El ex-novio, el amigo y ella disfrutan la piscina

Una ruptura sin malos rollos, toqueteos, calor, piscina... y tres amigos con ganas de disfrutar del sexo sin tabúes.

Javier, Eva y Luis eran muy amigos. De hecho, Luis y Eva habían salido juntos durante un tiempo, y Javier era, por aquel entonces, amigo íntimo de Luis.

Luis y Javier, físicamente eran el día y la noche. Javier era de complexión fuerte, moreno y de ojos oscuros. Luis en cambio, era rubio y un pelín flaco, y de ojos verdes. Eso sí, ambos eran bastante altos, rondando el 1'85. Eva, un poco mayor que ellos, tenía el pelo castaño, los ojos claros y un cuerpo muy bien formado, especialmente de pecho, ya que lucía un busto bastante prominente.

Los tres habían decidido pasar aquella semana de verano en casa de los padres de Eva, que por aquel entonces se encontraban en Jaén visitando a unos familiares. La verdad es que aquella casa era un lujazo : piscina, 3 plantas, un impresionante solárium arriba y, al estar rodeado de setos, tanto el solárium como la piscina gozaban de total intimidad.

Llegaron pues, el primer día, con un calor que caía de mil demonios. Rápidamente, pues, salieron a la piscina, en la parte posterior de la casa y, Luis, sin ningún reparo, se desnudó y se tiró al agua. Luis, de hecho, poca tenia que ocultar, ya que había salido con Eva, y no tenía ningún problema (ni con Javier tampoco, claro está).

Eva se fue a cambiar y salió con un tanga, y en top-less, se tumbó en el césped y se puso a leer. Javier, en bañador, se pegó un chapuzón en la piscina, y sin secarse, se fue también a tomar el sol.

Luis, tras nadar un ratito, salió y se fue hacia donde estaban sus amigos. Llevaba una ligera erección, pero la verdad es q no hizo nada para esconderla. Al contrario, mientras se secaba un poco el pelo, dijo:

  • La verdad, estando como estamos aquí de tranquilos, no entiendo como no os poneis en bolas! Al fin y al cabo, nos lo hemos visto todo, ya, ¿no?

Javier, dijo:

  • Hombre, yo a Eva no la he visto nunca desnuda!

  • Si este es el problema... - dijo Eva, quitándose el tanga.

Eva y Luis se miraron, y se rieron y Javier dijo:

  • VAYA DOS!!!

Y girando la cabeza se tumbó bocabajo.

Eva y Luis se volvieron a mirar pícaramente y, sin mediar palabra, le agarraron el bañador a Javier que, sorprendido, y bocabajo como estaba, no pudo evitar que le dejaran desnudo.

Javier, un punto avergonzado, se quedó bocabajo y dijo:

  • Bueno, hoy no tenia previsto bañarme...

Eva cogió el bañador y tirándolo al agua, le respondió:

  • ¡Por si cambias de opinión, te guardo el bañador fresquito!

Una vez todos desnudos, fueron recuperando la normalidad. Luis y Eva se pusieron a jugar con unas palas, los dos desnudos, pero sin ningún tipo de pudor. El pobre Javier seguía bocabajo, pero aguantando como un jabato. Eva le dijo, riendo:

  • " te va a quedar la espalda como un tomate".

  • "Como a ti y a mí," contesto Luis, "yo al menos no me he puesto protección solar".

  • "Vamos, ya te pongo yo ...", dijo Eva, dirigiéndose al interior de la casa.

Javier aprovechó este momento para ir a tirarse a la piscina, pero Eva, salió corriendo de la casa y dijo:

"JAAAJAJAAA Lo sabiaaaa!!! "

Javier, pues se giró y se quedó de cara a ellos, riendo, resignado y mostrando toda su desnudez.

  • Joe, nen ! No te recordaba tan pollón! - Dijo Luis

  • Tu tampoco estas mal armado, colega - respondió Eva. La verdad es que como la rotura de pareja de Eva y Luis había sido muy amistosa, gozaban de una excelente confianza para cosas como el sexo.

  • Gracias, contesto Luis.

Javier pudo, por fin, tirarse a la piscina y nadar y mientras tanto, Eva le empezó a poner crema a Luis. Estaban los dos de pie, y Eva le empezó a poner por la espalda, luego, arrodillándose, le puso por las piernas. Luis la tenia morcillona, así que le quedaba a Eva a la altura de la cabeza.

  • Aparta esto que me desconcentras, dijo burlonamente Eva. Pero al apartarla con la mano, claro, la polla volvió hacia la cara de Eva y le dio un ligero golpe cerca del ojo izquierdo.

  • Ahora verás, dijo Eva, y sin mediar palabra se puso la punta de la polla de Luis en la boca y hizo el gesto de morderla.

