EL INTERNADO (10) Mi Hermano se deja Follar por Mi

Empezó a joderle el ano con fuerza y vigor, clavándole el pollón una y otra vez en su inquieto culo, agarrándole los huevos y la verga con una mano, y mientras con la otra le azotaba con furia, y rabia las nalgas. Yo le golpeaba fuerte en la cara con mi cipote, eso le encantaba a Marcelo, ... sentirse como una maricona sumisa, y bien follada por detrás, ... mientras el suplicaba y le rogaba a mi hermano, que no parara de follarle el culo.

EL INTERNADO (10)

Mi Hermano se deja Follar por Mí (1 parte)

Los Jueves a primera hora de la tarde tenemos clase de arte dramático y coincido con Marcelo. Ese día el profesor estaba eligiendo alumnos para interpretar una obra de teatro, como es un internado solo para chicos, los papeles de chicas los tenemos que hacer nosotros, y estaba escogiendo a siete compañeros. A mi solo me escogió de figurante, pero a Marcelo le dió un papel protagonista de chica, con las facciones tan finas de su cara y un buen maquillaje lo haría estupéndamente. El profesor nos explicó la trama por encima, después fué pasando unas fotocopias del libreto de la obra, y nos dejó tiempo libre para repasrlas con los compañeros. Marcelo y yo, nos fuimos al final de la clase para poder hablar mas intimamente, y le conté mi super follada con Eric y el entrenador, primero en las duchas y después en su oficina.

MARCELO: ¡Que cabrón eres! ... Así que ya has probado el cipote del entrenador ... El tío está tremendo de bueno, y el broncas de Eric no se queda atrás. El niñato me calienta la polla una barbaridad, sobre todo verle ese culo, y el paquete en los pantalones cortos cuando entrenamos. Y como es el capitán del equipo, me pone muy cachondo cuando me grita mandándome cosas del juego.

NIKO: Colega fué increible, y me alegró el día. Después estuve hablando un buen rato con Eric, y no me parece mal chico. Además, ... hoy vengo contento por que por fin he podido hablar con mi hermano Luis, y me ha dicho que quiere verme, pero que no tiene ganas de ir a mi casa, y verle la cara a mi padre.

MARCELO: ¡Que bien Niko! ... Pués veniros a mi casa si quereís, y pasaís el fin de semana. Ya sabes, que a mi no me importa y así por fin conozco a tu hermano. Además, mis padres nunca están y mi abuelo siempre está fuera.

NIKO: Ya lo había pensado colega, por eso quería hablar contigo y pedirte el favor.

MARCELO: Nada tío, ... yo también estoy alegre, por que el viernes voy a cenar a casa de mi hermana, y así podré ver a mi cuñado, ... haber si cae otra mamada ... jajaja ... Lo dicho, ... os veneís para mi casa, y pasamos el fin de semana allí. Antes de irme te doy las llaves para que podaís entrar, y yo ya llegaré cuando termine de cenar.

NIKO: Muchas gracias colega, te debo una.

MARCELO: Calla tonto, no me debes nada, ... bueno, a lo mejor una mamadita con tu boca, ... jajaja ... Anda, sigue contándome esa follada con Eric.

Por fin llegó el viernes, y allí estaba mi hermano Luis, esperandome en su coche en la puerta del internado para recogerme. Le dí un abrazo fuerte de hermanos, nos subimos al coche y le indiqué la dirección de la casa de Marcelo.

Ibamos hablando de cosas superficiales, de mis estudios, de mis amigos, de su vida en la academia militar, hasta que a los 20 minutos de estar conversando, salió el tema de aquel día.

LUIS: Le he dicho a Maite que la veré el Domingo, que estos dos días los quería pasar contigo. La verdad es que no le ha importado mucho, parece que no tiene muchas ganas de verme, y no me ha puesto ningún problema, la muy zorra ... Con repecto a lo que pasó aquella noche Niko, estaba muy borracho, y no era responsable de mis actos. Quiero que me perdones hermanito, ... y no quería hablar esto por teléfono, por eso no he respondido a tus llamadas, quería hablarlo contigo cara a cara ... ¿Lo entiendes Niko?

