El grupo de Victor (6: Terminó el fin de semana 2)

A la mañana siguiente me desperté con mi polla en la boca de ...

EL GRUPO DE VICTOR (6)

(TERMINÓ EL FIN DE SEMANA, III)

A la mañana siguiente me desperté con mi polla en la boca de Jaime, el mamonazo se había tomado al pie de la letra, que me encantaba que me despertaran con una buena felación en el nabo. Al parecer no había tenido bastante con la follada que le dí en el culo anoche, después de contarle la violación de nuestros colegas. Puede ser que como solo me lo tiré por detrás y no le dejé que me chupara la polla, se quedaría con las ganas, y se estaba aprovechando de la empalmada mañanera de mi cipote.

–                   Victor:. Espera colega, … que me estoy meando.

–                   Jaime:. Pues meate encima mía, … moja me la cara y pon me chorreando todo el cuerpo con tu meado, … y después te corres en mi boca.

–                   Victor:. Te has levantado esta mañana viciosillo, … vamos para el cuarto de baño y metete en la bañera, que te voy a dar una duchita dorada, cabroncete.

Jaime se metió en la bañera y se arrodilló, esperando mi jugo varonil, mi lluvia dorada. Me puse de pie cerca de su cara y empecé a soltar por el capullo unos buenos chorros de meado. La orina resbalaba por su cara, ... cayendo por su boca hasta llegar a su pecho, … a su polla tiesa pajeada por su mano a un ritmo frenético, manchando sus muslos, …  y llenando de líquido amarillo el suelo de la bañera. En ese momento me sentía superior, como si fuera su amo y el mi sometido, dueño de su ser, todo poderoso, … y con ese sentimiento de grandeza me corrí en su boca abierta. Lo recibió como agua de mayo, chupó y tragó de mi cipote todo lo que le dí por el agujerito del capullo. Succionaba el mamonazo que daba gusto, se lo tragaba, degustaba, saboreando la mezcla del semen con la orina. Mientras se daba el festín con mi polla, se corrió de gusto disfrutando  como un enano, de la experiencia nueva. Cuando terminamos del polvo, nos duchamos juntos y volvimos a la cama.

–                   Jaime:. Joder tío, que gusto me da hacer guarradas contigo, … no se como te las apañas, pero sacas lo peor de mi, … mi lado mas vicioso y oscuro. Si te digo la verdad Victor, contigo no me importa hacer lo que me pidas, … lo que sea colega.

–                   Victor:. Me parece estupendo Jaime, … ten por seguro que conmigo vas a disfrutar como un loco. El sexo es para pasarlo bien y compartir con los colegas, y si encima están buenos, … pues mejor que mejor.

–                   Jaime:. Oye, por cierto, … ¿donde está el video que grabasteis en la cabaña?

–                   Victor:. Lo tengo yo en casa. De vez en cuando me hago una paja viendo a mis dos amigos, tan machos de cara a la gente, poniendo el culo y tragando buenas pollas.

–                   Jaime:. ¿y que pasó luego? … me refiero al último día que estuvisteis.

–                   Victor.. primero voy a llamar para que nos traigan el desayuno, cuando me beba el café y me fume un cigarro,  te sigo contando lo que ocurrió después.

Pues, … después de la violación de mis dos colegas, … lo que quedaba del sábado pasó sin pena ni gloria. Lidia llegó sobre las siete y media del pueblo, justo para la cena, comimos charlando entre todos, jugamos unas partidas de cartas,  … y lo mas fuerte era la normalidad, … como si no hubiera pasado nada entre nosotros. Me refiero a las folladas, tanto las de Miguel conmigo, como las de los colegas de este, con mis amigos. Nada de nada, … nadie hablaba de eso, ni la mas mínima broma al respecto, y eso nos dejaba alucinados. Nos fuimos retirando cada uno a nuestros dormitorios, primero los amigos de Miguel, detrás  nosotros tres y dejamos a Lidia y Miguel viendo la televisión.

Estuvimos un rato en mi habitación hablando, comentando la follada de David y Luis con los cuatro buenorros, y lo bien que nos lo habíamos pasado, ellos con los pollones follandoles el culo y yo grabándolo. A las dos horas, ya cansados los dos, se marcharon a su habitación y esperando, por si Miguel me daba alguna sorpresa, me quedé dormido.

