EL INTERNADO (27) Dos folladas para Niko

Una grabación de las que yo guardaba,nos ayudó mucho a mi hermano y a mí, para poder follarnos el riquísimo culo de Angel Carmona, su colega y compañero en la academia militar.

EL INTERNADO (27)

Dos folladas para Niko

Casi sin darme cuenta, me estaba haciendo una buena filmoteca de todas las folladas que iba teniendo, tanto con mis compañeros del internado como con los nuevos amigos que no pertenecían a él. Las que grababa con Marcelo eran las mejores, ... los dos solos, haciendo un trío, en plan orgía con más pollas, la follada que le pegamos a mi amiga Marta, ... pero la que más me gustaba ver, y guardaba como oro en paño era la que tuvimos con mi hermano Luis. Precisamente esa grabación nos ayudó mucho a mi hermano y a mí, para poder follarnos el riquísimo culo de Angel Carmona, su colega y compañero en la academia militar.

Mi hermano se presentó a recogerme con su colega, le había dicho la semana anterior que ese viernes lo pasaría en la casa de campo que tenemos, ya que estaban las fiestas del pueblo, y él también pasaría el fin de semana allí por qué estaba de permiso. Además, sabía que mi padre no estaría ese finde a causa del trabajo, así que estaría solo con Luis y aprovecharía para comerle la polla y hartarme de follar con él. Con lo que no contaba era con su amigo, el cabo Carmona, el tío estaba para comerselo desde la cabeza hasta los pies de lo bueno que estaba el cabrón, y pasarse horas mamando de esa polla gorda que le colgaba entre las piernas. Mi hermano lo había invitado a pasar los dias de permiso con él en nuestra casa, en plan colegas para desconectar de la academia, y disfrutar de unos baños en nuestra gran piscina.

Luis también le había comentado a su colega lo de las fiestas del pueblo, ... que había mucho ambiente, que las bebidas eran muy baratas, que las niñatas mojaban las bragas al ver a un soldado, y que si querías, se follaba bastante. Con ese pretesto y esos argumentos, lo que mi hermano perseguía era pegarse una buena follada con el cabo Carmona. Y ahí entraba yo, ... mi hermano le había cogido gusto a las pollas, y por lo visto le tenía ganas al coleguita, pero no sabía como entrarle y preparar el terreno para llevarselo a la cama, y lo más importante, ... como reaccionaría el tío ante la situación.

LUIS: Hola hermanito. Mira este es mi compañero de la academia, el cabo Angel Carmona, ... Carmona para los colegas.

NIKO: (Estrechándole la mano) Encantado tío.

CARMONA: ¿Que pasa chaval?

LUIS: Como estamos de permiso este finde, lo he invitado a nuestra casa del pueblo para que lo pase con nosotros, y se divierta un poco en la feria.

NIKO: Ah, ... estupendo. Si, las fiestas del pueblo son bastantes animadas y divertidas, creo que te van a gustar tío.

CARMONA: Eso espero, por que tu hermano me ha hablado muy bien de la feria, y para no hacerle un feo, he tenido que romper una cita con una chavala.

LUIS: Para ya semental, ... jajaja, ... ya verás lo bien que nos lo vamos a pasar tronco. Escucha Niko, le he comentado a mi colega, que tu sabes donde conseguir buen costo, ya sabes, porros, pastillas, y algo de polvito blanco.

CARMONA: Eso, ... eso, ... que por lo menos vayamos contentos a las fiestas.

NIKO: Jajaja, ... sin problemas colegas. Ahora de camino para el pueblo te digo por donde ir, y paramos un momento en casa de un amigo que tiene de todo.

Le fuí indicando a mi hermano que conducía, por donde tenía que ir hasta la casa de Rashîd. Dos veces me equivoqué de calle, por estar mirándole el paquete a Carmona que iba sentado de copiloto, y desde mi perpectiva sentado en el asiento de atrás, le podía divisar con los ojos una entre pierna prominente y bastante abultada. Ya iba más que caliente y empalmado por culpa de mis fantasias, cuando me bajé del coche y entré en casa de Rashîd. Ellos se quedaron en el coche hablando y fumándose un petardo, mientras esperaban a que yo volviera con la mercancía.

