El masaje tantrico

Como consegui, gracias a un masaje tantrico que mi preciosa mujercita se iniciase en el intercambio de parejas.

EL MASAJE TANTRICO

Lo que voy a relatar a continuación es la historia real de como logre iniciar a mi preciosa mujer en el mundo swinger.

La historia tiene dos partes porque todo lo comenzamos gracias a un masaje tantrico que ahora mismo relatare y la segunda parte vendrá mas adelante cuando os explique como fue, en nuestra segunda visita a un local liberal.

Eva es una preciosidad que lleva sus 44 años tan bien como cuando tenia 20.

Es morena de 1,65m figura espectacular, pechos pequeños pero muy bien formados, piernas bien contorneadas las cuales tienen como marco un hermoso par de nalgas que cualquiera de vosotros, estimados lectores, daría todo lo que tiene para poder saborear. Eva es aparte de guapa y sexi muy simpática y habladora, es de aquellas mujeres que creo que se tienen que compartir porque no es natural que solo yo pueda disfrutar de ella. Que yo este con ella desde hace mas de 20 años disfrutando de su belleza y simpatía, solo para mi, creo que es de ambicioso y trace un plan para que otros afortunados pudiesen disfrutar un poco de ella aunque solo fuera en el terreno sexual.

Yo soy un tío que según las amigas de mi esposa, soy muy atractivo, lo que supongo querrá decir que no guapo como Brad Pitt, que se le va a hacer, rubio como el en Troya, delgado, mido casi un metro ochenta, ojos verdes o sea que como ya contare en la segunda parte de esta historia, cuando fuimos al local swinger me exprimieron como una naranja.

Empece a hablar a Eva sobre el tema del intercambio hace ya mucho tiempo y como casi todas vosotras estimadas lectoras, dijo que estaba loco y que ni de coña iría nunca a un local liberal, que estaba muy contenta conmigo y que no necesitaba para nada sexo con nadie que no fuera yo. Para hacer la historia corta os diré que en unos meses la convencí y me la lleve al 6&9, un local que me dijeron era fantástico para nuestra primera vez. Que mala suerte tuvimos aquel jueves después de cenar, que en el local no había mas que un viejo gordo sentado tomando una copa con la que seguro era una profesional y nadie mas...El pobre relaciones publicas nos enseño el local y nos explico todas las reglas de los swingers, fue interesante observar a Eva mientras el R.R.P.P. decía que si no le apetecía que la tocaran con solo apartar la mano del tío o tía que la tocara el o la interesado/a la dejaría tranquila, luego explico que si había tenido alguna relación con alguien y ya se había corrido y no le apetecía seguir, con tan solo decirlo, también la dejarían tranquila. Eva escuchaba tranquilamente y afirmaba con la cabeza como si una explicación tan intima como esa fuese de lo mas normal, con lo que yo pensé que estábamos en el sitio y el momento adecuado para iniciarnos en el que a priori me parece el mundo mas excitante de todos. Paso el tiempo y siguió sin aparecer nadie y después de hablarlo con Eva decidimos dar por finalizada nuestra primera visita a un local liberal. Eva había dado el paso y tenia que conseguir una segunda oportunidad, porque no me negareis que si accedió a entrar fue porque algo de gracia le haría, pero resulto que ahora ella tenia la excusa perfecta para decir que ya había ido y que esos locales eran una mierda y que no volvería nunca mas.

No había manera de convencerla para una segunda oportunidad hasta que un día se me ocurrió que un masaje tantrico seria una buena idea para lograr que unas manos que no fueran las miás le proporcionasen placer. Lo logre, para mi pasmo me dijo que vale, que un masaje si, así que llame y nos dieron cita en un local muy bien acondicionado, cálido con luz tenue donde nos pidieron que nos desnudásemos, nos duchásemos y nos pidieron que nos echásemos en un tata-mi a ras del suelo a esperar a nuestra masajista. Eva no estaba ni pizca de nerviosa aunque ella dijese que si lo estaba. La masajista empezó por ella, le aplico un aceite de masaje y empezó a masaje arle la espalda, los pies, las piernas y rozaba su bien depilado sexo de vez en cuando. Eva disfrutaba, se le notaba.