NIKO: No te preocupes hermano, lo entiendo. Lo que pasó, para mi no tiene la mayor importancia, sucedió y ya está, ... y si volviera a pasar otra vez, no sería un trauma para mi, así que no te comas la cabeza Luis. Ya hemos llegado, es esta casa.

LUIS: ¿Pero me estás escuchando Niko? ... ¿Que no me coma la cabeza? ... Eso estuvo mal, lo que hicimos está muy mal, y es antinatural hermano.

NIKO: ¿Antinatural, ... quién lo dice papá, ... tus amigos, ... la sociedad? ... Mira hermano, para mi fué auténtico y me gustó muchisimo, y creo que a tí también, así que conmigo no finjas que soy tu hermano, y te conozco mejor que nadie. Además, no quiero discutir mas contigo, quiero pasar estos días disfrutando y divirtiéndonos. Vamos entremos.

LUIS: ¿De quién es esta casa, de una amiga tuya?

NIKO: Si, ... es de, ... Marcela, ... una, ... amiga.

No sé por que le dije aquello, ... quizás por que en mi mente, muchas veces me había imaginado a Marcelo follado, por mi hermano y por mi, y me había corrido masturbádome la polla pensando en ello. Marcelo, maquillado y vestido de chica daba el pego cantidad, parecía una tía completamente el cabrón, hasta a mí, me engañó la primera vez que lo ví vestido de mujer, y si no me fuera hablado, no lo hubiéra reconocido. Así que, como a mi colega le gustaban los juegos sexuales, se me había ocurrido uno después de meter la pata con mi hermano, y decirle que Marcelo, ... era mi amiga Marcela.

Nos instalamos en el dormitorío, que me dió mi amigo la última vez que estuve, tenía una amplia cama de 2x2 metros, y allí podíamos dormir los dos a pierna suelta, ... y lo que surgiera. Mientras mi hermano dejaba la ropa en la habitación, me salí a la terraza para llamar por teléfono a mi amigo, contarle en el problema que me había metido, y explicarle que tenía que venir a su casa vestido de chica. La verdad es que contra mas  pensaba en la escena, la idea me parecía divina, ... ese Marcelo haciéndose pasar por una tía, y mi hermano Luis follándoselo por el culo con ropa de mujer, me estaba palpitando la polla dentro del slip, y se me estaba poniendo muy dura.

MARCELO: Pero, ... ¿Como se te ocurre Niko? ... Estás loco colega, una cosa es el teatro y otra muy distinta la vida real. Tu hermano me va a descubrir, se dará cuenta y nos va a partir la cara a los dos ... Joder.

NIKO: Que no tío, ... ya verás que no se entera, ... mientras tú, no abras la boca al principio. Lo que venga después es otra historia. Ya verás, como te va a encantar este juego, y nos lo pasamos genial. Así que esta noche maquillate muy bien, y ponte un vestidito bastante provocativo, que vamos a calentarle la polla a mi hermano, y a follárnoslo por todos y cada uno de sus boquetes.

Estuvimos cenando pizza y bebiendo cerveza, y después de terminar, seguimos con mas cervezas sentados en el sofá hablando. Al poco llegó Marcelo vestido de chica, estaba el cabrón impresionante, la ropa que se había puesto le hacía un cuerpo imponente, y la transformación de mi amigo con el maquillaje era extraordinaria. Se había puesto una peluca de pelo natural, un suéter azul que le marcaba unos pechos postizos normalitos, y una faldita tableada a cuadros que le cubría solo las nalgas, y dejaban un poco al descubierto unas braguitas de encaje rosa.

Antes de que llegara Marcelo, yo le había dicho a mi hermano que "Marcela" no podía hablar, por que le habían operado de las cuerdas vocales hacía poco tiempo. Así que cuando vió a mi hermano, lo saludó con dos besos en la cara, y solo se comunicaba con nosotros por gestos de las manos, y de la cara. Marcelo me llevó a la cocina a por mas cerveza, y así poderme hablar en susurros, para que mi hermano no se enterara.