Cuando entré en la habitación de Rashid, se alegró muchísimo de verme, el cabrón estaba delicioso con el torso desnudo y el calzoncillo blanco marcándole el paquete. Me aproximé hacía él, hasta pegar mi boca con la suya fundiéndonos en un excitante beso, mientras el tío me rodeaba la cintura con sus fuertes brazos, posando sus manos en mis nalgas y me presionaba su paquete contra el mío. Era lo que me faltaba para ponerme más cachondo y caliente si cabe. Bajé con mi boca y lo fui besando por todo su cuerpo hasta llegar a su bragueta, hasta el paquete gordo y robusto que se formaba en sus calzoncillos. Sabía muy bien, que al cabrón le excitaba muchísimo que le besara la polla por encima del calzoncillo, que mojara la tela con mi lengua, y que le quitara con los dientes la prenda, dejando al descubierto su rico pollón que tan gustosamente me regalaba.

Al destapar su bragueta me encontré con una hermosa verga, muy gruesa y muy grande, tal como la recordaba, deseosa de recibir placer. Así que, como buen mamón que soy empecé a lengüetear el capullo poco a poco, suavecito, saboreando y recogiéndo con la lengua su rico pre-cum. Me metí toda su polla en la boca, y la fuí metiendo y sacando suavemente hasta que Rashid se colocó con las piernas abiertas, me agarró la cabeza con sus manos y comenzó a follarme la boca como un puto bestia. ¡Como había echado de menos aquél pollón, joder! ... En menos que canta un gallo, sentí una gran cantidad de leche en mi boca, que me inundaba hasta la garganta y se me salía por las comisuras de los labios.

RASHÎD: ¡Ahhhhh! ... ¡Joder, que gustoooo! ... Eres único chaval ... ¡Que boca tienes mamonazoooo! ... ¡Ufffff! ... Sigueeee, tragaaaa, asiiiii, ... siiiiiii.

Después de aquella mamada, y de que el tío se corriera en mi boca regándomela con su leche, estaba que me subía por las paredes del calentón, y notaba como las venas de la polla me iban a estallar de la empalmada. Me colocó de rodillas encima de la cama y me bajó la ropa hasta los muslos, desnudándome por completo mi culito respingón. Con la mano derecha me separó una de las nalgas, y con la izquierda agarró mi polla por el tronco y empezó a pajeármela, como el que ordeña a una vaca lechera. Un escalofrío de placer y de gozo, me recorre por toda la espalda cuando Rashid penetra mi ojete con su lengua. ¡Qué gustazo! ... Ya no puedo más, me tiene al límite, a mil por hora, y el muy cabrón lo sabe por mis gemidos, y lo nota en su mano mojada por el babeo que segrega mi capullo por el gusto.

Me masturba el pollón suavemente, muy despacio, haciéndome sentir el tacto de su mano apretándome el manubrio, y sin parar de lametearme el ojete. Mete y saca la lengua de mi ano, de una forma alucinante y bestial. ¡Dios, no resisto tal placer! ... El mamón se da cuenta de que me derrito de placer, y aumenta el ritmo de su mano y de su lengua. Luego pasa a los dedos, alternándolos con sus lamidas, introduciéndome por el boquete del culo dos de golpe, después tres, sin tiempo a contar cuatro, y al final encontrarme con la mano dentro del recto. Bombea y bombea con la lengua y los dedos, al mismo tiempo que yo me retuerzo de placer. Me corro, y me descargo entre gritos de placer, desparramando el semen por toda la sabana. Rashid no deja de masturbarme la polla, rápido, fuerte, duro, vertiginosamente, manchándole la mano de esperma, mientras me tiene ensartado por el ano como un pinchito moruno.

NIKO: ¡Ahhhh! … ¡Que gustooooooooo! … Joder tío, no aguantaba  más colega ... ¡Siiiiiiii! … ¡Ahhhhhh! … ¡Dame fuerte cabrón! … ¡Ahhhhhhhhh!

Después del polvo, le conté a Rashid que aparte de querer verlo y saludar a su polla, había venido a comprar mercancía de la buena. Le conté que la quería para las fiestas del pueblo, y para compartirlas con mi hermano y un colega de su academia. Rashid sabía perfectamente las folladas que había tenido con mi hermano Luis, por que yo se las había contado, incluso le conté la de Marcelo vestido de niñata. Asi que terminé explicándole mis intenciones, y las de mi hermano, que no eran otras que follarnos al soldado buenorro.

RASHÎD: Que puta estás hecho chaval, ... jajaja, por eso me encantas joder, y te quiero Niko, ... te quiero de verdad niño. Mira, ... llevate todo lo que quieras, y no me tienes que pagar nada, pero eso si, ... con una condición.