Luego me toco a mi. Eva también disfruto viendo como la chica de tanto en cuando rozaba mis testículos..

La chica volvió a Eva y le pidió que se pusiera boca arriba. El masaje volvió a empezar por las maravillosas piernas de mi querida mujerctita y pronto las manos de la masajista pasaron por encima del sexo de Eva. Esta tenia los ojos cerrados y empezaba a poner esa carita que pone cuando esta disfrutando de uno de mis famosos cunilinguis. La masajista subió sus manos masajeando su plano vientre hasta que alcanzaron los pequeños pero preciosos pechos de Eva. Mi mujer lanzo un casi inaudible gemido. Al oírlo la chica que estaba proporcionando placer a Eva y a mi, me estaba regalando un momento de lo mas erótico que he vivido, volvió a acariciar el sexo de Eva con una mano mientras con la otra seguía masajeando sus pechos. Mi mujer movía la cabeza de un lado a otro, cosa que siempre hace al estar apunto de correrse. De repente la masajista le agarro ambas piernas para atraerla mas a ella, para empezar a introducirle un dedo en esa cavernita que ya rebozaba en jugos, cuando la brusquedad del movimiento asusto a Eva y en lugar de proporcionarle lo que tenia visos de un brutal orgasmo solo logro que Eva dijese que le había cortado el rollo.

La masajista nos dejo solos un ratito para que tuviésemos un momento de intimidad, pero Eva se negó a todo, decía que nos oirían y que ademas no le apetecía nada, que le habían cortado el rollo con tanta brusquedad y que quería vestirse e irse de allá. Me masturbo con celeridad, nos duchamos y salimos a la calle.

En la cena me dijo que el masaje le había gustado, pero que la había tocado demasiado y que por eso le corto el rollo. Yo creo que efectivamente se corrió pero no lo quiso reconocer nunca.

Al cabo de aproximadamente un mes le dije a Eva que había reservado otro masaje tantrico, pero esta vez con un chico y me dijo que no, que con una chica o nada, así que le hice caso y cuando llego el momento de salir de casa para ir hacia el masaje, me dijo que no quería ir, que había pasado muy mal día pensando en eso y que si quería iría por mi pero no porque a ella le apeteciese. Así que llame y anule la cita.

Desde ese día en adelante todo volvió a ser frío como antes, aunque logre que varias veces mientras hacíamos el amor, me dijese ante mi insistencia y cerca de su orgasmo, que accedía a volver a hacernos un masaje tantrico e incluso a ir a visitar un local swinger aunque solo fuese a mirar.

Estaba muy cerca de conseguirlo lo sabia, y tenia que idear un nuevo plan o conseguir que aceptase ir otra vez a lo único que ha funcionado un poco hasta el momento así que le dije un día si le apetecía volver a repetir experiencias en un nuevo masaje tantrico. Tuve suerte, me dijo que si y que al día siguiente a lo mas tardar.

  • Carai que contento me haces, no esperaba una respuesta tan rápida
  • Es que no se que me pasa hoy, que pensando en ti y en todo lo que me cuentas sobre el sexo con otra gente, ya me he masturbado dos veces.

No le di ni un segundo, la bese en la boca como cuando eramos novios y tuvimos una sesión de sexo épica

A la mañana siguiente llame a un local nuevo que había visto por la red y no me arriesgue a pedir a un masajista masculino no fuese que se negara otra vez, así que contrate a la masajista mas guapa que encontré y quedamos a las seis de la tarde.

Ana la masajista que nos recibió, era una belleza de 25 años, rubia de ojos azules, un metro y setenta centímetros de altura, un tipo espectacular y unos pechos redondos y grandes que quitaban el hipo.

Repetimos la rutina de la primera vez, nos desnudamos nos dimos una ducha y aquí empieza lo bueno, mientras el agua caía sobre nosotros Eva se fundió conmigo en un apasionado beso, mientras jugaba con mi sexo. Yo le correspondí y mientras la tocaba y la besaba Eva me dijo:

  • Estoy muy caliente, porque no me haces eso que haces tan bien?