MARCELO: ¿Como estoy? ... ¿Crees que ha picado?

NIKO: Si mi hermano Luis se ha dado cuenta, ... lo sabré enseguida, ... pero creo que no. Estás, alucinante colega, pareces una chica de verdad, y el toque de las braguitas rosa asomando, me ha puesto cachondo tío. Y dime ... ¿Te gusta mi hermano? ... ¿A que está bueno el tío?

MARCELO: Bueno no, ... buenísimo, y tiene un morbazo en la cara que te cagas. Tu ya sabes, que le saco parecido a todos los tíos con actores porno, ... pues, ... ¿Sabes a quién se parece tu hermano? ... A "Cliff Jensen", ... y si tiene el mismo pollón que él, me voy a correr de gusto cuando me lo meta por el culo. Y si no me crees colega, ve un momento a mi habitación, y mira en el ordenador una carpeta que pones actores gay, y verás que no te miento.

NIKO: Jajaja ... Vale tío, ahora voy y lo miro. Toma mamoncillo, he traido regalitos, ... unos cuantos extasis, que me ha dado Alberto el gemelo, ... echa una pastilla en cada cerveza y ya verás, que pronto se calienta mi hermanito. Ahora voy a ver como está, que llevamos mucho tiempo los dos en la cocina, y él solo en el salón.

Dejé a Marcelo en la cocina cogiendo las cervezas, y fuí hasta mi hermano para ver si estaba bien, y si necesitaba algo.

NIKO: ¿Todo bien por aquí? ... ¿Necesitas algo? ... Dice Marcela, que ahora va a poner una pelicula en la pantalla grande, ya verás que alucine hermano, parece que estás viendo la peli en el cine.

LUIS: Vale ... Si, estoy genial no te preocupes. Acercate Niko que no quiero que me escuche ... Tu amiga está tremenda de buena ... ¿Te has fijado, que se le ven las bragas cada vez que se agacha? ... ¡Ufff! ... Tiene un culito delicioso ... Y eso que me he fumado solo un porro, pero tengo un puntillo estupendo ... Oye Niko, ¿A ésta te la has follado?

NIKO: Pués si, que me la he follado, y a la muy zorra le encanta que le den por el culo ... Y te hace unas mamadas en la polla que alucinas colega. ... Sssss ... Calla que viene. Voy un momento a mear y ahora vengo.

LUIS: Ok, me voy a liar otro porro mientras.

Fuí a la habitación de Marcelo, para ver en el ordenador si era verdad, que mi hermano se parecía tanto a "Cliff Jensen", como decía mi amigo. ¡Joder! ... Parecian gemelos coño, eran iguales, menos en los tatuajes, y en las fotos que se le veía la polla al actor, la de mi hermano era un poco mas gorda si las comparábamos.

Cuando regresé al salón con Luis, Marcelo nos indicó con la mano que pasaramos a la salita de cine donde había preparado la pelicula. La sala no era muy grande, tenía una pantalla de 60 pulgadas pegada a la pared, un mueble bar con bebidas, y un par de sofás bastante grandes, uno detrás del otro. Marcelo puso la pelicula, apagó las luces y se sentó en medio de nosotros dos, en el primer sofá. Mi hermano, nos pasaba el porro para que fumaramos también. Ya se había bebido casi la cerveza con el extasis, y me hacía señales para que le acercara otro botellín, ... así que pronto le haría efecto y empezaría a quitarse ropa. La pelicula que eligió mi colega para ver era 50 sombras de grey, ... y menos mal, por que el cabrón era capaz de poner una de Men.com.

A los 30 minutos de pelicula, ya estabamos los tres sudando por el calentón de las escenas subidas de tono, borrachillos por las cervezas, y muy colocados por el extasis y los porros. Mi hermano Luis el que mas, se había quitado la camiseta dejando su pecho fibroso al descubierto, y brillante por el sudor. Marcelo, me pellizcaba el costado cada vez que Luis, rozaba la pierna con la suya, en el momento que se tocaba el paquete con la mano, o cuando notaba que lo miraba de arriba abajo.

