El juego de Luz ...
Una cita, tres personas y a disfrutar del juego de la noche ....
EL JUEGO DE LUZ
Se respira un aire de tranquilidad, que se rompe tan solo en breves secuencias de segundos, tal vez por el canto de los pajarillos que se retozan alrededor de la ventana de Luz, o tal vez por que Luz se ha levantado eufórica, puesto que la primavera comienza a dar sus primeros pistoletazos de salida. Apenas se escuchan los ruidos de los coches, Luz mira por la ventana, fijándose en cada persona que pasea por la calle, recorriendo con su mirada profunda cada detalle que caracteriza a su pequeño barrio. De repente algo rompe el magnifico silencio que estaba haciendo de las primeras horas de la mañana algo diferente. Es el teléfono de Luz. Al descolgar el aparato una voz masculina le ha dicho buenos días, con firme y serena. Luz ha contestado buenos días, pero su voz temblorosa advierte que no sabe con quien esta hablando.
_ Hola Luz, ¿Cómo te va? Ha preguntado la voz masculina, Luz entre titubeos contesta:
_ Hola estoy bien gracias, pero podrías decirme, ¿Quién eres?
La voz masculina ya había advertido con anterioridad que Luz no sabia con quien hablaba, respetuosamente pero con tono irónico se atreve a decir, ¡que poca huella deje en ti Luz!.
Luz pensativa, recuerda esa vez pero no puede recordar a quien pertenece, tan sólo nota una gran seguridad, algo que la tranquiliza. La respiración de Luz es agitada, y siente como su corazón late con rapidez. _ Soy Miguel. Ha contestado dicho la voz masculina sin dejar media más palabra a Luz.
Luz se ha quedado sorprendida no esperaba la llamada de Miguel, por nada del mundo.
_ Perdona Miguel, no esperaba tu llamada y menos a estas horas de la mañana.
_ Estoy en la ciudad, sólo te llame por si querías que nos viéramos antes de marcharme me voy para Madrid mañana por la mañana.
Luz más serena le dice que sí, que podrían tomar un café o incluso salir a cenar. A lo que Miguel ha contestado con mucha rapidez, diciendo:
_ Nos vemos esta noche, en la pequeña taberna irlandesa que hace esquina junto al parque de las siete lunas, ¿Té parece?.
_ De acuerdo Miguel, nos vemos a las diez.
_ Adiós.
_ Adiós.
Luz ha comenzado la mañana con calma, pero la llamada de teléfono ha roto la calma del momento, puesto que a Luz no se le hubiera pasado nunca por la cabeza volver a ver a Miguel.
El día ha transcurrido con normalidad, Luz se está preparando para su cita cuando nuevamente suena el teléfono, esta vez la voz si le es conocida, es un amigo algo más que amigo, que juega con Luz a la vez que ella con él. No se deben nada, no son nada el uno del otro pero ambos sienten un desenfreno y una pasión sexual que sólo ellos saben saciarse.
El le ha propuesto verse ésta noche, y Luz aún sabiendo que la espera Miguel ha accedido. Luz le ha dicho de quedar a la misma hora y en el mismo sitio que a Miguel, pero con una condición, sólo una, y es que no puede acercarse a ella, tan sólo puede mirar.
Jorge ha dicho que sí, sabe que los juegos con Luz están siempre al alcance de la circunstancia más remota.
Luz ha llegado a la taberna irlandesa, se ha vestido muy exquisita para la ocasión, una camisa negra con mucho escote, y un pantalón ajustado a la pierna con las botas hasta la rodilla, marcando cada una de sus curvas, el pantalón es tan ajustado que se puede ver bien marcado el pubis de Luz, esto junto a un poco de perfume muy seductor hará de la noche algo mágico.
Miguel la espera sentado en la banqueta mientras se toma una cerveza. Luz se acerca de Miguel y se saludan con dos besos, más bien fríos por parte de Luz y deseosos de placer por parte de Miguel. Luz pide una cerveza, mientras hablan de cómo les han ido estos meses a ambos.
Jorge ha entrado por la puerta discretamente te ha colocado enfrente de ellos, para no perder detalle de lo que su amiguita Luz le tiene preparado. Luz da comienzo al juego, Miguel es la víctima del juego sin saberlo. Luz comienza a coquetear con Miguel, éste loco por el deseo que lo lleva a querer poseer sexualmente a Luz es presa fácil. Luz se abre de piernas en la banqueta insinuando a Miguel que miré su pubis, Miguel no puede evitar mirar lo que se esconde bajo el pantalón ajustado de Luz.