Al oírlo y mientras ella seguía masturbándome, bese y chupe sus pechos que ya exibian unos pezones totalmente duros, me agache y le bese el vientre y el monte venus hasta que mi lengua alcanzo su sexo.

  • Ahhh Así así, sigue hasta que me corra. Ahhhhhhhh si si, me corro gritaba mientras el agua que caía por su cara hacia que balbucease.

Al relajarse me dio un beso y me dijo.

  • Gracias es que estoy tan caliente pensando en el masaje que si no me hubieses hecho esto ahora, me hubiese corrido al primer minuto de masaje. Te acabo yo a ti o prefieres que esa belleza rubia que nos espera sea la encargada de hacértelo?

Sin tiempo de contestar, se abrió la puerta del baño y apareció Ana vestidita solo con un tanga y nos dijo.

  • Chicos parar un poco que si no, no tendré trabajo esta tarde.

Así que que entre risas salimos de la ducha, nos secamos y nos fuimos pasillo abajo hacia el box que nos toco, flanqueados por esa bella rubia que nos tenia que hacer un masaje en pareja.

  • Ui, Pepe dijo Ana, menuda erección que llevas, pero no te preocupes que ya daremos cuenta de ti Eva y Yo. Venga echaos boca abajo en el tatami que empezaremos lo que sera un gran masaje, porque pensar que nunca en mi vida he empezado un masaje como el de ahora, estando tan caliente como mis clientes, los gritos de placer de Eva se oían por todo el piso y de veras que me habéis puesto como una moto. El masaje de hoy es el llamado Thai Interactivo, que quiere decir que el masaje os lo daré utilizando mis manos y mi cuerpo, es de alto contenido erótico, no solo por eso sino que al ser interactivo vosotros también vais a dármelo a mi y ademas me permitiréis que lo os la haga desnuda del todo no?

No espero a nuestra respuesta, Ana se despojo del pequeño tanga que llevaba.

El masaje comenzó por los pies y las piernas de Eva donde Ana se recreo durante unos minutos para luego y saltándose el precioso culo de mi amada, las manos de Ana mas ajearon la espalda y el cuello de mi chica por otros tantos minutos. Me toco el turno a mi. Ana me hizo lo mismo. Ana volvió con Eva. Masajeo su espalda otra vez, pero ahora sus manos bajaron un poco hasta sus nalgas, me fije que los pulgares de Ana rozaban el sexo de la agradecida Eva y fue entonces donde oímos el primer... mmmm de la noche.

  • Chicos, dijo Ana, ahora me tenéis que embadurnar el cuerpo con ese aceite calentito que he usado con vosotros. Yo me tumbare primero boca abajo y Tu Eva harás mis piernas y nalgas y tu Pepe mi espalda.

Así lo hicimos, nuestras manos masajeaban a esa diosa del masaje. Eva disfrutaba porque mientras sus manos untaban de aceite las piernas y los glúteos de la chica se mordía el labio inferior. Sus pulgares rozaron también el sexo de la chica mientras mis manos acariciaban con una ligera fuerza hacia abajo su espalda. Mi erección era descomunal. Como también tenia los pechos de Eva muy cerca de vez en cuando los tocaba. Sus pezones estaban otra vez duros como piedras y veía en su cara la expresión del placer.

  • Muy bien chicos ahora me girare y haréis lo mismo por la parte anterior de mi cuerpo, dijo Ana dándose la vuelta.

Así lo hicimos. Esta parte era mejor, a mi me tocaba untar el torso y los pechos de la rubia mientras Eva hacia la parte anterior de las piernas y... claro el Monte Venus. Los pulgares de Eva rozaban los labios externos del sexo de la chica y los medios se metían un poco mas al centro y rozaban su clítoris.

  • Mmmm, Eva cariño muy bien, dijo Ana. Que bien me masajeas las tetas Pepe.
  • Si ya lo veo dije yo. Tienes los pezones durisimos igual que Eva.

Yo ahora alternaba los pechos de las dos mujeres.

