El director de cine (4)

COMIENZO DE PELÍCULA.

Me levanté temprano y al ver que Noelia lo quería hacer junto conmigo le pedí que se quedara un rato más, no amagó a nada y volvió a estirarse en la cama.  Me duché rápido y me fui para la cocina sólo vestido con una bata a media pierna.  Allí me encontré con la primera agradable sorpresa, Amina y Lina vestían con gasas de color turquesa que pretendían tapar sostenes a media teta y unas tangas que cubrían solamente la hendidura de sus vaginas y te quitaban el aliento, las dos además calzaban sandalias de taco medio y su cabello largo y renegrido enmarcaba sus bellos rostros sutilmente maquillados.

Se las notaba expectantes esperando mi reacción y no pude menos que alabarlas por la forma en que se presentaban ante mí.  Me senté a la mesa y ambas se acercaron solícitas para atenderme… ¡Hermosa manera de comenzar el día! , mis manos no se quedaron quietas y “volaron” al encuentro de sus nalgas prácticamente descubiertas.  Eran duras, compactas, unas, las de Amina , eran más voluminosas pero las dos portaban unos culos espectaculares.

Acostumbrado a controlarme, no hice movimientos ampulosos pero “mi amigo” de la entrepierna no entendía de esto y asomó en la bata entreabierta. Amina fue la primera en darse cuenta de esto, sus ojos negros parecieron echar chispas y, aún con cierto temor, preguntó mirándome con una especie de súplica:

• Por favor señor, ¿me dejaría ocuparme?
• Ocupate pero con calma, por mi salud yo no puedo “pasarme de rosca” y enloquecerme.  No te arrodilles, ponete de costado y que Lina se ocupe de vos dejándome sus nalgas a mano.

Formamos de inmediato una figura geométrica extraña, Amina a noventa grados y de costado a mí, se tragó mi miembro casi con desesperación, Lina se ocupó de sus oquedades de placer con las dos manos y dejó su culo a disposición de mis dos manos.  La técnica de la cocinera era exquisita, yo trataba de gozarla sin pasarme de revoluciones y me costaba bastante porque no sólo eran los labios, su garganta y toda su boca, además estaba la lengua que parecía una víbora moviéndose por todo el tronco, “envolviendo” la pija, aun cuando la tuviera en el interior de su boca aplastando su nariz en mi pubis.

Gemía medio descontrolada por los dedos de Lina y ésta lo hacía también a la par que movía sus caderas con tres dedos de una de mis manos en su vagina y dos de la otra en su ano palpitante… “No se controlen chicas, déjense llevar” , -les dije- y fue un punto de largada para que gimieran y temblaran casi al unísono.

Amina temblaba y se cogía profundamente la boca a un ritmo impensado mientras su orgasmo se hacía sentir, yo cerraba los ojos tratando de aguantar la explosión y una mano me apartó suavemente del culo de Lina , rápidamente otros dedos más finos ocuparon ese lugar haciendo que la ayudante de la cocinera emitiera un gemido más profundo.

Era Noelia , la enfermera estaba totalmente desnuda y su mano se perdió en el agujero del culo de Lina , sólo quedó el pulgar afuera.  Yo sentía como se movían junto a la delgada membrana que separaba los dedos que tenía incrustados en su vagina y por los movimientos y gemidos de la odalisca, estaba gozando a pleno de esta doble penetración “manual” que se complementó cuando con mi mano libre pellizqué su clítoris erguido.  Ya no fue gemido, fue un grito de placer el que dio y Amina se “desayunó” con leche de hombre pues no pude seguir aguantando y me vacié en su garganta.

Lo sacó de su boca a la vez que limpiaba el miembro y lo dejaba reluciente, sus ojos brillaban y yo me sentía fenomenal.  Mi erección no aminoró casi nada porque a mi costado Noelia y Lina , se “mataban” comiéndose la boca a besos y me obligué a decirles: “Chicas, quiero desayunar tranquilo, váyanse las dos a la habitación, tienen cuarenta minutos” … Lina hizo una reverencia y Noelia no la dejó hablar, los ojos, las miradas resplandecientes y las sonrisas lo decían todo, la tomó de la mano y se la llevó con ella, seguramente Alicia tendría un lindo despertar.

Amina me agradeció y no la dejé seguir, sólo le contesté que cuando se pudiera se repetiría, ¡ni loco me iba a privar de hacerles el culito a las dos! ...  Me sirvió el desayuno mientras me contaba que las chicas y los chicos ya estaban despiertos y se encontraban en la sección de maquillaje, le habían dejado dicho que a las nueve de la mañana se acercarían a desayunar para después irnos a la casa de campo.  Faltaba casi una hora para esto y yo me tomé un desayuno como para dos, estaba famélico pero me sentía muy bien.

Al regresar a la habitación para cambiarme salía Lina , se paró para darme un agradecimiento y no la dejé hablar, sus labios llenos y enrojecidos me tentaron y me prendí a ellos, la respuesta fue inmediata y sus pezones parecieron que se clavaban en mi pecho.  El gusto en su boca era indudablemente femenino y a punto de enardecerme me contuve diciéndole que en cualquier momento le tocaba a su culito, “está a su disposición, mi señor” , -me contestó- y, a pesar de la erección y las ganas que tenía, la mandé a la cocina.  Las enfermeras se estaban bañando y me quedé en la cama porque seguramente cuando salieran tendrían que hacerme las pruebas diarias.

