El ladrón de Esposas Capítulo 3

Vanesa se encontraba muy ocupada con su nuevo trabajo, y por la gran cantidad de tiempo se juntaba fuera de horario de oficina con Luis en su casa a terminar el montón de trabajo que tenía, y aunque a Leo, su esposo, esa idea no le gustaba mucho lo aceptaba para que su esposa se sintiera útil en algo y la verdad no podía ser otra. Los primeros días realmente fue eso , pero desde la semana que le Luis le dictó clase a su hija Victoria, todo cambióuando llegaban Luis y Vanessa a la casa de Luis pensando en adelantar trabajo, no hacia mas que al llegar al sofá arrodillarse y chuparle con devoción la polla a Luis como un tremendo manjar, para después desnudarse y permitir que Luis la penetrara y usara a su antojo. Desde que Vane entró a trabajar, veía a Luis con otros ojos, lo veía más atractivo y le generaba un placer que nunca había experimentado con su esposo, pero a pesar de esto, no sentía remordimiento ya que solo era sexo y parte de su trabajo, así ella era realmente útil, poniendo su empeño, cuerpo y mente al servicio de otros, su amor seguía siendo su amado esposo, estaba totalmente convencida de eso.. Después de sus sesiones de trabajo extra llegaba exhausta y a pesar de que Leonardo quería intimar con ella, solamente obtenía un no por respuesta argumentnado que estaba cansada, sin recordar bien lo que había hecho, sólo estaba segura de haberse esforzado al máximo en su, cada vez más demandante trabajo.

Todo siguió su curso, Luis ocupó esa semana tanto en dejar muy bien preparada para los estudios a Victoria en su materia como introduciendo los comportamientos que necesitaría para que su plan tomara efecto, y todo empezaría el siguiente lunes. Debía ser paciente si quería tener éxito, pero estaba seguro que todo saldría a su favor.

Al lunes siguiente…

Era lunes y Victoria llegó más temprano porque cancelaron las clases de un curso, su padre se encontraba viendo TV, charlaron normal de las cosas hechas en el día. Se sentía raro, como una atracción que no entendía por su hija, no le prestó atención, pensó que era por el tiempo que llevaba sin follar Vanessa.

Llegó el día miércoles, Leonardo salió a ejercitarse un poco y cuando llego a las 8 directo a la cocina por algo de comer se encontró con algo que no esperaba. Su hija Victoria vestía únicamente un tanga en hilo diminuto que se juntaba al inicio de su trasero y desaparecía dentro de él, al igual que un top que dejaba en vista sus senos, obviamente no llevaba sujetador .

Leonardo se sintió raro, como una corriente que recorría su cuerpo al ver a su hija, se sentía como un quinceañero cuando se encontraba en su primera vez, se quedó viéndola con la boca abierta

Vic: Hola papi, ¿cómo te fue haciendo ejercicio?

Leo: Hemm… que..?

Vic: ¿Papá estás bien, que tienes?, Porque me ves así?

Leo; No es por nada hija… disculpa el ejercicio me debió caer mal, ¿podrías traerme un vaso con agua?

Vic: claro, papi.

Victoria se encontraba en la nevera buscando comida y se fue a la estantería tomo un vaso y fue al filtro de agua, mientras hacía todo eso no dejó de mover sensualmente su trasero, meneándolo y mostrando sus bellas nalgas desnudas a su padre, el cual sin saber porque abrio los ojos como platos y pensando para sí mismo, “Mi hija esta buenisima, joder”

Ante lo que veía no pudo evitar una erección que era notoria en su pequeño short de deporte, cuando victoria regresó no pudo evitar quedarse mirando cómo se movían sin control a los senos de su hija, siendo ella misma quien lo sacó de sus pensamientos.

Vict: Papá, papá ¿sigues ahí?.

Leo: Sí hija,solamente estoy muy cansado. -- dijo con pena y esbozando una disculpa

Sin embargo esta excusa no fue suficiente, ya que cuando su hija le entregó el vaso, se dio cuenta de la evidente tienda de campaña que había en su short deportivo.

Vict : Jajaja papá, el ejercicio parece que sí te sentó bien.

Él no entendía lo que ocurría, debía taparse ante su hija, debía sentir pena pero no entendía el porqué estaba tan tranquilo, tomó el vaso con agua y se sentó en una silla del comedor.

Vict: Papá una pregunta, cuánto te mide tu pene?