  • Vale ahora me vuelve a tocar a mi dijo Ana. Eva ponte boca arriba. Ella hizo caso rápidamente, no sin antes darle un ultimo masajito al clítoris de Ana.
  • Ahhh... no para, para, que aun tenemos trabajo dijo Ana. Ademas el Tantra sirve para enseñaros a no correros a la primera y que el goce se alargue lo mas posible.

Con Eva tendida boca arriba en el tatami, Ana empezó un nuevo masaje, rozaba con su cuerpo las piernas de Eva primero y luego su sexo con las tetas, sus erectos pezones se entretenían en el sexo de mi chica, para luego subir y masajear pechos con pechos. La escena era espectacular y no pude reprimir que mi mano se dirigiese a mi erectisimo pene. Ana que se dio cuenta y me dijo.

  • No no, debes aprender a tener mas aguante y a disfrutar de los orgasmos sin eyaculacion. Disfruta del espectáculo.

Mire la cara de Eva. Era toda placer. El cuerpo de Ana seguía masajeando el de Eva, los pezones de nuestra masajista volvieron al sexo de Eva y se recrearon allí un buen rato. Eva debía de estar en el séptimo cielo porque movía su cabeza de lado a lado mientras se mordía el labio inferior.

  • Mmmm, mmmm decía Eva, que bueno sigue así, si si si, me corro ahhhhh

no pares ahhhhhh, ahhhhhhhh

Ana siguió encima de ella hasta que Eva se relajo y suspiro.

  • Buff que pasada, estoy agotada dijo Eva
  • Relajate un poco mientras me ocupo de Pepe, vale preciosa pero no tardes mucho porque quiero que me ayudes con el.
  • Vale, vale uff, ya estoy lista dijo Eva mientras seguía echada en el tatami, pero sigo muy caliente... dijo mientras sus manos acariciaban sus pechos y sexo. Acaba tu con el que yo miro mientras me masturbo yo solita mientras miro el espectáculo.....
  • Coño hoy si que lo hemos conseguido, nunca había visto a Eva tan caliente en mi vida, dije yo, mientras Eva con una sonrisa de oreja a oreja, me guiño un ojo mientras se acariciaba todo el cuerpo.

Ana empezó con mis piernas y enseguida llego a mis testículos, tocándolos suavemente, mi erección era la mas bestia que había tenido en mi vida. Ana se puso encima mio, su cuerpo se deslizaba por el mio, sus pechos acomodaron mi pene entre ellos, mientras no paraba de moverse hasta que se incorporo y volvió a jugar con mis testículos con ambas manos. Yo miraba a Eva mientras se masturbaba, le di mi mano y Eva me la cogió fuertemente mientras nos mirábamos a los ojos. Ana agarro mi pene y comenzó a masturbarlo. Al poco rato empece a correrme haciendo saltar el semen a borbotones.

  • Ahhhhh, ahhhhhhh gritamos los dos al unisono.

Eva y Yo nos corrimos juntos y Ana no dejo de acariciarnos hasta que nos relajamos por completo.

  • Os a gustado eh pillines, dijo Ana.
  • Muchísimo dijo Eva a sido realmente fantástico y muy erótico
  • Si si bestial dije Yo.
  • Nunca en mi vida de masajista había disfrutado tanto dando un masaje y por supuesto nunca me había puesto yo tan caliente.
  • Quieres dijo Eva que te...

Ana no le dejo acabar la frase.

  • No cariño gracias pero esta totalmente prohibido.. ya me gustaría, dijo Ana mientras empezaba a tocarse Ella misma.

Al unisono, Eva y Yo nos incorporamos y empezamos a tocarla por todo el cuerpo. Ana se dejo hacer. Eva le masajeaba las piernas y Yo los pechos. La chica empezó a gemir cuando Eva toco su sexo.

  • Mmmmm que bien lo hacéis, seguir asiiiiii.Los expertos dedos de Eva masajeaban el clítoris de nuestra masajista y Yo seguía jugando con sus pezones. Me voy a correr Ahhhhhhh Ahhhhhhhh

Seguimos con Ella hasta que Ana dijo.

  • Ya, ya, que bestial ha sido. Gracias parejita. Ahora os voy a dejar un rato solitos. Vale.

