El harem de Fernando (9)

Miguel se pegó más al culete de su mujer. La polla se le estaba poniendo dura con tanto roce. Lorena lo notaba. No llevaba braguitas debajo del corto vestido.

-Así me gusta. Hemos educado muy bien a nuestro hijo. Siempre hay que hacerle caso a los padres.- dijo Miguel llevando sus manos a las tetas de Lorena, acariciándolas desde atrás.

-Ummm, sí..es un gran chico...muy...obediente...¿Sabes lo que me hizo?

-No...dime que te hizo tu hijo.

-Me folló el culito. Metió su enorme polla en mi apretado culito...ummm. Tu obediente hijo me dio por el culo, mi amor.. Casi me parte en dos..Pero..me encantó. Y ..al final me lo llenó de su lechita.

Miguel casi se corre en los pantalones, restregando su polla por el follado culo de su esposa. La idea de Lorena siendo enculada por Fernando lo excitaba sobremanera. Se arrodilló detrás de ella y le subió el vestido, dejando su lindo culito al aire.

-¿Es este el culito que se folló mi hijo?

-Ummmm, sí, ese es

Le dio un beso en la nalga derecha, haciendo cosquillitas a Lorena y haciéndola estremecer. Después otro a la nalga izquierda. Lorena, con los ojos cerrado, gemía. Le encantaba el comportamiento de su marido. Nunca había sido tan...lanzado.

-Enséñame por donde metió su polla.

Lorena se echó hacia adelante, apoyándose sobre el poyete de la cocina y echó su culito hacia atrás. Con sus manos abrió sus nalgas para que Miguel pudiese ver su ojete.

-Le metió por ahí...Metió toda su polla por ahí, mi amor.

Entonces hizo algo que Lorena nunca hubiese imaginado que su marido llegase a hacer.  Acercó su lengua y empezó a lamer su oscuro agujerito.

-Agggggg Miguel...que..rico.

-Pobre....slurp....cito...

Lorena sentía la lengua caliente lamerla, chuparla... Abrió más sus nalgas, exponiendo aún más el ojete a aquella maravillosa lengua. Estaba tan cachonda que sintió como una gota de flujo le corría por la cara interna del muslo. Los lengüetazos de su marido en su ojete la estaban volviendo loquita de placer.

De repente, Miguel paró y se puso de pié. Lorena oyó el ruido de la bragueta del pantalón de su marido. Se la iba a follar. Siguió abriendo su culito con las manos y cerró los ojos, esperando la estocada. Sintió como Miguel apoyada la punta de su polla en su ojete.

-¿Esto hizo tu hijo?¿Apoyó la punta de su polla en tu culito?

-Aggggg, sí....

-Y después hizo esto, no?

Miguel apretó y le metió la polla en el culo hasta el fondo. Al no ser tan grande como de la de Fernando, casi no sintió ningún dolor, sólo un inmenso placer. Arqueó su cabeza hacia arriba y gritó.

-Aggggggggggggg siiiiiiiiii eso ..hizo.

Miguel siempre había deseado follarle el culito a Lorena, pero nunca se había atrevido a pedírselo. Ahora las cosas eran muy distintas. Ahora no había estúpidas barreras entre ellos. Agarró sus caderas con sus manos y empezó a darle por el culo a su amada espesa, que gemía y se retorcía de placer, meneando su lindo culo contra él.

-Mi vida..que culito más estrechito tienes....me encanta follártelo...

-Ummm, y a mí que me lo folles, mi amor....así..así...dale por el culo a tu esposa...

Le metía la polla hasta el fondo y la sacaba hasta más de la mitad. Lorena, con los ojos cerrados, gozaba de la polla de su marido, la polla que era suya por contrato.

-¿Te llenó el culito de leche?

-Ummm sí mi amor....¿Me lo vas llenar tú también?

-Sí...y ...no ..voy a tardar...mucho.

La enculada se hizo frenética. La follaba a toda velocidad. Lorena no pudo soportar tanto placer y se corrió provocando, con las contracciones de los músculos de su culito, que Miguel también estallara. Apretó las caderas de su mujer y empezó a lanzar sus calientes y espesos chorros en lo más profundo de su culito. Lorena, con la respiración cortada y su cuerpo tensado por el placer sentía cada chorro. Cuando por fin el aire volvió a sus pulmones dio un fuerte grito. Su cuerpo quedó flojo, y Miguel la sujetó para que no se cayera.

