos follando sin que nada pudiese frenarnos, Lamas chilló como un loco, se apartó de mí y se corrió, se agachó y me lamió el clítoris a lengüetazo limpio metiendo dos de sus dedos dentro, yo llegué al orgasmo jadeando bastante alto y le aparté, le miré a la cara...

-Ha estado bien (yo, guiñandole el ojo)

-¿Quedamos otro día? (Lamas)

-No, esto no ha sido más que esto y ahora se ha acabado (yo)

-¿Quieres mi número por si acaso? (Lamas)

Reí en tono sarcástico...

-Dile a Lore que cuando llegue a su casa me de un toque, y a ti que te vaya bien la vida (yo)

Me fuí sin mirar atrás y recordando aquel polvo que había sido el mejor de mi vida, nunca me habia corrido de aquella manera... Llorando y sin parar de contraerme tirando flujo a diestro y siniestro, lo recordaré siempre con una grata sonrisa.