El mecánico bailarín

Estas son las ventajas que uno le saca a tener algun cargo en medio social.

El mecánico bailarín.

Hola soy yo de nuevo, para los que no me conocen me llamo Saúl y tengo 21 años. Les diré que soy trigueño, mido 1,75, ojos pardos, pelo negrísimo, y mi cuerpo lo mantengo mediante ejercicios diarios y esta fue mi experiencia con un joven que desde que lo conocí me propuse follármelo. Ahora les cuento.

Como ya sabrán estudio Ingeniería Industrial en una Universidad bastante grande donde hay de todo tipo de personas: heteros muy heteros, bisexuales al descubierto y otros escondidos, gays que ya "salieron del closet" y otros que no. Cuando comencé en el 1er año de la carrera viajaba diario a mi casa por lo que conocía estrictamente a los demás de mi clase y algunos otros de la facultad pero al entrar en 2do año por la carga de estudio decidí pedir alojamiento en una de las residencias pertenecientes a mi facultad. De esta manera al convivir todos los días y todo el día excepto los fines de semana comencé a conocer más gente, en el comedor, en los laboratorios, en el club de recreación y en todas las zonas de la Universidad que eran desconocidas para mí.

Tuve la suerte de encontrarme con Edy (ya les he hablado de él) que vivía cerca de mi casa y compartía mis mismas preferencias sexuales y casi siempre andábamos juntos de pachanga por ahí. Resulta que un día cuando íbamos a comer nos dimos cruce con un chico que realmente me impactó, era delgado, pelo negro, ojos claros (me enferman los ojos claros), bien blanco y tenía algo en el caminar que me llamó la atención, le pregunté a Edy si lo conocía puesto que él estaba interno desde el curso anterior y me dijo que se comentaba que era gay pero que él no sabía nada (Edy tenía un amplio conocimiento de la mayoría de los gays en la Universidad) y yo le dije:

--Pues a ese me lo piso yo y te voy a despejar las dudas.

A partir de ese momento comencé a ser más observador para ver si lo veía, supe que se llamaba Joel, que estudiaba Ingeniería Mecánica en 4to año, que dormía en la residencia de al lado de la mía y además bailaba en el conjunto danzario de la Universidad. Cada ves que nos cruzábamos yo me tocaba la verga por encima del pantalón para ver si él se daba cuenta pero estaba seguro de que permanecía ajeno a lo que pasaba por mi mente. Pasó el tiempo y no desistí de mi propósito aunque no inicié ninguna acción concreta. Por esa fecha yo era el promotor cultural de mi facultad y estábamos organizando un festival de artistas aficionados a la cultura y estábamos en busca de los números culturales a presentar para confeccionar el guión del espectáculo. Se me dio la tarea de contactar con alguien del conjunto danzario para pedirles su participación en la gala pero con el ajetreo de las clases no había tenido tiempo de ir a verlos, lo que hice fue enviarle un mensaje al director del grupo para que viniera a verme y explicándole los motivos.

Una noche estando en mi cuarto me disponía yo a salir a resolver otros asuntos y tocan a la puerta, y cuan fue mi sorpresa que al abrir era Joel quien con una dulce voz me preguntó:

--Aquí duerme Saúl?

--Soy yo, que desea.--le dije algo nervioso.

--Yo vengo en representación del grupo de danza para ver los detalles del festival que ustedes están preparando –me respondió.

Lo invité a pasar y nos pusimos a aclarar sus condiciones de trabajo y las necesidades de nosotros. Yo no le quitaba los ojos de encima. Cuando terminamos de hablar él se despidió y quedamos en solucionar todos los detalles dentro de dos días en mi cuarto nuevamente después de que ambos consultáramos con nuestros respectivos colectivos. Llegado el día yo me encontraba nervioso y me había propuesto que ese día el chico bailarín seria mío a cualquier precio. Me bañé, me afeité y me puse un bóxer bien apretado con el que se me marcaba todo mi paquete y me preparé para cuando llegara. A eso de las 8:30 PM apareció en mi cuarto el chico, esta vez traía puesto un pulóver sin mangas ajustado al cuerpo y pantalón bien apretado y bien bajito de cintura, noté que cuando le abrí se quedó mirándome, yo estaba sin camisa dejando al aire libre mis pectorales (recuerden que hago ejercicios físicos y mantengo buena figura) aunque después cambio la vista, esto ya de entrada me excitó pues sabía que le había causado buena impresión. Lo invité a pasar y comenzamos a hablar de nuestros asuntos.