LUIS: ¿No teneís calor? ... Por que yo estoy sudando como un cerdo. Si no te importa Marcela, me voy a quitar los pantalones y quedarme en calzoncillos. Es que no puedo más, haber si así estoy mas fresquito y paro de sudar.

NIKO: Te está indicando que no le importa, que estás en tu casa. Uffff, es verdad ... ¡Que calor! ... Yo también me voy a quedar en calzoncillos, para hacerte compañía hermano.

Mi hermano estaba así por el subidón de la pastilla, además del alcohol y los porros, ... pero mas por el extasis, y él ingenuo, no lo sabía. Se quedó en calzoncillos sentado en el sofá con las piernas abiertas exhibiendo y mostrando su paquetón desmesurado, dandose arrascones con la mano en los huevos y con la otra sujetando la botella de cerveza.  Marcelo, que estaba más calentorro que una perra en celo, al ver aquella exagerada maravilla, puso su mano encima de la bragueta de Luis, y comenzó a sobarle la polla sin timidez ninguna. Mi hermano se dejaba hacer sin decir nada, solo movía lentamente las caderas arremetiendo contra su mano, mientras bebía buches sin parar de la cerveza, y gemía suavemente como un gatito agusto. Después de unos minutos tocándole el paquete, Luis agarró a mi colega por la cabeza brucamente, y le pegó la cara a su bulto, Luego se bajó con la mano la tela de los calzoncillos, dejando el cipote empalmado al descubierto, pegado a sus ojos, y una vez que lo vió bien, se lo restregó por toda la boca.

LUIS: ¿Te gusta lo que ves? ... Pues sirvete tu misma, y come todo lo que quieras.

Sin hacer esperar a su macho, Marcelo comenzó a lamer aquel pollón, que le daba Luis tan generosamente, miraba la cara de mi hermano transformada de placer, mientras pasaba con suavidad la lengua alrededor de la base del hermoso glande, lamiendo los huevos como si fuese un perro, pasando a lametazos la parte inferior de aquella verga tiesa, y llegando denuevo hasta la gruesa punta del capullo. Yo me levanté  rápidamente, y coloqué a Marcelo de rodillas frente a Luis, para que de esta forma no pudiéra meterle mano, y descubrir tan pronto que no era una chica.

Mi compañero, con las lamidas de lengua, le tenía la polla gruesa y cubierta de venas, el cabezón gordo, rosado, babeante de pre-cum, ... ver aquello era super apetecible, y yo ardía en deseos de poder chuparle la polla otra vez. Marcelo se la metió en la boca despacio, poco a poco, notando el sabor de aquella polla, cuando la tenía a medio camino, Luis echó hacía delante las caderas con un movimiento brusco, y le hundió todo el cipote entero dentro de su mamona boca. El  cabronazo de mi hermano, sacaba y metía la dura verga por su garganta, parecía un potro desbocado cabalgando sin freno, un buen semental excitado por la buena chupada, que le estaba proporcionando mi colega con la lengua.

LUIS: ¡Que boca mas buena, tienes mamona! … ¡Gustazo de cojones! … ¡Siiiiii! … Chupame toda la polla, … dame con la lengua en el capullo … ¡Ahhhhh! ... Estoy flipando al verte como te tragas mi verga entera, y me haces temblar de placer chavala ... ¡Pedazo de guarra!

Nunca había visto a mi hermano así, estaba con un calentón incontrolable, ... las drogas le habían hecho efecto muy rápido, en su cuerpo, en la polla, en sus pensamientos perversos, despedía un vicio pérfido al mirar a Marcelo mamando, y golpeaba con la polla bruscamente en la boca de mi amigo.