Luz acerca su boca a la boca de Miguel, le muerde los labios con deseo y desenfreno mientras Miguel comienza a sentir una gran sensación de poseerla.
Luz juega con los labios de Miguel, mientras Jorge la mira con lascivia, con pasión y ella lo sabe, eso aún la pone más ardiente. El deseo de saber que Jorge la desea y la esta viendo en los brazos de otro hombre la pone a cada minuto más y más caliente.
Luz se levanta de la banqueta y le dice a Miguel que necesita ir al baño. Una vez dentro del baño Jorge entra y se besan apasionadamente, las manos de Jorge recorren los pechos de Luz mientras se besan apasionadamente, Luz acaricia con su mano derecha el pene de Jorge, que esta duro y firme casi listo para llevar a cabo una penetración. Las manos de Jorge se introducen por el pantalón de Luz, hasta llegar a bajarle las bragas ya mojadas, en un estado de placer desenfrenado las manos de Jorge recorren el pubis de Luz e incluso llega a introducir uno de sus dedos, cuando Luz decide parar, para volver de nuevo a los brazos de Miguel.
Jorge esta de acuerdo, con lo cual Luz ha salido del baño y se ha dirigido nuevamente al lado de Miguel, el cual en su intento desesperado por ser complaciente con Luz, ha soltado sin ningún tipo de miramiento; _Joder Luz, ¿Te abras quedado a gusto? Y a comenzado a reír, Luz sin ningún pudor le ha contestado con risa sarcástica; _ ¡No lo sabes bien, Miguel!.
Luz enciende un cigarrillo pensando en lo que acaba de suceder, siente ganas de seguir jugando pero no tiene ni la más remota idea de cómo continuar el juego, pues volver nuevamente al baño, sería ya demasiado para Miguel. Mientras Miguel sigue hablando, Luz parece estar en otro mundo, y Miguel advierte el comportamiento extraño de Luz.
Jorge dispuesto a seguir con el enorme placer atado a la tortura de ver los labios de Luz pegados a los labios de Miguel, manda un mensaje al Móvil de Luz: _ Nena, sal a la calle, te espero dentro del coche, está situado en la esquina.
Luz no sabe como ingeniárselas para, hacer semejante locura, pero sabe que es lo que está deseando y el deseo de sentir las manos de Jorge recorriendo cada milímetro de su cuerpo, hace que empiece a pensar como puede salir a la calle, sin que Miguel advierta nada.
Miguel, dice Luz; he recibido un mensaje de mi hermana es importante, tengo que encontrarme con ella en unos minutos, apenas tardaré unos diez minutos, ¿te importaría esperarme aquí?, Miguel se ha quedado perplejo, pero asiente con un movimiento de su cabeza, dando a entender a Luz que la esperará en la taberna.
Luz sale apresuradamente, apenas se ha puesto el chaquetón negro cuando ya esta saliendo por la puerta de la taberna, con pasos largos se dirige hacia la esquina en busca del coche de Jorge. ¡Ay está! Luz ya puede ver el coche de Jorge, su respiración agitada por el paso largo que le ha conducido hasta el coche, la hace llegar sofocada. Luz se ha metido al coche, Jorge la esta esperando, comienzan de nuevo a besarse desesperados, desenfrenados por el morbo de la situación. Luz urgentemente busca la polla de Jorge con sus manos por encima del vaquero, mientras Jorge con mirada llena de lujuria aprieta los pechos de Luz con fuerza, mientras esta respirando agitadamente, mueve todo su cuerpo con movimientos provocadores que están volviendo loco a Jorge. Luz ha desabrochado el pantalón de Miguel y ha sacado la polla de ésta sin ninguna perdida de tiempo Luz ha comenzado a chuparla con movimientos suaves, Jorge ha bajado el pantalón a Luz a media pierna y ha introducido dos de sus dedos en el coño de Luz haciendo a un lado el tanga. Jorge esta muy excitado y Luz también apenas llevan unos minutos cuando se han pasado al asiento trasero del coche, y ambos comen de sus manjares a la vez, Luz nota como Jorge está llegando a culminar su acto, pero es incapaz de retirar su boca, Jorge a acabado en la boca de Luz, y está consigue acabar también en la boca Jorge.
