El director de cine (1)

De vivir puteando por la pandemia y los “charlatanes” a una posibilidad de trabajo impensado, desconocido, si se quiere, riesgoso aunque con posibilidades de ganar un muy buen dinero inesperado.

Con este nuevo relato Guilleos 1 nos ofrece otra aventura que sin duda nos hará pasar buenos ratos, espero que estén de acuerdo conmigo. Tauro47

SIN COMERLA NI BEBERLA.

Soy Guillermo , ando por los cincuenta y “pico” y mejor es que el “pico” lo dejemos ahí.  En mi país hace unos cuatro o cinco meses que se levantó parcialmente la cuarentena y la gente comenzó a salir de sus casas para tratar de restablecer sus vidas reintegrándose a sus trabajos, a sus estudios, a saber que hay parientes y amistades que todavía están, a reencontrarse con los vecinos y conocidos que quedaron.

Al principio salieron en tropel olvidándose de los cuidados, de las distancias y las recomendaciones.  Como era de esperar, el virus se hizo sentir nuevamente, aparecieron algunos nuevos contagios debido al poco respeto del uno para con el otro, luego, vacunas mediante y anticuerpos naturales, todo comenzó a estabilizarse.  Se tomó conciencia que comenzar de nuevo no era ni es tan fácil, muchas costumbres han cambiado, el abrazo y el beso cariñoso ya no existe, ni siquiera el entrechocar de manos en un saludo amistoso o respetuoso.

No es nada sencillo, estos casi diez meses se acompañaron de incertidumbres, de miedos, de pérdidas de familiares a los que no se pudo despedir, de economías destruidas, de interrogantes, de hipocresías y egoísmos desenmascarados de vecinos, de conciudadanos, de Políticos, Sindicalistas y personal jerárquico de la Justicia “escondidos” en sus casas de lujo, gozando de la facilidad del dinero que se les paga sin producir.  Desgraciadamente la lista de los “malos” es larguísima para escribirla y cada quien sabe de lo que hablo, menos mal que los “buenos” todavía existen.

Muchos (demasiados) apelaron a la corrupción para llenarse los bolsillos de un modo inmoral amparándose en la pandemia, compras a granel de productos facturados con sobreprecios, otorgamiento indiscriminado de subsidios, “amigos” del Poder beneficiados en perjuicio de los más necesitados, “suelta” de delincuentes orquestada y programada sin contemplar el crecimiento e incremento de la inseguridad.  Todo provocado por los mismos políticos demagogos que, irónicamente, en su momento, volverán a ser “Referentes” apelando a la mala memoria de la gente o a su ignorancia para seguir manteniéndose en sus lugares de Poder prestado.

Lo peor de todo es que ya nada será igual, llovieron y llueven las críticas, se echan culpas a unos u otros Gobiernos, se especula sobre quién “sembró” el “bicho maligno” o quién lo dejó de sembrar o como habrían encarado otros el problema, como si eso importara tanto o se pudiera cambiar algo.  Se apela a la demagogia con “discursitos facilistas” para continuar con la campaña de desprestigio a los anteriores gobernantes y mientras tanto, poco y nada se hace para que la Economía y la sociedad se recupere trasladando hambre y necesidades a “adherentes y contrarios” .

Tenga la culpa “Mongo” , “Picho” o quien en definitiva termina por venderte las vacunas, nadie te devuelve las persianas cerradas de miles de comercios, las fábricas vacías y tampoco las pérdidas de familiares o te reintegra la misma vida que tenías y/o te habilita para dar abrazos y besos a hijos y nietos a los que no pudiste ver en todo este tiempo.  Menuda “pelota” les dará “Mongo o Picho” a unos miles (nunca llegan a miles) de pelotudos que salgan a gritar o agitar pancartas o a quemar banderas, tal como la “pelota” que les dieron siempre a los “vendedores de humo” o a los que tratan de manipular a otros buscando beneficios personales.

Se desnudaron muchas falencias pero, ahora sólo queda llorar o recordar a los que ya no están y tratar de volver a “caminar” lo mejor que se pueda, tratando de mejorar el presente y el futuro, con la seguridad de que las risas volverán a aflorar, eso sí, limitadas y protegidas por el barbijo que, de obligatorio ha pasado a ser esencial para movilizarse entre semejantes.

Ese “caminar” y, en muchos casos, volver a empezar, no implica que somos todos iguales o que el prójimo o que el semejante y “bla, bla,  bla” , no entremos en la “pavada” de la ingenuidad de creer que “somos todos iguales” .  Por lo pronto, los que pusieron las pelotas arriba de la mesa (personal de la Salud, policías, fuerzas armadas y de seguridad, bomberos) haciendo frente al flagelo y ayudando al semejante no son iguales a los cobardes charlatanes que se ampararon en sus casas y se mostraron sólo vía virtual demostrando que los egoísmos abundaron.

Me parece canallesca esa forma de pensar “manipulada” políticamente y más idiota es el que se la cree.  Jamás seremos “todos iguales” , las diferencias existieron desde que el tiempo es tiempo y seguirán existiendo o, en todo caso, se “inventarán” nuevas porque el ego y el egoísmo son característicos de los seres humanos.  Esto es así por más que digan o te quieran hacer creer que siempre el que tuvo dinero se enfermó o se murió igual que el que no lo tiene.

Yo entiendo que nunca seremos todos iguales, es cierto que podrán cambiar los costos de los cajones y, metafóricamente, los gusanos nunca hicieron diferencias a la hora de alimentarse (ahora mucho menos que antes porque la cremación es más sencilla, más práctica y hasta a ellos le sacan el “alimento”) por ello, en la realidad de lo cotidiano, la “famosa igualdad” es una utopía y lo que te dicen los Políticos no dejan de ser “sanatas interesadas” pues las diferencias instaladas permanecerán o, si es posible (casi seguro) , se cambiarán o se buscarán otras.

No cometan el error de creerlo porque lo digo yo, con recorrer un poco de la Historia y abriendo la mente me van a dar la razón.  Si partimos desde un hecho archiconocido como fue la Revolución Francesa, urdida y pergeñada por unos pocos utilizando al pueblo ignorante y pobre para sacar del Poder a los “Oligarcas” que los explotaban derivó en nuevos ricos que comandaron esas revoluciones y los pobres “utilizados” , incluso para matar a otros pobres que no estaban de acuerdo con la Política que se aplicaba, se multiplicaron y siguieron siendo explotados.