Salieron las dos con una toalla en la cabeza y vistiendo sólo una diminuta tanga, no me dijeron nada y se pusieron a ponerme los chupetes para el electro, dio bien y cuando se aprestaban para hacerme la espirometría Noelia me comenzó a contar:

• Tenía ganas de tomar una gaseosa y cuando fui a la cocina y vi lo que allí pasaba no me pude contener, me desnudé y quise participar, sabía que no te enojarías, además te vi respondiendo bien sin agitarte.  Lo de después en la habitación con Alicia , no se puede contar…
• ¿Tan malo fue?
• No mi amor, no se puede contar porque no hay palabras, nos hizo “mierda” a las dos. Lina tiene la lengua sin frenillo, jamás noté nada igual, le llega por debajo de la pera otra que el de los “Rolling”.  Le pedí que nos mostrara y me comentó que Amina la tiene igual.
• Con razón Selva me dijo que cuando la ayudaron a depilarse las habían dejado “culo al norte”, parece que las dos saben lo que deben hacer con la lengua.
• Algo nos contó, parece que es una exigencia de las concubinas o esposas del Jeque.  Nos tenés que dejar que esas dos nos destrocen a lengüetazos, va a ser una experiencia para atesorar.
• Jajaja, por lo que veo y noto, se han “emputecido” las dos, ¿vos que decís Alicia?
• No quiero hablar, no puedo contar porque pienso y me mojo toda, nunca viví nada igual y yo que pensé que tenía experiencia en el tema, soy una ilusa…
• Yo no tengo “historias” con eso, lo que me gustaría es poder “hacer algún culito” en el revoleo sin que me afecte.
• Hablando de eso, me comentó Alicia que los remedios que estás tomando son insuficientes, hay en existencia uno nuevo, es inyectable, además hay una pastilla que se toma diariamente y que puede llevarte a una mejoría del orden del 80%.  Lo que sucede es que es muy caro para el común y tiene que recetarlo un médico especialista.
• Ahora puedo comprarlo, ¿cómo podríamos hacer para conseguir eso?
• Vos dijiste que no podés salir de aquí, lo único que se nos ocurre es ir a esa clínica en que nos tienen que atender en caso de urgencia, hablar con el médico, hacerle ver los estudios y pedirle la receta, comprarlos y volver, en un par de horas estaríamos de regreso.
• No pueden ir las dos, voy a arreglar para que vaya Alicia sola y después que la lleven a la casa de campo.

Lo llamé a Adil y le dije que destinara a uno de los custodios para que la acompañara a Alicia porque debía comprarme unos remedios, él me hizo saber que no disponían de otro vehículo pues estaban todos destinados para el traslado.  No hubo mayor problema, se alquiló a un remís para que los trasladara a la clínica, a la farmacia y posteriormente a la casa de campo. Alicia estuvo de acuerdo, junto todos los resultados de los análisis y se fue a comprar el remedio que me ayudaría a estar mejor.

Nos reunimos todos antes de salir y pude comprobar el buen trabajo de Amad con el maquillaje de todos los actores, José Luis parecía efectivamente un hombre de poco más de cuarenta años y lo felicité por el trabajo.  Tendríamos un par de horas de viaje y ya comenzamos con las escenas de las cuatro chicas y el “sobrino” de José Luis que salían contentos, alegres, felices y conversando para iniciar el viaje rumbo a la mansión campestre en la que estaba alojado el tío.  La “prima” , en este caso Selva manejó una de las camionetas y salió del edificio, luego su lugar lo tomó unos de los conductores-custodios.

Algunas tomas se hicieron dentro de la espaciosa camioneta y las tuvieron de protagonista a Cynthia , a Grace , a Marisol y a Roberto en una fellatio múltiple y sexo lésbico, matizado todo con un buen diálogo en que dejaban entrever y comentaban todo lo que podrían hacer estando juntos en la casa.  Esto tuvimos que hacerlo en marcha y después se haría un empalme con Selva puesta al volante y puteando porque no podía participar. Adil estaba contento porque, a pesar de los “malabarismos” con la cámara para captar las distintas instancias, no había habido “baches” en los diálogos y habían surgido muy “naturales” .  Yo tenía un “palo” de aquellos, hasta doloroso diría porque dentro del vehículo se respiraba sexo puro.

La llegada a la casa de campo fue con expectativa porque tuvimos que detenernos ante un gran portón que no dejaba ver el interior y se rodeaba de un gran muro de unos tres metros de alto.  Los custodios del lugar eran cinco y el jefe de los mismos se acercó preguntando por mi nombre.  Nos identificamos todos, le hicimos saber que faltaba otra persona y otro custodio que llegarían en un auto de alquiler.  Del mismo modo en que pasó con la gente del edificio, se puso a mi total disposición como si yo fuera un “puto amo” , aunque ya, a esta altura, no me molestaba para nada.

El lugar tendría unas diez o doce hectáreas matizadas con pequeños bosques dentro de los cuales circulamos por casi trescientos metros, el camino era sinuoso y estaba enteramente asfaltado, se veían, de vez en cuando, unos claros totalmente parquizados incluso con verdes de distintas tonalidades, lo que indicaba distintos tipos de césped para cada lugar.

Al final del camino se abría un enorme claro y quedábamos de frente a una mansión, propiamente un palacio espectacular, rodeado enteramente de parque y jardines preciosos.  A todos nos causó el mismo efecto, sorpresa y estupor, esperábamos una casa de fin de semana porque aún sabiendo que al Jeque le gustaba el lujo, ninguno esperaba semejante inmueble.

