El estrés y otros factores - El vestuario.

... no respondió nada, comenzó a mover su mano suavemente por él miembro de su amigo de forma lenta y fue aumentado poco a poco...

CAPÍTULO 4 - El VESTUARIO

Es la segunda semana de entrenamiento, y el sol todavía es abrasador. En el campo todo está muy tranquilo, ya todo el mundo llevaba su uniforme y su casco puesto, de pie bajo el sol ardiente. A nadie se le permitía moverse, sólo debían mantenerse de pie durante dos horas enteras, según el entrenador, era para entrenar su persistencia, pero las piernas de Alejo ya no podían más,  le dolían y quería doblar o sentarse un poco, pero la mirada estricta en la cara del señor Andrés solamente le permitía permanecer en posición. Ya la cara de Alejo estaba llena de gotas de sudor y en la de Diego también corrían poco a poco, pero del otro lado del campo, en la sombra, junto al entrenador, se encontraba Dayer, firme y sin una gota de sudor.

La primera hora paso tan rápido que Alejo ni lo noto, pero su cuerpo por otro lado, su mirada parecía algo perdida y comenzaba a ver doble. Era como si estuviera sufriendo un gran golpe de calor y estaba por de desmayarse. Alejo subió sus brazos, señal de que se rendía y el entrenador le permitió volver a la sombra, sabiendo que le esperaría un castigo peor luego,  de camino las gradas tendría que pasar cerca de Dayer y siguió su camino un poco mas mientras se comenzaba a tambalear y trato de caminar hacia él pero ya era muy tarde, ya su cabeza estaba golpeando la tierra.

Su ultimo pensamiento fue “Por el bien de la amistad, no me dejes aquí tirado”

Todos comenzaron a gritar cuando vieron al frágil y flaco de Alejo desmayado pero ninguno se movió de su lugar para auxiliarlo, y antes de que el mismo Diego pudiera ir por él, ya alguien le estaba pidiendo permiso al entrenador, “Entrenador, un compañero se ha desmayado! Lo siento pero tengo que ayudar” para sorpresa de Diego, esas palabras no venían de Dayer, venían de otro jugador del equipo, el chico se acerco con algo de agua y mojo un poco la cara de Alejo.

El entrenador se acerco y Alejo ya estaba despertando, trato de reponerse pero no podía así que este chico le ofreció su hombro y le ayudo a levantarse, de cerca Dayer observaba todo sin perder la compostura, sin ninguna expresión en su rostro, él entrenador felicito al chico misterioso por tener el valor de ir en la ayuda de su compañero de equipo y le pidió que acompañara a Alejo a las gradas y que le diera un poco mas de agua.

Nuevamente las palabras del entrenador se volvieron a escuchar por todo el campo "Esto es un equipo, lo vieron y no lo ayudaron así que se van a quedar bajo el sol hasta que yo diga” Las expresiones de enojo de todos se escucharon y cerca del entrenador se encontraba Dayer sin decir nada, el entrenador se acerco un poco más a él y le hablo “Tú eres él que mas me decepciona, estabas más cerca y no haces nada, mejor te paras en el sol junto a los demás. Vamos!”

"Sí." Solo eso se escucho de Dayer.

El chico misterioso estaba muy cerca de Alejo, y el olor del sudor de ese chico era raro o eso pensó él, una vez más, Alejo se desmayó totalmente sin ninguna otra reacción.


En el momento que Alejo despertó, estaba en la cama de su apartamento, miró la hora, y se dio cuenta de que ya era de noche y no podía creer que durmió durante tanto tiempo. Diego entro con algo de comida, se acercó y lo lanzó sobre la cama de Alejo:

-Debes estar disfrutando pana, desde que llegaste estas durmiendo. Alejo comenzó a engullir la comida como un animal mientras desde la puerta era observado por Diego.

-¿Cómo hiciste para traerme de regreso? Preguntaba alejo con la boca llena de comida.

-Él chico que te ayudo nos trajo en su carro, y te cargue hasta aquí arriba, eres flaco pero pesas bastante pana. Alejo recordó al chico misterioso que lo ayudo y entonces a su mente volvió lo último que vio, Dayer.

-Gracias por traerme, disculpa por las molestias y todo eso. Diego ahora estaba sentado.

-Ah, el entrenador dijo que podías descansar por hoy, pero tienes que estar allí para la práctica de la tarde.


Alejo ya se sentía mejor y paso su mañana de clases de forma muy tranquila, trabajo su hora en la biblioteca y espero el momento  esperó hasta la tarde para ir al entrenamiento. Todos ya estaban en los vestuarios cambiándose y Alejo llego algo tarde, se apresuro a cambiarse de ropa y correr al campo junto a lo demás.

De un momento a otro, el entrenador les ordeno que se organizaran frente a él y alejo aprovecho la oportunidad para hablar con Dayer.

