El inicio de nuevas experiencias

Asi es como inicie a experimentar de todo en el sexo.

Hola lectores de TR, es la primera vez que escribo aquí, pero no la primera que entro a esta página, me gustaría que comentaran sobre mi primer relato, y si les gusta, escribiré más.

Me llamo Erika tengo 19 años, mido 1.65, soy morena de ojos cafés, cabello a los hombros color café oscuro, un poco llenita, las piernas firmes, unos senos grandes y un culo que se empareja perfectamente conmigo. Actualmente estoy viviendo con mi prometido, un muchacho 7 años mayor que yo, al que amo con todo mi corazón, con respecto a él es un hombre caballeroso y simpático, es un príncipe, estoy enamorada de él, físicamente mide 1.80, es moreno, tiene los ojos cafés oscuro, su cabello es corto color café claro, lo que más me gusta de él, es su trasero, tiene un pene normal, no es muy grande ni muy chico, estoy satisfecha con él. Yo soy muy loca en cuanto al sexo se refiere, me gusta experimentar y disfrutar a lado de mi pareja, pero a el no le va muy bien ese tipo de cosas, hay algunas a las que acepta sin rogarle, pero a unas cuantas aun no se atreve.

Una noche llego del trabajo y yo ya lo esperaba con un baby doll negro acompañado de una diminuta tanga que se metía entre mi culo; sin decirle nada lo bese y lo empuje hasta la mesa del comedor, le empecé a quitar la camisa y el pantalón para dejarlo en bóxers, el empezó a tocar mi culo y con la boca empezó a morder mis pezones yo gemía de placer como una loca, para esto ya había sacado su pene y lo empezaba a masturbar, el empezó a gemir y a gruñir como loco en mi odio y solo me decía "Eres mi perra" , me cargo y me acostó sobre la mesa y empezó a acariciar locamente mi clítoris, se llevo una sorpresa al ver que mi clítoris era adornado por una pequeña argolla y solamente me dijo "Te atreviste a hacértela, eres una perra" . Se inco ante mí y empezó a jugar con su lengua en la argolla, la jalaba la mordía, eso a mí me provocaba mucho placer sentía que un orgasmo se aproximaba pero no quería acabar, quería que siguiera jugando, en eso, se levanto y me dijo "Perra, te voy a dar lo que tanto te gusta.." y de un tirón metió su pene en mi vagina, en eso, se me vino un inmenso orgasmo, grite de placer "ahhhh, maldito perro..!! que esperas?? Follame!!" empezó con su movimiento de vaivén mientras con su dedo jugueteaba con mi clítoris y yo con mis manos pellizcaba mis pezones, "te gusta que te de verga verdad perrita?" yo no decía nada, solo movía la cabeza afirmando lo que me había preguntado, "Toma perra mi verga, siéntela gózala toda" Gemía de placer, sabía que no tardaría mucho en correrse, lo despegue de mí y me puse a cuatro patas, como a mí me gusta que me follen, empezó a darme unos deliciosos besos negros, metió un dedo sin dificultad, ya que casi todos los días cogíamos y teníamos sexo anal, supongo que mi ano ya se había acostumbrado; se preparo para penetrarme y de igual manera, metió su verga de un solo tirón, llore de placer empezó a cogerme más a prisa, al mismo tiempo me tomaba de los pelos y me daba nalgadas con la otra mano "Te exita que te coja así, eh? perra, te lo mereces.. Eres una puta.. Eres mi puta" gemía como loca, realmente me exita que me diga así, que me trate como su puta, como su perra, "ahhh.. Maldito perro, es todo lo que puedes hacer? Follame mas.. Follame como si fuera la última cogida que me metes!!" me vino un tremendo orgasmo y casi al mismo tiempo termino él, eso me gusta y me ayudo a que mi orgasmo fuera más fuerte. Me voltio para chuparle su verga y dejarla bien limpiecita, se la estuve mamando un buen rato, me gustaba ese sabor de una mezcla con semen y el característico sabor de mi ano. Me levanto, me dio un beso y me dijo que me fuera a bañar, que al rato me alcanzaba. Subí al baño y prepare la tina para darme un largo baño, se metió a mi lado y empezamos a platicar de su trabajo, hasta que salió el tema de la perforación que me había hecho, yo ya le había mencionado que quería hacerme una y él me dijo que no le llamaba la atención, que si quería que me la hiciera. A mí me excitaba la idea de tener una perforación ahí y mas que él me comiera el coño jalando la argolla, así que me anime y fui a hacerme la perforación. Siguió indagando sobre aquel nuevo hoyo en mi cuerpo yo solo lo escuchaba al mismo tiempo que empezaba a tallarme el cuerpo "Porque te la hiciste? No habías dicho que no te la ibas a hacer porque no me exita?" Lo voltee a ver con esos ojos que caracterizan a una mujer y le conteste "Que no te excite a ti, no quiere decir que me vaya a quedar con las ganas de tener una perforación en mi coño" Solo agacho la cabeza y molesto, se fue a la habitación, seguí en la tina jugando con mi nuevo hoyo. Una vez que termine lo alcance a la habitación y estaba el acostado tapado con una sabana, estaba medio dormido, lo desperté para seguir aclarando nuestros puntos de vista y fue ahí cuando le dije lo que quería experimentar

" Sabes, a veces quisiera que fueras igual que yo de loco y atrevido en el sexo.."

"ah sí? Y que quieres que haga? Que me deje coger por un hombre?"

Me reí y le conteste: "No sería mala idea, solo te digo las cosas que me gustarían hacer, tal vez y lapasión entre nosotros aumente"

"Por dios mujer, si a ti te da por coger todos los días.. "

"Así soy yo.. Me gusta el sexo.. Me gusta disfrutar.. Me gusta sentir una polla adentro de mi.. O tal vez.. Algo mas grande"

"Algo más grande? No te basta con el consolador que te compre?"

"No.. no es eso.. Bueno.. Quiero ser directa.. Quiero practicar un fisting"

"Un fisting mujer? Estás loca! Como crees que te va a caber una mano por el ano!! Ya duérmete y deja de decir tonterías"

Al terminar nuestra pequeña platica, se durmió y yo.. Yo no podía pegar el ojo, así que decidí ir por algo a la cocina y me pregunte ¿Realmente seré capaz de meterme la mano en el coño o en el ano? Y fue en ese momento cuando mi curiosidad, me llevo a hacer cosas que no me creí capaz.

Fui al mini bar que tenemos, y me di cuenta que no quedaba gota de alcohol, solo había una botella con un poco de alcohol, con esa botella como compañera fui al sillón y comencé a ver el canal solo para adultos que habíamos contratado, me sentía mojada, me empecé a masturbar, primero con un dedo, al poco tiempo fui por el consolador que me había comprado mi prometido y empecé a jugar con el pero me aburrí y mejor lo deje a un lado, fue ahí cuando vi la botella ya vacía, jugué con ella en mi coño y en mi ano.. Primero, lo trate de meter en mi coño y no entraba, solo me producía algo de dolor. Decidí dejar la botella y me subí a la habitación, me dormí casi a las 3 de la mañana pensando que si era capaz de meterme esa botella, y a los pocos días.. Me di cuenta de que era capaz de eso.. y de mucho mas.

Lobita.