Yo estaba igual o peor que Luis, me chorreaba la polla del placer al ver la escena, me quemaba el cuerpo por la lujuría, y sin contener mis deseos mas primitivos, agarré a Marcelo de los pelos fuertemente, y me descontrolé por completo, como un energúmeno, haciéndole daño y sometiéndolo con mis movimientos bruscos, violentos, crueles, a meterse el pollón de Luis hasta la garganta. Mi hermano me miraba con lascivia, con lujuría, con ojos de vicioso pervertido, mientras se relamía con la lengua el labio superior, dandome a entender con su cara, que ya le daba igual todo, que se prestaría a lo que fuera, ... y que si, ... si, ... si quería follar otra vez conmigo.

Ya me puse guarro, ... pero guarro de verdad, las palabras que salian de mi boca, eran las de una puta cerda viciosa, y me daba igual lo que pensara mi hermano, solo quería disfrutar con los cipotes de esos dos tíos. Me subí de pié encima del sofá, poniéndome de frente a él, y coloqué mi cipote mojado de pre-cum en la boca de Luis.

NIKO: ¡Chupamela, maricón! … ¡Tragate mi polla! ... desde que follamos en mi dormitorío, supe que te iba el rollo, y que te gustaban los tíos ... Te gusta mamar pollas ... ¿Verdad? ... Pues venga, … a trabajar mamón, y chupame la mía.

Luis, me sujetó de las caderas con sus manazas, abrió la boca y me inclinó hasta tener mi cipote dentro de la boca. Aquello fué el paraiso, sentir su lengua caliente jugueteándo con mi capullo hinchado, mirarle la cara y los ojos que se le iban a salir de las cuencas, mientras tragaba polla como una maricona mas. La calentura y el morbo, me salía por la boca en forma de babas, la polla me iba a reventar dentro de la boca de mi hermano, ... con cada chupada que me daba, se me salía el pre-cum goteando sin control de la rajita del capullo, y lo escuchaba dandole arcadas de vómito, por no poder respirar.

Mientras los dos hermanos estabamos a lo nuestro, Marcelo dejó de mamar, se apartó las braguitas hacía uno de los lados, destapando el boquete del culo, y se envergó de un solo golpe el pollón de Luis. Por la excitación, el ardor, la fogosidad, ... el maricón de mi colega habló, no pudo callarse del vicio que llevaba encima, y empezó a decir las guarradas que él soltaba normalmente por la boca.

MARCELO: ¡Follame Luis! … Follame bien fuerte el culo, … ¡Siiiiii! ... Quiero sentir este pedazo de verga dentro de mí ... ¡Muevete cabrón! ... ¡Dámela ya! … ¡Destrozame este boquete con tu polla!

Al escucharlo, Luis se sacó mi polla de la boca parando en seco la mamada, y casi sin poder hablar por el colocón, y jadeando sin control, se dirigió a Marcelo y a mi.

LUIS: ¡Joder! ... ¿No me digas, que eres un tío vestido de chica? ... Pero que cabrones, ... seguro que esto es cosa tuya ¿No, Niko? ... Jajajaja ... Papá lleva razón en una cosa, ... eres perverso ... Jajajaja ... ¿Pero sabes una cosa chaval? ... Que sabes como hacer que disfrute un tío, ... sabes darle a cada uno lo que mas desea, y siempre quieren repetir contigo ... Como yo.

NIKO: ¿No estás enfadado conmigo?

LUIS: Anda, calla ya y sigue follando, ... que me lo estoy pasando de vicio. Pero, ... sigamos con este juego, quiero follarme a tu amigo con las braguitas puestas, ... es como un travestí, y nunca me he follado a uno.

MARCELO: Por mí no hay problema, con el colocón que tengo hoy soy lo que tu quieras, hoy soy su putita y tu mi macho, Así que si quieres viólame por el culo, por la boca, por donde gustes mi chulo. y por cierto, ... me llamo Marcelo.

LUIS: Menuda guarra estás hecho colega, tienes que ser un verdadero cerdo follando, uno de esos maricones viciosos, que te revientan la polla del gustazo, y te sacan el semen hasta dejarte seco los huevos ... ¡Ufffff! ... ¡Que vicioooo! ... ¡Que cerdo estoy! ... Nooo, no te llamas Marcelo mamona, ... te llamas puta, ... eres mi puta, y la de mi hermano Niko.

