El gallego

Somos un grupo de chicas de aproximadamente 23 años, nuestra confesiones ya están en todorelatos desde hace tiempo, por supuesto bajo el anonimato de otros nombres.

La verdadera historia de este relato, es inentendible para nosotras mismas no entiendo como hicimos nosotras cuatro Mary, Claudia, Cristina y yo (Soledad) , porque lo hicimos .

Sin lugar incidieron las circunstancias , Un amigo de Claudia vía Internet llego en el vuelo de ese lunes directamente desde Madrid , como era muy temprano las 7 a.m. solamente estaban Claudia y el chofer de nuestra empresa, lo traslado a un hotel de mediana categoría, puesto que si bien el cambio lo favorecía no quería dejarles plata por dormir a nadie, no le costo mucho a Claudia conectarlo con Cristina que se había ofrecido para viajar con el a los mejores lugares, esa semana estaba de vacaciones y si hay mina liberal predispuesta para enchufarse y salir ella lo es.

Fueron a las Cataratas a los hielos del Sur , a Ushuaia , no le preguntamos nada, pero el Sábado nos reunimos en la quinta de Mary que aprovechando que sus padres estaban en Brasil, estaba a nuestra disposición, el gallego no entendía esto de la hospitalidad argentina, pero creo que la disfruto a pleno.

Era un chico de veinte años, su cuerpo atlético, su aire picaron dejaban traslucir una actitud de que le gustaba esto del sexo, bueno a nosotras también y con el anticipo que le debe haber dado Cristina, no le habrán quedado dudas.

Nuestra amiga Cristina nos dijo que era un chico normal, que como amante bien, pero lo sentía un poco tímido, que no se soltaba, enseguida pense que los años le habían pesado, ella tiene 23 años, es una potra y lo debe haber exprimido.

Cada una fue contado y charlando con Cristina, como era, como lo hacia, creo que fue Mary quien dijo !vamos a violarlo! bueno lo vamos a gozar a pleno.

Al día de hoy creo lo violamos:

Fue Cristina que lo llevo al baño interno de la quinta, duchándose ambos, veíamos como lo enjabonaba a través de la mampara cada vez mas empañada, comentábamos entre nosotras que había expresado en un mail que le gustaba probarse ropa femenina, lo llevábamos a la cama y una a una lo montamos, dejándolo sin acabar hasta que la ultima lo subió.

Mary trajo una bragas y ropa femenina, lo vestimos , lo pintamos , el dejaba que le hiciéramos todo, desnudándolo entre todas , el consolador que Mary habia dejado de usar con su pareja lesbiana, aparecio en escena, acostado sobre Claudia, fue Mary quien se lo introdujo en el ano, sentándose sobre el (era doble el aparato), el gallego grito del dolor cuando todo el aparato se introdujo, considero que lo gozo puesto que no fueron mas que dos o tres segundos entrando en un gemido de goce, Claudia acabo y empezó a los gritos que la aplastaban, higienizamos el falo doble (consolador) y nos pusimos a jugar con Cristina, mientras el galleguito penetraba a Mary y Claudia.

Llego Carlos un amigo de todas que a veces hemos usado de compañero de viaje, no sabíamos que el era celoso, nos dimos cuenta cuando, viendo los restos de pintura y la braga suelta en la cintura del gallego, le dio el puntapié inicial para apoyarle el culo y penetrarlo, el aparato de Carlos es respetable otra vez sentimos el grito de dolor y a los segundos el gemido de placer, Carlos en un entre y saca lo lleno de leche de su primer polvo en la orgía que se había formado.

A la nochecita, todos nos calmamos, Mary trajo unas botellas de champagne, haciendo una segunda ronda de sexo donde eso de que nos gusta el sexo a los latinos quedo bien claro.

El gallego quedo encantado con la Argentina, pero creo que es imposible que olvide esa tarde en la quinta, donde realmente fue violado, le preguntamos si le gusto, pero su silencio nos dejo en el misterio.