El gusto por el semen 3°parte

Directamente al baño se fue Pedro. Se duchó a conciencia y desarmando la alcachofa de la ducha se metió la goma por el culo introduciendo a presión agua templada y limpiar bien todo el interior. Quería disfrutar de la noche que le ofrecía Gonzalo.

Don Gonzalo era para Pedro un capricho. Desde que empezó el curso no andaba nada más que buscando la oportunidad para poder comerle el rabo. Y esa oportunidad le llegó esa mañana.

Por un error o mas bien por no estar atento falló en dos preguntas del ultimo examen de química. Así que decidió ir en busca de Gonzalo al despacho para explicarle que los fallos fueron algo casual. Que el había estudiado a conciencia para no tener ningún problema en el examen.

Gonzalo así lo entendió. Además el mismo se preguntaba como Pedro había fallado en algo tan mascado durante el trimestre. Pero le dijo que ya no se podía hacer nada. Que lo tendría presente en la próxima evaluación e intentaría hacerle una recuperación.

Pedro:- Ahh vale! Y ya está?

Gonzalo: - Como que si ya está? Que esperabas? Que te lo aprobará sin más?

Pedro: - No profe. No me eches cuenta. Solo me ha sorprendido que seas tan comprensivo. Creía que me costaría algo más.

Gonzalo: - Pues si te podría haber costado algo mas Pedro. Date cuenta que hace un mes te vi en los servicios públicos de la Gran Plaza arrodillado comiéndote una buena verga hasta sacarle todo el jugo. Lo podría haber utilizado.

Pedro: Y porqué no lo has hecho?

Gonzalo: Por que no quiero problemas en mi trabajo. Pero vamos de buena ganas te follaría ese culo tan redondito que tienes.

Pedro: Mira Gonzalo. Te propongo algo. Sácate la polla que llevo mucho tiempo queriendo comérmela. Que si en tan hermosa como me han contado quiero sacarle toda la lefa que llevas en los huevos. Y después dime donde quedamos esta noche que tienes mi culo a tu disposición. Llevo mucho tiempo queriendo estar contigo pero como te ves tan serio nunca me he atrevido.

Gonzalo: Y yo desde que te vi en los servicios aquellos anhelo mucho comerme ese culo. Pero esto no tiene nada que ver con el examen ehhh.

Pedro: Me parece genial profe. Pero por favor. Te pido discreción. No quiero que se sepa por aquí lo puta que soy.

Gonzalo: Venga putilla. Arrodíllate que ahora quiero tu garganta.

Recordando el sabor del semen de Gonzalo acabo de secarse Pedro. Se perfumó bien y fue a su habitación a cambiarse.

Tenia la dirección del profesor y un teléfono apuntado en la hoja. Se la guardó, recogió las llaves, la cartera y el móvil y partió en busca del rabo que lo follaría esa noche.

A las 20:30 en punto estaba tocando el telefonillo del portal que sin demora se escuchó como se abría.

Ya en el piso Gonzalo lo invito a pasar. En la mesilla del salón junto a los sofás había dos vasos con hielo, ron y dos latas de cola.

Después de tomarse los cubatitas y charlar de lo maricones que eras los dos se fundieron en un abrazo comiéndose la boca como dos posesos. Se fueron desnudando uno al otro sin dejar de tocarse ni de lamerse.

Una vez desnudos Pedro se tiró en busca de la barra de carne de Gonzalo que rojiza y babeante recibió la boca del chaval provocándole un gemido de placer que retumbó en todo el salón

Se recreó en lamerle el capullo. Ya recordaba su sabor. Estaba tiesa, imperial. Soltaba precum constantemente. Estaba encantado con su sabor. Lo devoraba. La metía hasta la garganta. El mismo se follaba la tráquea.

Gonzalo alucinaba con la destreza con la que le chupaba el nabo. Le agarró por los cabellos y le empujaba para meterle todavía mas polla dentro.

Pedro se la sacaba de la boca y la lamia entera desde la punta hasta la base. Le comía los huevos. Uno a uno. Volvía lamiendo hasta la punta y otra vez traspasaba la garganta.

De un tirón del pelo le sacó la verga de la boca y empujándolo hacia atrás se tiró encima del muchacho. Le comía la boca, las orejas, el cuello. Así bajando hasta que notó en la mejilla que la punta del cipote le rozaba. Abrió la boca y chupó. Chupó con tanto frenesí que notó como le traspaso la campanilla provocándole una arcada. Pero no lo aminoró. Agarrando el nabo por la base lo mamó hasta que Pedro tensando el cuerpo le descargó cinco trallazos de leche que fue acumulando en la boca. Lo besó compartiendo el semen a lo que el chico aceptó encantado.

Pedro levantó las piernas hacia arriba suplicándole que lo follara.

Gonzalo se amorró a ese culo ensalivando bien el ano y metiendo todo lo que podía la lengua haciendo gemir al nene pidiendo una vez mas que se la metiera.

Escupió en la punta y acercándola a la entrada fue presionando poco a poco hasta entrar el capullo. Se detuvo para ver la cara de zorra de la putilla y poniendo cara de sátiro empujó con todas sus fuerzas hasta colocarle toda la carne dentro.

Pedro: Aaaahhhh! Cabrón. Fóllame ahora despacio hijo de puta. Que quiero sentir como me partes en dos. Jooodeeer que buena polla tienes cabrón. Rómpeme el culo. Ahhhh. Sssíiiiii. Que gusto dios. Asi despacio. No tengas prisa. Mi culo hoy te pertenece. Puedes hacer con el lo que quieras. Uuuummmmm. Aaahhhhh. Asiiii. Ooohhhh despacio mi amor. Asiii. Ohhhhhh eso eso. Sacala entera y metela. Ahhhhhhh. Asi un poco mas rapido asiiiiiii. Ooohhhhhh. Que bien follas joder. Que buena tranca me estas metiendo. Que tiesa. Parece un palo. Ahhhhh que gusto. Asi dame mas fuerte asiiii. Ahhhhhhh

Fue subiendo el ritmo de la follada poco a poco. Se la sacaba entera y acertaba otra vez. El culo se amoldó al cipote como un guante. Lo estaba matando de placer.

Gonzalo: Jooodeeerrr que culo tienes puta. Que culazo. Que gusto me das. Quiero partirlo. Quiero preñarte. Dime que si babe. Dime que quieres que me corra dentroooo.

Pedro: Es tuyo cabrón. Has lo que quieras. Córrete. Échamelo dentro. Quiero sentir tu leche en mis entrañas. ¡¡¡¡CÓRRETEEEEEE!!!!

Con toda la polla dentro descargo uno tras otro los trallazos de leche dentro del culo. Con cada espasmo que pegaba mas gritaba Pedro al sentir como mojaba sus entrañas.

Quedaron rendidos uno encima del otro. Jadeando, intentando coger aire. Se miraron y a carcajadas se rieron abrazándose.

Pedro: Joder profe que bien follas cabrón. Que gusto me ha dado. Uffff ten cuidado al sacarla que esta toda la leche dentro. Tráeme algo para limpiarme porfa.

Del ropero sacó una toalla y se la ofreció. Se quedó mirando como se sacaba la leche del culo. Alucinaba con este niño. Sin duda era la mejor puta que se había follado.

CONTINUARÁ…..

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