  • Cuidado, gritó Luis, mira, la tengo super roja por el sol!

  • Ostras, perdona!, y dicho esto, soltó un chorro de crema encima de la polla de Luis y empezó a untarla. Paso la mano también por los cojones e incluso llegó hasta el culo, lo recorrió un par de veces e introdujo un dedo en el ano de Luis.

Luis, absolutamente empalmado, dijo :

  • para, joder, que me estas poniendo a mil.

  • Es que no tienes control, macho !

  • Oye, tía, que yo en menos tiempo te pongo a temblar, y lo sabes.

Eva se puso firmes, delante de Luis, desafiante.

Luis se tocó la punta de la polla, que rezumaba lubricante transparente, se untó las puntas de los dedos con aquél liquido, y le pellizcó los pezones a Eva, que en medio segundo ya estaban erguidos como lanzas.

  • mmmm, para, para , tenías razón !!! Joder que cachonda me has puesto!!!

Y rápidamente se fue corriendo al agua. Al girarse, ambos vieron q Javier no se había perdido detalle y que incluso bajo el agua, su erección era claramente perceptible.

  • Hoy nos va a tocar una ducha bien fría!, dijo Javier cuando ya los tres estaban en el agua.

El clima se tranquilizó y ambos se pasaron el rato jugando por el agua, sobre las colchonetas, retozando sin pudor aun estando todos desnudos y tocándose por todos lados sin ninguna contemplación ni miramiento.

Y eso incluye a Luis y Javier, que en un momento, en el borde de la piscina, llegaron a hacer una lucha de espadas, blandiendo sus propias pollas tiesas.

Llego la tarde y dijeron de ir a tomar algo. Tocaba irse a la ducha y los tres se dirigieron al lavabo aun desnudos y no hacia falta decirlo:

los tres se metieron en la bañera, que era sobradamente grande y Eva encendió el chorro de agua.

  • Nos enjabonarás?, dijo Luis a Eva, con voz entre picara e inocente

  • La espalda o íntegramente?

  • Hombre, la duda ofende ! Íntegramente ! Yo al menos, cuando te enjabone no me voy a cortar!

  • Ponme jabón en ambas manos, dijo Eva a Javier-Ahora daros la vuelta Ambos estaban de espaldas a ella así que ella empezó a frotarles la espalda, empezó con el culo, luego puso las manos por delante y les acarició con dulzura las dos pollas. Ellos, con el agua, mas que excitados se estaban sintiendo mas que relajados, y mas aun con la voz de Eva diciendo, ¿esta bien así? y frases similares. Luego, Eva se puso un poco mas de jabón y se empezó a frotar ambas manos, por lo que Luis, que ya conocía las costumbres de Eva, empezó a reir por lo bajo.

De pronto, y sin aviso previo, ambos notaron el dedo índice de Eva dentro de sus culos. Luis, que ya se lo esperaba y había relajado el esfínter, se reía, pero Javier parecía francamente sorprendido.

  • El culo hay que limpiarlo por dentro, también, sabias, Javier?

  • Joe, esto se avisa, coño !

Los tres reían y Eva no paraba de empujar los dos agujeros de sus amigos con el dedo.

Acabado esto, Eva se puso con los brazos en cruz, entre los dos chicos y les dijo :

  • Que? me enjabonáis ahora a mi?

No les costo mucho decidirse. Luis le acariciaba el pelo, desde atrás, mientras Javier ya atacaba sus pechos. Luego bajaron y ambos se encontraron acariciando el coño a Eva que no paraba de sonreír y decir "mmm, que bien" mientras se tiraba el chorro de agua contra la entrepierna y los pechos.

De los manoseos no pasaron, pero estaba claro que aquella noche habría tema.

Los tres se vistieron y fueron a cenar a un japones. Hablaron de todo  y de nada y parecía que nada hubiera pasado aquella tarde. Luego, volvieron a la casa de los padres de Eva y allí, ... allí empezó todo.

Al volver, ninguno tenia sueño. Se desnudaron, y se fueron a la piscina a pegarse el ultimo bañito. Se secaron con las toallas y, aun desnudos, entraron en el comedor a ver la tele.

Javier se fue a la cocina un momento, y Luis no lo pudo resistir : se acercó a Eva que estaba estirada en uno de los sofás, y le empezó a lamer las tetas. Desde que cortaron no habían tenido sexo juntos, así que ambos se miraron y dijeron "sin malentendidos, eh? Esto es solo sexo"

Javier hizo ruido al entrar al comedor, lo que les dio tiempo a separar-se, huidizos, como si les hubieran pillado robando.

Pusieron la tele y, haciendo zapping, pillaron la porno del Canal+.

  • Déjala aquí, soltaron al unísono Javier y Luis.