Puede que algunas cosas buenas surgieran de ese movimiento pero los pobres siguieron pidiendo y viviendo con monedas y los únicos que se estabilizaron y crecieron fueron los que utilizaron su sangre y sus vidas para llegar al Poder. ¡Bendita Historia a la que nadie parece recordar!...

No hay que escarbar mucho, apenas con dos dedos de frente uno se da cuenta que todas las “famosas revoluciones victoriosas” acabaron o continúan llevándose a cabo con un grupo de “nuevos poderosos” que las lideraron, los cuales detentan riquezas personales aprovechando la explotación de los ignorantes y de un pueblo con hambre, con necesidades insatisfechas y dependencias y lo que es peor, sin tener acceso a un crecimiento educacional y económico individual porque están supeditados a lo que decidan los que, en hipótesis, “mandan” , por eso digo que no cometan el error de creer que es porque lo digo yo.

Volviendo al tema de la pandemia y de la “igualdad” , por allí se podría pedir una mayor equidad pero las voces de los que hablan de “igualdad” meten en el discurso lo de “Capitalismo salvaje” o de sacarle o destruir lo que tienen los ricos o de ponerse en contra de todo lo que implique ser “Oligarca”(palabra de moda si las hay) y todo lo que se habla de “igualdad” va a parar a un “tacho de caca” porque también allí hay conveniencias para “manejar” , según convenga, a una masa que no aspira a más que dádivas.  Para mal de males, la mayoría de estos “salvadores” te lavan el cerebro con el Iphone o la Tablet en la mano o bajando de un auto de alta gama, sólo posible cuando proviene del “Capitalismo salvaje” , algo que la ignorancia del “rebaño masificado” no les deja ver.

Seguramente la hipocresía, la demagogia y un cierto grado de tiranía es lo que debería cambiar porque el que tuvo seguirá aspirando a tener más y el que no tiene (si lo dejan) pensará en tener “algo” , a más, “lo tuyo es de todos pero lo mío es mío” seguirá siendo una premisa acomodaticia y de práctica constante porque está lleno de “arrastrados” capaces de vender a la madre con tal de rapiñar en época de “vacas flacas” y obtener Poder a como dé lugar, principalmente “a costillas” de los ignorantes, hábil y concienzudamente “preparados” desde hace tiempo.

Yo no lo pasé bien en este “aislamiento obligatorio” , lo venía practicando desde hace años pues soy paciente de Alto Riesgo debido a que tengo una enfermedad que no me permite respirar bien y hacer esfuerzos, de todos modos, la cabeza funciona, aparentemente, bastante bien y estar tanto tiempo encerrado en casa, con mi mujer y los perros como única compañía (doy gracias a que hayan estado) te permite elucubrar, pensar y descubrir las “mierdas manipuladoras” de cualquiera de los lados que provengan y un papel y ganas de expresar te permite desgranarlas.

De todos modos no me erijo en el trono del “dueño de las verdades” , apenas si tengo las mías y, a esta altura, callarlas pasa a ser una forma de hipocresía que trato de no permitirme.  En definitiva, aunque los problemas estén instalados y las soluciones no van a ser sencillas, quería contarles sobre algo que emprendí y que me trae más de un dolor de cabeza y, para que negarlo, a pesar de creer que eso nunca más me sucedería, de huevos también.

Todo, en concreto, comenzó hace un mes atrás, porque, entre otras cosas, esto de expresar en letras por medio de relatos eróticos le interesó a un amigo que, desde siempre, desde generaciones, nadó en billetes de los colores que le pidieras.  Digo amigo mío y de varios conocidos más a los que jamás nos puso el dinero en las narices, estudió en la misma escuela pública, jugó al fútbol con nosotros en los mismos potreros, “repartió y recibió” codo a codo en las peleas con los “del otro barrio” .  Jamás se demostró “distinto” aún cuando supimos “la que tenía” porque para sus “18” , la gran mayoría conoció la casa en que vivía con sus padres.

José y yo, los dos que en definitiva nunca nos “despegamos” de él y nos tratamos siempre igual, teníamos una pequeña ventaja, ya conocíamos a sus padres y la casa en que vivían pero respetamos siempre sus deseos de no divulgarlo. “Según mi viejo, cuando saben “la que tenés” muchos cambian para peor” , -nos dijo-, eso nunca nos importó pero… el tiempo, muchas veces corto y otras veces más largo, le dio la razón al padre de Javier , que así se llama él.

Años después yo abandoné los estudios universitarios, la excusa fue que había que trabajar pero la comodidad y la inexperiencia jugó su parte, José se sacrificó, su familia lo ayudó, se recibió de Médico y se fue a ejercer al África , Javier con un Máster en Economía recaló en EE.UU. , la vida y las distancias nos separaron pero siempre, en la medida de lo que podíamos, nos mantuvimos en comunicación.

José no volvió nunca más, de buenas a primeras se perdió todo tipo de contacto con él, ni siquiera sus familiares supieron nada y si ahora es complicado, en ese tiempo era más jodido, gran parte de África vivía convulsionada por guerras tribales continuas, Golpes de Estado y sí, revoluciones por Poder que pudiese subyugar y manejar a la ignorancia. Javier movió a amistades políticas de distintas embajadas y trató de averiguar dando recompensas pero no hubo caso nunca se supo nada.

Hace cosa de dos años nos encontramos y pasamos toda una noche conversando de “cosas de hombres” , me había invitado a cenar en el piso que habitaba, se había separado de su segunda esposa y ¿quién mejor que un amigo para contar y sacarse mierdas de encima?...

Cuando conté las mías supo que me entretenía con el tema de los Relatos Eróticos y se entusiasmó con esto, averiguó y preguntó lo que quiso y yo no le escatimé información.  Supe allí, de “viejos” , que Javier , a pesar del dinero, las empresas, los estudios y los Títulos tenía una gran materia pendiente con las mujeres y el sexo.