-Hey, Dayer.  Dayer puso la cara de enojado así que Alejo continuo hablando.

-¿Por qué no me ayudaste?. Y pensar que te di una botella de bloqueador, ¿Es así como usted trata a sus propios amigos?.

Dayer levantó la mano diciendo: “ Entrenador, este pendejo no debe estar de aquí."

El entrenador miró a Alejo y gritó de la forma más fuerte posible, “¿Por qué estás de pie allí de nuevo? No te mande al final el primer día. ¿Te mueres de ganas por salir del equipo?”

Luego de eso, Alejo caminó al fondo y no volvió a ver a Dayer durante todo el día, el entrenador comenzó a explicar sobre el día de selección y las cosas que tenían que hacer para ese evento, sobre todo un partido entre todos los chicos que pasaron de la primera fase, luego de separarlos en equipos, Alejo quedo con el grupo de los “perdedores” y Diego y Dayer quedaron el equipo de los “Favoritos”.


El día del evento había llegado y los vestuarios estaban llenos de chicos con muy poca ropa, todos ellos corriendo de un lado a otro para prepararse, Alejo se iba a duchar y se sacó los pantalones que traía junto su ropa interior. Después de que terminó de ducharse, se sorprendió al descubrir que su ropa interior no estaba en ninguna parte, ni su toalla ni nada de su ropa, toda había desaparecido. Alejo era muy tímido y no podía correr desnudo como los otros por todo el vestuario así que busco con la vista a alguien para que lo ayudara, Diego estaba caminando de un lado a otro buscando para bañarse y cuando vio que pasaba cerca de la ducha, lo jalo y le metió con él.

-Alejandro! Idiota! De que se trata esto? Diego estaba muy sorprendido con la situación.

-Diego, me robaron la ropa y mis cosas y no puedo salir de aquí. Alejo exclamo tratando de taparse.

-Está bien pana, toma mi toalla y ve a cambiarte, luego me la traes. Hablaba Diego mientras miraba el cuerpo de Alejo, noto que era más blanco de lo que parecía e incluso que tenía un buen cuerpo.

-Gracias. Respondió Alejandro mientras miraba a Diego sin nada, no lo pudo evitar, el era virgen y ver un cuerpo tan bueno provoco una erección y la situación no ayudaba para nada.

Ya no se hablaron más, Diego noto la erección de Alejo y sin pensarlo dos veces, se dejo llevar por los impulsos y el morbo de la situación, cuando Alejo estaba por salir, lo detuvo y le quito la toalla, dejando al aire su miembro erecto. Alejandro no podía creer lo que estaba pasando y por inercia lo primero que hizo fue taparse pero Diego le sostuvo la mano, el miembro erecto de Alejo seguía al aire libre y la otra mano de Diego fue a parar sobre este.

-¿Qué haces? Solo esas palabras salieron de la boca de Alejo y Diego no respondió nada, comenzó a mover su mano suavemente por él miembro de su amigo de forma lenta y fue aumentado poco a poco, Alejo no volvió a decir más nada y puso su mano también en el ahora también erecto miembro de Diego, los gritos de los chicos del equipo se escuchaban por todos lados pero ellos dos estaban en la ducha masturbándose, Esta era la primera vez que Alejo hacia algo así con otra persona, él ya se había tocado a sí mismo en otras ocasiones.

Diego y Alejo fueron dando la vuelta poco a poco hasta que Alejo quedo pegado de la pared  y el agua caía sobre sus cuerpos, el cuerpo formado de Diego se veía genial bajo el agua o eso pensó Alejandro, antes de pasar su otra mano por sus abdominales, Diego por otro lado se fue acercando mas y junto su miembro erecto junto al de Alejo y comenzó a frotarlos, el calor subió entre los dos y fue entonces cuando Alejo se comenzó a sentir que algo caliente quería salir de la cabeza de su pene, Diego siguió con el movimiento por un buen rato hasta que…

Nadie dijo nada, Alejo salió de las duchas y fue directo a donde estaban sus cosas y comenzó a vestirse, nadie había notado el par de pies en la ducha o cuando Diego entro a ella, eso era lo que pensaba Alejo hasta que termino de vestirse y fue a entregarle la toalla a Diego, la dejo sobre la puerta y fue a colocarse el casco, cuando se lo estaba poniendo, Dayer se le acerco.

-Hey, suerte. Las palabras de Dayer dejaron a Alejo fuera del mundo, no podía creer que Dayer la había dicho eso, Alejo no tuvo tiempo ni de responder, ya el chico de las palabras había salido de los vestuarios.


