El Escarmiento

Hola: Como están espero que muy bien , como les había comentado en el relato anterior sobre lo ocurrido con mi ex enamorada. Ahora les narraré de una experiencia, en la cual es similar a la otra , pero esta vez es un compañero suyo el que en cierta forma es quien se percata de lo acontece en su cuarto mientras ella y yo hacemos el amor. Sin más preámbulos la historia dice así:

Su mamá y su hermana como es ya muy común en ellas se encontraban de viaje y su papá esa vez no viajaría. Sin embargo como trabaja su hora de llegaba entre las 6:30 y las 7:30 pm, ella tenía un examen en la Universidad creo que era sobre estadística y como yo no sabía nada del tema pues no había llevado esos cursos no podía enseñarle.

Para poder solucionar ese problema ella le dijo a un amigo de la Universidad que la ayude o mejo dicho que le enseñe ese curso ya que números no es su fuerte. Él por su parte ni corto ni perezoso dijo ya, eso no debía incomodarme pero si había un gran problema y creo que me van a entender al decir esto pero uno se da cuenta cuando le gusta alguien de otro verdad, a menos que sea demasiado inocente.

El hecho es que este pata no era la excepción y miraba a mi ex enamorada con unos ojos bastantes libidinosos y ella no se percataba pues lo hacía a sus espaldas y esta creía que era un chico muy "serio y responsable", si co..........mo no, pero sin salirme del tema este amigo pensaba que ella por ser mayor que yo solo me agarraba para un "bacilón" y la mi.........sma , pero no era así, puesto que en las oportunidades en las que tuvimos nuestras relaciones sexuales ella se mostraba inmensamente feliz pues cuando tenía sus orgasmos prácticamente tenía que taparle la boca para que no gritara, que no hubiera dado yo por escucharla gritar y pedir más y más hasta que me diga que ya no puede más pero por los lugares en donde lo hacíamos no era muy conveniente ello.

Me acuerdo que ese día ella me dijo que la esperara como de costumbre cerca de su casa para poder tener relaciones aprovechando que su ni mamá ni su hermana estaban. Pero no me había comentado nada del maldito amigo. El asunto es que cuado llegaron a mi me dieron unas ganas de matarlo al imbécil pero esperé a que ella me de una explicación bastante razonable por lo que estaba llegando a su casa con ese idiota. Se acercó a mí y todo como si se tratara de algo me jaló de la mano y le dijo al idiota ese que la espere un rato pues al ver mi cara de enojo se asustó pues me han dicho que mi mirada se clava bien feo en el corazón de los demás y es como si miraran al mismísimo diablo en persona.

Me dice : Calos He llamado a Antonio para que me ayude a estudiar estadística pues no sé mucho de ese curso y si salgo mal puede ser que lo vuelva llevar y eso a mi papá no le va ha gustar mucho espero me comprendas.

Traté de calmarme lo más que podía y le dije : entonces que me voy o que quieres que haga.

Era lógico mi malestar en ese momento, pero que podía hacer. No me iba a quedar así sabiendo que ese con.............chudo se quede a solas con mi enamorada de ese entonces, ustedes que creen, tengo razón o no. Trató de calmarme y me dijo que te parece si entramos a la casa y tú te quedas en mi cuarto mientras yo estudio y cuando él se vaya tú y yo repetiremos lo de la vez la pasada (haciendo alusión al relato anterior), eso me tranquilizó un poco ya que aprovecharía para que ese idiota se de cuenta de a quien quiere ella y de una buena y maldita vez se baje de su nube pues creo que le estaba dañando, y si no lo dañaría a ese huevón.

Una vez que entramos a la casa ella le dijo de la manera más cordial que tomara asiento, mientras ella y yo nos dirigíamos a su cuarto, para dejar las cosas y sacar lo necesario, le dije que sí que íbamos a su cuarto para que sepa que solo yo podía hacer eso y que él jamás tendría la oportunidad que a mí se me presentaba. Al dar la vuelta pude ver su cara de enfado y eso me alegraba bastante pues sabía que sufría con eso. Al ingresar a su habitación la tomé de la mano y de una manera brusca la acerqué hacia mí y la besé con un desenfreno que jamás pensé que lo haría, pues estaba excitado al saber que su "amiguito"estaba en la sala y nosotros en su habitación a punto de empezar lo que para él sería su martirio, que cruel verdad, pero bien merecido lo tenía pues con lo que es mío nadie se mete.