Había salido con mujeres hermosas, se acostó con muchas de ellas pero… ninguna le enseñó o su machismo no le permitió aprender y el tema, desde su parte, no pasaba de un simple “misionero” , es más, ante mi asombro, me dijo que en los videos pornos, los pocos que había visto, debían usar una buena “técnica” para que pareciera que había penetración anal…

  • Disculpame Javier, ¿me estás jodiendo?, ya estamos viejos para que me salgas con pelotudeces de esas.
  • No boludo, de verdad, aparte de que debe ser sucio y es contra natura, ¿cómo hacés para que entre semejante “pedazo” en ese agujerito?
  • No sé vos dirás, ¿nunca te pusiste a pensar cómo es que hacen los gay?...  ¡Me estás cargando!
  • A lo mejor por eso son gays, porque tienen el culo preparado para eso…

Lo primero que se me ocurrió fue reírme a mandíbula batiente pero no, no llegué a hacerlo, al mirarle la cara desistí completamente de la risa, Javier me hablaba convencido de lo que me decía y opté por tratar de explicarle.  Yo no me las sé todas pero algunas aprendí y le conté de varias aventuras o experiencias que supe tener, nunca hice nombres y no comenzaría con él pero detalles di a granel, sin contar los que inventé, pues leyendo también se aprende.

Entre preguntas y respuestas amparadas por la intimidad de la amistad y adobada por tragos de un fino whisky importado, la madrugada nos sorprendió.  Mi amigo estaba bastante apesadumbrado y cuando me levantaba para despedirme porque no le acepté el desayuno, me dijo:

  • ¿Sabés qué es lo más triste de todo esto?, ahora entiendo que jamás fueron las mujeres, me ocupé del estudio, de las empresas, del dinero, amén de darle pelota a las idioteces que me inculcaba mi vieja y me olvidé de conocer y vivir.  Más de uno o una se debe haber cagado de risa de mí.
  • Tampoco es para que te hagas tanto drama, es lo que toca, yo no manejé una Ferrari, ni me subí a un yate o un avión de lujo, al margen de que no conozco montones de cosas que vos conocés.
  • Sí pero, no es lo mismo, vos no terminaste descubriendo que has sido un “paganini” toda tu vida.
  • Eso es una idiotez, los que de verdad interesan jamás pensarían así, por lo pronto yo no lo hago ni lo hice nunca, si estuviera José con nosotros tampoco lo haría y algún otro que piense igual debe existir.
  • Lo sé, lo sé pero te juro que a partir de ahora voy a tratar de conocer montones de cosas que viví ignorando.
  • Por las dudas hacé una revisación médica completa, no vaya a ser cosa que tengas que consumir puré de Viagra y te caiga mal, jajaja.  Yo te ayudaría y acompañaría pero estoy en “cuarteles de invierno”.

Insistió en llevarme hasta casa y como no me venía nada mal y me era necesario acepté, en el viaje volvió a insistir con esa obsesión repentina de aprender más sobre el sexo.  Le pedí que se cuidara porque no tenía edad para andar haciendo desfasajes y le dije que el descubrimiento de esas “cosas nuevas” haría que el “amigo Javiercito” le pidiera siempre un poco más pero todo se contraponía con “Don Bobo” y “José Pulmón” .  Me entendió la broma, que no era tal pero me contestó que primero iría al médico y luego se dedicaría a buscar buenas “profesoras” .

Seis meses después me llamó preguntando como estaba, le contesté que seguía “peleándola” pero quedó evidenciado que él quería hablar de sus nuevas “experiencias” …  Me contó que salía sólo con “chicas de categoría” y no quería más parejas, también que había aprendido mucho de estas experiencias, acotando que “preguntando también se llega a Roma” .  Le celebré la broma y lo felicité por esto pues al preguntar siempre aparece alguien que se interesa por darte buenas respuestas.  Me dijo que se tenía que ir un largo tiempo a EE.UU. pero que, por cualquier cosa, yo tenía el teléfono, le deseé suerte y desde allí, hasta hace un mes atrás, no volví a saber de él.

Me llamó como a las once de la noche, él sabía que yo no me dormía nunca antes de las dos o tres de la mañana pero lo que me puso en alerta es que se lo notaba alterado…

  • Pará Javier, bajá un cambio, calmate y contame lo que te pasa. -Imaginé cualquier burrada, además no lo saludé ni esperé su saludo-.
  • Sí, sí, disculpame Guille , me tenés que salvar, me metí en un lío, quilombo, bardo, llamale como quieras, de aquellos…  Aposté con un Jeque árabe diez millones de dólares y ahora sí o sí tengo que hacer una película porno en dos o tres meses.
  • Jajajaja.  Vos tenés un pedo terrible en la cabeza.  ¿Película porno?, jajaja, se me “destapó” el amigo Javier queriendo vivir lo “no vivido”, jajajaja.
  • No te rías boludo, esto aparte de dejarme “culo para arriba” en lo económico me puede costar la vida.  Hoy firmé el contrato con los Abogados del Jeque, ni siquiera pude atinar a negarme alegando el consumo de alcohol, fueron más que explícitos al respecto, de perder no sólo sería el dinero de la apuesta, no es para contarlo pero yo sé cómo se las gasta este tipo.

Según lo que me decía, aunque fuera muy en el aire y sin detalles, ni siquiera era castaño, pasaba directamente a lo oscuro pero no era para hablar por teléfono y se lo hice saber…

  • Ya lo sé y después de lo de hoy no puedo perder tiempo, ¿vas a estar despierto hasta tarde?  Decile a tu mujer que no se enoje, llevo algo para “picar” y te explico bien, aparte para que me ayudes a entender algunas cosas, vos sabés de letras y diálogos y el tipo hasta un guión escrito por él me hizo llegar.
  • Por mi mujer no hay problemas, ni sabía que estabas en la ciudad, vení, de última nos vamos a la habitación que tengo libre en la terraza y me contás bien, te espero…

Ni siquiera dudé, MÍ AMIGO me estaba pidiendo un favor y no lo dejaría “pagando” , además, había algo que yo tenía claro, había un problema instalado y urgía buscarle soluciones, ya surgirían los pro y los contras acorde se conociera bien el problema.  Le avisé a mi mujer y ante el amago le pedí que no se levantara que nosotros nos iríamos a hablar en la habitación de arriba para no molestarla, “dale mis saludos” fue lo único que dijo y siguió en “la de ella” .