Esta vez era él el que no dejaba de mirarme y aunque yo lo notaba le estaba dando de largo (yo ya tenia dura la verga). Nos pusimos de acuerdo así que nuestra conversación terminó allí y yo le dije:

--Bueno si todo está arreglado nos vemos el próximo viernes en la gala—le dije y me dispuse a abrirle la puerta.

Él asintió y se dispuso a irse no sin antes ver como se marcaba mi paquete por encima del pantalón. Le abrí la puerta y cuando él iba a salir la cerré nuevamente dejándolo dentro y le dije:

--Aquí termina nuestra conversación profesional, te haz pasado todo este rato mirándome y no te puedes ir y dejarme así -- me toqué la verga.

El se sonrió y sin más demora lo atraje hacia mí y le espeté un apasionado beso, él me respondió de la misma manera. No se si eran las ganas de que esto sucediera pero ese beso me supo a gloria, nos sentamos en mi cama y continuamos con nuestro beso mientras él me sobaba el paquete. Comenzó a safarme la portañuela de mi pantalón y yo le hice lo mismo a él, cuando sacó mi verga al aire empezó a pajearmela lentamente como un experto (aún no la había visto), cuando menos me lo esperaba y más entusiasmado yo estaba con sus besos se separo de mi boca y se inclinó para mamármela y cuando vio el trozo de carne del que yo disponía (21 cm.) me dijo:

--Es grande tu verga, como a mi me gustan -- y comenzó a mamármela.

Sus mamadas eran espectaculares de esas que le sacan gemidos a cualquiera desde lo más hondo de uno, desde el tronco hasta la punta, muy suavemente, jugaba con mi prepucio, con el orificio de mi glande al que trataba de meterle la punta de su lengua, terminó de desvestirse y de desvestirme a mi, se acostó en mi cama y yo encima de él, nos besamos largo rato, lo besé en el cuello, los hombros, su pecho, jugaba con sus tetillas, se las mordía. Cogí una de sus piernas y se la levanté, le mamé los testículos y le di un buen beso negro. Le ensalivé un poco su ano para prepararlo para la penetración, lo puse de lado y le subí una pierna. Después apunté mi verga hacia la entrada de su orificio y comencé a hacer presión, de una vez entro todo mi glande y me dijo:

--Métemela de una sola vez para que me duela, eso me excita—me dijo.

Me estaba dando en la vena del gusto, no hay algo que me excite más que oír gritar a mi pareja de placer (o dolor) cuando tengo sexo. Con un fuerte empujón entro toda mi verga en su culo, Joel gimió y por como se contrajo supe que le había dolido, después se relajó y también supe que le había gustado. Estuvo un rato con ella dentro para que se acostumbrara a su tamaño y grosor, yo se la sacaba y metía lentamente y sus jadeos eran música para mis oídos. Él me dijo:

--Sácamela que quiero cabalgarte un rato.

Así lo hice y me acosté boca arriba con la verga apuntando al techo. Joel se acercó a mí y de frente comenzó a sentarse encima de mi falo, iba bajando poco a poco, las expresiones de su rostro iban cambiando a medida que mi verga entraba en su culo. Yo lo tomé por la cintura y lo senté de una vez arriba de mí y nuevamente se escuchó un gemido esta vez mayor, al parecer mi verga había llegado más adentro. Comenzó a cabalgarme apoyado en mis hombros con una mano mientras con la otra se masturbaba y me decía que quería que me viniera dentro de él y yo le decía:

--Si sigues con esa cabalgata no demorare mucho en correrme.

Por suerte no me vengo rapido pero aún asi Joel logró que lo hiciera antes de lo previsto. Mi semen se le salio del culo por la cantidad y llegó a mi pubis y testículos. Joel se paró de encima de mi y lo recogio con la boca. Yo me quedé acostado y él vino hacia mi lado, se recosto en mi pecho y me dijo:

--Esta noche la he pasado bien, creo que nos veremos antes del viernes. Que tú crees?

--Por mi nos podemos ver todos los dias—le dije.

Y asi fue como el mecanico del conjunto de danza fue mi pareja por tres meses. Solo nos separamos cuando él tuvo que cambiar de Universidad por asuntos de su carrera.

Todo esto es verdad si les gusta mi relato me lo hacen saber a: hotman2005@muydivertido.com