Ella me dijo que todavía no porque su "Antonio" estaba muy cerca y que podía escucharnos, la volví a besar pero esta vez de manera más dulce, no sé como hice para no violarla en ese momento pues supuse que le gustaría, pero era mejor evitar los problemas. Ella se retiró del cuarto dejando la puerta abierta y me dijo que me echara en su cama si quería descansar, y como estaba bastante cansado opté por hacer ello claro sin desconcentrarme de lo que afuera ocurría, ella entraba cada vez que podía con el pretexto de llevar cosas que hacían falta y la primera vez me vio con los ojos cerrados y pensó que estaba dormido y me dio un beso en la boca un poco fuerte y le dije que no me des ideas por que de aquí no sales, me miró y se rió.

Salió del cuarto y me dio una sonrisa un tanto provocativa y me imaginé lo que después vendría, no sé cuanto tiempo pasó y se disculpó y dijo que iba al baño mientras el imbécil ese se quedaba otra vez solo en la sala. Pero esta vez ella no se conformó con el besito y al diablo, no esta vez se colocó encima mío y como quien hace la pose de la cabalgata se quedó allí mientras yo me hacía el cojudo y según yo no pasaba nada, eso parece que la enojó y me besó con mucha fuerza mientras me sujetaba de la cabeza y me decía eres solo mío y de nadie más,(eso lo dijo por que hace tiempo le comenté que tenía fantasías con una de mis amigas), mientras mi reacción fue inmediata a tan buen estímulo, le acaricié sus senos por encima de su ropa y comencé a levantar su pequeño TOP que a ella tanto le gusta usar y le estrujaba de manera directa sus senos y los acercó a mi boca sin decir nada y sabiendo lo que quería me engolosiné con ellos, cosa que a ella le gustó y no paraba de moverse encima mío fingiendo la penetración en aquella pose, tuvo un orgasmo pequeño pero bastante significativo, cosa que me agradeció con un beso y me dijo ya no aguanto, espérame u rato mientras lo despido y le digo que mañana me enseñe lo poco que falta sobre el examen, y el resto de la tarde soy toda tuya, le dije que ya pero que se diera prisa pues yo tampoco aguantaba la excitación. Al salir se volteó y se levantó su TOP y acarició sus senos cosa que sabe que a mí me encanta que me seduzca.

Ya en la sala siguió hablando con su amigo y este le explicaba creo que era evidente que al demorarse demasiado sospechara lo que estaba pasando en el cuarto, pero no lo podía o no lo quería creer, que mierda me importaba lo único que quería era tener entre mis brazos a Irma y hacerla mía. Cuando ya prácticamente terminaba de explicarle ya eran las 5:00 de la tarde y el tiempo se nos iba, él como que entendió la situación y solo se votó, no sin antes pedirle un cuaderno, para ese momento yo estaba reventando y no podía contener las ganas de hacerle el amor a Irma, ella le dijo que bueno pero que la espere un rato pues estaba en su cuarto, este respondió que estaba bien.

Cuando entró al cuarto, la tomé de los hombros y la empujé contra la cama, no estaba dispuesto a esperar ni un minuto más la besé estando encima de ella y abriéndole las piernas me ubiqué sobre ella rozando mi órgano entre sus piernas y esto la enloqueció, pero sabiendo como es ella pensé que sucedería lo mismo que la primera vez, pero me equivoqué, me dijo

-Cierra la puerta, de una vez y continúa con lo que estás haciendo.

-Estás segura de ello, sucede que ahora era yo el que no quería, me tomó de la camisa y me dijo o lo haces tú o que?