Unos cuarenta minutos después, cuando llegó, además del saludo, del abrazo y el agradecimiento, dejó los paquetes que traía con comida y bebidas y me contó que, para no buscar estacionamiento, el chofer se había llevado el auto y, tal como pensé cuando lo esperaba, iba a ser una larga noche.  Nos acomodamos frente a una especie de escritorio que tenía en esa habitación y comenzó a contarme…

  • El tipo tiene unos cincuenta años y billetes hasta en los zapatos, su fortuna es incalculable.  Se quiso reunir conmigo para brindar por lo logrado, ya que gracias a que es primo de un Príncipe de uno de los Emiratos pudimos meter los productos de nuestra empresa en ese país árabe.  Sí, no me mires con esa cara, dije “brindar”, el tipo no se priva de nada y el tema de la Religión y la prohibición de consumir alcohol es “sanata” para determinados “consumidores” de la misma .
  • Ya no dije ni “ay”, seguí…
  • La reunión la hicimos en un pent-house de la gran puta que tiene en plena capital, en realidad no es sólo el pent-house, es todo el edificio de quince pisos con departamentos que son semipisos y dónde hospeda a la delegación que viaja con él, tripulación del avión, custodios y el harem que, según me dijeron son como veinte mujeres divididas en cuatro esposas principales, dos concubinas y su séquito.
  • Me imagino, seguí con el tema de la película que es lo que te preocupa y nos tiene despiertos.
  • En la charla, cuando yo alababa a un par de odaliscas de infarto que se movía bailando para los dos, me dijo que tenía escrito un guión de una película porno-erótica y buscaba a quien la podía realizar pero no quería caer en lo trillado de siempre, quería algo totalmente nuevo y que tenía que tener una calidad excelente porque sería sólo para consumo de sus parientes y allegados de los Emiratos.
  • Según me expresó, metiendo parientes y allegados de unos y otros sumaban una banda de miles, con la prohibición del Príncipe de darla a conocer exteriormente pues el que lo hiciera sabía a lo que se exponía.
  • Lo de “no caer en lo trillado” implica que no quiere “estrellas” ni gente del porno para rodarla, ¿no?
  • Exactamente, junto a otras condiciones que me las enteré hoy, caras y físicos totalmente nuevos, cuatro mujeres de menos de veinticinco años y dos hombres uno joven y otro un poco mayor, me entrega, durante los tres meses de la filmación, el edificio y, según las fotos que vi, una casa de campo espectacular, junto de dos combis y dos camionetas enormes para movilizarnos.
  • Además, el plantel de camarógrafos, sonidistas, compaginadores, ayudantes, maquilladoras, vestuaristas y equipos de primera calidad, los pone él, según se especifica los hombres son eunucos o semi eunucos y aunque esto de “semi” no lo entendí muy bien, no quise preguntar.  ¡Ahh! y todos hablan Español.
  • Bien, parece que te allana mucho caminos, ¿qué es lo que querés que haga yo?, ¿querés que te lea el libreto y te de mi parecer sobre lo escrito?, ¿me imagino que estará traducido, no?
  • No es sólo eso Guille, entendeme por favor, me fui de boca con el alcohol y te nombré diciendo que, aunque no te dedicaras a ello, eras un Director de Cine fantástico para la película, lo que menos imaginé es que se tomaría a pie juntillas mis palabras.
  • ¡¡¡¡¡QUÉ!!!!!, ¿NO PODÉS ESTAR HABLANDO EN SERIO?, NO SÉ NI COMO MIERDA SE HACE UN ENFOQUE…  ¡JAVI!, ¿QUÉ CARAJO TOMASTE ESA NOCHE?

No sólo era que eso superaba cualquier tipo de expectativas que podía tener al respecto sino que, para que negarlo, me corrió un escalofrío feo por toda la columna, ya no era solamente lo que le podía pasar a Javier , ahora era a mí a quien le podía pasar.  Me quedé pensando en esto porque me vi cortado en rebanadas por una cimitarra y no escuché bien lo que mi amigo seguía contando…

  • …  Ya viajó y es una especie de cuarentena…
  • Pará, pará y repetí todo porque no te entendí nada.
  • Digo que el Jeque ya se volvió para Arabia y dejó encargado de todo a un Abogado de un Estudio Jurídico de primer nivel para que allane cualquier inconveniente.  Será una especie de cuarentena, los hombres y mujeres del equipo de filmación, las actrices, los actores y el Director no podrán salir de las instalaciones, lo mismo para el personal de servicio, las comunicaciones serán las mínimas y aunque no lo dijeron, seguramente monitoreadas porque el tipo es un obsesivo y creído que le pueden robar la idea del guión.  El horario de filmación lo pone el Director y las comidas, bebidas, limpieza en general y personal para todo esto depende del Abogado.  Lo mismo sucedería cuando ocupemos la casa de campo.  Hay una prohibición absoluta para meterse con las actrices, actores y Director.
  • Lo de quedarse en un solo lugar, para mí, no es problema, mi enfermedad no me permite moverme libremente para cualquier lado ni hacer esfuerzos saliendo a la calle, con mi mujer no sé cómo lo puedo arreglar las broncas a aguantar no van a ser fáciles, sin contar con que necesito determinadas ayudas con los remedios, con el oxigeno y con la atención rápida en caso de ahogos repentinos.  Vos me mandaste al frente con esto pero no sé si puedo serte de utilidad, ya viste lo que me costó subir la escalera hasta aquí.

Le ponía excusas tratando, de alguna manera, de zafar del compromiso en que me había metido y de combatir el pánico que parecía subirme desde los tobillos pero la cara y los gestos de él me daban a entender que a todo mis “peros” le pensaba encontrar respuestas…

  • Aparte del problema de salud que te planteo, ¿qué tipo de actrices y actores quiere?, ¿ya se consiguieron?, ¿están dispuestos a quedarse dos o tres meses enclaustrados?, ¿qué es lo que harían cuando no duerman o trabajen, seguirían cogiendo todo el día entre ellos?...  ¿Cuánto se les piensa pagar?, además de todo eso y de las exigencias que yo pondría, porque lo mío sería salirse un poco de lo estereotipado del “bomba, bomba” tan común en los videos porno, tengo que pensar que para no morirte o para que no te maten, no vas a estar enclaustrado con nosotros pero vas a dejar que me muera solo, rodeado de “polvos” ajenos y matándome a pajas.

