El mandil y la cofia parte 2
Sigue el maltrato a Alex
A la hora de estar en mi cama llego aun mas enfurecida la señora palmer gritando y vociferando, haciendo un escándalo para que me pusiera en pie no permitiré que estés en esta casa sin hacer algo para ganarte el sustento rápido a lavar los platos del desayuno a punta de golpes me llevo hasta la cocina corrí despavorido al entrar a la cocina nuevamente me saco y me dijo espera afuera hasta que te de permiso de entrar me pare afuera envuelto en lagrimas le pedí permiso para entrar y me dijo pasa rápido antes de que me arrepienta me dijo pon mucha atención que no pretendo explicártelo dos veces tomándome de el cabello las sobras van en ese plato dañado y no quiero verlas dentro de la casa en vista que no sabes barrer voy a supervisar personalmente el lavado de los platos pronto tuvo razón y a punta de golpes en mi nuca me mostro la forma de hacerlo no podía mas mis lagrimas se mesclaban con el agua en los trastes y el hambre que tenia todo estaba en mi contra y no sabia porque estaba pasando esto.
Al terminar de lavar los trastes me lleve el plato al patio y lo puse en una tabla de madera que había y me fui a recostar a las 2 horas me dio hambre ya que no había almorzado me dirigí a la cocina esperando en la puerta para poder pasar ya que no quería que la señora palmer me golpeara nuevamente los minutos pasaban y paso una hora y no veía a la señora palmer eran las 4 de la tarde y ella apareció llevando platos de lo que era el comedor me dijo Alex puedes entrar a lavar los platos sin si quiera voltearme a ver yo tartamudeaba en voz baja señora palmer puedo comer algo ella grito no aquí no somos restaurant y tu no deberías estar aquí esta es una casa para jóvenes decentes y tu estas de sobra tráete el palto gris para los desperdicios y llévatelos para afuera .
El hambre que tenia era demasiada no podía después de lavar los platos como me habían enseñado me lleve el plato vi unos pedazos de brócoli y varias zanahorias y lo mas triste de todo unos cuencos con col hervida y caldo no pude asimilarlo pero pronto me estaba llenando la boca con esas verdura que muy escasas y sin sabor apenas satisfacían mi apetito no se como pude llorar tanto estos días en apenas un día mi vida cambio totalmente a los minutos llego la señora palmer me dijo no puedes estar sin hacer nada rápido quiero que juntes todas las herramientas y te pongas a pintar las paredes del patio empecé a juntar todo lo que pude y me puse a pintar las paredes llegando la noche mi hambre me desmotivaba pero justo acababa de pintar ambas paredes cuando vi la luz de la cocina encendida me acerque para ver si podía cenar algo…
No vi nada de movimiento yo solo podía pensar en comer y me escabullí haber si alcanzaba a comer algo mas vi la cazuela nuevamente con verduras pero esta vez eran champiñones y pollo estaba apunto de meter un pedazo de pollo a mi boca cuando la señora palmer callo como noche moliéndome a golpes me dijo el robo esta prohibido incluso con las personas que no son bienvenidas aquí y no puedo permitir que hagas esto tienes que aprender una lección me dijo extiende tu mano con la que agarraste el pollo y me dio con una barita que cargaba en su bolsillo del delantal no podía creerlo como una rama podía hacer tanto daño con solo un golpe me arrastraba de dolor me pateo rápidamente ponte de pie rápido y extiende tu mano esta rutina se prolongo por 25 azotes mi mano dejo de sentir para solo concentrarme en el dolor cuando la barra tocaba mi carne ese día no pude ni siquiera cenar las sobras de los platos.
Sin querer alargar esta rutina esto siguió así todo el mes entraba solo a lavar los trastes y siempre me ponía hacer cosas en el patio el punto era que no tuviera tiempo para pensar en otra cosas pinte las paredes 3 veces barrí el patio otras tantas y sacaba la basura igual de veces siempre con el mismo protocolo pedir permiso para entrar a la cocina y salir para llevar el plato gris a el patio que paso a ser el mío a comer solo lo que sobraba de comida con lo poco que comía y las sobras siempre vegetarianas había perdido mucho peso ya que solo daba una comida al día y cuando eran buenos dos perdí mucho peso y realmente no me sentía bien entre extrañar a mis padres y mi vida y los maltratos sufridos no hacia nada incluso bañarme o arreglarme no me importaba nada hasta que un día llego la señora palmer.
Basta gritando desnúdate rápido y me aventó una tina de agua helada rápido tállate límpiate el cabello con este shampoo rápido no quiero verte en ropa interior me dio un trapo vejo y dijo sécate de inmediato lo hice cuando tomo mi ropa y se la llevo me dirigí a mi cuarto y para mi sorpresa no había ropa todas mis pertenencias no estaban ciertamente no las había recogido como la señora palmer me había dicho pero estaba seguro de que estaban en algún lugar de la habitación y para mi sorpresa cuando regrese nada a los pocos instantes entro ella te dije que todo tenia que estar impecable supuse que todo lo que estaba en el piso era inservible así que lo tire.
Pero que me voy a poner no puedo andar desnudo por el patio, me dijo no ese es tu problema te dije que recogieras tu ropa que dejaras ordenado, ahora sufre las consecuencias estuve todo el día así con un remedo de toalla enredado en mi cintura ese día estábamos a 25 ° pero las corrientes de aire hacían que deseara algo con que cubrir mi desnudes tuve que ir a lavar los trastes así con la toalla en mi cintura en cuanto me vio la señora palmer me corrió inmediatamente que como se me ocurría entrar a la casa desnudo propinándome golpes en la espalda con la vara al volver a mi cuarto vi una camisetita de tirantes cruzados por la parte de atrás color blanca 3 pantaletas lisas de licra y dos pantalones a los cuales no les puse mucha atención supuse que eran de una persona eran muy pequeños y al analizarlos bien era obvio que eran de mujer la señora palmer tocaba mi puerta vociferando rápido a lavar los trastes o quieres que lo haga yo ..
No se si fue el hambre o el miedo que entrara la señora palmer a seguir pegándome con la vara pero me puse la pantaleta como pude era muy pequeña y de licra me apretaba mucho, después me puse la blusa de tirantes no se como me quedo pero estaba prácticamente pintada a mi cuerpo al levantar los pantalones me di cuenta que eran de mujer de esos pantalones que tienen elástico y que van pegados al cuerpo batalle para subirlo entre mis piernas pero ya una vez arriba pude abrocharlo sin problema era increíble el maltrato que había sufrido todo este tiempo había perdido tanto peso que la ropa me quedaba lo único que me quedaba era mis piernas de futbolista a lo cual posiblemente desaparecerían si seguía en esta casa del horro…