En el lugar no había ningún personal, la casa estaba enteramente a mi disposición y, lógicamente, de todos aquellos que hacían la película.  Las cocineras se preocuparon enseguida de poner todo en orden y Adil dispuso las cámaras y las luces para la actuación y aquí era José Luis el que salía de la casa para recibir a sus sobrinos Selva y Roberto y a las amigas.  El verano comenzaba con fuerza y viendo la buena predisposición de las chicas y del personal, me puse a pensar que con unos tres días no nos alcanzaría, tampoco me engañaba, yo mismo quería quedarme unos días más.

Noelia, tomada de mi brazo, me decían que teníamos que pasarnos mucho tiempo allí, que eso era mejor que en el edificio, “luego vemos cielo, luego vemos” , -le contesté- y la mandé a que vieran la distribución de la casa junto con Amina y Lina , yo me dediqué a la filmación marcándole un par de cosas a las chicas y a los chicos.  El ambiente era ameno y sin divismos, lo que nos facilitaba el buen trato y un mejor desenvolvimiento de todos ellos, además, también hay que decirlo, Adil tenía un don especial para el trato con los actores.

En el guión se hablaba de la invitación del “dueño de la casa” a sus parientes y amigos para que se ubicaran y se juntaran para el almuerzo, todo esto acompañado de caricias, besos, y toqueteos que lograban un clima propicio para la imaginación y el sexo.  El determinado momento Adil me hizo una seña para darme a entender que lo que él y yo pretendíamos con esa parte de la filmación ya estaba listo.  Después se filmaría en la mesa del almuerzo y les dije a todos que era lo único que faltaba por el momento y ya no habría más trabajo, les pedí que se ubicaran en las habitaciones y que se pusieran cómodos.

Creía que iba a ser más fácil de lo que pensaba, habitaciones, y lugares espaciosos sobraban y estuvimos de acuerdo con Adil en que las líneas de diálogo se respetarían pero dejaríamos a las chicas y chicos “sueltos” .  Sólo “marcaríamos” lugares y situaciones determinados por el guión.  Indudablemente que ese lugar era perfecto para moverse y para que los actores se movieran siempre seguidos por una cámara, tal como si fuera algo tipo “Gran Hermano” , luego nos tocaría a nosotros evaluar lo filmado para compaginar todo en la película.  Mirando el culo de Noelia que se movía junto a las chicas, decidí que nos quedaríamos no menos de diez días.

Así se los hice saber reuniéndolos a todos y hubo un acuerdo general que se “selló” con las cuatro actrices tirándose encima de mi cuerpo para abrazarme y besarme por esto.  Me sorprendió Marisol , la “nerd” del grupo porque junto con el abrazo y el beso, “disparó” su mano para aferrarse a mi “dormido amigo” que enseguida comenzó a “despertar” …

Las demás chicas bromearon con ello y ella se dirigió a mí diciendo: “No te enojes Guille, estoy excitadísima, nunca me pasó algo igual y la oportunidad que me diste te la quiero pagar con la virginidad que me queda” … Selva , ni lerda ni perezosa porque no se le escapaba ninguna respondió: “Ni en pedo vas a ir sola, vamos a estar todas porque esa “rotura” hay que filmarla” . “Están todas “del tomate”, cámbiense y vayan a la pileta, sáquense los “calores”, todavía debe faltar para el almuerzo” .

Fue como un “disparador” ni las cuatro chicas ni los dos muchachos perdieron tiempo en ir a buscar sus trajes de baño, se pusieron en pelotas en un parpadeo y corrieron a la pileta que era enorme, tan grande que tenía una mitad al aire libre y otra mitad cubierta y totalmente climatizada, sólo una puerta vaivén y una gran estructura transparente dividía ambas partes.  Demás está decir que mis ojos se “pegaron” al culito de Marisol y dejé que la imaginación volara.

Adil los iba a seguir y le pedí que no lo hiciera, ya habría oportunidad en los días venideros para filmarlos a todos en pelotas en cualquiera de los dos lugares, “vamos adentro, tenemos que ver cómo te vas a ubicar y cómo nos ubicaremos todos” .  El lugar tenía habitaciones para acoger a un regimiento, eran más de veinte y a eso había que sumarle los lugares para estar, el comedor, el living, una sala de reuniones y otras dependencias, nosotros ocupamos la planta alta y el personal toda la parte baja de la mansión, en las habitaciones sobrantes se instaló toda la maquinaria de la filmación.

Mi habitación era la mejor y ya se encontraba Noelia ocupándose de toda su “artillería” , pues al igual que en el edificio, ella y Alicia tenían una habitación enorme pegada a la mía.  Le avisé a Lina que les acercara toallas a los chicos y chicas y me dediqué a recorrer las instalaciones con Adil y Noelia .

Verdaderamente no daba para describirlo, la mansión, casona, palacio, palacete parecía escapado de las “mil y una noche” , trataba de mantener el aplomo tal como lo hacía Adil , evidentemente más que acostumbrado a este tipo de lujos pero… la que no podía contener sus exclamaciones era Noelia , no sé que “película” pasaba por su cabeza aunque era evidente que estaba excitadísima y la completó con el baño de mi habitación.  Un jacuzzi que parecía un natatorio con capacidad para ocho o diez personas con toda la grifería de oro puro, al igual que en el bidet y el lavatorio.

No daba ni cuadraba para nuestra mentalidad, para más, nos enteramos que había seis habitaciones más que tenían baños tan lujosamente “adornados” como el que tenía yo, seguramente para las esposas y concubinas merecedoras de toda la atención.  Esa ostentación, acá y en cualquier país del Mundo, era como decir, “ni sé la que tengo y gasto en lo que se me ocurre, sin que nadie me joda al respecto” .  Son gustos y yo no iba a alojarme allí a plantearle nada a nadie sobre las necesidades que podrían tener algunos semejantes, aprovecharía, como creía que lo harían todos, de la posibilidad de “nadar un rato en lujos” .