Eva soltó el mando y ellos empezaron a hacer comentarios sobre la peli. Sin ningún desparpajo, Luis empezó a masturbarse delante de sus dos amigos.

Eva le dijo : Tío, no te cortes, tú como si estuvieras en tu casa!

Se giró y descubrió que Javier estaba en lo mismo. Ella se abrió de  piernas y, suspirando, se empezó a frotar el clítoris diciendo :

  • Dos pollas para mi sola y me tengo que hacer un dedo!

  • Nos ofreces algo mejor?, dijo Javier, sin dejar de pelársela.

  • Venid aquí los dos, ahora mismo.

Ambos, de pie, y absolutamente tiesos, se acercaron a Eva que sin darles tiempo, sentada desde el sofá, les empezó a comer los rabos.

Al cabo de muy poco, dijo :

  • bueno, empiezo por uno y termino por el otro que sino no daré abasto.

Comenzó así a comerle la polla a Javier, que le acariciaba el pelo con dulzura. Como le quedó a ella el coño en pompa, Luis no pudo evitar encasquetarle toda su polla, sin previo aviso.

Eva no se podía concentrar en comer la tranca de Javier, por las  embestidas de Luis, así que dijo :

  • Organicémonos : ven aquí, le dijo a Luis.

Eva escupió en sus dedos, y se untó el ojete, dejando claras sus intenciones.

  • Túmbate, Javier. Los dos chicos seguían las expertas instrucciones de la chica, al pie de la letra. Ella se sentó en la polla de Javier y con la mano izquierda, de espaldas, dirigió la polla de Luis a su culito hambriento, que poco a poco, sufrió la presencia ya conocida del pene de Luis.

  • No os mováis o os saldréis, ya me muevo yo, dijo Eva con dificultad.

Ahí estaban los tres, montándose su fiesta particular y gritando cada  vez mas, "YA NO PUEDO MAS, me voy a correr en tu culo, Eva" soltó Luis.

"Eso, llenadme, cabrones", soltó Eva trotando excitadísima.

La leche de Luis no se hizo esperar ni tampoco la de Javier. Javier, debajo, sufrió el goteo de los dos chorros de leche, que llenaron y rebasaron el coño y el culo de Eva, que aunque ya se había corrido, se negaba a detener su movimiento del todo.

  • Quiero mas, decía ! Pero no por el culo, que me lo estas destrozando!

  • Coño! Entonces yo me quedo sin probar un culito? - dijo Javier

  • Prueba el de Luis, que no es virgen ! - dijo Eva, sacándose las dos pollas ahora medio arrugadas , de dentro.

Se hizo el silencio, pero Eva, como si no fuera con ella, empezó a sorber de nuevo las dos pollas, bebiendo lo que quedaba de lo que se había derramado.

Luis, un poco avergonzado, dijo : "Eva, que cabrona eres! Solo me he metido tu consolador alguna vez, y siempre contigo!"

Eva sin hacerle caso, le tenia agarrada la polla a Javier y hablándole al miembro decía : "Quieres probar el culito de Luis? Lo quieres? "-  como hablándole a un niño pequeño.

Luis, con cara de indignado, pero realmente excitadísimo, cogió a Eva por el brazo, le separó las piernas y le metió 3 dedos en el coño.

Al sacarlos, salió liquido de Eva y también de Javier, que se había corrido a gusto en aquel coño enrojecido. Aquel liquido le sirvió a Luis para untarse el culo, dejándolo preparado para las embestidas que le vendrían de Javier.

Se puso de cuatro patas y le dijo a Javier, "venga, a que esperas?"

Javier no se izo de rogar. Sabiendo que Luis no tenia el culo preparado para tal polla, le fue entrando poco a poco pero sorprendentemente, poco después, ya le tenia empalado.

Los tres se tumbaron recostados hacia un lado y Eva acercó su coño a la polla de Luis, para montarse en el primer vagón de aquel tren.

Luis, se movía hacia delante y hacia atrás, embistiendo así a Eva y pelándole la banana a Javier con su ojete.

El dolor inicial dejó paso al placer que les venia en ondas a los tres amigos que terminaron por correrse casi al unísono.

Javier salió y luego lo hizo Luis. El culo de Luis goteaba el espeso liquido blanco de Javier, y Eva no pudo mas que acercarse y limpiarle a lengüetazos los restos del placer que quedaba esparcido por aquella zona.

Ellos estaban exhaustos, pero Eva aun tuvo tiempo de acariciarse recogiendo los restos de leche que se derramaban de su coñito, y poniéndose un par de dedos bien adentro, en busca de las gotas que aun pudieran quedar.

Así se fueron durmiendo los tres : ellos dos exhaustos y Eva aun  masturbándose.

Les esperaban días de autentica lujuria, pero esto ya es otra historia.