A la mañana siguiente, me desperté con dos cipotes encima de mi cara. Dos capullos, dándome en la nariz un maravilloso olor a hombre, poniéndome dura y empalmada la polla, y con ganas de guerrear con mi lengua, una pedazo de mamada. Miguel y su colega Karim, se turnaban mi boca para que se las chupara, uno a cada lado de mi cabeza, tocándome con las manos el paquete y metiendolas por debajo de los calzoncillos hasta llegar a mis glúteos. En unos momentos ya estaba tragándome por el culo, los dedos de Miguel que no paraba de moverlos dentro del boquete, me tenían a mil por hora, mamando las pollas de los dos al mismo tiempo y preparando mi ojete para recibir unos buenos pollazos. No me hicieron esperar mucho, … Miguel se quedó sentado encima de mi cara, recibiendo lametones de mi lengua en su culazo, mientras Karim, ya me había levantado las piernas y me hacía devorar su verga, tirándose violentamente mi pobre culo. Me despertaron sin ninguna duda, por que la follada era de las buenas, y conociéndolos como eran los cabrones, me iban a dar la del pulpo. Joderme hasta hartarse los dos y a esperar que sorpresa me tenían guardada, y que vicioso juego harían conmigo.

Me pusieron a cuatro patas en la cama, Karim me dió su polla para que la chupara, y se la limpiara después de haberme follado el culo. Miguel se había puesto un guante de látex, le echó abundante crema y comenzó a metermelo por el boquete, abriéndome bien el culo. No dejó ni un palmo de mi ano sin explorar con su mano, sentía que me había partido en dos, alternaba su puño con la lengua una y otra vez, sin delicadeza ninguna, hasta que me tuvo chorreando babas por la punta de la polla. Me agarraba fuerte el cipote, apretándome el tronco desde la base, lamiendo los chorros de babas de mi capullo mezclados con su saliva. Las manazas de Karim separaban mis cachetes, mostrando ante sus ojos el boquetón tan suculento y sabroso que se iba a follar en breves segundos.

Tumbó mi cuerpo boca abajo y arrastró la almohada poniéndola debajo de mi abdomen, colocó mi culo en pompa, en posición de ataque, y me pegó un pollazo que me puso mirando para cuenca. El grito que di, me lo cayó el bofetón que me metió Karim con la mano, … marcados los dedos me dejó en el carrillo izquierdo, … ¡como me puso aquello! … ¡que calentón pillé! … agarrándome sin piedad de los pelos y obligándome a seguir mamando su verga. La sacaba de mi boca y me golpeaba la cara con la tranca, dura, gorda, venosa, y con la fuerza que daba me dolía hasta los dientes.

Miguel seguía a lo suyo, tirándose mi culo, dándome por detrás, como lo que era, ... un vicioso de mierda, … pero, … ¡que vicioso! … ¡que follada me estaba dando!.

Agarró de la Polla a Karim y le hizo una señal con la cabeza, dándole a entender que ahora le tocaba a él follarme. Cambiaron la postura, y ahora me pusieron boca arriba encima de la cama, espatarrado por completo y con la polla super gorda totalmente a la vista. Karim se agarró a mis muslos y los tensó hacía arriba, presionaba con fuerza al mismo tiempo que elevaba mi ojete a la altura de su boca, me lanzó un escupitajo en el agujero y me metió la polla dentro de un empujón. El tío cabrón, me escupía en la cara mientras me follaba el culo, clavaba sus dedos en mis piernas como un bestia, sentía sus huevos golpear el final de mi espalda, y para colmo Miguel me mordía los cojones con los dientes. ¡Que dolor! … ¡Que placer! … estaba disfrutando como un loco, era sufrimiento y gozo a la vez.

Bajó mis piernas y las juntó, poniéndome de lado para joderme en posición fetal, ni siquiera sacó la polla de mi culo para hacerlo, ni detuvo el ritmo de la follada en ningún momento. Así me tuvo hasta que Miguel se sentó en una silla, con las piernas abiertas y la verga empalmada apuntando hacía arriba, esperando mi culo hambriento. Karim paró el destrozo que estaba haciendo en mi ojete y se arrodilló entre las piernas de Miguel, abrió su boca y se la tragó entera. ¡Que morbazo! … viendo a ese pedazo de tío, como una maricona chupa pollas. Lameteaba el capullo con ímpetu, apretaba con fuerza los huevos de Miguel, estirándolos hacía abajo, tocaba los muslos, el pecho y se detenía en los pezones para retorcerlos a pellizcos. Miguel me hizo una señal para que me acercara, agarró mi cintura, me atrajo hacía el y me sentó en toda su polla. La clavó como una estaca, me partió el culo de nuevo, y al mamón le daba igual. Disfrutaba follándome el culo, comiéndome la boca, lamiendo con su lengua mis pezones, y metiendo la tranca mientras me separaba los cachetes con sus manos.