Regresamos al comedor porque ya estaba listo el almuerzo y me agradó notar que las chicas estaban “vestidas” , eso sí, zungas con remeras para los muchachos y tangas con sostenes mínimos para las chicas.  Por lógica, el comentario generalizado era al respecto de la propiedad y allí me preguntó Grace cuánto era el tiempo que nos quedaríamos… “Si por mí fuera, me quedaba a vivir acá pero, por lo pronto, háganse a la idea que pasaremos unos diez o quince días aquí, ya que estamos en el baile, “bailaremos” rodeados de lujos y espectacularidad” , -contesté-.  Nadie estuvo en desacuerdo.

Selva preguntó si no había posibilidades de sacarse fotos en distintos lugares de la casa, algo casi imposible porque no teníamos celulares a mano pero Adil nos solucionó el tema diciendo que se podían usar las cámaras fotográficas de los camarógrafos, “usted sólo tiene que ordenarlo Guillermo , las cámaras son profesionales pero uno de ellos la puede operar a discreción acorde a los pedidos de las chicas” .  Era una solución fantástica porque luego nos quedaban los chips de memorias, no hubo necesidad de ordenarlo, Amad se ofreció para la tarea y nos satisfizo a todos.

La llegada de Alicia fue recibida con silbidos y aplausos y fue otra que quedó anonadada por el lugar.  Nos sentamos para el almuerzo y quedaron las cuatro chicas y los dos muchachos apartados de los demás, esto porque Adil aprovechaba el momento del almuerzo para seguir filmando, ellos ya sabían sus diálogos que matizaron con algunas cosas propias de su inventiva y dándose continuamente “el pie” para que los diálogos no tuvieran “baches” .

Me tocó hacer repetir una toma por algo que se pasaron por alto y lo hicieron para que quedara perfecto, tuvo que ver con la ida a la cocina para retirar las fuentes y acercarlas a la mesa, esto lo hicieron Selva y Cynthia mostrando y acariciándose sus hermosos culos “entangados”, acompañadas de las risas de los demás y con Adil detrás usando la cámara y otro chico que llevaba la caña con el micrófono.  Era lógico porque en la película estaban solos y había que hacerlo resaltar, ya vería de hacer una toma teniendo sexo sobre la mesa de la cocina.

Luego de esto quedaba irme a la habitación para que me hicieran los controles y para que Alicia me explicara el tema de los medicamentos nuevos.  No lo dudé y les dije a todos que por hoy no haríamos nada más y que cada uno hiciera lo que creyera conveniente. Adil me dio un C.D. con las filmaciones de las pruebas de las chicas, el mismo estaba editado y tal como lo había hablado con él, después de las escenas sexuales haríamos otra con las chicas cambiadas con la misma ropa.

Ésta escena la haríamos en el edificio y sería la del comienzo de la película, estaba preparada así con las tres vestidas con la misma ropa de ese día se pondrían de acuerdo en ir a visitar al tío que había hablado con su sobrina Selva para invitarla, Grace tendría que decir que aprovecharían para invitarla a Marisol que estaba descansando luego de unos exámenes y Cynthia , escuchando esto, se “prendía” en esa salida porque no tenía trabajo en vista.

Se los expliqué muy por encima a las chicas y dándole a Selva un reproductor de C.D. le alcancé lo grabado esos días para que, si querían, lo vieran todas juntas, imaginé que se “matarían” con esto, me sonreí para mí mismo y me dirigí con las enfermeras a la habitación.

Cuando comenzaron con las pruebas cotidianas, Alicia me comentó sobre los medicamentos y leyó las indicaciones del médico al respecto.  Era una inyección por día, aunque podría darse otra dosis en poco tiempo y una pastilla cada doce horas, Noelia leía el prospecto de la medicación y me decía que, acorde a lo que entendía, eso me vendría de perlas porque el alivio respiratorio era inmediato y en el orden del 80% para los casos más graves.

• Si se da así, prepárense porque no pienso perdonar ninguno de sus agujeros y se joden porque despertaron a la “bestia” .
• Jajaja, ¡como si nos tuvieras que rogar tanto!, yo ya tengo ganas de que me lo “rompas” como cuando estábamos en mi casa , -dijo Noelia sin empachos-.
• No me dejen afuera, yo también tengo ganas de que me la metas vos, no es lo mismo cuando es el macho el que empuja, -completó Alicia - .
• No hay problemas, aunque creo que estos días van a ser caóticos, de vez en cuando voy a tener que “ayudarme” con alguna medicación de color celeste.
• Yo traje Guille, podemos usarlas haciéndote controles antes y después , -expresó Noelia que ya lo tenía pensado-.
• Listo, quedó en sus manos pero la pastilla y la inyección quedan para después, ahora tengo ganas de dormir un rato de siesta.
• Dormí tranquilo, nosotras nos vamos un rato a la pileta y luego te venimos a despertar con Amina y Lina .
• ¡Vaya par de putitas resultaron las enfermeras!, las voy a tener que poner en la película.
• Yo soy “tu” putita, si alguna se quiere “arrimar”, bienvenida sea , -dijo Noelia dándome un beso que me hizo parar hasta los pelos de la nuca-.

