El esposo de mi tía

Como el esposo de mi tía me hizo mi primer anal.

Voy a comenzar este relato, no diciendo que es verídico, pues aunque se diga muy pocas personas así lo creen. Esto que paso realmente cambio mi vida, y mi percepción del sexo. Mi nombre es Antonio, tengo 27 años, soy profesional, con un buen puesto y tengo una vida relativamente acomodada, soy casado desde hace 5 años. Mi vida sexual siempre ha sido muy buena con mi esposa, realmente ella es muy liberal y es abierta a intentar todo tipo de posiciones y cosas. Debo reconocer que comencé mi vida sexual algo joven, a los 16 años. Sin embargo, desde los 12 años veo pornografía.

Uno de mis deseos siempre ha sido ser negro, me encanta la gente de ese color, siento que tiene estilo, nunca pasan desapercibidos y siempre decían que eran bueno en el sexo. En mi familia somos todos blancos, a pesar de no ser racistas. Hace 4 años mi tía presento a su novio que posteriormente iba a ser su esposo, el es negro. Mi tía tiene 36 años y el, Steve, tiene ahora 40 años.

Como yo siempre anhele ser negro, me pareció muy buena nota tener un amigo así, de manera que me acerque a el y nos hicimos buenos amigos, a pesar de nuestra diferencia de edades. A mi me gusta el deporte, específicamente el baloncesto, y a el también, así que nos metimos a un equipo de barrio a jugar. Jugamos dos veces por semana en las noches, mi esposa es delicada y no soporta que llegue oloroso a sudor a bañarme pues dice que dejo la casa con mal olor, así que mi tía para solucionar el problema, y por estar muy agradecida conmigo por el apoyo y la amistad con Steve propuso que después de jugar pasara y me bañara en su casa, así no llegaría oloroso a nada.

La casa de mi tía es grande, tiene un baño arriba en el cuarto de ellos, un medio baño en el primer piso y un baño completo en el basemant o sótano como le llaman en algunos países. Ellos no tienen hijos, pues se casaron ya "viejones" así que decidieron no tener para no arriesgarse a algún defecto por la edad.

Un día llegamos y mi tía estaba algo enferma por lo que Steve me pidió que nos bañáramos en el basemant para no despertarla y molestarla. Steve se metió a bañar primero, mientras yo prendí el TV y mientras la veía saque de mi mochila mi paño, mis pantaloncillos, el calzoncillo y una camiseta limpia. Como Steve tardaba me recosté un poco para ver TV y sin querer bote el paño al suelo. Cuando Salió Steve, solo lo cubría una toalla en sus partes genitales, sin embargo, se le hacía buen bulto, pero yo para no dar una imagen de gay, porque no lo soy, tome mi ropa y me metí al baño rápido. Cuando me estaba desvistiendo oí como se cayó una botella, a los que Steve me contesto que se le había caído una colonia. Cuando me quitaba mi ultima prenda me di cuenta que había olvidado el paño, así que me puse mis pantaloncillos y salí a tomar el paño que había dejado afuera.

Cuando salí encontré a Steve de cuclillas, totalmente desnudo y secando con el paño en el perfume que había dejado caer. Me asombré pues nunca había visto un miembro negro ni tampoco tan bien formado y de buen tamaño como ese. Me quede atónito, como tonto viendo el pene de Steve colgando. El apenas percibió hacia donde estaba dirigiendo mi mirada, quiso taparse pero no encontró con que, así que nada mas se hinco y se trato de esconder y me pregunto en un tono burlista si nunca había visto aun hombre desnudo.

Le respondí que si, pero que nunca con un pene tan grande y tan grueso. Con un tono de presumido me dijo" y eso que no estoy templado" y se echo una carcajada, que me saco del trance, pero que al mismo tiempo me puso a pensar que tenía razón. Le dije que me alcanzara el paño, con la intención que se pusiera de pie y poder verlo mejor. EL percibió eso y ya con malicia me dijo que como era el mío, a lo que le dije que mucho mas pequeño y delgado que el de él, y eso que yo no estoy tan mal que digamos. Nuevamente sonrió y me dijo que mi tía le había dicho que nunca había visto un pene así de grande y que al principio les costaba tener sexo, y que aun ahora después de 2 años de casados usan lubricante para poder penetrarla, mientras hablaba eso, se lo agarrraba y hacia como masturbándose, a lo cual y no perdí detalle de eso. Note como se le estaba poniendo gruesa y se estaba templando con la conversación. El también lo noto y me dijo que me bañara pues podía llegar mi tía y pensar mal al respecto de lo veía.