Esto último que dije le causó gracia y no pudo aguantar la carcajada, las lágrimas de la risa le caían por las mejillas y me contagié a la par que pensaba que no dejaba de ser un desafío y nada mejor ante un desafió que afrontarlo, ¡maldito ego! Luego de reír Javier volvió a ponerse serio y me explicó otras cosas…

  • Lo de tu salud lo podemos solucionar contratando a dos enfermeras para que te atiendan sólo en el set o “pegándose” como estampilla a vos.  A tu mujer le dejás un buen dinero y te comunicás por Skype todos los días.  Respecto a las actrices, está bien especificado, aparte de la edad, quiere a una pelirroja, una rubia, una morocha y una castaña, depiladas pero con vello púbico que denuncie que el color de cabello es natural, la altura oscila en el metro setenta no más alta y atléticas pero con curvas más que evidentes, no quiere operadas, sosas o fofas, ¡ahh! sin tatuajes, apenas con algunos muy sutiles, dice que eso también está muy trillado en el porno.  Con los muchachos, uno morocho y uno rubio, el morocho cercano a los cuarenta y el rubio que no llegue a los treinta años, las medidas del “aparato” no deben ser excesivas pero tampoco de la medida media.
  • Imagino que lo que quiere son mujeres que te “calienten” de sólo verlas, vestidas o desnudas y con los hombres, que al mirarlos no te lleven a las “comparaciones”.  ¿Ya están hablados los que tienen que actuar?...
  • No, todavía no, no sé dónde buscar y no puedo recurrir a los Representantes de actores.
  • Es más complicado de lo que parece pero, ¿de cuánto es el presupuesto con que se cuenta?
  • Es ilimitado, me lo dejó claro en el contrato, lo de la apuesta es al margen, quiere un buen producto y no importan los gastos.
  • Eso es una ventaja, si tenés a un par de empleados y empleadas de confianza que vayan a las Universidades Privadas que ya están comenzando a dar clases con normalidad o a los boliches bailables más caros, de esos que funcionan todos los días de la semana y que busquen chicas con esas referencias físicas, que les pregunten si quieren ganas doscientos cincuenta mil dólares por tres meses de trabajo en cine, 30% en mano si son contratadas y luego de un exámen físico exhaustivo.  Primero dales la dirección del pent-house y yo les hago la entrevista.  También podés mandarlos a otras discotecas o confiterías nocturnas y a las Universidades Públicas, van a encontrar algunas que estén dispuestas pero para “figuritas” son mejores los primeros lugares que te nombré.

Me daba cuenta que estaba hablando y actuando como si ya le hubiera dado el “visto bueno” y como Javier era un lince para muchas cosas, también se dio cuenta de esto.  Yo ya estaba pensando en la “moneda” , si iba a arriesgar, por lo menos que me redituara algo…

  • Javier, hacete a la idea que esto no te va a salir gratis, yo le estoy calculando unos tres millones de los “verdes”, incluyendo lo que esté estipulado para las actrices y actores, pienso en no privarme de ningún medicamento y le voy a pagar muy bien a las Enfermeras, lo que reste queda para mí, con un adelanto de unos cincuenta mil dólares para dejarle a mi mujer, con eso atemperaré muchas broncas y unos diez mil dólares para adelantarle a las Enfermeras.  Vos dirás…
  • Por mi está bien, yo le calculaba cinco millones, mañana mismo te hago llegar los adelantos para que vos te muevas y te paso a buscar después del mediodía para ir a ver las instalaciones del edificio en que deberán estar.  Con el resto de lo que podamos sacar, nos arreglamos entre los dos.

Para variar le salió el “empresario especulador” pero eso a mí no me jodía, me dejó el guión para que lo fuera leyendo y para ver las modificaciones que habría que hacerle, aunque me recalcó que tratara de que fueran mínimas, luego llamó al chofer y se retiró unos treinta minutos después recordándome que vendría a eso de las dos de la tarde.  Eran las cuatro y media de la madrugada y me puse a leer un rato más.

La historia trataba de un millonario cercano a los cuarenta y cinco, “nene” de mamá y papá devenido en play boy que se ve obligado a recluirse en una mansión por unos seis meses como requisito a cumplir para cobrar una herencia millonaria de un tío solterón y excéntrico al que ni siquiera conocía.  No puede tener contacto con gente del exterior, salvo con la cocinera y la sirvienta que son mujeres obesas y entradas en años y con un mayordomo parco y reacio a las palabras.

Según el fallecido tío, el aislamiento y el contacto prolongado con la naturaleza harían posible que el sobrino “sentara cabeza” y encarara con seriedad el resto de su vida.  El play boy accede a cumplir con ese requisito pero toma sus recaudos para pasarlo lo mejor posible.  El lugar está aislado y sin señales de telefonía o Internet y no hay radio ni televisión, el único medio de movilidad es el de una camioneta cuyas llaves guarda celosamente el mayordomo y el pueblo más cercano queda a unos veinte kilómetros.

A sabiendas de lo que le esperaba pues así se lo había pautado el Abogado que le leyó el testamento se consigue un teléfono celular satelital como para no estar tan aislado y es trasladado, el día posterior a la lectura del testamento, por gente del Estudio Jurídico a cumplir con lo estipulado.  Hasta allí venía bien y me generaba algún tipo de expectativa pero no terminaba de convencerme, me parecía mucha introducción y cambié parte del argumento del guión.

En el escrito original hablaba de dormir a las sirvientas y al mayordomo para poder recibir a un sobrino, una sobrina y sus tres amigas pero filmar varias escenas de sexo implicaba utilizar días y noches, ergo: la opción de doparlos no cuajaba demasiado, entendí que era más factible lograr hacerlos “compinches” del que estaba “guardado” en ese lugar o “comprarlos” .

