El espectáculo
Una mujer, sabedora de su carga sexual y sensual, se masturba ante un hombre, dándole un espectáculo al que asiste como espectador inmóvil, hasta que se ofrece a él, a punto del orgasmo mutuo.
Me siento en un sillón y miro. Luces bajas
Apareces vestida con un body, ligas y nada más. El body es transparente y muestra un pubis depilado. Solo piel.
Comienza el show. Te paras frente a mí y te desabrochas los snaps inferiores del body, se entreven labios hinchados.
Tus manos recorren tu cuerpo lentamente. Muslos, cintura, brazos... tus pezones se dejan ver duros a través del material. Tienes algo más en ellos... ¿aros? no se alcanza a notar. La luz no es suficiente.
Te arrodillas frente a mí, entre mis piernas, abres mi cierre, sacas mi pene, medio erecto, le das un beso en el glande y lo dejas afuera, prohibiéndome tocarlo. Sigues arrodillada entre mis piernas, enderezas la espalda y empiezas a acariciarte los pechos lentamente, recorriendo toda su deliciosa superficie. Tus pezones parecen perforar la tela. Miras como me crece y crece el pene. Ves el brillo de una gota en la punta. Estiras un dedo, esparces el liquido por el glande y te chupas el dedo como si te estuvieras devorando un pico grande y duro. Con gula.
Comienzas a enrollar el body de a poco, mostrando tu pubis depilado perfectamente, tu ombligo, y te lo dejas justo antes de mostrarme los pechos. Noto que tu piel brilla. Parece aceite. Me gustaría tocar pero no puedo.
Te das media vuelta y te pones en cuatro patas. Tus nalgas me apuntan y veo como se asoma una vulva pelada y un ano rosado e invitante. Veo ese brillo que puede ser aceite. Te lejas gateando, te incorporas y te abres las nalgas, dejándome ver en plenitud tu depilación y el brillo del aceite y tu lubricación. Quiero comer y lamer... pero nada.
Traes una silla, te sientas frente a mí, totalmente abierta de piernas y te comienzas a acariciar la cara interna de los muslos, diciéndome que parece que a ambos nos gusta esto, que mire lo congestionado y mojado que tengo el pico.
Piensas un poquito y sacas mis testículos también para verlos. Un par de pajitas, y me dejas el pico con el glande cubierto.
Te abres los labios inferiores y me muestras un clítoris rojo e inflamado. Veo que te gusta también esto de dar shows. Te pellizcas el clítoris entre el índice y el pulgar, y suspiras. Yo te ruego me dejes ver tus pechos. Tú me ignoras. El pellizco deja paso a caricias y tirones suaves en tus labios inferiores, como si los quisieras estirar. Te acaricias suavemente la zona alrededor del ano, y tu dedo vuelve, lentamente, desesperantemente, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris.
Pasas una mano por debajo de tus piernas y te acaricias la entrada de la vagina mientras tu otra mano se dedica fulltime a tu clítoris. Yo goteo y goteo y tú te das y te da placer, un dedo desaparece en tu vagina. Gimes... clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris... otro dedo desaparece, respiración acelerada, me dices cuánto te gustaría ser penetrada por algo grande y duro. Me ofrezco. Tu te ríes y sacas un vibrador de no sé dónde. Sacas dos dedos brillantes de tu vagina y te metes el vibrador lentamente, sin parar pero con lentitud cruel. Tu otra mano no olvida clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris... te empalas más y más rápido en el vibrador, cuyo zumbido se confunde con los sonidos líquidos de tu vagina inundada. Tu otra mano sigue clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, con la diferencia que tu entrada de vagina esta distendida alrededor del pico falso que bombea en tu interior. Aun así, la caricia no disminuye: clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris, clítoris, labios, entrada de vagina, ano, labios, clítoris... me dices que estas a punto de acabar y me ordenas pajearme. Te corres entre gritos y gemidos. Yo me pajeo lentamente, con el poco autocontrol que me queda. Te sacas el vibrador, te acercas a mí y te empalas en mi pene, hipersensible.
Mientras nos besamos me corro en torrentes, llenándote