El mecánico me domina (Cap. V- final por ahora)

Betsy continúa en el singular cuarto de torturas de Tadeo, aunque para ella poco a poco deja de ser tortura y se vuelve placer.

Después de 15 minutos, que para Betsy se sintieron como 6 horas, regresó Tadeo secando y tallando su cuerpo y su verga con una toalla de mano. Debido a su posición ella lo vió venir de cabeza y se paró frente a su cabeza. Dejó caer la toalla sobre la cara de ella y le tapó la visión por completo, como si de un simple mueble se tratara para luego ir a la mesita y elegir nuevos instrumentos.

-- Dime mascota, te has divertido?

-- Si Amo, he gozado demasiado -- respondió bajo la pequeña toalla.

-- Sabes que eres un objeto para mí verdad? Una mascota obediente y creo que eres candidata a volverte un Dron.

-- No tengo idea de lo que eso significa Amo.

-- Ya lo sabrás luego, no te preocupes. Tu función aquí no es pensar, solo obedecer, ok perrita?

-- Si Amo -- se sintió aliviada al no tener que hacer nada más que obedecer, resistir y gozar.

-- Ahora, quiero divertirme contigo. Tu ya haz gozado bastante y yo solo me he corrido una sola vez, no creo que eso sea justo cierto? -- preguntó con la intención de hacerla sentir culpable y manipular su mente.

-- No es justo -- respondió sinceramente.

-- Buena mascota! Haremos esto, tu seguirás sin ver nada pero yo tengo una vela en mi mano y lo divertido es que tú me rogarás para que derrame cera caliente sobre tu cuerpo -- dijo mientras encendía la vela.

-- Ok Amo, así usted se divertirá??

-- Mucho, y me sentiré orgulloso de ti por entregarme tu Dolor -- de nuevo la manipulación. Si sientes demasiado dolor solo di las palabras claves y todo se acabará; pero si resistes te premiaré, qué dices?

-- Yo no decido Amo, mi función aquí no es pensar... -- sonrió al parafrasear a su Amo.

-- Me sorprendes querida Betsy! Serás de mis favoritas muy rápido. Ahora iniciamos.

Betsy tenía el rostro totalmente cubierto por la toalla y podía percibir el aroma del sudor de su macho en ella. Seguía atada firmemente a los tubos manteniéndola en la posición de misionero totalmente expuesta. Realmente no tenía control de nada, su Amo podía follarla, tortura o usarla como decoración si se le daba la gana y eso la mantenía exitada. Dejó de escuchar a su Dueño pero sentía su presencia justo a n costado de ella.

-- Mi Amo, le ruego me tortura con cera por favor.

-- Segura mascota?

-- Si Amo, quiero satisfacerlo, divertirlos, quiero ser su obje... Ahhhhggg -- calleron 3 o 4 gotas de cera sobre su pezón derecho.

-- Resiste, pasa rápido el dolor. Si es demasiado para tí ya sabes que decir perra.

-- Estoy bien Amo. Le ruego continúe, quiero complacerlo.

-- Muy bien! -- derramó otro pequeño hijo de cera sobre su monte de Venus haciéndola retorcerse.

-- Gracias Amo, por favor, tortura a su sumisa -- pidió asombrada de que solo con el toque caliente de la cera ya estaba húmeda su vagina.

-- Concentrate en tu función en la vida, entrégate a complacerme, eres un objeto que funciona solo para mí placer -- derramó más cera en su otro pezón.

-- Si Amo, soy su pertenencia, no decido nada, solo obedezco... -- repetía mientras retorcía su cuerpo ante el toque de la cera.

Así continuó hasta cubrir todas sus tetas, un poco de su abdomen y hasta una parte de sus muslos. Poco a poco el ardor que generaba cada gota fue disminuyendo y la humedad en su vagina aumentaba. Él la mente de Betsy se repetía: Aguanta, eres un objeto, estás exitada con el dolor.

-- Te ves hermosa así mascota! Ahora a limpiarte para darte tu premio -- retiró la toalla de su rostro y retiró la cera fría de su cuerpo para luego ponerle gel refrescante en toda la piel.

-- Gracias Amo, creía que no resistiría -- sonrió.

-- Lo hiciste bien, solo es el comienzo.

Tadeo metió un objeto ovalado de goma en su vagina mojada haciéndola suspirar. De la bolita de color rosa salía una pequeña cuerda de goma que colgaba del cuerpo de la chica. Él jaló un poco la cuerda para ajustar el objeto dentro de Betsy y éste comenzó a vibrar haciéndola gemir instantáneamente y poner los ojos en blanco.

Cuando ella se acostumbró al vibrador, Tadeo literalmente abrió sus nalgas y se sentó en la cara de su sumisa cubriendo de nuevo el rostro y de manera natural ella comenzó a lamer y estimular el esfinter del mecánico. Sus ojos solo veían los testículos de su Amo, los cuales apretaban su nariz limitando su respiración. Ella estaba vuelta loca con la estimulación en su vagina y el sabor dulce y perfumado del culo de Tadeo. "Hay algo de éste hombre que no sea perfecto?" Pensó al saborear cada centímetro del ano como si de un plato gourmet se tratase; el movimiento de él permitía lenguetear los huevos y eso la hacía feliz. Cuando estaba gimiendo de manera ahogada y se aproximaba un orgasmo más, el Amo se sentó de manera un poco más fuerte sobre la cada de Betsy e interrumpió poco completo su respiración de boca y nariz con sus nalgas, culo y bolas. La jovencita recibió un fuerte orgasmo en medio de convulsiones debido a no poder respirar, la exitacion de la situación, la vibración constante dentro de su concha y de la entrega de su cuerpo, mente y voluntad a un hombre que tenía solo días de conocer. El orgasmo estalló y Tadeo aguantó unos segundos más para moverse y dejarla respirar; ella jaló la bocanada de aire más grande de su vida y eso hizo que su orgasmo se agrandará y alargará haciéndola gritar a todo pulmón, literalmente. Tadeo la observó fascinado y en silencio. Dejó que pasará y la desató y le ayudó a bajar del aparato cuál muñeca de trapo.

La cargó en silencio hasta el hermoso y amplio baño de su casa, no sin antes abrir la puerta de la habitación con sus huellas digitales. Tadeo la bañó con cuidado, la secó como si fuese una figurilla de porcelana fina y aplicó aceites en toda la piel haciéndola oler divinamente; después, al recibir una sonrisa de él, la llevó del baño a su habitación y la acostó en una cama gigante con todas las sábanas de seda blanca.

-- Lo hiciste increíble, disfrutaste?

-- No tienes una idea lo mucho que gocé, eres fantástico, el dolor, el placer, la dominación, la sumisión, la humillación... Todo eso me exita ahora, fue increíble.

-- Estarías dispuesta a continuar?

-- Si sabes que te pertenezco verdad? Después de hoy haré lo que fuera por ti.

-- Yo también Betsy.

Se besaron tiernamente mientras acariciaban sus cuerpos desnudos.

Fin.

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Hasta aquí llega éste relato por ahora. Las aventuras de Tadeo y Betsy continuarán más adelante pero en otro relato dentro de esta misma categoría.

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Se vienen más relatos en la categoría Amor Filial, si les gusta ésa temática y mi estilo estéis atentos.

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Gracias por sus comentarios, sugerencias e ideas, todo es felizmente recibido por mi sumisa Asistente Lilith en miss.lilith2000 @gmail. Com. Feliz inicio de año a los lectores de este fantástico sitio.