Con su polla aún dentro de su culito, la hizo levantar y besó su cuello. Ella giró su cabeza y la besó en los labios..Al poco, la polla fue perdiendo su dureza y se salió del culete. Un reguero de semen cayó por su muslo. Se dio la vuelta y abrazó a su marido.

-Oh mi amor...que..placer me has dado..eres..maravilloso.

-Tú si que eres maravillosa.

Comieron como dos recientes enamorados. Entre risas, besos y caricias. Lorena nunca había sido tan feliz como en ese momento

Después de comer se tumbaron en el salón. Se abrazaban y besaban como dos chiquillos. Miguel lentamente llevó su mano a su coñito y empezó a masturbarla, mojándola enseguida.

-¿Me lo comes?

-Claro mi amor

-Abrió sus piernas y Miguel se acomodó entre ellas, empezando a lamer la rica rajita.

-Ummm hazlo despacito, mi amor..sin prisas...

Besaba sus muslos y pasaba con delicadeza la lengua por sus labios vaginales... Lamía su clítoris...con mimo...Lorena mecía sus caderas y acariciaba el cabello de Miguel... Sonó el teléfono.

-¿Quién será? - preguntó Miguel

Lorena cogió el teléfono inalámbrico. Reconoció el número. Era María

-Tú sigue lamiéndome....¿Diga?

-Hola guapa. ¿Cómo estás?

-Ummm...estupendamente... ¿Y tú?

-Cachonda perdida. A ver si tu niño viene a casa y me folla bien follada.

-No sé....a ido a comer..con...Sonia y Marta.

-¿Qué Sonia?

-Ummmm la amiga de Marta.

-Mierda. Seguro que se las va a follar a las dos

-Aggggggggg Segura...mente...

-Lorena...¿Te estás haciendo una paja?

-No....ummm

-Joder...pues gimes como si te estuvieran comiendo el coño.

-Es que...me están comiendo el coño.

Miguel se sorprendió de que Lorena hablase tan claramente con María, pero siguió lamiéndola

-¿Qué te están comiendo el coño? Pero si Fernando y Marta no están......LORENA!! No me digas que te has echado otro amante, granujilla.

-Agggggggg no...no tengo ningún otro...amante...

-¿Entonces quien carajo te lo está comiendo?

-Miguel

-¿Miguel? ¿Qué Miguel?

-¿Cómo que qué Miguel?. Miguel..mi marido....agggg

-JA!!!! No me creo que el pánfilo de Miguel te coma el coño. Seguro que le da asco.

Lorena acercó el teléfono a Miguel.

-Mi amor..dile a María que me estás haciendo.

Dudó un momento. Pero la situación le daba cierto morbo.

-Hola María. Pues sí, le estoy comiendo el coño a mi mujer....

Si hubiesen visto la cara que puso María se hubiesen partido de risa los dos. Lorena volvió a coger el teléfono.

-¿Ves? ummmmm y me lo come muy ...bien

-No me lo puedo creer.

-Agggggggggggg Me ha metido...un dedo...en el culito.

-Ese no es tu marido. Lo han abducido.

-Ummmm que rico..si que es mi marido....¿Sabes que me hizo antes de comer?

-Joder, no! Cuenta, cuenta.

-Me...apoyó contra la ..cocina..y...me dio por el culo, María. Mi marido me folló el culito y me lo llenó...de..lecheeeeeeeeeeeeee

Se corrió. Estalló en un fuerte orgasmo contra la boca de Miguel, la lamía y chupaba, bebiéndose todos los ricos juguitos de su coño, a la vez que la follaba con el dedo en el culito. Fue un orgasmo largo y placentero. María lo escuchaba, con su propio coño echo una sopa.

-Ummm, María..me he corrido....Miguel tiene toda la cara brillante de mis juguitos.

-Eres una hijaputa, Lorena. Lo quieres todo para ti. No es justo.

-Jajajajaja.....Tengo que recuperar el tiempo perdido.

María oyó un beso y luego a Lorena decirle algo a Miguel.

-Mi amor, sabes a coño....Uy...si tienes la polla dura...María, Miguel tiene la polla dura. ¿Que crees que debería hacerle?

-Chúpale la polla María. Hazle una buena mamada a tu marido.

-Mi amor, María dice que te chupe la polla.

-Jejeje, pues hazle caso a tu amiga.

Miguel se acercó y le puso la polla al alcance de la boca. Lorena no lo dudó y empezó a mamar.

-Ummm Madia..le eftoi mamando la pfolla a mi madido...

-Joder, María! jajajaja. ¿No te enseñaron que no se habla con la boca llena? Dale el teléfono a Miguel.