El calentón depravado desbordaba todo su cuerpo, se sentía con autoridad para hablar así, con poder absoluto sobre nosotros, el mismo que ejerce un amo con sus esclavos, y a partir de ese momento fué el dueño y señor, de sus dos putos chavales.

Marcelo, después de escuchar a mi hermano decir aquello, se quitó la faldita de chica quedándose con las braguitas, y se arrodilló como un perrito con el culito empompa delante de sus ojos. Era obsseno, y muy indecente, el movimiento que hacía mi compañero con sus nalgas, tocándose con los dedos la raja del culo, y metiendo un par de ellos por el boquete. En ese momento miré la cara de Luis, fijándome como sus ojos viciosos miraban el redondeado y morboso culo del niñato, todavía vestido con las bragas de chica, ... sabía lo que estaba pensando, ... se imaginaba las sabrosas pollas, y los tíos buenos que habían disfrutado de ese agujero. Me puse delante de la cara de Marcelo, para que mi hermano me viera, y le atrapé con fuerza los pelos de la cabeza. Mis manos tiraba de ellos violentamente, obligando al maricón chupa pollas, a tragarse de un golpe mi trancazo, y a violarle la boca como se merecía, … como un puerco vicioso.

Hice que mi colega se atragantara por la presión que ejercía al joderlo, Marcelo, con la boca me masturbaba frenéticamente el miembro de acero, le permití por un momento que retrocediera, y que se concentrara en el capullo, que me lo pelara lentamente, y que le metiera la lengua en la rajita en busca de pre-cum. Me apretaba los huevos con la mano, tirando de ellos con fuerza hacía abajo, hasta que conseguía hacerme gritar y gemir de dolor.

Mi hermano Luis se fué acercando a mi compañero, arrastrándose a gatas, hasta tener su cara pegada al trasero alzado, y la lengua metida en el boquete del culito. Rápidamente se puso a trabajarse ese ano, demostraba una maestría y un saber hacer con la lengua el mamón, que se manifestaba fogosamente en la boca del niñato, que cada vez tragaba con mas rapidez y sin tener que obligarlo. Estaba gozando, se le veía en la cara de gusto que ponía, mientras me daba en la polla aquella chupada de escándalo. Poco tardó Luis en colocar el capullo de su polla a las puertas de su dilatado agujero, presionando rápidamente hacía dentro, al tiempo que resbalaba el duro tronco del rabo por el ensalivado recto, y sacándole mi cipote de la boca para que chillara de placer.

Empezó a joderle el ano con fuerza y vigor, clavándole el pollón una y otra vez en su inquieto culo, agarrándole los huevos y la verga con una mano, y mientras con la otra le azotaba con furia, y rabia las nalgas. Yo le golpeaba fuerte en la cara con mi cipote, eso le encantaba a Marcelo, ... sentirse como una maricona sumisa, y bien follada por detrás, ... mientras el suplicaba y le rogaba a mi hermano, que no parara de follarle el culo.

MARCELO: ¡Siiiiii! … ¡Clavamela Luis! ... Me tienes caliente como una perra, quiero que me destroces el culo con tu pollón, quiero devorartela dentro del ano, ... soy tu puta maricona … ¡Dámela toda entera cabrón! ... ¡Que gustazoooo!

LUIS: ¡Mariconazo! ... Estoy alucinando de gusto, … siento como el boquete de tu culo, me devora todo el cipote ... ¡Ohhhh! ... ¡Siiiiiiii! … Menea ese culo puto guarro … ¡Muévete! … Así, así está bien … ¡Tomaaaa! … ¡Sigue asiiiii!

MARCELO: ¡Joder, colegas! … Me voy a correr de placer, … no aguanto mas mi macho … ¡Siiiiiiii! … ¡Ahhhhhh! … ¡Dame fuerte cabrón! … ¡Ahhhhhhhhh!