La atmósfera apasionada del evento rápidamente hizo que Alejo se olvidara del asunto de las duchas. Seria una mentira decir que Alejo no estaba asustado, sería su primera vez jugando en un evento tan importante, hoy le tocaría ser 1era base y esa era una posición importante. Él estaba bien preparado, se ató los cordones y espero que terminara la presentación para ir al campo. El entrenador comenzó hablando , "Este evento es el fruto de su trabajo. Espero que todos lo tomen como algo importante y saquen lo mejor de ustedes. Varios entrenadores están aquí para verlos y quiero que den lo mejor de ustedes, de eso depende su futuro”

El evento comenzó y los “Favoritos” estaban al bate, Alejo tomo su posición en el campo y el primer jugador en salir al bate era Diego, para Alejo fue casi imposible no pensar en el miembro de su compañero de habitación, de lo grueso que era y como su semen corría por su mano cuando estaban en las duchas, Diego se estaba preparando y el pícher del equipo de los perdedores no era otro que el chico misterioso que lo ayudo cuando se desmayo “Rivas” estaba marcado en el uniforme del chico acompañado de un numero “22” Alejo no le prestó más atención a eso, cuando se dio cuenta del jugador al bate, ya era muy tarde.

Los gritos y la emoción del público presente no se hicieron esperar, un rolling por primera base dejo al pobre Alejo muy mal, no le dio ni tiempo de reaccionar, diego ya estaba pisando su base y corriendo con dirección a segunda.

Los perdedores estaban comenzando muy mal y con ese nombre, no era de esperarse, los demás miembros del equipo comenzaron a gritar en apoyo y entonces Alejo decidió poner más concentración. Con Diego en segunda, las cosas comenzando ya estaban difíciles para los perdedores, luego el segundo bateador fue más por la tercera base y para fortuna de todos, la jugada termino en out. El tercero al bate ya estaba preparado, luego de una bola y dos strikes, no pudo salir de la goma, fue ponchado en manos de Gonzales.

Era el turno de nada más y nada menos que el cuarto bate, Dayer, él chico simplemente se paro y con el bate en sus manos, abanico un poco antes de calentamiento, cuando estaba listo, tomo du posición y entonces ocurrió, no se necesitaron mas tiros de parte de Gonzales, la pelota simplemente desapareció entre las nubes mientras se alejaba del estadio, Dayer comenzó a recorrer las bases y miro con superioridad a Alejo cuando paso por primera, siguió su recorrido y del otro lado, diego ya estaba llegando, así fue como en la primera parte del Inning, Dayer estaba luciendo sus habilidades.

Tardamos un poco pero nos pusimos las pilas y rápidamente agarramos el out faltante y entonces término la primera parte, luego de recogernos es que pudimos discutir, el entrenador encargado hablo con nosotros y sí, me regaño muy feo por quedarme dormido, ya con los ánimos un poco más calmado, me tocaría ser segundo bate, y el primer bate seria otro chico, creo que su nombre era Wilson, en su espalda tenía el numero 12.

El numero 12 estaba preparado y rápidamente pude ver a Dayer como antesalista y Diego como primera base, el momento no se hizo esperar y Wilson con un hit logro llegar a primera base, era mi turno para batear y las piernas me temblaban un poco, trate de concentrarme y de pensar que era solo un juego más, otro entre los miles que había jugado, ni cuenta me di por donde se fue la pelota, solo sé que golpeo una de las paredes del fondo y no la pudieron agarrar, Wilson logro llegar a tercera y por órdenes del entrenador, se quedo allí, mientras yo esperaba en tercera.


Luego de unos ocho largos Innings, la cosa estaba fatal, los favoritos nos iban ganando nueve carreras por seis, debo admitir que los perdedores lo estaban haciendo mejor de lo que se esperaba, era el turno al bate para los favoritos y la parte alta del Inning paso rápido y era nuestro momento al bate, el primero al bate era Wilson nuevamente y creo que dios se puso de nuestro lado por un momento, luego de un buen rato, le dieron base por bola.

Era mi turno al bate y creo que después de lo que me paso en el primer inning he mejorado bastante, podía escuchar algunos gritos y el sol estaba en su máximo, me seque un poco el sudor y me dispuse a batear nuevamente, luego de abanicar dos veces y teniendo mi cuenta limite, creo que realmente el nueve era nuestro numero de suerte, conecte el bate con la pelota y pude ver como se alejaba del campo poco a poco, cuando vi que salió del área es que escucho el grito por los parlantes.

¡JOOOOOOOONRÓN!

Wilson corrió hasta primera y me tome mi tiempo para llegar detrás de él, cuando llegue el equipo nos recibía, nuevamente estábamos en el juego y teníamos una oportunidad de dejarlos en el terreno. El tercer bate estaba listo, Gonzales, el chico calentó y se fue a parar en el home, espero el momento y conecto un rolling, que le permitió llegar a segunda.