María estaba en su sofá, recostada, con las piernas abiertas y tres dedos dentro del coño. Esta Lorena la ponía siempre muy cachonda. Estaba resultando tan calentorra como ella.

-¿Miguel?

-Aggg...dime.

-¿Te la chupa bien?

-De maravilla, María...Se la mete toda en la boca....casi..soy yo...el que me la estoy follando por la boca.

-Métesela hasta la garganta. Que sepa esa guarra lo que es mamar una polla...Miguel....me estoy haciendo una paja oyéndoos

La polla de Miguel se puso más dura. María, la amiga de Lorena de toda la vida, los estaba escuchando y además se estaba tocando. María estaba bien buena, y más de una vez la había mirado con ojos libidinosos. Con el auricular en la oreja, miraba hacia abajo y veía su polla, brillante de saliva, entrar y salir de la boca de su esposa, que lo miraba a los ojos, con deseo. De vez en cuando se la sacaba de la boca y se la pasaba por toda la cara, para volver a metérsela otra vez.

-Dile a María lo estupenda comepollas que soy.

-María, Lorena es la mejor..agggggggggggg comepollas del mundo...

-JA! Mentira. La mejor soy yo. Ella no ha podido tragarse todo el pollón de Fernando y yo sí

-¿Tú también lo has hecho con Fernando?

-Ummmmm, siiiiiii ...¿También? ¿Sabes lo de Fernando y ...Lorena?

-Sí, lo sé todo

Silencio en la línea....

-¿María...? ¿Estás ahí?

-Sí, es que...no me lo puedo creer.....Vaya cambio que habéis dado los dos....Para mejor, Miguel...para..aggggggggggggggg mejor..Que caliente estoy...me voy..a ...correr...

-Y yo....

-Córrete en su cara..Llénasela toda

Cuando María oyó a Miguel gemir más fuerte, signo de su orgasmo, ella también se corrió. Cerró los ojos e imaginó como Miguel sacaba la polla de la boca de Lorena y se empezaba a correr en su cara. Si Fernando salía a él en ese sentido, la iba a dejar preciosa, cubierta de leche. Se imaginó a Lorena, sonriente, con su cara ofrecida a su marido para que se la decorara con su blanca esencia

Cuando los gemidos cesaron María tenía su mano empapada de sus jugos.

-Miguel..¿Te has corrido en su cara?

-Ummm, sí, en toda su cara...y en su boca. La abrió bien para recibir su premio.

-¿Está guapa?

-Está preciosa.

-Si estuviese ahí le chuparía toda la cara hasta dejarla bien limpita.

-Pero mira que eres cochina, María

-¿Cochina? ¿No te gustaría verme lamerle la cara a tu mujercita llena de tu leche?

-Me encantaría.

-Jajajaja. Lo sé.

-Bueno, me voy a trabajar, que llego tarde. Hasta luego María.

-Adiós...guapo.

Le dejó el teléfono a Lorena. Antes de irse, le dio un buen beso a su mujer. Parte del semen que aún tenía en la cara le manchó la suya.

-Hasta la noche, mi amor

-Hasta la noche, mi vida.

Miguel bajó por la escalera. Bajaba los escalones de dos en dos. Iba ligero, como una pluma, canturroneando. Feliz.

Marta llegó a casa de Sonia antes que Fernando. Se abrazaron y se besaron, con pasión.

-¿Cómo estás, preciosa?

-Uf, Sonia...no te vas a creer lo que ha pasado.

-Ummmm, cuenta, cuenta.

-Anoche mi padre pilló a Fernando follando con mi madre.

-JOOOOOOODEEEEEEEEEEER! ¿Quién mató a quien?

-Calla, bruta!  Mi padre se fue a su cuarto hecho polvo, me imagino. Mi madre se fue a hablar con él.

-Lo siento, tía. Si las cosas en tu casa están chungas te puedes quedar aquí todo lo que quiereas.

-Coño, Sonia, déjame terminar.

-Vale, vale..sigue.

-Nos quedamos Fernando y solos. Acojonados. Imagínate. Nos temíamos lo peor...Como no oíamos nada, ni gritos ni golpes, me acerqué a su habitación....

-Aggg Marta..me tienes en ascuas...¿Qué pasó?

-Estaban....follando.

-¿Quién?

-La vecina del quinto y el portero!!! Mi padre y mi madre, tonta.

-No me lo puedo creer.

-Como te lo cuento.

-Que pasada...

