EL INTERNADO (21) Julio Desayuna mi Culito

Julio me follaba despacio, él marcaba el ritmo mientras me agarraba de las caderas con sus manazas, y me inclinaba hacía adelante sacándome el cipote del ano hasta capullo, para luego volverlo a meter enterito pegando su pubis a mis nalgas. Mi culo cabalgaba tragando sin parar, el dilatado boquete se había amoldado sin problema al grosor del pollón de Julio, y me estaba dando un placer el cabrón, que mi polla no paraba de soltar gotas de pre-cum de puro gusto.

EL INTERNADO (21)

Julio Desayuna mi Culito

Aquella mañana, (como tantas otras), me desperté con una lengua dentro de mi ano, y unas manos abriéndome totalmente los cachetes del culo. Era la lengua de mi compañero Julio, que me chupeteaba y me follaba el ojete con avaricia. Yo estaba todavía adormecido y un poco agotado, por la excitación y la follada en casa de Rashîd, ... así que me hice el remolón, y preferí hacerme el dormido. A Julio, le encantaba echarme un buen polvo mañanero de vez en cuando, y le daba mucho morbo follarme mientras me despertaba, notando su cipote abriéndome el ojete en canal.

Tengo que decir, que me alegraba el día el muy cabrón cuando abusababa de mí de esa forma, lo que me hacía Julio algunas mañanas, practicamente era una violación también, pero como buen traga pollas que soy me gustaba mogollón, y disfrutaba de lo lindo con aquel niñato tan bueno. Mi compañero gozaba preparándome el culito, dejándomelo bien dilatado para después meterme todo el cipote, y follármelo hasta correrse de gusto. Me tenía boca abajo aplastado contra el colchón, completamente abierto de piernas y con la lengua del colega sin parar de penetrarme el culo.

Julio siempre me lo ha dicho... ¡Como me gusta este culito bonito y blanquito, con estas nalgas redonditas como montañas, y este delicioso ojete super apretado..., para que mi cipote vaya abriéndose camino hasta el fondo!... y ahora estaba el cabrón, relamiendo la raja de aquel deseado culito, metiendo la lengua por su interior y lubricando como lo que era..., todo un experto comiendo culos.

Mientras Julio, me trabajaba fantásticamente bien el ano con sus lametones, me acordé de que llegué tan cansado anoche, que ni siquiera me duché, así que los restos de semen que hubieran quedado en mi interior, se los estaba tragando y saboreando mi compañero sin saberlo... ¿O si lo sabía, y le gustaba el sabor que dejaban las pollas dentro de mi culo?

Se me venían a la mente las imágenes de la noche anterior, recordaba con mucho placer, como los cuatro negros le violaron el culo a Eric, sometiéndolo a la fuerza..., de la mamada que me dió Rashîd en la polla, mientras miraba los enormes pollones reventándole el ano a Eric..., el putón del Chileno cabalgándole la polla a Roman, y como gozó el maricón con nuestras dos vergas llenándole el ojete..., y por supuesto, la follada tan rica que me pegó en el culo el buenorro de Rashîd.

¡Ufff...! El calentón ya era tremendo, el muy cabrón sabía que mi ano era mi debilidad, me derretía de placer sentir su lengua atravesando mi esfínter, su boca devorándome el ojete, recordé lo que me dijo Rashîd de Jorge el coleguita de Eric, que le gustaba que los tíos se corrieran en su cara, y en ese momento me imaginé al niñato tendido en el suelo, y un tío tras otro mojándole la cara de semen... ¡Que morbazo colega!

Sumido en mis pensamientos calientes y sin apenas darme cuenta, ya me había metido Julio media polla por el culo, y sentía su cuerpo caliente encima del mío. Conforme iba resbalándose hacía arriba, y poniendo su boca junto a mi oreja, notaba su respiración cada vez mas acelerada. Al hijo puta de mi compañero, le gustaba al principio tirarse mi culo suavemente, para después desvocarse como un fiera, golpeando con sus huevazos en mis nalgas, y cabalgarme el culito introduciéndome el pollón por completo hasta el fondo.

JULIO: ¡Joder... Joder! ... ¡Como me gusta follarte el culito Niko! ... Este boquete que tienes, tan apretadito, tan sabroso, ... ¡Como me estrangulas el tronco del cipote! ... ¡Uffff! ... ¡Que gozada cabrón! ... Y que caliente noto tú ano, ... me quema la polla cada vez que te envergo hasta el fondo.

NIKO: Tú pollón, si que me da gusto cabrón ... ¡Como la siento engordando dentro de mí! ... ¡Asiiii ... Siiiii! ... ¡Follame ... Sigueeee! ... No te pares compañero, y envergame este culito que es todo tuyo ... ¡Ahhhh!

