El güero de la tienda
deseos de estar con alguien despues de tanto tiempo,me motivaron a seducir al guero despachador de la tienda.
El güero de la tienda
En Durango capital, la noche estaba lluviosa y no dejaba de sentir el deseo de tener sexo y es que hace tanto ya de mi primer encuentro que, el calor me invadía junto de una ansiedad de tocar algún hombre, y para acabar de perjudicarme mis padres no estaban en la ciudad yo soy del estado norteño antes mencionado de un hermoso país llamado México; ellos tuvieron que salir de emergencia al estado de Guanajuato, lo que me prendía, sabiéndome solo y libre, mil ideas invadiendo mi mente hasta que, una me convenció.
Si el chavo de la tienda un güero piernudo, quien en más de una ocasión me observaba y lamía la boca, vino a mi mente, tenía que hacer algo pero el siempre tiene a alguien cercas, su mamá, o alguien ¿que hago?, bueno se me ocurrió revolver unas cosas de la casa no muchas pero tenía que llevar acabo mi plan, llegué y le dije disculpa ¿no me puedes echar la mano por favor? El me pregunto que de que se trataba y le dije es que creo que alguien se metió a mi casa y estoy solo desde ayer.
Por favor, debo decir que soy bueno actuando, y me dijo espera voy a avisar para que mi sobrino venga a cuidar la tienda.
Están prácticamente enfrente una casa de la otra, le digo no hagas ruidos y entremos pero tu adelante y es que con el shorts que traía, quería verle cuanto pudiera, entro y cerré la puerta sin hacer el mas mínimo ruido, entremos y revisamos una a una de las habitaciones y hasta lo ultimo la mía, y fue cuando aproveche para quitarme la ropa argumentando que me iba a cambiar pero que sentía miedo si lo hacia cuando el sé fuera.
Le dije siéntate señalando mi cama, el muy obediente lo hizo, mientras bajaba mi pantalón volteé a verle el paquete que resaltaba en ese diminuto shorts de color rojo pasión, con un descaro absoluto, el me vio y se rió y se toco, enseguida me moje los labios, a lo que el me respondió con un movimiento con la cabeza indicándome que me le acercara lo hice, con solo una trusa puesta el acariciaba mi pierna y uno de mis brazos.
Mis manos se fueron directo a su pene el respondió acercando su boca a la mía, yo estaba temblando, pero gozando nos desnudamos y mi sorpresa su pene era hermoso rosita de la punta como de 16 cms, y sus vellos castaños medios mojados, me enloquecían más y la verdad no sabia ni como hacerlo, lo chupe, lo bese, lo acaricie, incluso lo apreté mientras el hacia lo mismo, luego el me dijo siempre me han gustado tus piernas musculosas y ahora quiero que me aprietes.
me volteó y en la orilla de mi cama le ofrecí mi pequeño goloso, el quiso meterlo a la primera pero no se le hizo, estaba muy contraído, me dijo ¡me regalas cremita!, enseguida de recibirla me la unto con ligeros movimientos circulares y haciendo presión metió su dedo y después se puso sobre mi hablando al oído me dijo te cogeré muy rico y suave por estar cerradito, y yo le creí pero no fue así metió su descomunal animal dentro de mí, no pude evitar gritar, el se movía tan rápido que no podía ni hablar, era algo así como una agresión cuando acabo solo me dijo luego le seguimos tengo que atender la tienda, ok.
Como ven es muy cortes mi vecino y ahora amante.