El es el que domina
Como en todos los aspectos de la vida, siempre hay dos polos: lo negativo y lo positivo, lo bueno y lo malo, lo hermoso y lo horrible, la libertad y la exclavitud, ... el dominante y el dominado.
"el es que domina"
En el metro siempre pasan cosas, siempre conoces a alguien, te rozas con alguien, pisas a alguien, alguien te empuja, alguien te pide algo, te miran... era viernes, 5 de la tarde. Acababa de salir de trabajar. Todo un fin de semana por delante y sin ningún plan, sin nada excitante planeado... que agradable sensación de libertad!!!
El metro, como siempre, iba a tope... que calor!!! En uno de los vaivenes del vagón, me agarro fuertemente de la barra para no caer. De repente noto como una mano negra, fornida, caliente se afianza de la mía apretándome fuertemente a la vez que oigo un "lo siento" a escasos centímetros de mí oreja. Sensiblemente me doy la vuelta y le veo la cara. Era un chico negro, de unos 38 anos, muy alto, fornido, vestía un traje y llevaba un maletín cogido en la otra mano. Por ello deduje que el también salía de trabajar. Le sonreí a la vez que me di la vuelta. El separo su mano de la mía ligeramente y la puso inmediatamente arriba de la mía de manera que nuestros dedos rozaban ligeramente. Podía notar su aliento, oler su sudor. Seguro que todos habéis pasado por esta situación alguna vez... en el siguiente vaivén del tren, mi culo quedo pegado completamente a la altura de su pene. Ni yo me separe ni él lo hizo tampoco. Al haber tanta gente, la discreción era absoluta. De repente su mano baja más aun y se posa completamente sobre la mía. Aun recuerdo esa excitante sensación, aun recuerdo el peso de su pene tratando de alcanzar mi ano. Yo me movía con movimientos circulares, aprovechaba el mínimo vaivén para apretarme mas y mas a el, nos movíamos como si fuéramos un solo cuerpo. Mi imaginación empezó a rodar y rodar y rodar. Me imaginaba ese pene, erguido, fornido, grueso, entrando suavemente en mi estrecho culito, en mis apretaditas nalgas.
De repente otro movimiento brusco, no puedo más!!! Su aliento cada vez esta más cercano y su respiración es cada vez mas profunda... oooohhhh!!!!! Nnnnnooooo!!!!! Es la masiva parada de metro donde baja la mayoría de la gente... bajara él??? Bueno, la verdad es que aunque no baje, no podemos seguir en esta posición con el vagón medio vacío. Antes de empezar a moverse la gente, como un acto reflejo, los dos nos damos el ultimo "empujón". la gente empieza a circular entre nosotros, nos separan, le miro, me mira y sonríe, me aguanta la mirada, yo también, le sonrío, no para de mirarme y baja del tren sin parar de mirar hacia atrás. Que hago??? No es mi parada!!! Pero total! es viernes y no tengo ningún plan, que tengo que perder??? Puede que lo persiga y el pase de mi,... mejor dejarlo como esta, dejarlo como un restregón alucinante en el metro... cuando llegue a casa me masturbare pensando en ello... que triste!!! Tengo que tomar una decisión ya, el se va alejando mirando sin parar y las puertas se van a cerrar. Lo hago!!! Salgo del tren. El primero mira hacia el vagón donde yo estaba y le cambia la mirada al ver que ya he salido. Se para e intenta localizarme. Me ve, lo veo y le sonrío, me sonríe y sigue andando. llegamos a las escaleras, cada vez mas cercanos el uno al otro, cada vez mas calientes, el corazón me va a mil, y la polla sigue su propio ritmo ... salimos a la calle, el cada vez anda mas despacio y a mi cada vez me tiemblan mas las piernas.
Ya estoy a su altura. Puedo sentir el latir de mi corazón. Ahora viene lo mas difícil, quien dirá las primeras palabras? simplemente nos quedamos mirando el uno al otro y sonreímos. El se dispone a andar y yo, ahora, a su lado, sin hablar, solo sintiendo su presencia a mi lado. Caminamos durante unos cinco minutos. Dios mío!!! Y si es un delincuente agresivo compulsivo??? No lo conozco de nada!!! Ninguno de mis amigos sabe que estoy aquí!!! Y si es parte de un grupo homófono y esto no es mas que la trama del asesinato de un pobre gay solitario??? Saldré en las noticias de todo el país!!! ... "encontrado cuerpo de gay muerto, descuartizado", no! hay que ser positivos ... a la mínima sospecha, me voy corriendo o me pongo a gritar como un histérico ... el me sigue mirando, su mirada cada vez es mas lasciva, mas penetrante, mas sincera. Cada vez que me mira, me atraviesa las entrañas. A estas alturas ya se han repartido los papeles: el es el que domina la situación y yo, el dominado... y os diré algo: me encanta ser dominado por un hombre de esas características.