-Bueno si es lo que deseas. Respondí

Me levanté y cerré la puerta con mucha fuerza para que ese estúpido se de cuenta de más de lo que pasaba allí y él nunca haría por lo menos con ella no. Le levanté el TOP, le saqué su brasier, procedí por retirarle el maldito pantalón pero era tal mi excitación que en un arranque de locura le rompí su tanguita y comencé a lamerle su conchita que por demás decir estaba muy húmeda y sus labios vaginales bastante dilatados me tomó del cabello y me presionó con mucha fuerza contra su vagina y yo le restregaba los senos y sus pezones estaban duros. Ella comenzó a gemir y me decía Carlos sigue no te detengas, acaba conmigo, no me hice de rogar y muy por el contrario arrecié con mis estímulos a su cuerpo que me encantaba. Ella gemía muy fuerte parecía que el morbo se apoderaba de ella y de que forma su desenfreno era evidente y cuando trataba de separarme de ella para poder respirar un poco ella, me lo impedía de tal manera que presionaba más mi cabeza a su vagina que en esos momentos ya chorreaba, por de más estaba lubricada. Una vez que ya estaba "en su punto", me pidió que la penetrara sin mayor preámbulos. Como era obvio tenía que quitarme la ropa y en su desesperación me ayudó con la tarea, me cogió por la camisa y casi me la arrancó y mientras yo me quitaba el pantalón vi en su mirada una dilatación de pupilas como si mi demora le provocara ira, en cierta forma quería que sufra o que se desespere (qué jodido no?), pero en fin ya no quería hacerla esperar, y la levanté en mis brazos, la recosté en la cama de su hermana pues hace menos ruido. Mientras la iba echando, ella se sentía como desvanecida, como absorbida por un deseo que casi no le permitía saber donde se encontraba y por fin le fui tocando los senos pero de una manera más, tranquila como queriendo apagar un poco los impulsos que tenía en ese momento. Ella compendió o recordó que su amigo se encontraba en la sala y que de seguro estaría escuchando todo eso. Le separé las piernas y ella me tomó de la cabeza y me llevó hasta su boca y empecé a besarla con mucha dulzura, al terminar ese beso me dijo quiero estar contigo toda la vida, le respondí claro que sí mi amor. (pero eso no sucedió a sí , eso se los cuento en otra oportunidad) al acercarme a ella para empezar con la penetración ella me tomó del pene y yo pensando que para orientarlo a la entrada de su vagina, me equivoqué y me dijo lo quiero en mi boca, tus deseos son ordenes le dije.

Lo llevó hasta su boca empezó con unas lamidas suaves y acompasadas, era lógico ya que no tenía mucha experiencia en el tema y aunque su esfuerzo en ese momento era algo improvisado pero con el pasar de los minutos parecía una perfecta puta pues era la mejor mamada que me habían dado hasta ese día y vaya que casi logra que me corriera pero no quería terminar así. La coloqué boca arriba y le llevé sus piernas a mis hombros ya así conseguía una mayor penetración , es decir más profunda y comencé con el movimiento que a ella tanto le gustaba. Le dije que gimiera con más fuerza y me respondió estás loco.

Al sentir su negativa empecé a envestirla con más fuerza que antes ya que no se ,me había quitado de la cabeza el que ese idiota se de cuenta que sus ideas estaban erradas y que Irma sería solo mía y solo yo era el dueño de su cuerpo y sus sentimientos, no paraba de respirar muy fuerte de hecho por los movimientos que tanto cansan y ella se desesperaba y movía su cabeza en todas direcciones cosa que me encanta.

La levanté y la coloqué en la pose del perrito y en eso le metí el órgano sin compasión gritó muy fuerte y la cogí por las nalgas casi hasta marcarle los dedos en las mismas y la acercaba hasta mí con mucha fuerza de tal manera que se escuche hasta afuera el choque de mi cuerpo con el suyo, le metí un dedo en su vagina mientras seguía penetrándola con fuerza y con su propia lubricación le untaba n su esfínter rasero para que se prepare para esa penetración que tanto nos había permitido disfrutar, al contacto de mi dedo en su ano se estremeció y me preguntó si l iba a hacer por allí al responderle que si me dijo que lo haga con cuidado pues la vez pasada le gustó pero después le dolió terriblemente, al repetir la operación reiteradas veces y cuando su ano ya estaba bastante dilatado le retiré mi órgano de su vagina y se la empujé de un solo golpe, poco me importó lo que me había dicho pero al escuchar su grito entre dolor y placer escuché que alguien golpeó la puerta ella sea asustó pero sabíamos que era el Antonio ella se iba a parar para vestirse y la agarré con más fuerza y le dije despacio tú te quedas hasta que termine y ella muy sumisa alo que había dicho asentó la cabeza como aceptando mi proposición.