Leo; ¡Victoria, por favor! ¿qué es eso?, no tienes edad para andar pensando en eso y menos preguntárselo a tu padre, ten un poco de respeto.

Vict: Papá, relájate, como si no hubiera visto el de mis compañeros, ellos también tienen erecciones.

Leo: Pero ¿qué dices hija?, te tomarán como puta donde no tengas cuidado.Y por cierto ¿por qué andas vestida asi?, ve y ponte algo, ten respeto con tu padre joder.

Vic: Papi, no seas pesado, me gusta estar cómoda, además por lo que veo te sienta bien lo que ves jajajaja.

Leo: Hija calla esa boca, ¿cómo puedes decir eso? Eso es desagradable, como dices fue por el ejercicio.

Leo no entendía, lo que acaba de decir no tenía sentido pero aún así lo dijo con tanta confianza como si realmente lo creyera.

Vict: Como digas, papi.

Dijo antes de darse la vuelta y dirigirse al lavaplatos.

Su padre quedó embobado en ese par de nalgas blancas balanceándose a cada lado. Tanto que estaba pensando en lo suaves, tersas y deliciosas que debían estar cuando su hija lo sacó de sus pensamientos

Vict: Papá ven ayúdame, rápido.

Su padre despertó, y no se había fijado que había regado medio vaso en su pantaloneta, se había embobado con el trasero de su hija.

Él acudió al llamado de su hija y se puso detrás de ella, y la rodeó con sus brazos, sintiendo su calor e inevitablemente tocando su desnudo trasero con su pene.

Leo: ¿Qué ocurre hija?

Vic: No puedo limpiar esto, froto y froto y no sale ..

Por el movimiento, empezaba a empujar su trasero hacia Leo y su verga comenzaba a crecer otra vez. Victoria estaba limpiando una grasa de un sartén muy sucio.

Leo: Mira, debes hacerlo con más fuerza, con lo cual se apretó junto a su hija sintiendo su delicioso trasero .

Vic: Lo sé papá, pero no sale.

Comenzó a frotar nuevamente y movía de lado a lado su trasero, empezando a sentir el pene de su padre como se iba poniendo duro.

Leo cayó en cuenta de que se estaba  restregando con el culo de su hija, que delicia y como si su hija leyera su mente.

Vic: Papá que rico… dijo a su vez que ensartaba la verga de su padre entre sus nalgas… tu verga así de dura, ¿eso se come mamá todos los días?

Leo: Pues hija, ahora con su nuevo trabajo no hemos podido.

Leo pensó, por qué carajos estoy contándole esta intimidad a mi hija pero un chorro de agua proveniente de una cuchara que hizo interferencia con el grifo lo distrajo.

Leo:  Victoria, qué has hecho….

Y llevó sus manos al top de su hija con la intención de limpiarla pero terminó, sin saber por qué, magreando sus senos.

Vict: ay, papi ¡qué rico! .. sigue ..

Gimió su hija sintiendo como la repasaba con la verga y le amasaba sus senos.

Leo: Hija esto no está bien..., pero ¡qué rica estás!.

Tras decirle eso le dió la vuelta y quedaron viéndose a los ojos, su padre la tomó por la cintura y lentamente fue acercando su boca a la de su hija, mientras su mano derecha recorría el tanga de su hija en dirección a su ya húmeda vagina, y cuando sus labios empezaban a rozarse y la mano llegaba al monte de Venus de su hija, empezó a caer en la cuenta de que esto no estaba bien, quería tener sexo,pero aquello no debía pasar, Victoria, al sentir la mano de su padre hurgar ese lugar, hasta el momento virgen, se sintió insultada y le dió con toda su fuerza a sus testículos con la rodilla, haciendo que su padre se encorvara de dolor,  poniendo su cara entre el par de senos de Victoria, que al sentirlo le agarró de la cabeza y le pegó tremenda cachetada que lo dejó en el suelo adolorido y confundido.

Victoria con una ira que venía de un lugar que no conocía dijo:

Vic: Pervertido de mierda, ¿cómo te atreves hacer eso?, desgraciado, no me vuelvas a tocar a menos que quiera o se lo contaré a mamá, pajón de mierda.

Leo: Pero hija espera, algo está mal , todo esto no puede ser normal, así no eres tú y me siento raro

Vic:El único raro eres tú, no te me acerques desgraciado..

Leo: Hija….

Y diciendo eso salió en dirrección hacia su cuarto. Leonardo se quedó muy confundido y sintiéndose culpable, no por lo que había pasado, sino por cómo su hija había reaccionado.