De vez en cuando, mi compañero se incorporaba para mirar como su polla entraba entera en mi culo, viendo la maravillosa cabalgada que me estaba pegando, contemplando su enorme y gordo rabo acoplándose perfecto a mi ojete, y entrando justo y perfecto. Él cabrón lanzaba salivazos desde arriba que caían directos en su polla, la sacaba un poquito sin dejar que se le saliera por completo, y la lubricaba para volverla a meter entera dentro de mí.

JULIO: ¡Que gustazo me da mirarte este culito que tienes! ... ¡Uffff ... Joder! ... ¡Que cachetes mas morbosos, Niko! ... De todos los culos que me he follado, el tuyo es el que más caliente me pone mariconazo.

NIKO: ¡Mmmmm! ... ¡Como me gusta que me digas guarradas cabrón! ... Mi culito es todo para tí, ... para tu pollón, ... para que me lo folles y te corras dentro de el a gusto ... ¡Que bueno estás compañero! ... Gozo dejandote el cipote bien satisfecho, mi macho.

Después de un buen rato jodiéndome en esa postura, me agarró fuertemente del pecho con sus brazos y sin sacarme la polla del ano, me volteó sentándome de espaldas a él en el borde de la cama. Quería seguir envergándome el ojete, al mismo tiempo que  él miraba como entraba todo su cipote en mi culito, como mi orificio anal iba devorando todo el tronco venoso, y gozar mientras contemplaba como su putita domaba la verga de su semental.

Julio me follaba despacio, él marcaba el ritmo mientras me agarraba de las caderas con sus manazas, y me inclinaba hacía adelante sacándome el cipote del ano hasta capullo, para luego volverlo a meter enterito pegando su pubis a mis nalgas. Mi culo cabalgaba tragando sin parar, el dilatado boquete se había amoldado sin problema al grosor del pollón de Julio, y me estaba dando un placer el cabrón, que mi polla no paraba de soltar gotas de pre-cum de puro gusto.

Me tumbó encima de él, tocando mi espalda con su pecho y comenzó a acelerar las embestidas de su cipote contra mi culo. Yo estaba abierto de patas como una puta rana, mientras mi compañero me tocaba el ojete follado con una mano, y con la otra me cogía la polla y comenzaba a masturbarme velozmente.

NIKO: ¡Joder cabrón! ... Si sigues así, me voy a correr enseguida ... ¡Ohhhh! ... ¡Que gustooooo! ... Dame duroooo.

JULIO: Eso es lo que quiero, ... pedazo de puta ... ¡Que culoooo! ... ¡Que gustazo de culo colegaaaa! ... ¡Ahhhhh! ... Quiero que nos corramos al mismo tiempo, ... que te llegue el gustazo sintiendo mi pollón dentro de tu culo, ... notando como te quema mi leche mientras te inunda el agujero ... ¡Asiiiii! ... ¡Siiiiii!

NIKO: ¡Yaaaaaa! ... ¡Me corrooooo! ... ¡Suigue cabronazoooo! ... ¡Joder, ... Joder, ... Joder!

JULIO: ¡Tomaaaaaa! ... ¡Siiiiii! ... Me vuelves loco Niko, ... este culo tuyo me tiene loco, ... ¡Que gustazo de culooooo! ... ¡Ahhhhh! ... ¡Me corrooooo!

Pasaron como 10 minutos sin poder movernos, yo seguía encima de Julio con la polla dentro de mi culo, y notando como iba desinflándose dentro de mi.

JULIO: Esta noche, quiero que te vengas conmigo y con Javier, para hacer un servicio a casa de un amigo. Verás que bien te lo vas a pasar, y de camino te ganas un dinerillo disfrutando. Este amigo es un cabrón vicioso de mucho cuidado, le encanta follar con chavales como nosotros, y disfruta montándose su fantasía. Además es super generoso..., así que si le gustas, y se lo pasa bien contigo..., te regalará un buen fajo de billetes.

NIKO: Jajaja... ¿También somos chaperos ahora?

JULIO: Llamalo chavales de compañia, que se ganan un pastón follando con buenos tíos. En el Clan hacemos de todo, y como ya creo que has comprobado, nos lo pasamos muy bien... Si no quieres venir, me llevo a otro compañero.

NIKO: Ese amigo que dices... ¿Está buenorro?

JULIO: Buenorro no..., está tremendo de bueno, y tiene una polla que te va a encantar.

NIKO: Pues entonces, cuenta conmigo... jajaja.

Continuará ....