Luz y Jorge hablan unos minutos y deciden que el juego duré lo mismo que la noche
Luz vuelve a la taberna y permanece sentada en la banqueta con la mirada fija en Miguel, quién no puede dejar de desearla en silencio. Miguel mira los labios de Luz brillantes y humedecidos por el contacto de la cerveza que Luz esta tomando. Miguel propone a Luz ir a cenar puesto que son las diez y considera que es una de las mejores horas de la noche para tal cuestión. Luz asiente con la cabeza y ambos salen de la taberna de la mano. Jorge sigue sus pasos en silencio mientras mira como el hermoso cuerpo de Luz se contornea al caminar. Jorge recorre lascivamente el cuerpo de Luz.
Luz camina despacio con un ligero movimiento muy sensual de las caderas, dejando que cada uno de sus pies pida paso al otro. Han llegado al restaurante y Jorge no puede evitar hacer el juego más difícil para Luz.
Luz y Miguel se han sentado en una mesa para dos, pero de repente Jorge se acerca para saludar.
_¡ Hombre Luz!, ¿qué tal?
Luz desconcertada por la situación aunque deseosa de seguir con el juego contesta más bien nerviosa.
_ Buenas noches, Jorge ¿qué tal?, ¿qué haces tu por aquí?
_ He venido a cenar, pero creo que mi cita va a ser todo un desastre, la chica con la que he quedado no va a venir.
_ Vaya, lo siento mucho ¿Quieres cenar con nosotros?, te presento a Miguel somos buenos amigos.
Miguel se ha quedado perplejo por la situación, lo que iba a ser una cena de dos de repente te ha convertido en una cena de tres, pero con mucha educación, Miguel saluda a Jorge y le pide que por favor tome asiento.
El camarero se ha acercado para tomar nota y colocar un cubierto más en la mesa, mientras los tres han brindando por el encuentro.
Durante la cena los tres han entablado conversación e incluso el ambiente ha sido, el de tres amigos que se conocen de toda la vida.
¡Brindemos! Ha dicho Luz, y sin más deleite Luz ha dado un beso en la boca a cada uno de ellos. Jorge no se ha sorprendido pero Miguel ha reaccionado de forma que Luz no esperaba, parece que no le ha disgustado tanto ver como Luz besaba la boca de Jorge al igual que la suya.
Es el momento idóneo ha pensado Luz tras observar la reacción de Miguel después de los besos. Entre risas y vino, Luz se atreve a decir;
_Chicos, habéis tenido alguna vez la fantasía de estar con dos mujeres a la vez, ¿a qué sí? Jorge muy picaron ha contestado; _Si claro como todo hombre, ¿no, crees Luz?
Miguel no ha contestado nada, se ha quedado pensativo pero no a articulado palabra.
_ Quiero estar con dos hombres a la vez. Dice Luz.
_ En serio chicos, os lo digo de verdad.
Jorge acaba de ver el juego de Luz pero Miguel todavía no cree lo que esta escuchando.
_ ¿Os atrevéis?, ¿Queréis hacer realidad mi fantasía chicos?
Miguel muy serio ha contestado rápidamente dirigiéndose a Luz;
_Vale deja de beber te esta sentando mal el vino.
Luz despechada por las palabras de Miguel, ha cogido la barbilla de Jorge y le ha besado la boca apasionadamente, Miguel toma la copa de vino en su mano y bebe un trago, al soltarla Luz le besa la boca de igual manera que a Jorge y esto lo pone muy nervioso;
_ Luz, basta no bebas más te hablo en serio.
_ Miguel, cálmate sólo es un beso. Se ha atrevido a decir Jorge.
Miguel siente la necesidad de jugar al juego que le esta provocando un placer escondido, pero no se atreve a llevarlo a cabo. El simple echo de imaginarse a Luz en los brazos de Jorge lo excita pero también lo asusta.
Jorge propone tomar una copa en su casa, miguel esta deseoso del cuerpo de Luz pero la situación para él es tensa, Luz accede sin pensar en Miguel y éste accede pues prefiere jugar que ser el que se retire y perder el placer de sentir el calor de Luz