Luego de eso, la semana entrante nos vimos igual para el juego, pero esta vez, hablamos del tema que hasta ahora nunca habíamos hablado, del sexo.

Y es verdad que nunca habías visto un pene como el mío? Me preguntó iniciando la conversación candente.

No, nunca, la verdad si había visto pero solo de hombres blanco y mucho mas pequeños. Le respondí

La primera vez que tu tía me lo vio casi le da un paro cardíaco, pues me dijo que eso no le entraba a ella ni en sueños, y de verdad que no, siempre que lo hacemos por más lubricante que usemos no entra más de tres cuartas partes. – O sea, se desperdicia una parte de tu pene, que pena- le dije sonriendo

Si, así es, un día nos grabamos para que ella viera cuanto entraba pues ella decía que le entraba todo y yo le decía que no, así que nos grabamos para que ella viera que estaba equivocada.- me decía

La verdad no pensé que mi tía, tan recatada que se veía se dejara grabar teniendo sexo. Mi esposa que tiene 25 y es mas liberal nunca me ha dejado ni siquiera fotografiarla, mucho menos grabarla.

Sabes algo, me dice. Algo que siempre he querido hacer y que he intentado con tu tía pero no he podido ni con ella ni con nadie, obviamente por el tamaño, es el sexo anal. Una vez hasta me fui con un tipo que era gay pues pensé que ya estaba bien abierto y tampoco aguanto más que la punta.

así me imagino le dije, mientras pensaba en las sesiones de sexo anal que tenia con mi esposa, pues a ella le encantaba y la mayoría de las veces me pedía que lo hiciéramos por el culo pues lo disfrutaba mas.

Entonces tú lo harías con un hombre con tal de hacerlo por el culo – Le dije. Pensando en arriesgarme yo a hacerlo.

Si claro, me dice, de solo pensarlo ya se me esta parando y se echo una mirada muy maliciosa como esperando que yo le dijera algo caliente.

Muéstramela le dije, venciendo todo temor a parecer gay.

Aquí no, alguien nos puede ver, me dijo, pues íbamos manejando rumbo al juego. Vamos a algún lado solos me dijo luego

Asentí con mi cabeza, aunque en realidad no se porque lo hice, me imagino que fue producto de la excitación de ver un pene tan grande en vivo.

Steve me dirige hacia un motel, entramos al cuarto, pagamos y entramos. Al principio obviamente las cosas estaban tensas, pero el rompió el hielo diciéndome que tenia que enseñarle la mía, pues el no la había visto y yo si la de el. Luego de esto y para bajar la tensión del ambiente, encendió el TV buscando el canal porno que hay en esto lugares, justamente cuando lo puso estaba un hombre metiéndoselo por el culo a una mujer y nos quedamos lo dos como tontos viendo. Esto nos excito de gran manera. Ver como poco a poco la metía, ver salir líquidos de su culo, ver como el lo metía y sacaba, gimiendo ambos de placer nos llevo hacia un éxtasis indescriptible. Puede ver como el pantalón de el ya no era suficiente para detener su armamento, así que se puso de pie y se quito toda la ropa, yo no hice nada solo verlo. Cuando se quito el bóxer, lo tenía medio parado, se sentó en la cama y empezó a sobarselo mientras veía la película. Ver la película y verlo a el me estaba excitando demasiado, sin darme cuenta como, solo seguí un impulso , me senté a sus pies y tome su pene, lo acariciaba y lo subía de arriba abajo, era enorme, y grueso, muy rico, para darles una idea, mis dos manos lo agarraban y aun así quedaba la cabeza sin tapar, mi mano es algo ancha mide un poco mas de 10 cm. la palma, así que sin estar totalmente erecto ese pene le media alrededor de 28 cm., el mío creo que una vez lo medí bien erecto y media apenas 19 cm.

Bueno, una vez que lo tome, lo empecé a acariciar, como despabido por la magnitud, lo subía y bajaba hasta que me decidí a meterlo en mi boca, era la primera vez que tenia un pene en mi boca, y lo peor de todo es que me gustaba, me gusta sentir eso duro en mi boca, sentir el orificio en mi lengua, sentir la suavidad del glande, sentir el cordón que recorre alrededor de la cabeza, me excitaba y a el también, pues a pesar de ser un inexperto, el lo estaba disfrutando.