Opté por esta versión y cambiando algunos diálogos quedó como que el personal de servicio haría la “vista gorda” a cambio de una buena cantidad de billetes contra la amenaza de la pérdida del trabajo al cobrar él la herencia y además, tampoco aparecerían en escena, se manejaría con diálogos haciendo saber que estaban pero no que actuaban, por otro lado, como estaban “comprados” podrían irse del lugar por tres o cuatro días y ya ni diálogos habría con ellos.

No viene al caso contarles toda la trama del guión o de la película en sí, los diálogos eran sencillos para dar a conocer la historia y como la pasaban todos en el lugar, en definitiva había que “llenar” la película con escenas de sexo, con expresiones de placer, con picardías, con exclamaciones y con buenas tomas y hacerlo a mi gusto no iba a resultar sencillo, dejé de leer y corregir y me puse a pensar en el “verso” que le haría a mi mujer para alejarme de casa.

Me cuadró inventar que Javier me había acercado la posibilidad de alojarme en dependencias de un laboratorio extranjero, alemán para más datos, que necesitaba pacientes para probar un nuevo medicamento utilizado para combatir mi enfermedad.  Según la mentira enarbolada, me darían todas las seguridades y un muy buen pago que nos ayudaría a pasar con felicidad y holgura el resto de nuestra vida.

Convencido de eso me fui a dormir cuando ya estaba aclarando el día y sabiendo que para el mediodía me caerían todos los interrogantes.  Llegada la hora del almuerzo no la dejé preguntar, “ataqué” primero diciéndole que Javier había venido para ofrecerme un trabajo importantísimo y le conté de la posibilidad y de la “internación” que se avecinaba, le dije que estaríamos en contacto permanente por el teléfono o por Skype y que me darían un adelanto importante, un 10% del total, para que ella no tuviera problemas de gastos.

Derrumbé cada uno de sus “peros” hasta que me dijo que hablaría ella con Javier , años de conocerla y previo a la charla explicativa, apenas me levanté fui al baño y sentado en el inodoro, ya había llamado a mi amigo para ponerlo al tanto de mi idea.  Para las dos y media de la tarde, cuando apareció Javier con el dinero, terminó de “deglutir” todo el “paquete” del Laboratorio y de la internación, inclusive del “secreto” de la marca del medicamento que todavía no saldría al mercado.

La idea se me ocurrió porque ya antes había hecho toda una serie de análisis y pruebas con otro establecimiento, algo había resultado de eso pero no me pagaron nada, aunque, nobleza obliga, tampoco me cobraron lo que me daban.  Ese problema estaba saldado y luego de las despedidas un tanto llorosas, pedidos de cuidados y/u otros etcéteras, cargando un bolso de mano nos fuimos al edificio del que hablaba mi amigo.

La zona era de las más pudientes de la capital y el lujo del pent-house me dejó un tanto anonadado y boquiabierto, tenía un dormitorio que era más grande que mi propio departamento, la cama debía medir 2,50 x 2,50, un baño como para quedarse a vivir y un vestidor enorme, unos ventanales inmensos me brindaban una vista maravillosa, por un lado a un parque frente a varios edificios gubernamentales y por otro lado a distintos edificios, además era totalmente insonorizada y se comunicaba por una puerta con otra habitación más “chica”(si así podía llamarse) con dos camas “King” .

Yo era el único que podría moverme por todo el edificio, las actrices y actores podrían ocupar del noveno piso hasta el catorce y el pent-house era sólo para mí.  Recorrí con Javier los departamentos que deberían ocupar las chicas y los muchachos y me contó que, aunque él no creyó mucho en lo que yo había planteado, la recorrida que hizo su secretaria por uno de los boliches de moda había resultado y había tres chicas que vendrían a las siete de la tarde por la posibilidad.

  • Javi, Javi, si yo te digo que es carnaval, apretá el pomo. ¿cómo querés que encare el tema en las entrevistas?
  • A “calzón quitado” Guille, no creo que sean idiotas, ese dinero no se ofrece por pavadas.  Si te interesan y están de acuerdo tienen que ir a tal Clínica a hacerse una revisación médica exhaustiva, ya te dejé los datos del Director de la misma y éste no tiene doble discurso, no va a falsear ningún dato, tienen que pedir por él de parte tuya.  También te dejé dinero para adelantos en caso de que firmen el contrato impreso, está todo adentro del bolso azul que está sobre la mesa del comedor del pent-house.
  • Hasta ahora viene bien, necesitaría a alguien para que le tomara todos los datos a los aspirantes y a un camarógrafo porque habrá que hacerles alguna prueba de voz, de gestos y de imagen.  Además quiero hablar con la gente que estará del otro lado de las cámaras y con los encargados de filmar, editar, maquillar, incluso de los que hagan las comidas y la limpieza y los custodios que eran dos.

Ya estaban avisados de mi presencia y me fue presentando a uno por uno, me saludaron como con miedo y me hice las “películas” respecto a que así se lo habían ordenado y ponían su trabajo y la vida en mis manos (al poco tiempo en la intimidad con la Cocinera y con el Ayudante de Dirección lo corroboré, el primo del Príncipe actuaba como dueño y señor de la vida de sus súbditos y las amenazas respecto de su cumplimiento y el trato para conmigo estuvieron a la orden del día desde el primer momento y si yo los rechazaba por algo, su destino sería muy incierto, quizás dramático) .  El que sería el Ayudante de Dirección para filmarlas en pruebas y un muchacho jovencito para tomar los datos serían los únicos con los que tendrían contacto y el primero sólo después de que yo hablara con las postulantes.

Luego de que hablé con el personal y de los que deduje que no tendría ningún problema, lo saludé a Javier que ya se iba y me puse en comunicación con una enfermera conocida, era una joven de treinta y cuatro años, morocha, estilizada pero de curvas “latinas” por donde quisieras mirar, de tetas altivas y nalgas duras y más que bien armadas, hermosa por donde se la buscara y dueña de unos hermosos ojos color café que parecían hablar.

No bien pensé en ella recordé que la había conocido hacía unos seis años atrás en la guardia de una clínica privada, mi enfermedad recién hacía sus primeros “pinitos” y una pastilla innecesaria para la presión me llevó a una lipotimia y casi desmayo estando en la calle, atención policial, ambulancia y guardia de urgencias en el primer nosocomio que se encontró.