Puedo adivinar que estamos llegando a su casa porque he oído el ruido de sus llaves que ya están en sus manos... menuda casa!!! Vale, esto me hace quedarme mas tranquilo, ..."un hombre que viva aquí, solo tiene el 10% de posibilidades de ser un asesino en serie" ... además el vecino de al lado nos ha visto entrar y le ha saludado muy cordialmente ... ya estoy mas tranquilo ... mierda!!! Me acabo de acordar que hoy no he ido al gimnasio, joder!!! Estoy sin duchar... seguro que huelo fatal, ... me invita a pasar muy amablemente. Que voz!!! Dios!!! Que voz que tiene!!! Me tiembla la voz y solo me sale: "muchas gracias". Me pide que me siente en el sillón. Lo hago. Parezco un gilipollas, no me sale nada de conversación. Pone música y me dice si quiero algo de beber. Sin pensarlo, le pido un coñac. Me sonríe y me lo trae. Cuando se inclina a ofrecérmelo, me da un beso en los labios, me pide que me quite los zapatos y me dice que vuelve enseguida. Que nervios!!!. Desconecto el móvil, miro hacia mi alrededor y con tres tragos apuro la copa de coñac... ya estoy mucho mas tranquilo. Oigo sus pasos cuando baja las escaleras... no puedo creer lo que ven mis ojos. El fornido hombre negro del traje negro ahora viste un pantalón corto de deporte y una camiseta blanca tan apretada que puedo entrever incluso aquellos músculos que ni siquiera yo sabia que existían... me niego a seguir mirando hacia abajo por miedo a que me descubra. Quiero parecer natural, como que no me preocupa el tamaño de su miembro. No lo puedo evitar, bajo mi mirada y la poso en su polla... ayyyy!!!!! Dios!!! Y esta aun paralizada... yo no podré con eso... el se acerca, me roza mi cabeza con sus largos dedos y me pregunta si me quiero dar una ducha. Ya otra vez abajo, esta vez soy yo el que se ha transformado: el chico del metro con vaqueros caídos, camiseta y gafas naranjas, ahora lleva una simple toalla blanca atada a su cintura. Mi cuerpo queda a su plena disposición, a su pleno disfrute. El es el jefe, el es el que domina... de repente le veo en una foto jugando al bolleyball y entablamos una absurda conversación sobre el deporte que casualmente los dos compartimos. Sin mediar ninguna palabra mas, me pide que apure mi segunda copa de coñac, me coge de la mano y subimos directamente a su habitación.
Ya en su habitación, ligeramente me coge de la cintura, me abraza, nuestros miembros se rozan ligeramente y nos fundimos en un largo y apasionado beso. Sin soltarme y aun con las lenguas entrelazadas, caemos en su cama. No nos paramos de besar, cada vez mas profundo, cada vez mas intenso, ... se quita la camiseta y los pantalones a la vez que me quita la toalla. Ahora, una vez desnudos, nuestros cuerpos necesitan tocarse, rozarse, sentirse. Sitúa su cuerpo completamente encima del mío. Mis piernas se abren instintivamente. Noto su miembro, su increíble miembro posado sobre mi estomago. lo noto duro, ardiente, noto el liquido preyacular al punto de quemarme el ombligo. su lengua quiere llegar hasta lo mas fondo de mi garganta. No me deja meter la mía. Simplemente me limito a recibir la suya con completo placer... el es el que domina... recorro con mis manos toda su espalda. Puedo sentir sus dimensiones, sus músculos perfectamente definidos. Voy bajándolas hasta que llegan a su trasero. Esta duro, muy duro. Con una de sus manos se coge el miembro y lo inclina hacia abajo, quedando este exactamente a la altura de mis testículos, concretamente entre mis testículos y el agujero de mi ano. Yo quiero sentirlo en mi culo, lo deseo... como un acto reflejo, estiro las piernas hacia arriba e intento rodear su cintura con ellas. Los movimientos cada vez son más rápidos, más agresivos. La furia empieza a dominar la situación. Su polla ha intentado ya situarse en posición de entrar en mi ardiente ano. Los besos ya se han convertido en pequeños bocados de ansiedad. Su sudor me pone a mil, enciende mi pasión. Las gotas de su frente caen directamente sobre mi cara. Mis gemidos son cada vez mas compulsivos... yo se que semejante tamaño solo entra en mi culo cuando yo estoy recostado sobre el frente. Sigilosamente, me separo y me doy la vuelta, le ofrezco mi culo en pleno, es todo para el, el es el que domina...