Mientras Ana se levantaba y salia de la habitación, Eva me dijo.

  • Ven aquí cariño que no puedes salir a la calle así

Y sin mediar mas palabras Eva engullo mi erectisimo pene.

  • No te corras que me tienes que follar.
  • Pues dejalo ya y cabalgame, dije.

Eva no se lo pensó un momento.Se me subió encima y con la mano derecha llevo mi pene a la entrada de su sexo y se dejo caer.

  • Ahhh, muévete dijo Eva mientras Ella se movía al principio despacio para ir acelerando sus movimientos.
  • Ohhhh cariño que gusto decía yo.
  • Sigue ahhhhh ahhhhhh me corro
  • Ohhhh Ohhhh Ahhhhhhhhh yo también

Y seguimos hasta que Eva cayo desfallecida sobre mi.

  • Gracias cariño dijo Ella, mira que has insistido, pero es que nunca creí que me gustara tanto.

Y me dio el beso mas intenso y erótico que me había dado nunca.

  • Va, me dijo. Vamos a la ducha que deben necesitar la habitación para que alguien disfrute otro mucho.

Nos levantamos, nos duchamos y salimos al pasillo ya vestidos. Ana estaba allí en recepción.

  • Bueno parejita gracias por la visita y espero que hasta otra.
  • No lo dudes dijo Eva, venia un poco asustada pero salgo convencidisima de los efectos del Tantra. Por cierto, Pepe hace muchísimo que también me pide que vayamos un día a algún local liberal para echar un vistazo. Después de lo de hoy ya tengo ganas de ir, porque si al menos es la mitad de erótico que lo de hoy, ya valdrá la pena. ¿Te gustaría acompañarnos?

Yo me quede de piedra por el comentario de mi preciosa mujer y también por la respuesta de nuestra bellísima masajista.

  • No tengo costumbre de intimar con mis clientes, pero en vuestro caso ya lo he hecho y ya sabéis que he disfrutado muchísimo. Acepto, pero con la condición de que dejéis que me acompañe mi novio.

En décimas de segundo pase de la emoción a la tristeza al pensar que todo se iría al traste, Eva no aceptaría de ninguna de las maneras. Intente abrir la boca para decir algo que lo arreglase pero no tuve tiempo. Eva dijo.

  • Estaríamos encantados de conocer a tu novio.

Yo no salia de mi asombro. Eva continuo diciendo.

  • Podríamos quedar a cenar la semana que viene y luego vamos a ver que pasa en en famoso local. ¿Os parece bien?
  • Vale sera divertido dijo Ana, os lo garantizo, somos asiduos y es brutal.
  • Encantado dije yo.

Ana nos escribió en una tarjeta su numero de móvil.

  • Espero vuestra llamada. Nos dio otro beso de despedida y dijo. ¿El jueves?
  • Si vale contesto Eva, te llamo mañana y quedamos, que me tienes que explicar como tengo que vestirme para la ocasión.
  • Vale hasta mañana.

Ya en la calle le dije a Eva.

  • Ves como tienes que hacerme caso. Ya sabia que te gustaría, pero lo del local de intercambio, Yo pensaba ir a mirar el primer día y como máximo hacer lo que llaman un primer encuentro suave, que es darse algún beso, aceptar tocamientos light y como máximo hacer un intercambio solo de masturbación, pero al quedar con ellos a lo mejor quieren algo mas.
  • El otro día estuve leyendo un poco en internet sobre el tema, y precisamente es lo que dicen que se haga el primer día, acudir con alguna pareja iniciada que es la que mas sabe como empezar muy suave y al oír que son asiduos he pensado que mejor ir con Ella que presentarnos allí solos como la primera vez que fuimos y tener un chasco otra vez.
  • Y si su novio no te gusta?
  • Pues le diré que mire y me lo hacéis Ana y tu.
  • Bien pensado
  • Ahora que se lo que se siente al sentirme acariciada por Ana, iría ahora mismo, pero tengo que recuperarme y comer algo que estoy hambrienta. ¿Vamos a cenar?
  • Encantado cariño.

En los próximos días saldrá la segunda parte.