Victoria estaba furiosa con su padre, si le gustó lo que estaba haciendo y le gustaba el tamaño de la verga de su padre, pero que la intentara besar o tocar su húmeda vagina no le gustaba para nada.

Llegó a su cuarto y se encerró, revisó su celular y vio que Luis le había escrito.

Luis: Hola nena ¿cómo vas?, ¿Te late estudiar esta tarde?, Voy a estar libre si deseas venir y repasar un rato estoy seguro aprenderás mucho hoy .

Victoria pensó que era mejor ir y así dejar de pensar en el estúpido de su padre .

Escogió cualquier cosa de vestir, quería salir cuanto antes, se puso una falda de mezclilla a medio muslo, unos zapatos converse negros y una blusa pequeña. Bajó las escaleras y antes de salir vio a su padre levantándose del suelo adolorido y con la cara roja del dolor.

Lo vió con cara de odio y salió de la casa tirando la puerta mientras su padre inútilmente intentaba llamarla:

Leo: Hija espera, no te vayas así…

Victoria tenía prisa, lo demostraba al andar, al salir apresurada, no usó sostén, por lo que sus senos a cada paso rebotaban gracias a la gravedad dando un espectáculo hermoso a quien la tuviera a vista. Llegó a la casa de su vecino Luis, timbró , se demoró un buen rato en abrir, pensó que se habría quedado dormido, pero escuchó pasos y escuchó la puerta abrir.

Luis: Hola nena ¿cómo vas?, Estás hermosa ¿y ese cambio de look?

Vic; no es para tanto, discutí con mi padre y tu mensaje le cayó como un alivio.

Luis: Sigue, sigue por favor.

La dejó pasar y siguió el Bamboleo de sus tersas nalgas ocultas por la falda, aunque no era difícil saber la forma de estas.

Llegaron al comedor y Luis sacó unos libros, Victoria no sabía bien que estudiarían, pero cualquier cosa es mejor que estar en casa con el pervertido de su padre, eso pensaba.

Luis comenzó a explicarle a Victoria el siguiente tema que vendría en su clase, y comenzó a prestar atención la cual no duró mucho ya que le distrajo al principio la voz de Luis, una voz que le pareció gruesa y firme, después empezó a ver los brazos los cuales le explicaban y ejemplificaba las cosas, los notaba gruesos y grandes, y terminó observando todo su cuerpo para que al final sus ojos terminarán fijándose en el rostro de Luis, un verdadero hombre, decente y formal. Sentía cosquillas en el estómago y como su vagina se empezaba a humedecer…. Se relamió los labios, en un momento los dos se quedaron mirando a los ojos fijos y Luis rompió el hielo:

Luis: Y entendiste esto que te explique.?

Vic: Claro claro, no hay dudas .

Pero los ojos de ambos recorrían el rostro del otro, se empezaron acercar, hasta que se fundieron en un beso tierno al principio, que después se volvió más pasional, y Luis metió su lengua en lo más profundo de la boca de Victoria y ella ante esas nuevas sensaciones se dejó hacer, Luis puso sus manos en sus senos y empezó a amazarlos, no duró mucho antes quitarle la blusa y luego,sacarlos del pequeño top y acariciarlos naturalmente. Victoria gemía entre el beso, pero fue cuando Luis metió su mano entre su falda que se alertó e hizo que se separan.

Luis: ¿Qué pasó muñeca .?

Vic: Hem, me gustas y todo pero es que….

Luis: ¿Qué amor ?

Vic: ¿En serio soy tu amor o se los dices a todas? - dijo con el último atisbo de cordura -Y bueno no es sencillo, es que soy virgen.

Luis: No te preocupes, si no quieres no pasará nada, que no quieras hacer.

Victoria quería irse, pero esta oportunidad ante este hombre, del cual estaba profundamente anonada y admiraba, le gustaba mucho y decidió quedarse y entregarse a él.

Vic: Siempre has Sido nuestro vecino y ahora te conozco más, como dijiste es mi decisión y decido que me hagas el amor.

Luis pensó para sus adentros, si supieras que esa decisión la tomé yo por ti.

