El inicio de mis aventuras
Hoy les voy a contar un poco sobre mi vida para que entiendan mi gusto y placer por ser sometida y admirada sexualmente por los hombres.
Viví en un hogar disfuncional, mi papá era un borracho y mi mamá una buena mujer, solo trataba de sacarme adelante con mis hermanos. Pero es muy difícil ser madre casi soltera, porque mi papá solo estaba 24/7 en la calle gastando el poco dinero de mamá en trago. Como no habían muchos trabajos disponibles. Mi mamá resultó siendo una puta.
No le reclamo nada, es lo que pudo hacer. Y de ella rescato mi fascinación por el sexo.
Mi papá se iba temprano a emborracharse y de inmediato sonaba un toc toc en la puerta de atrás, cada día varios hombres entraban a casa cuando papá no estaba.
Yo primero no entendí que pasaba, luego fui creciendo y entendiendo mejor, mamá nos tuvo la confianza suficiente para explicarnos su trabajo pero se volvió muy descarada. Antes teníamos que escuchar el rechinar de la cama, golpes y algun pequeño gemido, pero ahora que sabíamos a ella no le importaba gritar por más verga, nos decía que así le pagaban más. Que les gustaba saber que sus hijos la escuchaban mientras era follada.
Recuerdo mucho que una vez fui a abrir la puerta cuando sonó el timbre y vi a un hombre gigante, se veía un gran bulto en sus pantalones, yo no entendía por qué eso me hacía sentir cosquillitas en la vagina. Pero se sentía muy rico.
Así empecé a tener curiosidad cuando escuchaba a mi mamá gritar y los gemidos, los hombres diciendole puta, zorra, todas esas cosas me interesaban mucho.
Yo me ponía una falda sin calzones y me la subía hasta mostrar la punta de la nalga, así jugaba a que yo era una puta como mi mamá y terminaba frotando peluches entre mis piernas.
Cada vez mi curiosidad era más y más, aún no tenía cómo ver videos porno y me daba pena ver a mi mamá, pero ya no aguantaba, cada vez tenía más ganas de ofrecerme a uno de esos hombres solo por la curiosidad de saber cómo se sentía ser penetrada.
Un día mi mamá se estaba dando placer sola con sus juguetes con la puerta abierta, cuando la ví solo tenía en mente usar esos juguetes.
Y lo hice, un día que ella no estuvo entré a su cuarto, me puse su ropa de puta, unas medias de malla y tacones, me maquillé un poco y me sentía muy caliente de ver que yo también podía ser una zorra, sentí mi coño mojado así que busqué esos juguetes. Encontré varios dildos, uno se veía perfecto, parecía de goma y empecé a chuparlo, como loca, torpemente pero cada vez más mojada de pensar en vergas y lo rico que sería follar bajo voluntad. No me aguanté e intenté meter ese dildo, no me dolió mucho, pero entró la mitad.
Yo estaba en el paraíso, con la ropa de mi mamá metiéndome sus juguetes y gimiendo como ella lo hacía!! Puse el vibrador en mi clítoris y comencé a temblar, no sabía que podía sentir tanto, casi lloro y boté chorros de mi coño mientras sentía unas deliciosas cosquillas en mi coño. Fue increíble. Es uno de los orgasmos que más recuerdo con amor porque me hizo dar cuenta que me encantaba el sexo y que yo quería probar muchas cosas.
Con el tiempo empecé a tener acceso a internet, ahora podía ver porno. Incluso en una ocasión vi a mi mamá siendo doblemente penetrada!!! Cuando vi eso no podía creerlo, el porno que yo había visto era de dos personas, no tres!! Y ver a mi mamá saltando y gimiendo como una perra mientras la tenían ensartada por el culo y el coño al mismo tiempo, admito que fue un poco raro verla así pero al mismo tiempo quería ser ella. Se veía increíble y mi coño estaba tan mojado que me metí los dedos mientras veía como taladraban a mi madre en cuatro por el culo, me sentía muy caliente y quería ser así de puta, me imaginaba chupando una verga o teniendo una en el coño. Y mientras pensaba en eso ví como esos hombres aumentaron su fuerza de penetración, el que estaba en su coño se quedó quieto por un instante y el otro le destrozó el culo, o al menos recuerdo que literalmente mi mamá le dijo: me estás destrozando el culo por dios!!! Y ese tipo le daba con una fuerza impresionante mientras gemía como bestia y chocaba sus huevos contra ella, sacó su polla de su culo y ví como chorreaba algo blanco, exquisito, tuve un delicioso orgasmo mientras a mi mamá le dejaban el culo relleno de semen.
Saliendo un poco de mi casa. Otra razón para amar la verga fue don Pedro. El señor de la tienda.
No recuerdo cuando fue la primera vez pero lo vi varias veces masturbarse detrás del mostrador mientras me atendía. Era un hijo de puta, me hablaba lindo, me decía Luci linda, Luci, bebé, princesa, y todas esas palabras salían de su boca mientras echaba chorros de leche. Una vez se dio cuenta que lo vi, y al parecer eso lo excitó más porque se vino en su mano, se levantó, se acercó a mí por detrás y me susurraba.
-Un regalito para mi nena favorita - me dijo mientras levantaba mi falda, corría mi tanga y me restregaba su mano llena de semen en mi coño.
También una vez un profesor me mandó la mano al coño "por accidente".
Un señor me abordó en la calle a preguntarme si tenía la cuquita apretada, yo no respondía, solo caminaba rápido y él aprovechó para sacar su polla gorda y fea para masturbarse a mi lado. Yo no sabía si estaba asustada o me sentía curiosa por tener una verga a mi lado. Al ver que yo no decía nada siguió su labor hasta que tomó mi mano para ayudarse a masturbar, eyaculó en mi mano y se fue riendo. Yo lamí un poco, pero me supo muy amargo.
Joder, tengo tantas historias por contar, me pueden encontrar en correo como amapoola.monroe@gmail.com, estaré encantada de responder mensajes, contar historias y masturbarme para ustedes.
Me llamo Luci, y esto fue un breve resumen de por qué soy tan puta.