Se fueron las dos moviendo sus respectivos culos y aproveché a llamar a mi esposa, le mostré los remedios nuevos por medio del teléfono ( Adil y yo éramos los únicos que teníamos celulares) , le conté que estaban esperando la evolución de los mismos y de paso enfoqué también las maquinarias que había en la habitación, aunque no le hice ver casi nada de ésta, hubiese sido tonto, claramente se veía que no era una habitación para pacientes.

Quedó conforme y me pidió que me cuidara, luego nos mandamos besos recíprocos.  La cama en la siesta se portó de maravillas y a las dos horas y media me despertó Noelia que venía sofocada, yo pensé que era por el sol…

• ¿Qué te pasó cielo, te maltrató el sol de la tarde? , -le pregunté bromeando-…
• Ojalá hubiese sido sólo el sol, ¡son terribles!, la zona de la pileta se convirtió en una orgía, todo el mundo en pelotas y estuve a un tris de participar, no sé cómo nos aguantamos Alicia y yo, las chicas dijeron que se recalentaron por un video que les diste y se “mataron” entre todos, con Amad incluido, al que le dejaron el culo abierto como una flor, Marisol , muy nerd, muy nerd pero le metió toda la mano en el culo y el muy puto gozaba como deschavetado.
• Tampoco es para escandalizarse, yo ya tengo asumido que estos días van a ser peliagudos, además, como les dije que por hoy no filmaríamos, se sacaron las ganas alejadas de cierto profesionalismo.
• La verdad es que fue todo muy “natural” pero Adil no perdió la oportunidad y filmó todo lo que podía, aunque sólo con ellos seis, eso nos vino bien para mantenernos apartadas esperando a que despertaras, Alicia y yo vamos a ver como reaccionás a la medicación pero sí o sí me tenés que hacer la cola y ni te cuento como está Alicia , jajaja.
• Bueno, dale, poneme la inyección y dame la pastilla, veremos que resulta, si la cosa funciona las llamamos a Amina y a Lina, ¿te va?
• Claro que me va, no nos pensamos quedar con la calentura, vení que preparo todo.

La mano de Noelia para la inyección fue maravillosa, ni sentí el pinchazo, lo que si noté y me agradó sobremanera fueron las caricias que le hizo a mis nalgas con las dos manos y tampoco se aguantó, “besame Guille, necesito que me beses, tu boca y tu piel me enloquecen” .  Besándonos con cariño y con ternura no exenta de pasión nos encontró Alicia y se plegó a recibir su parte aunque, esto luego se lo agradecí, sin exigencias, como respetando que era un momento de nosotros dos.  Me estaba excitando como nunca y sentía como un fuego en mi pecho, aspiraba el aire por la nariz y parecía entrarme a borbotones.

Al toque y después de intercambiar besos con Alicia , me hicieron las pruebas de siempre y quedaron más que conformes con los resultados.  No bien terminaron, llamé por el intercomunicador que había al costado de la cama y le pedí a Amina y a Lina que subieran trayendo unos emparedados y bebidas gaseosas.

Tardaron poco y apenas entraron les dije que atendieran a las enfermeras que estaban tendidas en la cama, desnudas y abiertas de piernas esperando por las caricias de las dos esclavas. “Si mi señor” fue lo único que dijo Amina y la posición se tornó inmejorable, se colocaron apoyando las rodillas en la cama y echaron su cuerpo hacia adelante dejando los culos a mi disposición.

Las miré mientras lamían y besaban los muslos de las dos enfermeras que temblaban anticipándose al placer que esperaban sentir.  Que fue placer no hubo ninguna duda y los gemidos no tardaron en sonar en toda la habitación.  Yo estaba re duro, no lo podía creer, quizás eran mis ganas pero me veía hasta más grande y me lancé muy decidido a probar con mi boca en culo de Amina , me daba cuenta que estaba medido, controlado y rogaba interiormente porque no me faltara el aire.

Los gemidos de la cocinera no tardaron en surgir y el asterisco ensalivado parecía abrirse y cerrarse a voluntad, no quise esperar más.  Apunté el glande y me mandé, rápido, certero y sin hacer paradas hasta hacer chocar mi pelvis con sus nalgas, el grito fue tremendo y salió desde la entrepierna de Noelia pero no dejó de hacer lo que hacía.

Las entradas y salidas con un cierto rasgo de rudeza se multiplicaron y sentí como ella gozaba con esto, sus temblores no mentían, tampoco su lubricación abundante y mirando desaparecer mi pija en su recto me tenté, la saqué, castigué una de sus nalgas con mi mano y se la volví a meter, luego hice lo mismo con la otra nalga.  Los dedos quedaron bien marcados y las caderas de la mujer parecían tener vida propia, me había entusiasmado con ese culo foráneo hasta que escuché a Noelia , “basta por favor, no puedo más” , -dijo gritando y moviéndose desencajada-.

Entonces salí de esa calidez rectal y me corrí hacia el culo de Lina que me esperaba, a la par que jugaba con la desesperación de Alicia que mantenía su cabeza apretada a su vagina teniendo orgasmos sin parar.  Ese culo no estaba tan usado o hacía rato que no se usaba porque me costó un poco más, como fuere, cuando encontré el recto, le hice lo mismo que a Amina y esta vez el grito fue más fuerte, grito que se ocupó de apagar Alicia apretando más la cabeza de la esclava más joven.

El lugar era estrecho y lo gocé un poco más pero las penetraciones no cesaron así nomás.  Respiraba bien y estaba como enfervorizado entrando y saliendo como en mis mejores años, Noelia y Amina se besaban tocándose las tetas, Alicia logró escapar moviendo el cuerpo y diciendo también que ya no podía más y ante los temblores y gemidos de la “enculada” , me salí de allí para no terminar. Lina se giró como una víbora y se tragó mi miembro para limpiarlo, lo dejó brillante y aún con la pija erecta me fui a sentar en uno de los individuales que había en el lugar.