Karim se puso detrás de mi, con su verga dura amenazando con entrar también en mi boquete. ¿Quién podría impedírselo? … si el colega estaba como un salvaje, descontrolado, un animal  hambriento de culo.

La metió el hijo de puta de un tirón, uniendo su polla con la de Miguel, tocando y frotando, … sacando y metiendo las dos vergas al mismo tiempo. Me tenían como a la guarra de turno, la putita que se las traga de dos en dos, y nunca se queja.

La polla me estalló sin poder remediarlo,  la lefa me salía a borbotones por la raja del capullo, y sin tocármela siquiera con la mano. El escupitajo de leche que solté, llegó hasta la barbilla de Miguel, que pronto recogió con los dedos y se los metió en la boca. Hizo lo mismo con el semen que había rociado por su pecho, y el que se quedó en mi cabezón. Se fue metiendo los dedos entre sus labios cargaditos de lefa, y los relamió viciosamente sin quitarme la mirada de guarrón que ponía.

–                   Miguel:. ¡Que buena está tu leche caliente! … me pone super cachondo verte la cara, … ¡el gusto que te da, cuando te corres maricón!.

Karim sacó la polla de mi boquete y me duchó de semen toda la espalda, se corría restregándome la verga por la columna vertebral, llegando los chorros de leche hasta mis pelos.

Miguel me bajó de encima de el, alzó las manazas y agarró nuestras cabezas. Nos agachó, pegó mi boca y la de Karim a su pollón, unió nuestros labios a su tronco y se corrió pajeándose mientras arremetía contra nuestros hocicos. Relamimos con la lengua su capullo mientras se lo limpiábamos, nos lo pasamos de boca en boca hasta lavarle la polla entera, y los restos de lefa lo saboreamos en un pedazo de morreo entre Karim y yo.

Cuando terminamos se fueron los dos a desayunar, miré el reloj y marcaba las nueve y media de la mañana. Teníamos previsto irnos sobre las cuatro, después de comer y despedirnos de todos hasta la próxima.

–                   Jaime:. ¡Que calentura tío! … ¿Te lo pasarías de puta madre?

–                   Victor:. Ese fin de semana fue genial, todos disfrutamos muchísimo y lo pasamos de vicio. Es mas … a partir de ahí, es cuando le di rienda suelta a mis perversiones y me atreví ha hacer cosas, que jamás antes había hecho.

–                   Jaime:. ¿Como que?

–                   Victor:. Pues como, … meterme en el culo dos pollas, tragarme el semen de un tío, mearme encima de alguien, chuparle el coño a una piva, ver como violan a mis amigos y no hacer nada, y por ejemplo … entrarte a ti, que eres el tío mas chusma y macarra del instituto, que siempre vas de macho folla coños, … y al final, eres tu el maricón chupa pollas … jajaja.

–                   Jaime:. Jajaja … es verdad cabronazo, y a demás te diré, …  que me encanta mamarte el cipote, sobre todo cuando termino de emparmartela en mi boca y hago que te corras de gusto.

–                   Victor:. Esta noche nos reunimos los cuatro aquí en mi habitación, y le voy a decir a Luis, que te cuente la follada con sus primos ... En la noche vieja de hace un par de años, el cabrón se tiró a un par de primos gemelos que tiene y de paso también se apuntó a la follada su cuñado, ahora … ex cuñado.

–                   Jaime:. ¿El Peta? … ¿Que era novio de su hermana? … ¡joder! Cualquiera lo diría, con lo macho que es el colega, … y como está el mamón de bueno, … ¿Has visto el culo que tiene? Y el paquetón que se le marca, … ¡lo que tiene que tener entre las piernas!.

–                   Victor:. Está bueno el tío, ¿eh?. Por cierto, … a ti quien te gusta que yo conozca ... ¿Quien te gustaría tirarte?.

–                   Jaime:. ¿Sabes quien me da un morbazo que te cagas? … el Delio, … el negraco de mierda ese, que cualquier día le parto la boca. Ya he estado a punto dos veces de darle fuerte, es un chulo broncoso busca ruina, … y la chulería se la quito yo.

–                   Victor:. Si le pillas costo y después no se lo pagas, … es normal que se ponga gallito contigo.

–                   Jaime:. Pero él sabe que yo siempre se lo pago, no es para que se ponga como se pone conmigo muchas veces, el negro de mierda… en fin … ¿por que lo preguntas?

–                   Victor:. Jajaja … por nada hombre, … por nada.