El cuarto bate estaba preparado, los nervios estaban a mil, teníamos en empate en segunda y necesitábamos otro rolling para lograr extender el juego un poco más, el chico bateo un hit por segunda y gracias a un error de Dayer, Gonzales logro llegar a tercera y el otro chico se quedo en primera. Nuevamente nuestras esperanzas estaban a mil y entonces ocurrió el primer out, luego el segundo y entonces dios bajo su mirada nuevamente y los favoreció.

El séptimo bate como nunca en la vida, conecto nada más y nada menos que un jonrón para su cuenta personal, contra todo pronóstico, el equipo de los perdedores había dejado a los favoritos en el terreno, pastando. Los chicos llegaron a primera y todos corrían de la emoción al  home a felicitarnos y a gritar.

Alejo no lo podía creer la victoria que consiguieron, mientras tanto, varios objetos voladores cayeron en el campo, Alejo estaba totalmente sorprendido al ver el diseño y los colores de lo que cayó en el campo, parecía la ropa que acababa de perder en los vestidores y junto con ella su ropa interior. Los demás jugadores comenzaron a reírse y se acercaron mas a donde estaba Alejo, la ropa interior seguía en el suelo a la vista de todos.

El rostro de Alejo se sonrojó mientras recogía la ropa del suelo y corría a los vestuarios, dejo su casco y su bate, todo, lo único que le importaba era salir del grupo de jugadores rápido pero no todos ellos se atravesaban en el medio y reían mientras señalaban a Alejo, tanto fue el bochorno que algunas lagrimas comenzaron a caer de sus ojos.

En los vestuarios, Alejo comenzó a patear las cosas de la rabia, detrás de él entro el entrenador y le preguntaba lo que pasaba pero Alejo no respondía nada, la rabia y el enojo no lo dejaban articular otras palabras que no fueran insultos, como no explicaba nada, el entrenador entonces alzo la voz y Alejo se detuvo.

-Que te pasa? Ganaron, porque estas enojado?. Alejo le enseño la ropa interior al entrenador mientras lloraba.

-Me robaron mi ropa interior y la tiraron en el campo, eso es lo que pasa. Alejo estaba muy enojado y recogía algunas de sus cosas y las guardaba en su bolso.

-Hijo, esas son cosas que pasan algunas veces, solo lo hacen por bromear.

-No importa, ya no quiero estar aquí, ya no quiero ser parte de este equipo. El entrenador se sorprendió un poco pero respondió.

-Bueno, yo te quería decir que a varios les gusto tu trabajo hoy así que quería hablar contigo pero si te quieres retirar, me parece bien.

-Que otro se quede con esa oportunidad, yo voy a buscar otra en un equipo distinto.

Luego de esa conversación con el entrenador, Alejo rápidamente comenzó a caminar hacia la salida de los vestidores, de camino se encontró con Dayer, quien estaba recostado de la pared como esperando algo, cuando vio que Alejo lo ignoro y siguió caminando, Dayer lo tomo de la mano y le pidió que lo esperara.


Dayer y Alejo iban caminando juntos a los departamentos, en el poco tiempo que tenían conociéndose, ya habían formado una pequeña amistad o así lo veía Alejo que casi ni podía pensar en eso debido a su rabia por lo que paso en el campo, los pensamientos en su cabeza lo tenían como loco hasta que la voz de su acompañante lo saco de sus mundo.

-¿Qué paso  con el entrenador?, Preguntó Dayer.

-Nada. Alejo estaba algo sorprendido por l pregunta pero no quería hablar de eso.

-Entonces, vas a dejar el equipo?, Alejo pensó un momento y respondió.

-Sí.

Alejo se mantuvo en silencio y los dos sólo continuaron caminando. Después de un largo rato, Dayer abrió la boca diciendo:

-Debes de estar sintiendo algo de frío ahí abajo, ¿no?. Su tono esta, obviamente, lleno de burla. Alejo quedó atónito por un corto tiempo, antes de que finalmente reaccionara empujando a Dayer.

-¿De qué estás hablando? Esa era la ropa interior que usaba cuando llegue al evento, después que me la robaron, busque otra en mi bolso y ya.

Los dos siguieron charlando un buen rato hasta que llegaron  al edifico, abajo pareciera que ninguno de los dos quisiera entrar así que Alejo le propuso a Dayer ir por algunos dulces a la panadería que estaba cerca y este acepto.

-Oye, no sabía que te gustaban los elefantes y mucho menos los de trompa grande. Dayer estaba hablando sobre el diseño de la ropa interior de Alejo.

-Mi mama fue la que los compró para mí! Alejo gritaba con su rostro sonrojado.

-Me gustan, yo tengo unos iguales. Alejo no podía creer lo que estaba escuchando y antes de que pudiera decir algo, Dayer se adelanto riendo muy fuerte---


Continuara…

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