Alicia y Noelia se acercaron para ver cómo estaba y les contesté que me sentía bien, que siguieran un rato más, yo miraría como se “mataban” entre ellas y les pedí que aprovecharan para dilatar sus culitos porque hoy no se salvaban.  A Noelia le brillaron los ojos y me abrazó para besarme.  El espectáculo de esas cuatro “lobas” fue algo inenarrable, hubo “69” para repartir y ninguna le hizo ascos a nada, jugando incluso con juguetes que Alicia tenía guardados y que acercó en la celebración.

No pude aguantar mucho mirando y me acerqué a la cama, Lina estaba debajo de Alicia que se retorcía y fue el primer culo elegido para seguir, la arrimé al borde de la cama y su agujero quedó a disposición, Lina seguía en lo suyo con Alicia y cuando apunté al agujerito de la enfermera pude ver el trabajo de la lengua de la ayudante de la cocinera, la movía a placer, era grande, inquieta, larga y hacía derretir a su pareja momentánea.  La cadera y el cuerpo de Alicia se tensó cuando sintió la punta de mi pija, entonces “pincelé” la zona ganándome una penetración bucal de Lina que me ensalivó todo para que pudiera entrar más tranquilo.

La cabeza entró forzando el lugar pero no fui violento, así y todo tampoco me detuve hasta chocar con sus nalgas y seguí entrando y saliendo.  No sólo gritó, también sollozó pidiendo que no la rompiera, bueno, en realidad, eso fue sólo al principio y como no me detuve comenzó a gritar en voz alta: “Hijo de puta, así la siento más, me lo estás rompiendo y la noto hasta en la panza, seguí, seguí que la puta árabe me está llevando al Cielo con la lengua” …

Lina estaba cumpliendo dos funciones porque aprovechaba algunos momentos para chuparme los huevos, hasta que la saqué, la metí profundamente en su boca y de nuevo al culo de la amiga de Noelia , así varias veces.  Estas salidas y luego entradas cada vez más profundas enloquecieron a Alicia que se movía desaforada y gritaba incoherencias entrando en un orgasmo apoteótico.

Amina y mi enfermera favorita miraban la penetración y le dije a Noelia que estaba por acabar y lo quería hacer en su boca, Alicia quedó tirada y laxa sobre el cuerpo de Lina luego de su orgasmo y no bien la saqué de éste culo, Amina se lanzó a limpiarla, parecía una aspiradora pero pronto la dejó a disposición de la boca que esperaba para tragarse toda mi simiente.

Noelia me miraba con los ojos grandes, abiertos y agradecidos cuando tragaba toda mi leche y aquí sí que debí “manotear” el nebulizador manual para aspirar un poco de medicación, no fue gran cosa pero me sentí un poco ahogado y como ya estaba “curado de espanto” con eso, preferí hacer una prevención.  Mi amiga se desentendió de las otras y me obligó a ponerme la mascarilla del oxígeno, no me dio ni cinco de pelota cuando le dije que no era nada, ella también prefería tomar todas las precauciones.

De todos modos, fingiendo enojo, no perdió la oportunidad para decirme que a ella la había dejado de lado, “no mi cielo, nada que ver, esta noche dormimos los dos solos en esta habitación, voy a ser todo para vos” …  La alegría fue indisimulable y me abrazó para besarme con todas sus ganas.  Estaba desnudo, apoyado sobre el respaldo de la cama y rodeado de cuatro mujeres espectaculares pero… no quería más y la primera que se dio cuenta de esto fue Amina y rápidamente me preguntó: “Necesita algo más mi señor” .

Le contesté que no y como algo instintivo le acaricié la cara diciendo que habían estado más que bien.  Yo lo interpretaba como una sonsera pero tanto ella como Lina parecieron derretirse por el gesto que no tardé en repetir con la ayudante más joven escuchando lo que decía la cocinera: “es la primera vez en la vida que nos hacen una caricia después de haber compartido la cama, además, participamos, en ningún momento me sentí “usada” y creo que a Lina le pasó lo mismo” , -ésta afirmó con la cabeza y los ojos se le llenaron de lágrimas-. Alicia solucionó esto abrazándolas y preguntó como al pasar, “¿qué vamos a cenar hoy, preciosa?” …

No llegó a contestar porque las tomó de un brazo a cada una de ellas y se las llevó para el baño, Noelia se quedó un ratito más conmigo, ella no perdía la oportunidad de hacer mimos y darme caricias, luego fue también al baño.  Salieron las cuatro vistiendo una tanga mínima, sostén y sandalias de taco medio, algo que había notado en las otras cuatro y, verdaderamente, no me molestaba para nada, hacía mucho tiempo que se me habían aplacado las ínfulas de adolescente como para andar “al palo” todo el día mirando culos y tetas.  Esa forma de andar por la casa se convirtió en una constante en todo el tiempo que duró la filmación, fuera en la casa de campo como en el edificio.