Mi colega, fué vaciando sus huevos de semen entre aullidos de placer, manchando el suelo de espesos goterones, y la mano de mi hermano que le masturbaba la polla. Después Marcelo se tomó un breve descanso, para quitarse todo lo que llavaba de chica, y nos dejó solos a mi hermano y a mi. Luis quería seguir follándose un culo, al irse mi colega su cipote se quedó huérfano, y me miraba lascivamente a mí, para que adoptara su verga en mi trasero. Pero yo tenía otra idea, otro capricho, ... yo lo que deseaba, era follarmelo a él por el culo, y meterle todo mi cipote en su ano. Tirarme a ese marine, a ese militar buenorro, a ese macho rico, ... y hacerle ver las estrella de dolor, de placer, de vicio.

Me acerqué a Luis, y le comí toda la boca a besos con lengua incluida. Después lo cogí de la mano, y me lo llevé hasta el dormitorío donde había dejado nuestras cosas, y nos echamos en la cama. Lo puse boca abajo abriéndole las piernas velludas de par en par, estiré al máximo sus glúteos con mis manos, dejando bien visible el boquetón de su culo, pegué mi lengua voráz y le chupé el ano, bañándolo en saliva caliente. Notaba como el esfinter se le aflojaba y se abría a mi lengua invasora, permitiendo que la saliva se extendiera por las paredes resbaladizas del conducto. Chupaba, y chupaba ese ano, mientras mi hermano culeaba contra mi lengua, sintiéndose follado por su nene, y retorciendo sus caderas de gozo.

Cuando me cansé de saborear su rico culazo, encaminé mi pollón hasta aquel agujero super dilatado, y se la clavé de un solo golpe sin piedad. Luis, grito como nunca retorciéndose por el dolor, pero me dió igual, yo quería follarmelo y partirle el culazo en dos. Le fui abriendo el boquete anal del todo, cada embestida que le daba con mi cipote eran oleadas de placer, el cuerpo se me estremecía gozando, … por fin tenía lo que tanto deseaba, tirarme a mi hermano, follarme a Luis por detrás, y joderle ese culo que me ponía cachondo perdido. Yo bombeaba con la mayor fuerza posible, disfrutando de ese riquísimo culo, y haciendo con mi polla, que mi hermanito el macho gozara.

De repente sentí, un gustazo que me recorría por todo el cuerpo, y empecé a golpearle con mas fuerza todavía en el ojete. Sabía seguro que a Luis le gustaría la velocidad, la rudeza, lo salvaje de mi follada, … y no me equivoqué, … mi hermano comenzó a chillar como un loco, por el daño que le hacía mi cipote, al mismo tiempo que yo soltaba la leche corriéndome en su culazo, regándole de semen el esfínter, y terminando de romperle el culo a pollazos.

NIKO: ¡Aaaaaa! ... ¡Me corroooo! ... ¡Te quiero hermano, te quiero! ... ¡Que gustoooo! ... Estaba loco por follarte el culo ... Estoy disfrutando como nunca ... ¡Siiiiii! ... ¡Tomaaaaa!

Cuando terminé de empapar bien su recto, Luis se dió la vuelta y buscó con sus manos mi cabeza, y me empaló la boca con su pollón. Golpeaba mis morros frenéticamente como un sádico, me metía la verga hasta el fondo de la garganta, dejándome sin repiración, y chupando a la velocidad que el cabrón me marcaba, cada vez más, ... y más, ... y más rápido.

LUIS: ¡Ahhhh! … ¡Que gustooooooooo! … Te voy a llenar de leche toda la boquita, chulo de mierda, … ¡Siiiiiii! … ¡Toma, toma! … ¡Que bueno estás hermanito! … ¡Como chupas chaval! ... Me tienes en la gloría, fuera de mí, como un pervertido vicioso … ¡Siiiiiiiii! … ¡Me corrooooooooo!

Tenía mi boca hundida en su entre pierna, dándole un buen lavado de polla con mi lengua, tragando y bebiendo cada gota de su esperma, cuando, ... Marcelo entró en el dormitorío trasformado ya en chico, con la polla dura bien recuperada, y con muchas ganas de guerra.

Continuará ....