El médico de guardia, “por las dudas” , decidió que quedara internado (en las “privadas” siempre pasa, sin ninguna duda, hay que “facturar”) .  Me trasladaron a una habitación y quedé con ella, con Noelia como encargada de mi atención, me recuperé rápido y mientras me preparaba para un electro al “bobo” poniendo “chupetes” en mi pecho, la miré y le dije:

  • ¿En qué oficina atiende San Pedro?, decime la verdad, ya me di cuenta que sos un ángel.
  • Jajaja, mucho ángel, mucho ángel pero recién cuando me di la vuelta y te ponía el “chupete” en el tobillo no me miraste precisamente las “alas”.  Ya parece que estás mejor.
  • ¡Tocado y hundido!, no te enojes por la franqueza pero si tuvieras alas no hubiese quedado tan impresionado como con tus nalgas.

Su risa surgió espontánea y, seguramente acostumbrada a recibir piropos y halagos me dijo: “definitivamente ya estás más que mejor” , luego se puso seria y me pidió que no la mirara y me quedara quieto porque el electro saldría mal.  Hizo dos y luego de mirar la tira de papel fino largo y con dibujos de curvas avisó por el intercomunicador que iba a ver al médico para entregarle el resultado.

Escuché que le avisaban que había venido mi mujer, dejó el intercomunicador, se acercó nuevamente a la cama y expresó: “Tu mujer no se va a poder quedar, tu corazón está bien y esta noche te cuido yo” , lo dijo a la par que una de sus manos apretaba con suavidad mi miembro “amorcillado” que, escondido debajo de las sábanas, pedía a gritos por una reacción todavía no tan olvidada.

Mi mujer se fue pasando las diez de la noche, luego del susto lógico se retiró tranquila aunque sólo después de que le aseguraron que la internación era preventiva y yo me quedé un rato dando vueltas con mi cabeza en el silencio de la habitación, me ganaba una modorra incipiente que me llevaba a que se me cerraran los ojos y la entrada de Noelia avivó de pronto todos mis sentidos.

  • Hola papi, vine a controlarte y a que hagas pipi para analizar.

No me dejó contestarle, retiró las sábanas y me tomó del miembro para colocar el glande y un poco más en la boca del famoso “papagayo” , mi micción no fue abundante y los dedos de ella tamborileando en el ariete no me ayudaban demasiado, “papi, apurá a terminar porque está creciendo y luego no la voy a poder sacar” , -me decía divertida-.  Yo lo sabía, no es muy larga, apenas dieciocho o casi veinte centímetros cuando está muy “encabritada” pero es bastante gruesa, terminé y me secó un par de gotitas con un papel astringente, dejó el recipiente arriba de una mesita apartada y regresó al lado de la cama.

  • Me tenés que ayudar papi, no sé por qué pero desde que te vi que estoy recaliente.

Ver que se sacaba el guardapolvo y quedaba ante mí vestida con la cofia, medias blancas al muslo, una tanga diminuta, sus tetas que, en una medida media, parecían dibujadas con perfección, tenían areolas grandes y pezones que parecían piedras, duros y erguidos.  El placer se hacía notar en el rostro y alborotó a todos mis “ratones” que corrieron enloquecidos para agruparse en el miembro que ella no tardó en sostener con las dos manos.

Sólo una lamida al glande y luego lo perdió en su boca hasta que su nariz quedó pegada a mi ingle, sin arcadas, sin retrocesos y allí se quedó mientras movía la lengua en una caricia desquiciante.  Su cadera había quedado pegada a la cama y no perdí el tiempo, dos dedos de mi mano cercana apartaron la tirita y se perdieron en su gruta, bastante estrecha y totalmente anegada.  El gemido de satisfacción fue elocuente y sus músculos interiores junto a sus caderas parecieron tener vida propia.

Índice y medio en su interior mojado, el anular tocó el clítoris y el pulgar se aventuró en su agujerito más pequeño, fue una bomba casera, no paraba de moverse y gimiendo casi en voz alta dejó su trabajo bucal para dejar caer su cuerpo sobre mi costado y mientras que tenía temblores y contracciones, me brindó la explosión de su orgasmo.

Fue largo y bastante duradero, había apoyado la cara sobre mi vientre y me miraba mientras me acariciaba con una mano el tronco y hacía gestos de placer mordiéndose el labio cada vez que una contracción la asaltaba.  No tardó en recuperarse y subió sobre la cama poniendo sus rodillas a mis costados, la “cabalgata” iba a ser para no olvidar y la vista de sus pechos menudos pero altivos, duros y de pezones endurecidos me tenía a mil.  Ella dirigió la maniobra y se fue penetrando despacio sintiendo y haciéndome sentir la estrechez y el paso en todas sus rugosidades.

Los dos notamos cuando llegó a su tope interior pero su gesto de dolor pasó rápido y después ya no pude detenerla, las subidas y bajadas, las entradas y salidas aceleradas corrían por su cuenta y yo hacía esfuerzos para concentrarme pensando en cualquier “verdura” , nunca me costó controlarme pero me estaba sacando de contexto y atiné a pellizcar su clítoris, un par de apretones y…

Otra vez sucedió, aunque en este caso se tiró sobre mi cuerpo y mordió la almohada ahogando el grito que sentí pleno en mi oído.  La abracé fuerte para que siguiera con sus contracciones y sus apretones a mansalva, el beso en el cuello debajo de la oreja fue como echar nafta al fuego y siguió moviéndose hasta que la escuché: “Basta Guille no puedo más, pensé que sólo sería un “polvito” y ahora estoy enviciada” .

La dejé que se aflojara un poco y se la sacó despacio para bajar de la cama y darme un beso cargado de labios, dientes, salivas y lenguas.  Era el beso de una boca adictiva y cuando nos separamos vio que yo seguía tan duro como al principio, “¡Por Dios, ¿cómo hago para que termines?”“Apoyá las manos en la cama y prestame un rato esa cola, aunque me muera no me voy de aquí sin tenerla” .