Entonces Victoria se lanzó contra Luis el cual la recibió en sus brazos y tomándola de la cintura, bajó sus manos y empezó a masajear su culo. Volvieron a juntar sus bocas y recorrer sus cuerpos. Luis recogió en la cintura la falda de Victoria e hizo a un lado su hilo y empezó a masturbarla, la cual empezó a gemir. Luis dejó de besarla y atrapó uno de los pezones y empezó a chupar y morderlos, lo cual hacía gemir como loca a Victoria. Siguió masturbando la y masajeando su clítoris y empezó a sentir que Victoria estaba a punto, así que para mantenerla así sacó su mano y se separó de ella.

Victoria jadeando le dijo:.

Vic: Hey no pares, hazme el amor, no te detengas.

Luis: Eso me gusta, vas aprendiendo. Pero si quieres realmente eso, no te resultará fácil.

Victoria no entendía, ella quería darle su virginidad y que sea su primer hombre, estaba cachonda y su mente perdida pero se le aclaró todo con lo que le dijo a continuación.

Luis: Eres una nena preciosa y hermosa, pero no cojo con cualquiera, primero que todo no te haré el amor, eso es súper cursi en serio. Tendrás que pedirme que te folle y que me harás caso en lo que te diga.

Vic: ¿Quieres decir como si fuera tu hija? - lo dijo con su padre en mente, aún no procesaba las ideas impuestas por Luis

Luis: Más bien mi sumisa, te prometo que experimentarás mucho placer, pero ¿qué decides?

Victoria no se lo pensó mucho estaba caliente y quería terminar y que Luis continuara haciéndole sentir tanto placer.

Vic: Claro, acepto lo que me pides. Me gustas y quiero experimentar nuevas cosas, acepto ser tu sumisa y obedecerte en todo.

Luis: Me gusta que tomes tus decisiones, ahora empecemos con tu entrenamiento.  Desnúdate.

Victoria quedó en shock al principio, pero con valentía se levantó y se comenzó a sacarse la ropa. Cuando Tiro al suelo su top y falda Luis la detuvo.

Luis: Para ahí, no te quites ese hilo, te ves irresistible. Ahora arrodíllate frente a mí.

Ella lo hizo, él sentado en la silla la miraba con aires de superioridad le dijo:

Luis: Te enseñaré a chupar verga.

Ella asintió obedientemente.

Luis:Sácala y empieza a masturbarme, y cuando esté dura empieza a lamer desde la base hasta el glande.

Victoria obediente cumplió con la tarea, un poco sorprendida, porque su papá ya hubiera estado empalmado en ese momento y en unos minutos se estaba metiendo hasta la mitad de la verga de 19 cm de Luis, lo hacía algo torpe pero bien para ser su primera mamada. A Luis le encantaban las mujeres blancas por lo sonrojadas que se ponen cuando tienen sexo, eso lo mataba y Victoria al igual que su madre eran preciosas en ese detalle, tomaban un color hermoso.

Después de un tiempo le dijo:

Luis: ¿Quieres que te folle?

Vic: Por favor.

Luis: Siempre que te dirijas a mí me dirás señor, ¿entendido?

Vic: Sí señor, por favor folle conmigo, quiero que me desvirgue.

Luis se levantó rápidamente, haciendo que Victoria se fuera de espaldas al suelo, pero antes que está cayera la tomó del pelo y la alzó en vilo como una muñeca y la acostó boca abajo bruscamente sobre la mesa. Tomó sus caderas y las recorrió con sus mano, y una vez en su trasero lo azotó varias veces con sus manos hasta dejarle rojo. Victoria gimió por el trato duro, aunque le encantaba.

Vict: Unmgg...¡qué rico!, señor Luis por favor no pare…

Luis: ¿Qué quieres mi perrita?

Vic: Por favor , fólleme, quiero ser suya.

Luis: ¿En serio?, Me harás caso ante cualquier cosa?

Vic: Lo que quiera pero fólleme .

Luis comenzó a frotar su pene por todo el culo de Victoria y deslizó su verga por su  vagina sin penetrarla, repitiendo el movimiento varias veces, tanto que la misma Victoria movía su trasero con fuerza opuesta para buscar penetrarse .

Y cuando menos lo esperaba Victoria Luis la agarro del cuello, y la embistió de un sólo movimiento enterrando su pene en lo más profundo de su vagina, ahí en el comedor de su vecino dejó de ser virgen, sacándole un grito de dolor y placer.