NIKO: ¿Cual?

RASHÎD: Este domingo vente a mi casa con tu hermano, solo tu y él. Doy una pequeña fiesta solo para un selecto grupo de amigos míos, y me encantaría que asistierais. Ven, y no te arrepentirás.

NIKO: Por supuesto tío, dalo por hecho que vendré con mi hermano. Además, conociéndote ya, seguro que tienes algo en mente para gozar con Luis ... ¿A que si?

RASHÎD: Solo te diré que no te vas a aburrir, ... y él tampoco, te lo aseguro. Os espero aqui sobre las 20:30, ... y lo dicho, coge todo lo que quieras.

Volví al coche con un buen cargamento de todo, le dije a Luis que nos pusiéramos en marcha y que no corriera, por qué si nos paraba la policía, íbamos a pasar una larga temporada a la sombra. Cuando llagamos a casa mi hermano le enseñó a su colega el dormitorío donde iba a dormir, mientras yo me refrescaba dándome una ducha, y me quitaba el olor a polla que me había dejado Rashid. A los pocos minutos Luis entró en el baño, corrió la cortina de la ducha para verme, y se sentó en el water para hablarme.

LUIS: ¿Sabes hermanito? ... He cortado con Maite, ... lo hemos dejado por un tiempo, hasta que me aclare las ideas.

NIKO: Ah, ... ¿Y esas ideas, tienen algo que ver con una buena polla, un culazo super marcado, y un cuerpazo buenísimo, masculino, y delicioso que está ahora mismo en el dormitorío del al lado?

LUIS: ¡Ufff! ... Está bueno ¿Verdad? ... ¿A que te gusta mi colega Carmona?

NIKO: Está tremendo el cabrón, y tiene un paquete que me va calentando por momentos. ¿Le has visto la polla? ... ¿La tiene grande?

LUIS: Pues claro que le he visto la polla chaval, no ves que las duchas en la academia son comunes y allí nos duchamos todos juntos. (tocándose el paquete) La tiene gorda y bastante grande, de esas que se le nota todas las venas del tronco, y terminan en la punta con un capullo regordete.

NIKO: (Tocándome el ojete) Joder, ... que morbazo. Mira como se me ha puesto la polla hermanito, toda empalmada, solo de imaginarme ese pollón bombeando y taladrándome el ano. ¿Y alguna vez te ha insinuado algo, o te ha dado a entender que quiere follar contigo?

LUIS: Pues ese es el caso Niko, que el tío me mira mucho, me provoca disimuladamente, y siempre que estamos solos terminamos hablando de sexo. Al colega le encanta que le cuente como me follo a Maite, las posturas que hacemos cuando le meto la polla por el coño o por la boca, ... y él me cuenta como le gusta follarse a las niñatas por el culo, ... no por el coño, ¿sabes? si no por el culo. Y ya en las duchas, es super descarado el colega, siempre termina pegado a mi lavándose, ... y es que el muy cabrón, me pone cachondo perdido y malo de vicio cada vez que se pone a mi lado, me dan ganas de lamerle todo el cuerpo con la lengua, el pecho, el culo, la polla, ... ¡Uffff!, y me encantaría ponerlo contra la pared y envergarle todo mi pollón por el culo.

NIKO: ¡Joder, con el colega! ... No te preocupes Luis, que con lo que he traido de casa de mi amigo, y con mis dotes de calienta pollas, te aseguro que este tío folla esta noche con nosotros por cojones. Por que, no te importará que me una a la follada ¿No?

LUIS: Jajaja, ... por supuesto hermano, ya contaba con ello.

NIKO: ¿Y ahora que está haciendo en el dormitorío?

LUIS: Se ha echado en la cama y se ha quedado dormido. Esta mañana tuvo guardia las 5:00, y estaba rendido el pobre, así que lo dejaré dormir un par de horas.

NIKO: Pues ya que tu colega se ha dormido un rato, y que estamos solos en el baño, puedes aprovechar el tiempo para apagarme esta calentura, y taparme con tu polla mis deliciosos boquetes ... ¿No, hermanito?