Luego, ya sentados para la cena, noté que Amad estaba dicharachero e imaginé que bien “atendido” . Adil comentó que había hecho unas filmaciones y después vería de qué manera se podrían incluir en la película, eso me dio pie para hablarles:

• Sé que han estado todos muy liberados y me mantengo en lo que dije antes, eso no me molesta, sólo espero que cumplan cuando hagamos determinadas escenas.
• Si es por eso quedate tranquilo Guille, se dio porque el C.D. que me diste nos puso en las nubes pero no los exigimos mucho a los chicos, -contestó Selva-.
• Bueno, me alegro por todos ustedes, la idea es disfrutar de los momentos en que nos encontremos acá pero sin descuidar el tema del trabajo.
• Es que hay una muy buena onda y estando todos juntos, la “llamita” queda encendida.  No es como cuando trabajás en algo y luego te vas a tu casa desentendiéndote del tema “laboral”, tendríamos que hacer otra película con los momentos en que nos salimos de la actuación para darnos como “amigos con derecho”, -opinó Grace , la cual ya me había dicho que esto del sexo le encantaba-
• Eso se puede hacer sin problemas, si quieren yo me encargo de filmar apartando esos momentos y hacemos otro video paralelo, -expresó sin dudarlo Adil -.
• Hacé como quieras Adil, eso sí, allí no habría títulos aunque veríamos de editar algo más o menos entendible con copias que cada una se llevará.

La idea no me disgustó, además yo podría llevarme una de esas copias y “refrescar” mi memoria de vez en cuando, no me vendría nada mal, habida cuenta que era difícil que nos volviéramos a encontrar en circunstancias similares.  Todos los demás se despidieron y como Alicia ya sabía que esa noche dormiría sola, se levantó para cambiar unas palabras con Amina y Lina y por lo que me imaginaba al verlas que hablaban, buscaría la manera de no pasarla tan solitaria, sin embargo, la cocinera y su ayudante parecían negarse a ello, esto lo notaba por los movimientos negativos que hacía Amina con su cabeza.

Alicia se volvió un tanto cabizbaja para el comedor y le pregunté:

• ¿Qué es lo que te pasa allí?
• No, nada Guille, está todo bien.
• Lo único que falta es que me vengas a “esconder la leche”, contame que pasa, no me obligues a que deje de confiar en vos.
• No quiero joderte ni a vos ni a Noelia y pensé en irme a dormir con las dos árabes pero no hay caso, ganas tienen pero son intransigentes, no piensan hacer nada que no sea cocinar o arreglar las habitaciones, todo lo demás debe provenir de una orden de “su señor”, que en este caso y sin ninguna duda, sos vos.Entiendo que es parte de su cultura y no voy a entrar en discusiones pero me choca un poco eso.
• ¿Parece que tuvieras ganas de seguir la joda?
• Ni te imaginás, desde que vi la prueba de Marisol con las otras chicas se me deschavetaron todas las neuronas, lograr el placer del modo en que las árabes lo transmiten es fantástico, además me queda más que claro que con los hombres sólo lo puedo hacer con el que verdaderamente me guste, lo mío es más para el lado femenino.

Noelia asintió en lo que decía Alicia y no pudo evitar meterse en la charla…

• No hay drama cariño, venís a dormir con nosotros y listo, la cama es enorme, -le dijo-.
• Ni ahí, yo sé que vos tenés un sentimiento especial por Guille y no quiero estar metida en el medio, esta noche es de ustedes dos y se merecen disfrutarla a pleno.

Sabía de entrada o por lo menos me la “venía venir” , al estar conviviendo con esas mujeres bajo un mismo techo, sin poder salir, llevando a cabo un trabajo en que la inhibiciones brillaban por su ausencia, no podía ponerle un “cepo” a las ganas de cada una de ella, de sólo verlas moverse semidesnudas por la casa te alborotaban todos los “ratones” , las seis eran espectaculares y ahora con el agregado de Amina y Lina que pudieron demostrar en un rato todo lo aprendido en horas y horas de harem, la cosa se tornaba más complicada.

No lo pensé más y las llamé a la cocinera y su ayudante…

• Amina, Lina, ya les dije que mi trato hacia ustedes no es el mismo al que las tienen acostumbradas, sólo exijo que no me falten el respeto, por lo demás, hagan lo que crean conveniente.  Partan de la base de que, en tanto y en cuanto estén conmigo o dependiendo de mí, la cosa pasará solamente por sus ganas de hacer.
• Le agradecemos mi señor, no queríamos hacer nada que lo pudiera molestar, ya sabe que las dos estamos a disposición de lo que usted ordene.
• Se los voy a decir como se estila en mi país, cumplan sus obligaciones en la casa, dedíquense a mí cuando las solicite y luego, “hagan de su culo un pito”, ¿está claro?
• Si mi señor clarísimo y verdaderamente deseamos pasar la noche con Alicia**
• Bueno, vayan a la habitación que gusten y pásenla bien.

Por el brillo de los ojos de las dos, me hice a la idea de que al día siguiente Alicia iba a quedar hecha una piltrafa pero… como bien dicen: “Si te gusta el durazno, báncate la pelusa” … Noelia no estuvo indiferente a todo esto y me pidió irnos a la habitación porque las “películas” que se estaba haciendo sobre esas tres, más las que tenía conmigo, la tenían “chorreando”, así me lo dijo.  No pude menos que reírme por esa salida y la abracé para “comerle” la boca, sabiendo que eso la “derretía” y no les cuento a mí, esos labios eran espectaculares y se me brindaban sin tapujos.

No bien entramos a la habitación se sacó la chaqueta, era lo único que vestía, la chaqueta de enfermera y una mínima tanga.  En realidad, como dije, ya todas se movían así por la casa, sandalias, tanga y una mínima camiseta, a veces ni eso y yo estaba o seguía tratando de hacerme el indiferente pero me tenía todo el día a mil por hora y con “mi amigo” amorcillado y pronto a responder.  La ventaja que me daba el nuevo medicamento y la seguridad de la presencia de quién me cuidaba actuaban a mi favor, tanto así que no la dejé hacerme los controles pertinentes.