Oigo el chasquido del plástico del condón al abrirse. Tiene problemas para ponérselo. Abre una bolsita de lubricante, coloca parte en el condón y el resto lo restriega amablemente por mi ano. Suavemente esparce el lubricante por su pene. Puedo verlo: va a explotar dentro del condón. Empieza a introducir un dedo por mi culo. Me estoy muriendo de gusto. Pone más lubricante y ahora son dos los dedos que entran. Con movimientos circulares, muy suavemente, entra totalmente los dos dedos, hasta los nudillos. Puedo notar sus inmensos dedos entrando, circulando por mi interior. Me pregunta si me duele. Le contesto que aun no. amablemente saca los dos dedos. Se empieza a masturbar. Su polla va a explotar. Oigo un sonido muy familiar: esta abriendo una botella de poppers. Me la ofrece, aspiro profundamente por la izquierda y luego por la derecha. El hace lo mismo. Se tumba sobre mí. El calor empieza a subir por mi cabeza. Mi culo le pide que me penetre. Se incorpora. Empiezo a notar su capullo entrando por mi ano. Me duele un poco pero la propia excitación del poppers hace que mi ano se dilate más y más y más. Con una fuerte embestida, consigue entrar la mitad de su polla. Se para. Sus movimientos ahora son lentos, firmes, no quiero que salga, pero los efectos del poppers han acabado y el dolor es insoportable. Alargo la mano y le pido la botellita. Su polla sigue dentro de mí, esperando, sigilosa, dura, pendiente de mi ano. Me susurra al oído " a mi polla le gusta tu culo" eso me excita mas y mas. Aspiro todo lo profundo que puedo por las dos partes de mi nariz. Esta vez el no toma. Ahora si, estoy totalmente relajado. Le pido que siga. Su polla, hasta ahora quieta, sigue su trabajo. Poco a poco se introduce más y más. Ya esta!!! Noto sus testículos rozando mi culo. la tengo toda dentro. Pero aun no se mueve. El se incorpora levemente y echa un chorro de lubricante directamente sobre mi culo.
Empiezan los movimientos... dios mío, él esta completamente dentro de mí. Puedo notar todo su miembro bombeando mi culo. Ya no me duele. Ya estoy completamente dilatado. Sin salir de mí, se incorpora ligeramente a la vez que coge con sus dos manos mi culo y lo levanta hacia arriba. Me arrodillo. El también. Ahora los movimientos son mas fuertes, mas intensos... oigo el ruido que hace su pubis al chocar contra mis nalgas. Noto sus calientes manos que aprietan mi cuerpo contra el suyo. Ahora los movimientos descienden, son más lentos, pero más profundos. Cada uno de sus empujes es como si me quisiera atravesar. Se para. Empieza a sacar la polla, muy poco a poco... me pide que me arrodille al borde de la cama. El se pone de pie, de manera que su polla queda a la altura de mi culo. Se embadurna otra vez el condón de lubricante.
Ahora ya no necesito poppers. Su miembro empieza a entrar recto, muy recto, muy directo, entra y sale con total seguridad, cada vez que entra y sale, mis gemidos se convierten en gritos, gritos de placer, gritos de dolor, gritos de ardiente deseo. Quiero más. El también. Los movimientos empiezan a convertirse en salvajes, ya no hay límites. Los dos gritamos. Me empuja salvajemente en cada una de sus venidas. Me dice que se va a correr. En una de sus fuertes venidas, oigo un grito, un grito de placer absoluto, totalmente primitivo, puramente animal. Pero el sigue envistiendo, el sigue bombeando. Cada vez con menos frecuencia e intensidad, pero sigue bombeando. Yo me empiezo a masturbar, el sigue bombeando, su polla sigue dentro de mi. Me aferro a esa imagen: su enorme polla sigue bombeando dentro de mí. Grito de placer a la vez que mi semen empieza a fluir... el me abraza fuertemente y caemos los dos en la cama... el es el que domina... entre suspiros, el saca su polla muy muy poco a poco... ahora si que duele, pero hemos hecho un buen trabajo. Ya tumbados sobre nuestras espaldas, me enciende un pitillo y me lo da. el sigue sonriendo. el sigue dominando. Nos despedimos. No sé su nombre y ni siquiera quiero acordarme de donde vive. Estos momentos solo existen en un espacio, en un tiempo concreto, con unos olores, sabores y sensaciones de ese momento concreto. Intentar repetirlo seria un error.