Estaba super lanzado, me lo comía con la mirada mientras se sacaba la dura polla del pantalón, y le mostraba mi culito bien abierto. En pocos segundos ya me estaba abrazando por detrás, metido conmigo en el plato de ducha, y restregándome todo el pollón por la raja del culo. Después de mojarme bien el ojete de pre-cum, y de comerme a besos el cuello, me dió la vuelta poniéndome frente a él, y comenzó a besarme la boca con frenesí, mientras me metía dos dedos por el boquete del culo. Estuvimos largo rato restregándonos las lenguas, regalándonos la saliva del uno al otro, hasta que me apartó haciéndome un gesto con la mano señalándome su polla e invitándome a comersela. No le hice esperar, así que me agaché delante de su entrepierna y lo apoyé de espalda contra la pared. Le agarré el tronco de la polla con la mano, notando el calor y la dureza del miembro de mi hermano. Me quedé unos segundos contemplando su bello cipote, mirando su capullo exageradamente grande, gordo, y muy brillante por el pre-cum. Comencé a chupársela con suavidad, lamiendo por todas partes, por los lados, succionándola toda entera y tragando más y más, hasta que la cabeza tocó mi campanilla.

Yo sabía que eso es lo que más le gustaba a mi hermano, que le mamara la polla despacito, lentamente, y sintiendo el calor de mis labios recorriendo su verga hasta engullirla completamente. A Luis le encantaba que me la metiera entera en la boca, y que aguantara con ella dentro todo lo que podía, hasta quedarme sin respiración. El muy cabrón me agarraba la cabeza muy fuerte, y me mantenía apretado contra su abdomen, con su pollón dentro de mi boca casi asficciandome, mientras él me miraba la cara roja por el esfuerzo, y me lanzaba escupitajos.

LUIS: ¡Que boca tienes Niko! … Me vuelves loco hermanito ... ¡Uffff! ... ¿Quieres que me corra en tu boca? … ¿Quieres beberte mi leche caliente, mamón? … ¡Ahhhh! ... Y después, follarte ese culito tan rico que tienes ... ¿A que si?

No le respondí, tan solo continué chupándole la polla, devorándola con mi boca, y mamando cada vez más rápido. Al poco noté que su pollón iba tomando un sabor diferente, parecían pequeñas emanaciones de semen por la excitación, y el placer que sentía. De repente mi hermano me suelta un grito ... ¡Trágatelaaaa! ..., y me empuja la polla hasta el fondo con todas fuerzas, hasta que eyacula su leche dentro de mi boca, sobre mi lengua y mis amígdalas. Sentí su temperatura ardiente y su riquísimo sabor salado, y no tuve más remedio que tragármela toda.

Después de limpiarle bien la polla, le di la vuelta y lo incliné contra la pared. Lo abrí de piernas colocándole el culazo hacía arriba, y hundí mi cara entre sus redondas nalgas, al mismo tiempo que le penetraba el boquete del ano con mi lengua. Mi hermano se estremeció de placer al sentir mis lamidas, gemía como una maricona loca, y se retorcía de gusto bombeando su ojete contra mi boca, provocando que mi lengua entrara cada vez más adentro. Cuando me cansé de comerle y saborear su ano, me preparé para envergarle mi polla y darle una buena follada con ella en el culo.

Lancé un escupitajo en mi mano y me lo restregué por toda la polla. Le coloqué mi capullo en el ojo del culo y de un empujón se la metí hasta el fondo por el recto. Luis chilló angustiado, al principio le dolió mucho, y sentía que mi pollón lo partía en dos. Pero a los pocos segundos mi hermano gemía de placer, al sentir que le metía la polla y se la sacaba del culo a un buen ritmo, para que gozara. Notaba su esfínter dilatado, relajado y super lubricado por mi baboso pre-cum. Con rápidos movimientos de mete y saca le estaba destrozando el ojete, a lo bestia, con furia y con gusto, ... mucho gusto.

NIKO: ¡Que gustazo de culo hermanito! ... ¡Ahhhh! ... Te lo voy a preparar bien cabrón, ... te lo voy a dejar super abierto, para cuando el cabo Carmona te envergue su fusil, maricón del culo ... ¡Ahhhh, joder! ... Que ganas tengo de verte con el culo abierto y tragándote el pollón de tu colega ... ¡Uffff! ... ¡Siiiii! ... Me corrooooo ... Me corrooooo ... Ohhhhh.

Le saqué rápidamente la polla del culo, y me puse frente a su cara. Con dos ágiles movimientos masturbatirios pegados a sus labios, eyaculé todo mi semen manchándole de goterones todo su hermoso y bello rostro.

Después nos duchamos los dos juntos, y nos preparamos para salir a las fiestas del pueblo. Había que despertar a nuestro invitado, ... si no se había despertado ya con los gritos de placer de nuestra follada, ... espero que no, pero nunca se sabe.

Continuará...