Luis esperó a que se adaptara a su verga y empezó un mete y saca lento pero poco a poco fue tomando ritmo hasta el punto que la mesa se movía rayando el piso mientras Victoria gemía al son de las embestidas, con la mano libre continuó nalgueándola a placer y apretando sus senos y pellizcándole sus pezones entre la mesa a placer. Victoria gemía por el gusto y dolor recibidos, no se imaginaba que su primera vez iba a ser con el vecino ni mucho menos que iba a ser llena de tantas experiencias, estaba pensando en eso cuando llegó a un orgasmo profundo que la hizo vibrar y Luis continuo sin descanso. Así siguieron por 40 minutos más, Victoria experimentó 5 orgasmos y cuando Luis estaba próximo a venirse, aumento las embestidas, Victoria pensaba que el pene le saldría por la boca.

Luis se recostó sobre ella y empujó su cabeza contra la mesa fría, y mientras con una mano apretaba su rostro contra la mesa, deformando el bello rostro de la chica, con el otro le apretaba el cuello asfixiandola, y en eso le dió una última embestida y puso su mayor fuerza sobre la niña, que sentía que le faltaba el aire, que su rostro se deformaba y que su vagina terminaría abierta como un tubo, pero sobre todo el inmenso e impensable orgasmo que tuvo cuando sintió la leche de Luis invadir en toda su vagina. Puso los ojos en blanco y lo único que podía sentir era placer. Así duraron un rato más y Luis se retiró sin delicadeza con el típico ruido de botella… plap…

Y tras su salida un abundante flujo de semen y sangre salió consigo, Victoria parecía muerta, con los ojos idos y su cuerpo temblando.

Luis por su parte se sentó de nuevo a descansar, mientras observaba a la chica que se acababa de coger, ahí, indefensa, desnuda y follada no había nada mejor, y más aún sabiendo que la tenía para lo que quisiera.

Victoria por su parte tardó otro poco en volver en sí, y cuando lo hizo intentó ponerse de pie pero sus piernas le dolían, le costaba caminar a lo que Luis le dijo:

Luis; No es bueno que camines, arrodíllate y camina hacia aquí.

Victoria ante el inminente dolor, hizo caso y se dirigió hacial como se le dijo, y cuando estuvo frente a Luis.

Luis: Pon tu cabeza en mi pierna.

Victoria sin pensarlo obedeció.

Luis cuando tuvo la cabeza de la joven Victoria en su pierna acaricio su cabello y rostro, el cual estaba rojo con las marcas de sus manos, se veía preciosa.

Victoria viendo ese acto de amabilidad tuvo la iniciativa y como una buena mascota comenzó a lamer la pierna de Luis, como toda una perrita pero lo que ocurriría a continuacion cambiaría todo.

Victoria escuchó un ruido del 2do piso, se inquietó y  Luis se dió cuenta de eso.

Luis: Fresca, es mi sirvienta arreglando, ya vendrá a arreglar tu desastre.

Refiriéndose a la línea de semen que dejó su coño al caminar .

Luis: Vane, mi amor, puedes venir .

Victoria escuchó sorprendida, se refería a Vanesa su madre? Como su madre estaría trabajando para su vecino Luis como sirvienta, ella estaba en su trabajo, todas esas dudas se responderían en breve.

Unos pasos se escucharon, cada vez más cerca y Victoria mirando a las escaleras, quedó helada cuando la persona que apareció tras las escaleras era su madre, y muy diferente a cuando había salido esta mañana, tenía tacones de aguja por lo mínimo de 15 cm, una cortísima falda que apenas llegaba un poco más abajo del pubis, medias veladas sujetas con ligero que sobresalían de la falda, pero tan corta que apenas le cubría su culo, desde su postura podía ver el tanga blanco que usaba y que se notaba levemente en la falda, la blusas sin ser menos también pequeña, no le alcanzaba a cubrir su ombligo y sus senos amenazaban con salirse, se notaba que no llevaba sostén ya que se movían libremente.

Vanesa: si mi señor, ¿qué desea?

Luis: Por fa, amor puedes limpiar ese reguero que hizo tu hija, es muy sucia debemos educarla mejor. ¿Y que tal quedó todo arriba?

Vanesa; Lo siento mucho mi señor, creí haberla educado bien pero lo arreglaremos. Y todo el 2do piso quedó arreglado, baño cuarto todo, limpio e impecable como le gusta .

Luis: Y recuerda lavar bien el baño, de lo contrario si vuelve a quedar sucio lo lavaras con la lengua, entendido?

Vanessa : Si señor no tendrá queja de mí.

Y Luis la tomo de la cintura y trayéndola hacia él se fundieron en un beso profundo que consternó aún más a Victoria, se sintió celosa.