“Despacio Guille, despacio que no estoy acostumbrada” , -me dijo- pero se apoyó dejando a mi merced unas nalgas prodigiosas y donde no se apreciaba ningún tipo de flojedades.  Salí de la cama pensando que nunca me gustaron estas lides a lo loco, como a la desesperada y, agachándome, mi lengua se hizo cargo de toda la zona, se la oía gimotear del placer a la vez que los pulgares jugueteaban y dilataban el lugar.

Ella no se aguantó y, en medio de sus contracciones, penetré totalmente su culo en dos intentos.  El grito lo absorbió la cama y las sábanas pero no me detuve a esperar nada, las entradas y salidas se sucedieron acelerando y cuando noté que volvía a endurecerse para explotar nuevamente me dejé ir hasta el fondo y acabé apretando sus caderas.

Se abandonó un ratito sobre la cama, se escuchaba un llanto y pensé que le había hecho daño, no hice comentarios pero le acaricié la cintura, la espalda, la nuca y los hombros dejándola descargarse, luego se levantó, recogió la ropa y se metió en el baño, unos minutos después salió arreglada y resplandeciente.

  • Gracias Guille, el llanto no era por lo que pasó, tampoco podría decirte ahora el por qué de esta calentura instantánea, sin embargo, me hiciste sentir muy mujer, me cogiste y dejaste que te cogiera, fue compartido, ¿entendés? y nunca me sentí tan plena y tan feliz, así como tan estúpida por lo mío anterior en que vos no tenés nada que ver.  Mañana te vas por la mañana, yo voy a estar de franco y no te veré pero te dejo mi teléfono, llamame cuando quieras y te cuento más.

¿La llamé? , claro que la llamé y tuvimos cuatro o cinco encuentros más, a cual mejor y más placentero.  Dejamos de vernos porque ella me lo pidió, “estoy total y absolutamente enamorada de vos, sos el hombre de mi vida pero no voy a ilusionarme, tu vida es tuya y la respeto pero la mía es mía y prefiero alejarme sin exigir, recordaré siempre que mi felicidad tiene nombre y apellido” , fue así, sencillito y sin reclamos, de todos modos supe que siempre podría contar con ella.  Por eso ahora volvía a llamarla y nos ayudaríamos mutuamente.

Me atendió el teléfono irradiando la simpatía general que la caracterizaba y después de preguntarme cómo andaba y cómo me llevaba la salud, me contó que estaba en la casa y no la pasaba bien, se había tomado unos días porque los meses de pandemia la habían “apaleado” con la atención de pacientes y además conllevaba la tristeza por la pérdida de algunos compañeros y la desesperación porque a algunos pacientes no pudo salvar.

Uno no los suele tener en cuenta pero ante estos casos, siempre los que llevan la peor parte son los que están en la primera línea del combate, yo imaginaba que pelear una especie de guerra contra un enemigo invisible debía ser desesperante, mucho más cuando los insumos que el Estado debería ofrecer no eran los mejores para evitar riesgos propios.  La dejé que contara porque era un modo de descargar algunas frustraciones y después le dije que la necesitaba para que me atendiera por dos o tres meses.

Pensaba ofrecerle unos cincuenta mil dólares por los tres meses de trabajo y luego de escucharla y atendiendo a que era dinero que no saldría de mi bolsillo, decidí ofrecerle setenta y cinco mil.

  • Noelia, ¿te animás a atenderme en exclusiva por tres meses cobrando veinticinco mil dólares por mes?
  • ¿Me estás jodiendo?, apenas si llegó a cobrar unos setecientos dólares por mes, por esa plata te apantallo y hasta me animo a algo más.  ¿En qué andás Guille?
  • Tengo que hacer un trabajo y necesito tu aporte para sentirme, de alguna manera, protegido, además con vos sola no me alcanza, tendrías que traer a una compañera de trabajo, que no sea fea, ya sabés que las feas no me agradan, jajaja, el dinero es el mismo para ella o en todo caso arreglá vos con tu amiga pero las necesitaría las veinticuatro horas del día conmigo.
  • Las dos todo el día y viviendo contigo, ¿qué nos querés hacer?, ¿es en tu casa?
  • No, no es en mi casa y creo que yo ya no puedo hacer nada, tendríamos que hablarlo los tres, además habría que comprar un respirador, un tubo de oxigeno y lo que necesites.  Si te interesa, te doy una dirección de la capital, te subís al auto y lo hablamos personalmente, si me aceptás las condiciones puedo darte ya un adelanto de diez mil dólares.
  • Dame la dirección, la paso a buscar a mi amiga y nos llegamos hasta allí, llegaré en una hora y algo más, andá pensando con que me vas a convidar.

Estimaba que no iba a tener problemas y estaba seguro que la compañera que traería iba a tener su misma capacidad para el trabajo.  En lo inmediato quedaban las entrevistas con las tres chicas que ya estaban citadas. Adil que era el nombre del Ayudante de Dirección, que luego me enteré que significaba “Justo” , me avisó que las postulantes ya habían llegado y esperaban en uno de los departamentos.  Me preguntó si quería verlas antes por un vidrio espejado desde un cuarto contiguo y la idea no me desagradó.

Luego de pedirle que les avisara a las cocineras que prepararan una cena para tres a servirse en el pent-house, nos situamos detrás de un vidrio y me puse a observarlas, conversaban entre ellas, a la par que le daban los datos al jovencito que las atendía, cumplían todas las especificaciones físicas aunque una era morocha y las dos restantes rubias, las tres de minifaldas y tacos altos.

Fue la primera vez que tomé conciencia de que este trabajo sería casi mortal para mí… ¡Qué carajo les daban de comer a las mujeres de hoy en día! ... ¡En mi época de juventud no existían esa clase de hembras! ...  Tenía por cierto que una cosa era verlas por fotos o en videos o caminando por la calle y otra muy distinta era verlas en persona, imaginarlas sin ropas y/o pensarlas para cuando estuvieran filmando y, para mal de males, mirarlas desde afuera y ordenando primeros planos con la cara pegada a sus intimidades, ¡madre de Dios! , eso iba a ser demasiado dramático para mi salud física y mental.

Continuará…

Por favor, valoren y comenten. GUILLEOS1 se los agradece.