El vino y me levanto y me indico que me acostar en la cama, lo obedecí, me puse boca arriba, con la cabeza en la orilla, tal como el me lo había indicado. El de pie en la orilla de la cama, se agacho un poco de manera que el pene de el quedara a la altura de mi boca, en una posición como un 69, entendí inmediatamente que quería hacer, así que me hice caer mi cabeza, dejando una recta entre mi boca y mi esófago. Luego de esto, el se agacho y me dijo que abriera bien y que no tragara; procedió a metérmela, de a pocos pues podía ahorgarme, la fue metiendo poco a poco, y haciendo el movimiento como teniendo sexo, sentía como se ponía mas gruesa dentro de mi boca y sentir la cabeza de su pene dentro de mi esófago me excitaba, la metió hasta un poco mas de la mitad de su pene, pude sentir como sus huevo chocaban con mi frente. Mientras me lo hacia me dijo que me cabía mas a que a mi tía, me sentí mas relajado pues pude ver que el sabía lo que hacia, así que empecé a hacer yo cosas de mi iniciativa y le empecé a acariciar con mis manos sus huevos y sus nalgas, a lo que el respondió con agrado,

Luego que la saco, pude ver como quedaban líquidos de su pene dentro de mi boca, estaba tan excitado que no me dió asco y los chupe todos, y limpié su cabeza con mi lengua, a esas alturas ya el estaba mucho más excitado y pene era enorme y grueso. Me dijo que me desvistiera a lo cual supuse que vendría la parte fuerte, pero no fue así, después de desnudarme, me indico que me pusiera de 4 patas, dejándole mi culo virgen frente a el; el empezó a tocarme las nalgas, luego los huevos, y el ano, mientras me masajeaba el ano, me empezó a besar las nalgas, sentir rico, era la primera vez que me hacían eso, luego acerco su lengua hasta mi ano y lo empezó a lamer, y a chupar, mientras lo mojaba con su lengua, trataba de introducir un dedo hasta que lo logro, lo metía y sacaba, cuando lo dejaba fuera me metía la lengua, sentía que me orinaba del gusto, nunca había sentido algo así, era delicioso, cuando metía su lengua en mi culo, sentía la gloria.

Cuando dejo de hacerlo me dijo que me quedara así, en esas posición. Sentí como se dirigía a su pantalón y sacaba algo que ahora se era lubricante y condones, Se puso un condón, y se echo lubricante. Luego agarro una buena pelota y me lo unto en mi culo, metió su dedo lleno de eso, empezó a masajear abriéndolo hasta que alcanzo un tamaño considerable. Saco su dedo y puso la punta de su pene en mi culo. Pensé que me moriría cuando entrara ya por fin. La verdad la cabeza entro no tan difícil, sentí cierto dolor, pero no mucho, cuando ya la empezó a meter en forma, sentía algo dentro de mi, que me incomodaba pero me aguante, hasta que el empezó con el ejercicio de mete y saca, hasta ese momento no sentía nada extraordinario y no sabía que era lo que le gustaba a mi esposa, pero de pronto comencé a sentir escalofríos, escalofríos ricos, y me perdí en ese sentir, sentía demasiado rico, como nunca antes, mi pene se le salía solo el semen, de tanto placer, Steve también estaba sintiendo rico por sus gemidos, sentía tantas cosas, como que me orinaba, como que me cagaba, no se tantas cosas ricas que no se como explicarles. En un momento sentí que adentro se me rompía algo, y sentí como en mis nalgas golpeaban sus huevos, a lo que supuse que había entrado toda, al preguntarle me dijo que si, que estaba toda adentro, que era mejor que mi tía haciéndolo, que aguantaba mas. De pronto dio un grito de desahogo, sentí que mi culo se habría para dar aguantar su pene. Cuando terminó, y la saco, sentí algo rico cuando salía, me di vuelta para verlo, y su condón lleno de sangre, prueba de mi virginidad, jajajajaj. En eso me dieron ganas de ir a cagar y fui, sentía mí pansa descargada.

Cuando salí, Steve me estaba esperando acostado en la cama, desnudo, con su pene ya descansado, no podía creer que eso me había entrado en la primera vez. Me dijo que había estado muy bien, que le encantó, que se sintió mejor con que con mi tía.

-Lastima que no tengo cámara para grabarte y que tú vieras como se abrió tu culo. Me dice

  • Si, lastima, le contesté. Tu tienes los videos con mi tía aun guardados, le pregunté

-Si, quieres verlos?

  • Claro, dime cuanto y los vemos.

Quedamos que el próximo jueves no iríamos al partido y nos iríamos a ver los videos de el con mi tía.

Luego de esto salimos del hotel y nos fuimos a casa, nos bañamos como todos lo días de juego, para no levantar sospecha, me fui a mi casa, claro con un dolor de culo increíble, pero creo que valió la pena, sentí algo que nunca había sentido antes….