El diario de una princesa 3 (mi primera vez)
El relato de mi primera salida como chica travesti de la mano de un hombre y cómo llegué a la cama con él!!!!
Hola a todos, hacía mucho que no escribía un relato pero hoy con el frío que hace y bien vestidita les contaré cómo es que perdí mi virginidad y por fui una mujer feliz!
Antes que nada, quise aprovechar la casa sola para vestirme y tomare muchas fotos, me encantan, hoy decidí darme una ducha y depilarme toda, me encanta ver mis piernas depiladas, me puse una tanga rosa con flores, muy coqueta, un bra color lila con encaje que hace que mis bubis se realcen y luzcan bonitas, a pesar del frío tengo puesta una mini falda ya que quiero aprovechar la depilada, todo esto lo combiné con un blusita azul y alacié mi cabello (lástima que no se pueden subir fotos).
Pero ésta historia no se basa en cómo estoy vestida el día de hoy sino en cómo por fin me animé a estar con un hombre. Yo tenía 18 años, la edad perfecta para poder ya dejar de ser virgen, en mi cabeza siempre rondó esa idea, al menos desde que empecé a vestirme, dejar de ser virgen a los 18 como toda una señorita, he de confesar que me daba miedo porque estaba confundida, ahora sé que me encanta.
Ya llevaba un tiempo de haberme mensajeado con un chico no tan chico, 32 años para ser exacta, guapo, alto, fuerte, amable, en realidad el único que me ha conquistado del todo, además de que siempre me han atraído los hombres maduros. Un día, por fin me decidí a verlo pero como buena niña “closetera” no tenía nada de nada, pero él como todo un caballero me llevó de compras.
Yo tenía clases en la Universidad pero dije “es ahora o nunca” y lo vi en la Zona Rosa, lo vi afuera de ZARA para escoger lo que me pondría, debo confesar estaba nerviosa porque era mi primer encuentro con un hombre y se me salía el corazón de tan solo estar parada ahí, nos quedamos de ver a las 3 de la tarde y fue puntual, estaba de espaldas y sólo sentí una mano en la cintura diciéndome “Mariana” (así me hacía llamar en mis inicios como chica, desde hace mucho soy Daniela), lo cuál me hizo sentir “Woooooow”. Nos saludamos, algo nerviosa pero me tranquilicé, escogí una mini falda negra muy corta pensando que me la levantaría y jugaría conmigo, una blusa morada escotada, medias negras y una tanguita coqueta, negra con un moñito al frente.
El camino a Versus (casa travesti de aquélla época) fue raro, la verdad platicamos poco pero él en todo momento me tranquilizó y tomaba mi mano para calmarme, eso de verdad lo sigo recordando hasta el momento. Por fin llegamos y la chica que me atendió me hizo sentir cómoda, segura y sobre todo linda ya que me dijo que me veía bonita sin siquiera haberme maquillado. Aún faltaba mi bra porque una nena no puede andar así sin su bra, ahí había uno con efecto push-up; me dejó ahí para irse a comer mientras me maquillaban y la aventura continuaba.
Subí para comenzar con mi transformación, primero mi tanguita negra, seguida del bra, medias negras, mini falda y la blusa. Bajé las escaleras y comenzó la maquillada, la plática la verdad fue muy amena con la chica que me maquilló, no paraba de decirme que me veía como niña, en realidad, siempre me lo han dicho pero a veces me es difícil creerlo, jijiji. Por fin terminó pero aún faltaban los zapatos, ella amablemente me prestó unos porque no quería que mi primer salida fuera descalza y/o con zapato de niño siendo toda una mujer. Al verme frente al espejo, creo que quería llorar de emoción, por fin mi sueño de verme bien maquillada, arreglada y lista para salir con un hombre, se me había cumplido.
Por fin pasó por mi y aún recuerdo su cara de asombro, se acercó a mi, me tomó de la cintura, me plantó un beso, mi primer beso con un hombre y yo sentí mariposas, sentir sus labios, sus manos rodeando mi cintura y tocando ligeramente mis pompas, woooow! Me abrió la puerta del auto, subí y yo lo que quería era ir a la zona rosa a caminar un poco, pasear como nena, tomar un helado, qué sé yo, pero el camino hizo que nos desviáramos ya que había mucho tráfico y “curiosamente” dimos con un hotel cerca de Insurgentes, antes de irme mi amiga me dijo “usa condón para que no pase nada” y hasta ahora sigo el consejo!
Él me preguntó: “¿Quieres entrar?” y yo no dude ni un segundo, lo besé y le dije “Es lo que he estado esperando desde que te vi”, no sé si eso lo prendió pero aceleró para conseguir una habitación, jiji. Aún recuerdo la cara del señor del hotel al verme con lujuría, eso es de lo mejor que siento nos puede pasar a las travestis, también un chico detrás de mi no dejaba de verme las piernas, por lo que me dicen se me ven bien (lástima que no puedo subir fotos).
Por fin entramos en la habitación y empezó a besarme, aún recuerdo cómo sus besos erizaban mi piel, al principio tenía miedo pero al sentir sus besos, descubrí que un hombre es lo que quiero en mi vida y no sólo eso, sino ser su princesa. Cabe mencionar que cumplió mis sueños, transformarme en una dama, señorita, nena, etc., me hizo sentir mujer.