Mientras empezaba a embestirla con más fuerza y ella gritaba y gritaba por un espacio no mayor de 5 minutos en los que sus gritos de desesperación mezclados con placer se transformaron en palabras como muchas gracias, te amo sigue así no te detengas, más rápido mi vida si, si, si, si eres mío, y cosas como esa. De repente me detuve y me dijo

Por qué te haz parado ya casi llegaba a mi orgasmo. No le respondí nada y la tomé por su mano y la llevé hasta la puerta e donde entre la pared y la puerta la levanté cargándola y orientando mi pene a la entrada de su vagina se la empujé de golpe dejándola caer en mí y otra vez sus gemidos fuertes permitían hacer evidente lo que ocurría dentro de la habitación como por medio de un accidente perdí un hueso del oído derecho tengo mejor audición que otros logré escuchar un sollozo apagado de su amigo y eso en vez de provocarme lástima por haber hecho eso me provocó una sensación de victoria me sentía un triunfado pues logré con creces lo que me había propuesto la bajé despacio y esta vez si que me propuse a hacerla gritar no me importaba que nos pudiera escuchar solo quería hacer más larga y dolorosa la impotencia de su amigo la coloqué de espaldas a mí y le meto un dedo por el ano y se lo voy dilatando otra vez le pregunto estás preparada para esto y me tomó el pene y lo apuntó directamente a su ano y me responde estás tú preparado, cosa que? no le entendí pero había que probar lo que ella me quería decir con esa indirecta. Al momento de ingresar mi pene en su anito ella dejó que entrara de la más normal y lo más fácil, una vez que empezaba a embestirla con un poco más de fuerza ella presionó de manera tal que me dolía el ingreso de mi pene en su traserito cosa que ella me preguntó te gusta y como retándome entendía a lo que se refería y caballero no más tuve que decirle que sí aunque por dentro se me ocurrió luna idea. Como se hacía tan difícil el ingreso comencé a darle palmadas en las nalgas para que vaya aflojando su esfínter que tanta presión ya me estaba doliendo me retó a que no podía terminar después de ella y eso me picó el orgullo y ni loco me iba a dejar ganar por ella, no es que sea machista pero un reto es un reto y se debe ganar con todas las ganas posibles, le acepté le reto y ella se alocó y se movía con una fuerte tremenda parecía que quería que le salga mi pene por la boca gritaba con desesperación lloraba de gusto golpeaba la pared con mucha fuerza y ya se me había olvidado el que esté ejerciendo presión en su esfínter se tocaba los senos y movía su cabeza de un lado para otro lado. De su garganta salían palabras coma dame más fuerte Carlos más, más, más, como me gusta y cuando ya se acercaba su orgasmo volteó su cabeza y buscó mi boca desesperada y me besó apagando su grito que aún con mi boca era audible para cualquiera luego un poco más calmada separó su boca de la mía y salió un grito de placer y un suspiro muy fuerte, por mi parte arrecié mis acometidas y ella supo que ya estaba a punto de venirme le presioné los senos y ella gritó otra vez y, me dijo que lo quería en su boca , cosa que me sorprendió, pero no iba a hacerme de rogar, se lo saqué y lo llevó a su boca y recibió ahí mi leche que se lo tragó ávida y golosa, luego pasó a limpiarme y dejarla brillando, una vez terminada aquella labor ella quedó agradecida por lo que habíamos hecho.

Cuando se le pasó me dijo que su amigo ya se iba a ir y que habíamos demorado bastante le dije no te preocupes yo le abro la puerta, me pidió que le entregue el bendito cuaderno me puse el pantalón la camisa y salí del cuarto con una sonrisa de oreja a oreja y le dije: Irma se siente un poco mal y debe descansar me pidió que te entregara esto mientras él trataba de secar su visible lágrima y yo con mi cara de ganador, al darle su cuaderno me miró con odio y me dijo que le diga a Irma que se cuide, le respondí de tu parte con un cinismo que ni yo me lo podía creer.

Le abrí la puerta y su mirada me lo decía todo, se fue como un niño castigado con la cabeza abajo y yo me reí al dar la vuelta cerré la puerta, ingresé al cuarto y le dije a Irma que lo había encontrado sentado en el sillón. La besé y repetimos la experiencia que tanto nos había gustado.

Con el pasar del tiempo la seguía recogiendo y repitiendo la experiencia cada vez que podíamos y vaya que lo pasamos de lo más maravilloso y siempre o casi siempre lo hacíamos en lugares públicos en los parques, en los cines, hasta le metía mano sin descaro en los micros, es decir ya nos habíamos habituado a hacerlo de esa manera. Me gustaría sabe si tienen alguna opinión o saber que les pareció el relato, cualquier queja, duda, opinión, etc, me gustaría saberlo y pueden escribirme a mi e-mail : scooty_to_hotty2002@yahoo.com que gustoso estaré de responderles. Bueno conmigo será hasta una próxima oportunidad. Su amigo Carlitos. Chauuuuuuuuu.................uuuuuuu.