El león y la princesa 1

La historia trata sobre la historia de amor y entrega de un hombre en sus 40 y una joven veinteañera

Todo comenzó ahí, frente a la virgencita de Guadalupe, le tomaste de las manos y le dijiste, mi niña, ya no puedo callar, estoy enamorado de ti, y ya no quiero ser solo tu amigo

La verdad le dio mucho miedo, pues tu ya no querías tener una novia de mano sudada, pero le atraías y le gustaba mucho tu compañía… así que aceptó salir contigo

Esa tarde fue fabulosa, ir por una cerveza, estar contigo, platicar, sentir como tocabas su mano, todas las cosas lindas y hermosas que le decías… uff, la verdad le llenaste el ojo y pudiste contra toda la razón en ese momento… de pronto, decidieron salir del lugar, e ir a tomar un café

En la salida del bar, se besaron de una forma tan apasionada, demostrándonos el uno al otro que sentían algo mutuamente, que era momento de decir que si

Fueron al café y se besaron tanto tiempo como el que pudieron, sus labios no podían estar separados… tus brazos rodeaban la espalda de la princesa… se sentía protegida, se sentía muy bien, se sintió amada… ahí le prometiste que no le tocarías hasta que estuviera lista… y le dio mucho miedo pensar en que tenía que entregarse a ti… era virgen y tu ya tenias experiencia

Salieron del café, como dos enamorados, abrazados tomados de la mano… la llevaste a casa y te besó… ahí fue donde su razón le dijo, no, esto no puede ser, y te dijo, mi niño, me gustas, me caes super bien, pero no puedo estar contigo no podemos ser algo más

Él solo rió y me dijo… ok, está bien, solo te aseguro algo… a partir de ahora todos los viernes son nuestros… y le dije, ok, veremos si es verdad

El siguiente viernes llego y le dijo, te veo en el café… y ella acepto, para dejar las cosas en claro… de haber sabido… se besaron apasionadamente, se miraron a los ojos y fue nuevamente una tarde esplendida… al caer la noche y despedirse, le dijo nuevamente que esto no podía ser… sabías que la tenias… solo reíste y le dijiste que si… y repetiste, los viernes son nuestros

Y así paso repetidamente, todos los viernes en el mismo café

Un viernes, ya más enamorados que al iniciar, se besaban y le dijiste, me estoy quemando princesa, por favor, quiero estar contigo… ella le dijo, mi amor, tengo miedo… pero te amo… y voy a estar contigo

Salieron del café y fueron en busca de un lugar para estar solos… parecían adolescentes haciendo una travesura… subieron al auto, y cada semáforo encendían más y más el fuego que los estaba quemando… se perdieron en la búsqueda del lugar, y le dijo, mi princesa, me estoy quemando, pero no quiero que tu primera vez sea aquí… continuaron la búsqueda, hasta llegar al lugar… a ella le dio miedo al entrar… le temblaban las piernas… no sabía que es lo que tenía que hacer… tiernamente, él le beso los labios… y la abrazó… lee dijo no tengas miedo… solo te voy a besar ok princesa

Le beso los labios, el cuello, su cuerpo se estremecía más y más… y lentamente empezó a quitarle la ropa… era realmente una niña… con lencería color de rosa… inocente la pequeña princesa sentía como las garras del león tocaban su joven y blanca piel… las garras del león llegaron a los pechos de la princesa, y ella se estremecía… quería cada vez más… estaba ya dispuesta a entregarse a su rey… al león de la selva

La princesa le quito la ropa al león y comenzó a tocar la piel de su león… lo disfrutaban… era una experiencia nueva para ella… y una entrega pura y llena de amor… él, quito por completo la ropa de su princesa… ella sentía pudor de su desnudez… sin embargo era tanto el éxtasis del momento que se dejo llevar… de pronto… la boca de su león estaba en el lugar más intimo de todo su cuerpo… la llevo al sillón, la sentó y ella se estremeció al sentir la lengua de su león besando todo su sexo… su cuerpo se estremecía y se calentaba cada vez más… el al verla tan extasiada, se saco los bóxer y le enseñó su verga a la princesa… ella queriendo agradecer los besos en su sexo, besó con ternura la verga del gran león… él, nada tonto, la acomodo de manera que pudieran besar sus sexos mutuamente… la primera experiencia sexual de la princesa, fue un 69 hecho y derecho… comió verga hasta atragantarse… pero el león no estaba conforme con eso

Quería obtener la virginidad de la princesa, así que intento penetrarla… la acomodo para hacerlo… pero el dolor que la joven sintió impidió que pudiera culminarse el acto

Así que volvieron a su magnífico sexo oral hasta que mutuamente explotaron

La princesa, aún no ha perdido su virginidad… y el león sigue en busca de obtener ese gran tesoro