Al mismo tiempo que me besaba sentía cómo se excitaba y su pene comenzaba a levantarse, fue una rara sensación pero a la vez agradable. Aún recuerdo que no dejó de besarme mientras al mismo tiempo tomaba mi cintura y me decía “qué hermosa te ves” NOTA: CHICOS, es lo que nos gusta, que nos traten como nenas!
Mientras seguía besándome me tomaba de la cintura y me decía cosas como “mamacita, te ves muy bonita” “eres una princesa” y wow, eso prende! Le quité la camisa dejando a mi hombre en jeans y se veía tan fuerte, tan guapo, tan excitante! Se acercó a mi, me volteó y puso su espalda contra su pecho al tiempo que me acercaba de las nalgas a su pene, aún disfruto eso con cada chico con el que estoy, me besó el cuello, la espalda, los hombros, no dejaba de besarme y por fin hice lo que una chica debía de hacer, voltearme, ponerme de rodillas y besar ese miembro que tienen los hombres y nos vuelve locas a las mujeres.
Me arrodillé, le bajé los jeans, le bajé el bóxer y al ver su pene en mi cara me excité más, por fin sería esa chica de las películas porno chupando el pene de su macho, por fin me entraría esa masculinidad en mi zorra boca, por fin! Me lo metí en la boca como niña con juguete nuevo, lo besé, lo acaricié, lo chupé con todas mis ganas, siempre había querido probar uno, siempre había querido metérmelo y disfrutarlo, sabe salado rico, mi zorra boca tenía miedo de probar y que le gustara, se equivocó un poco, ME ENCANTA!!!!!
Él me acariciaba la cabeza haciéndome disfrutar de su pene, por fin me dijo las palabras mágicas “Quiero cogerte mamacita”, me levanté como de rayo, le pedí que sacara el condón y no traía, OMG me quería morir, sin condón no hay acostón, claro que se ofreció a ir por los condones a la recepción pero al verlo solo en bóxers listo para mi no quise interrumpirlo así que le pedí el dinero y me ofrecí a salir por ellos.
Al llegar a la recepción el señor del hotel me dijo “qué se le ofrece señorita” a lo que respondí “unos condones por favor”, pagué con un billete de 500 y no traía cambio por lo que salió a buscarlo a la tienda de en frente, mientras esperaba, noté que un chico detrás de mi estaba sentado viéndome las piernas, creo que fue la primera vez que me sentí tan zorra porque le dije “quieres tocarlas?” al tiempo que le ponía la mano en mis piernas hasta llegar a mis nalgas, esas nalgas que estaban cubiertas por una mini falda que hacía lucir mis esbeltas piernas!!!!
El señor llegó con el cambio y nada más pasó, pero sé que al chico le gustó! Entré por fin al cuarto y mi hombre estaba acostado, con el pene parado esperando a su princesa, no aguanté más, le puse el condón y le pedí que me la metiera con cuidado porque sabía que dolía, les puedo asegurar que es el hombre que más rico me la ha metido, me bajó las medias, me levantó la falda, me puso lubricante, me fue dilatando hasta que por fin me penetró, entró su ancho pene en mi, acostada, viéndolo a los ojos y me dijo “te va a doler pero te va a gustar mamita” y entró ese pene en mi, dolió? Si y mucho pero duró como 5 segundos el dolor que se volvió placer, muuuuucho placer!!!!
Cambiamos de posición, se acostó y me monté sobre él y me movía como loca, traía un pene entre mis nalgas y lo que alguna vez me daba miedo en ese momento se volvió puro placer, me movía como una loca, al menos él decía:
- Pensé que nunca habías cogido y te mueves como toda una zorrita, si de que te encanta, te encanta. (al tiempo que me daba nalgadas)
Cambiamos de nuevo de posición y quería quitarme la mini falda, le pedí que no lo hiciera y me pusiera de perrito y me la metiera así, me puso de perrito y comenzó a metérmela de nuevo al tiempo que me masturbaba, tener a un hombre así me encanta, perdido entre mis nalgas y mi aroma!!!!
Después de un tiempo me dijo “me voy a venir mamita” y me excité tanto que me vine, saber que di tanto placer a mi macho me prendió, él también se vino dentro de mi (con condón) y me dio un beso diciendo:
- Coges riquísimo mamita!!!!
Creo que hasta ahora naaaaadie se puede quejar, jejejeje! Nos vestimos de nuevo y me llevó a la casa de transformaciones a que me pusiera de nuevo mi disfraz de niño, iba emocionada y triste porque quería más pero para ser la primera vez no estuvo mal!
Me esperó como todo un caballero y aún me llevó a la Universidad, ya de chico se despidió de mi dándome un beso diciendo:
- Adiós mamita, te veo pronto!!!!
Ya en clase algunos compañeros en tono de broma me dijeron “parece que te acaban de coger” y si, así fue, acababan de darme una cogida que jamás olvidaría y que a la postre sería el inicio de una serie de hombres en mi vida!!!!
P.D.: Si lees mi relato, aún quiero verte y quiero estar de nuevo contigo!!!!