-Y no sólo eso. Esta mañana, cuando me desperté Fernando se estaba follando otra vez a mi madre. Y fue mi padre el que le dijo que le echara un buen polvo.

Sonia se sentó.

-Joder, Marta. Que familia la tuya. Como para hacer una película.

-Jajaja, sip. ¿Sabes a quien he invitado a comer?

-¿A quién?

-A Fernando. Estará a punto de llegar.

A Sonia se le iluminó la cara y se le mojó el coño. Todo a la vez.

-Ummm, al fin voy a verte follar con un hombre...Y que hombre..nada menos que tu hermano..con esa..enorme polla.

-El muy cabrito me la quiere meter en el culo.

-Ni loca. Que te lo rompe, mi amor.

-A mi madre se le metió.

-¿No le dolió semejante tranca?

-Pues parece que no. Se corrió como una loca.

-Ummm, a lo mejor....

-¿También tú? Que no, coñe!!! Que no ve a meter ese rabo por el culo. Que te lo meta a ti.

Sonia sonrió.

-A lo mejor..pruebo.

-Eres una salidorra.

Sonó el timbre.

-Ummm, nuestro hombre ha llegado.

Sonia fue corriendo a abrir la puerta mientras Marta esperaba en el salón. Cuando aparecieron Sonia y su hermano, éste venía con la polla fuera, cogida por Sonia.

-SONIA!! jajaja. ¿No podía esperar?

-Pues no...Estoy caliente como una perra.

-Fernando, Sonia quiere que le folles también el culito como a mami

-¿Si?

-Hey, hey!!! Que dije que a lo mejor.

-Os lo voy a follar a las dos.

-A mi no - dijo rápidamente Marta.

-A ti sí. Si me lo folla a mi te lo folla a ti.

Marta miró el pollón que Sonia tenía en la mano. Aquello no le podía caber en el culito...Pero a su madre le había cabido...y le había gustado..Después de todo, puede que al final esa tarde le desvirgaran el culito. Dio un respingo.

Sonia se besaba con Fernando y le hacía una lenta paja. Marta se levantó y se unió a ellos. Ahora Fernando tenía en su polla una manita de cada chica. Besaba a una, besaba a la otra.

-Chicas... ¿Comemos o follamos?

-FOLLAMOS - dijeron las dos al tiempo.

-Bien...

Las hizo arrodillarse delante de él. Su dura polla, que salía por su bragueta, quedó a la altura de sus bocas. Puso una mano en cada cabeza y las acercó. Empezaron una mamada a dos bocas. Una chupaba mientras la otra lamía todo el tronco. Luego cambiaban...

Fernando estaba encantado. Aquellas dos preciosas mujeres le chupaban la polla muy bien. Sonia era la más experimentada, pero nada podía compararse al morbo de ver a su hermana con su polla en la boca y mirándole a los ojos. Le bajaron el pantalón para poder tener acceso a toda la polla. Una se le chupaba mientras la otra intentaba meterse sus huevos en la boca...

Las dejó chupar unos minutos, pero no quería correrse...aún. Las hizo levantar y las beso. Los tres juntaron sus bocas.

Se terminó de quitar toda la ropa y se fueron al dormitorio. Fernando se tiró en la cama. Las chicas lo miraban, con deseo.

-Bueno, preciosas. El único que está en bolas soy yo. Hacedme un numerito.

Y vaya si se lo hicieron. Entre calientes besos y caricias se fueron desnudando la una a la otra, mirándolo. Cuando Marta descubrió las preciosas tetas de Sonia le chupó los pezones. Fernando vio en los ojos de la chica el placer que su hermana le estaba dando. Tenía su polla cogida con su mano. Sonio lo miraba a él y luego a la polla.

En poco tiempo, las dos mujeres también estaban desnudas y se acostaron junto a él en la cama, una a cada lado. Volvieron a llevar sus manos a la poderosa polla y a besarlo. Se pegaron a él y pasaron una de sus piernas por encima, de manera que sus mojados coñitos entraron en contacto con su piel. Se restregaron. Luego Sonia fue bajando y besando por su cuello, su pecho, su ombligo, hasta finalmente llegar a su polla, que no dudó en meterse en la boca y empezar una nueva mamada, mientras Marta enroscaba su lengua con la de él.

Marta no podía más. Estaba muy caliente, así que se subió sobre su hermano y le puso el coño en la boca.

-Cómeme el coñito, por favor...