La vista de su hermoso culo cuando se agachó para encender la máquina que me haría la espirometría me hizo dejar de lado cualquier tipo de control y aproveché para ponerme detrás de ella arrimándole el miembro erecto a la zanja de sus nalgas.  El estremecimiento no se hizo esperar, tampoco el gemido que se escuchó alto y claro.

Me afirmé aprisionando sus dos tetas dispuesto a penetrarla de una pero, pensé en ella, no me hubiese rechazado, sin embargo me contuve y, aunque sin moverme de la posición, la besé en el cuello y le dije:

• No te voy a coger a tontas y a locas, vos merecés más que uno o varios “polvos”, esta noche sos enteramente mía y quiero ser tuyo, - Noelia acusó lo dicho, lo entendió y se volvió para abrazarme fuerte y besarme con más ganas-.
• Guille, Guille, puede haber muchos o ninguno que, indefectiblemente, son tipos que siempre terminan por hacerme mal, en cambio, a tu lado, me siento más esclava que las árabes, la vida es injusta porque no puedo tenerte siempre, vos me entendés hasta lo que pienso, vamos a disfrutarnos.

Contarles lo que fue esa noche con Noelia sería una forma de traicionarla, en un momento tuve que pedirle que me inyectara nuevamente con ese nuevo medicamento porque los “fuelles” me fallaron un poco, el que no falló fue “mi amigo” que ya en la madrugada no aguantaba ni el roce de las sábanas, estaba escaldado y mis huevos parecían dos pequeñas pasas de uva, hasta la lengua tenía irritada.

Ella no estaba mejor, decía riendo que tenía la vagina y el recto en carne viva, “estoy feliz y si se pudiera te daría hasta el ombligo, fue lo único que me faltó” , -me dijo con una alegría que no se podía ocultar-.  El sueño nos iba ganando y la frutilla de ese postre fue su cara de felicidad cuando, acostada a mi lado, se durmió pasando un brazo sobre mi pecho y una de sus piernas sobre las mías.

Al día siguiente nos levantamos tarde, eran pasadas las once de la mañana cuando bajamos a la cocina, Amina , Lina y Alicia estaban allí y las caras decían de la noche pasada, las saludamos con un beso y pregunté por los demás, estaban en la pileta y los muchachos corriendo alrededor de uno de los bosques para mantener el estado físico.  Esto me gustó, el hombre era distinto a la mujer, necesitaba estar en forma física para rendir mejor en este campo de la sexualidad, incluso hacían una dieta determinada para esto.

Luego de “picotear” algo me reuní con Adil para ver el tema de la compaginación de las partes de la película.  Luego de un par de horas de estar viendo todo el material, nos dimos cuenta de que ya teníamos más de media película hecha, nos quedaban partes por rellenar, entre ellas una relación incestuosa entre la sobrina, el sobrino y el tío, una escaramuza lésbica en uno de los bosquecillos entre las tres chicas restantes y varias otras partes en la casa entremezclando a los actores y a las actrices.  También había que afinar el principio de la película cuando las chicas, luego de su entrevero daban a conocer la noticia de la invitación, eso había que pulirlo bien.

Estábamos entusiasmados con esto y nos habíamos olvidado de la hora del almuerzo, algo que nos recordó Marisol cuando vino a buscarnos. Adil se levantó para retirarse y Marisol preguntó qué era lo que mirábamos…

• Estaba viendo las partes que nos faltan filmar acorde a lo escrito y ahora me doy cuenta que también el guión nos marca un trío entre tío y sobrino en conjunto con la más inocente de las amigas, que, sin dudas, venís a ser vos.
• Si, ya leí esa parte del guión, yo no tengo problemas en hacer esa parte pero ya te dije que mi culito es virgen, no era una broma, quiero que vos seas el primero en hacerlo.
• No me lo digas así porque me vuelvo un poco loco, tu culito es fantástico y me encantaría ocuparme de él pero por ahora no va a poder ser, Noelia anoche lo descascaró a “mi amigo”, jajaja.

La “nerd” del grupo se acercó y dándome un hermoso beso, me dijo: “Tengo muchas ganas Guille, ¿es verdad lo que me decís? ...  Conjuntamente con el beso, acarició mí bulto que no se encontraba dormido precisamente y como tenía puesto un pantalón deportivo, me lo bajó de un tirón y se arrodilló para tomarlo con las manos.  Efectivamente el glande y parte del tronco tenían huellas más rosadas por la irritación producto de la fricción de la noche anterior, a ella mucho no le importó y se lo llevó a la boca, la mamada no fue profunda y la práctica no era de lo más virtuosa pero me alivió en parte con su saliva retirándose enseguida.

“Veo que hoy no va a ser posible pero, por favor Guille, dedicame un día posterior, después filmo lo que quieras, apelo a tu experiencia, con ningún otro me sentiría cómoda” .  Le prometí que lo íbamos a intentar al día siguiente y que trataría de hacerla sentir muy bien.  Me dio un piquito agradeciéndome que la entendiera y se fue moviendo ese culito, me quedé con los “patos revoleados” y con “mi amigo” más que endurecido y no entendiendo de rozaduras molestas. “Paciencia Guille” , me dije para mí mismo y me fui para la cocina a almorzar sabiendo que ese día no podría hacer ni dejar que nadie hiciera nada sexual conmigo.

Continuará…

Por favor, si les gustó, valoren y comenten…

GUILLEOS1 se los agradece.