Vic: ¿Mamá que ocurre, porque estás aquí y vestida así?, ¿Por qué le eres infiel a mi padre, tu esposo.

Vanessa: Ay hija, no le soy infiel, sólo cumplo con labores extra de mi trabajo.

E ignorando la cara de su hija, se fue caminando hasta donde iniciaba el reguero , y poniéndose en rodillas y pegando su lengua al suelo, comenzó a recoger toda la leche y sangre que de su hija estaba saliendo. Mientras victoria miraba sorprendida y asqueada a su propia madre, pero todo cambio cuando llegó a donde estaban y agarrando sus nalgas comenzó a chupar y lamer lo que salía de su hija.

La primera reacción fue separarse de su madre, pero Luis la detuvo

Luis: calma querida, se que es nuevo pero verás como disfrutarás si dejas. ¿Acaso no quieres disfrutar?

Victoria: Claro .  Pero gummm… ahhh.

Luis: Déjate llevar.

Y así Vanesa le saco unos cuantos gemidos a su hija, tragando parte de la mezcla pero guardando suficiente en su boca, cuando creyó suficiente se separó sacando suspiros de su hija, puso su rostro a la misma altura que de Victoria, tomó su nuca y ante la sorpresa de esta se fundió en un beso blanco, metiendo Vanesa su boca llena de fluidos y compartiéndolos con su hija. Después de un largo beso se separaron, dejando entre sus bocas un hilo de color rojizo. Victoria quedó anonadada y sorprendida ante lo cual Luis ..

Luis: Querida, explícale a tu hija…

Vanessa: Hija, no le estoy siendo infiel a tu padre, a él lo sigo amando como el día en que nos casamos, pero como viste con Luis he experimentado placer como nunca había hecho, ni tu padre me ha hecho sentir así, solo follo con él porque lo hace delicioso y veo que tu ya lo probaste, y tranquila no soy celosa.

Victoria: y...y...y . Porque el beso, mamá no soy lesbiana y no creía que t…

Vanessa le puso un dedo en su boca silenciándola.

Vanessa: Yo tampoco querida, pero nuestro señor Luis dijo que de presentarse el caso quería vernos besándonos, y es lo mínimo que podemos hacer en agradecimiento .

Victoria: wow mamá es mucho por procesar .

Luis: Vanesa puedes ir a preparar el jacuzzi, nos vamos a divertir los 3 en un rato.

Vanessa: Si señor, de inmediato.

Y levantándose con esos tacones que lo hacía verlo fácil, se fue moviendo sus caderas sensualmente.

Luis: Ahora que estamos los dos cuéntame ¿qué ocurrió con tu padre?, ¿Todo está bien?

Victoria:Hemm si y no .. lo que sucede mi padre intentó seducirme, besarme pero cuando quería tocarme no me gustó para nada y lo mandé a la mierda, no quiero un padre violador .

Luis: Eso que me cuentas es tremendo y vamos a darle una solución, hoy cuando te vayas te daré instrucciones precisas que debes seguir y si obtenemos esas pruebas lo tendremos atrapado, tu tranquila.

Victoria: Gracias mi señor, no sé qué haríamos mi madre y yo sin usted, es una buena persona.

Luis: de nada muñeca, y mira este regalo.

Luis le alcanzó una caja de regalo y se lo dió en las manos a Victoria la cual lo abrió y para su sorpresa era un pene de plástico sujeto a un arnés.

Victoria: Y esto señor?

Luis: Es para que jueguen entre ustedes, tu madre y tú, ya que conoces la verdad y  mejor que experimentar con alguien como tú madre, tienen la confianza y el amor que necesitan, nada mejor que eso, además me encantará verlas penetrarse entre sí.

Victoria: Muchas gracias señor Luis, no sé cómo puedo agradecerle.

Luis: Empieza ahora poniéndote de pie, lleva esa caja y la dejas adentro del baño junto a la puerta y que tu madre no se de cuenta, ya te avisaré para que lo uses.

Victoria: Sí mi señor .

Y Victoria se levantó con la ayuda de Luis, que en poco tiempo ambos se dirigían al jacuzzi, donde otra experiencia los esperaba.

Mientras tanto Leonardo estaba adolorido en su cama pensando en el delicioso culo y senos de su hija, no podía olvidar la textura o suavidad de ellos, mientras se mataba a pajazos con esa imagen en mente.

Esta historia continuará.