Se acarició las tetas al tiempo que sentía la lengua de Fernando moverse a lo largo de su rajita. Gimió de placer, restregándose contra aquella boca que le daba placer. Sonia, con la polla en la boca, miraba como su amor se movía sobre la cara de su hermano. Por como gemía, sabía que no tardaría en correrse. La conocía muy bien.

-Agggggggggg hermanito...que... bien.....me ..comeeeeeeees

Sintió su cuerpo empezar a tensarse hasta estallar en un fuerte orgasmo, mojando aún más la cara de su hermano, que con la boca abierta recibía los ricos jugos de Marta. Después la siguió lamiendo para dejarle el coñito limpito.

-Ahora me toca a mi - dijo Sonia levantándose.

Marta se quitó y dejo hueco. Sonia se subió sobre Fernando y como hiciera Marta, le puso el coño al alcance de la boca. Enseguida sintió la lengua del chico lamerla, chuparla. Marta, acostada al lado de Fernando recuperándose de su fuerte orgasmo miraba como su chica, con los ojos cerrados, se movía sobre la cara de su hermano. Recordó como esa mañana había dilatado el culito de su madre antes de que Fernando se lo follara. Llevó una mano a las nalgas de Sonia y las acarició. Después, la pasó un dedo por la rajita del culo hasta llegar al ojete. Centímetros más abajo, su hermano le lamía el clítoris.

Acarició con la yema del dedo el esfínter antes de apretar y meterle el dedo. Sonia gimió de placer al sentir como el dedo de Marta la penetraba por el culito, hasta el fondo.

-Agggg, Marta..que rico....tu dedo y su lengua...Me vais a hacer...correr....

Cuando Marta empezó a meter y sacar su dedo, Sonio no pudo más y se corrió, arqueando su cuello y gritando de placer. Casi ahoga a Fernando cuando se dejó caer sobre su cara. Cuando sus espasmos terminaron, se bajó de la cara de Fernando. Las dos chicas quedaron arrodilladas. Se abrazaron y se besaron con amor y con pasión. Él las miraba.

-¿A quién me follo primero?

-A tu hermana. Quiero ver como le metes ese pedazo de polla.

Marta se colocó rápidamente para recibir a su hermano. Se acostó boca arriba en la cama y se abrió de piernas. Fernando, con la polla dando saltitos de excitación se puso entre ellas, se agarró la polla con la mano y la pasó a lo largo de la nuevamente mojada rajita del coño de su hermoso hermana.

-Fóllatela..Métesela hasta el fondo

-Si hermanito...métemela toda

De un sólo estacazo se la enterró. Tal fue el placer que Marta sintió que los ojos se le quedaron en blanco unos instantes.

-AGGGGGGGGGGGGG

-Vaya pollazo que le has metido

Sonia se tocaba el coño mientras veía como la polla de Fernando empezaba a entrar y salir del coñito de Marta, que con los ojos cerrados y la boca abierta gemía de placer. Aquella gran barra de carne distendía la vulva de Marta, frotando las paredes de la vagina y proporcionándole a la chica olas de placer.

-Así, así...enséñale lo que es ser bien follada por una buena polla.

Fernando empezó un furioso mete-saca. La metía hasta el fondo, hasta que sus pelvis chocaban, y luego la sacaba casi toda, para volver a enterrarla.

-Marta...mi amor...que caliente...tu hermano te está follando...

-ummm si....Como siento su enorme polla dentro de mi..me va a partir en dos...

Las dos chicas se besaron. Fernando también se acercó a sus bocas y los tres entrelazaron sus lenguas.

Fernando notó como el coño de su hermana empezaba a tener contracciones. Estaba a punto de correrse otra vez. Arreció sus embestidas hasta que el cuerpo de Marta fue atravesado por una corriente de placer. El grito que dio fue ahogado en la boca de Sonia.

Cuando el cuerpo de Marta quedó flojo sobre la cama, Fernando sacó su polla. Sonia la miró. Grande, preciosa, cubierta del jugo de Marta.

-¿Me vas a follar a mi ahora?

-¿Tú que crees?

Como hiciera con su hermana, Fernando la montó y se la folló con fuerza. arrancándole un fuerte orgasmo a los pocos minutos.

Las dos chicas estaban agotadas, abrazadas en la cama. Miraron a Fernando, que con deseo las contemplaba.

-Aún no te has corrido, Fernando.

-No, aún no. Antes quiero follarme vuestros dos preciosos culitos.

Sonia sonrió, con picardía. Marta no sonrió. Su ojete se cerró sólo, como asustado.

-Sonia..¿Tienes un poco de cremita? - preguntó Fernando.

CONTINUARÁ