El dia despues

Me desperté a las 2 y media de la tarde del sábado. El pene y los testículos les sentía algo dormidos. La verdad es que no me sorprendió ya que el día anterior había tenido jaleo. Fui a comer con mis padres y mi hermana, y les comente que no iba a dormir esa noche en casa porque íbamos a las fiestas del pueblo de Sergio. Sergio es un colega que tengo, pero no le considero un amigo, el típico que conoces para ir de fiesta cuando no tienes plan, pero me servía de tapadera para esa noche. Después me fui al ordenador y me conecte al facebook. Estaba Fran, es un buen amigo pero hay muchas cosas que no le cuento, y también estaba Manu, que es el que prefieren las chicas, que si es un amigo mas intimo. Me preguntaron que donde me había metido la noche anterior y les dije que me había quedado con una chica. Fran no se metió mucho en el tema, pero me pregunto qué haría ese sábado. Le conteste que había vuelto a quedar con la misma chica y que ya quedaríamos. Manu sabía que me había quedado con Laura y se supuso lo peor:

• ¿No te habrás liado con Laura? Mira que Javier es compañero de clase y me buscas un lío. Sabias que ella tenía novio y que no debías haberte quedado con ella.

• Que no me he liado con Laura. Anteayer me presento a sus amigas y hubo feeling con una.

• ¿Hubo feeling? Apuesto a que con Yara es fácil tener feeling – Manu aun no las conocía, pero también tenía ganas por cosas que había oído– Seguro que fue con Yara. ¿Que tal estaba el resto?

• Sandra es una maravilla de morenaza. Y Marta no está nada mal, aunque no es mi tipo.

• ¿Pero te la zumbaste o que?

Manu siempre tan directo y tan cotilla. No me gusta hablar de mis conquistas de una manera tan abierta. Vale que  le cuento cosas, y que es mi confidente, pero nunca me ha gustado hablar así de las chicas con las que estoy, así que trate de cambiar de tema.

-Bueno, hoy he vuelto a quedar con ella y no voy a salir con vosotros.

• Si es Yara te la has tirado fijo, porque me han contado que es una norma suya tirarse todos los tíos con los que se lía desde el primer día para saber si le sirven o no. Has superado un listón muy alto. ¿Qué tal lo hace? Aunque solo sea por experiencia tiene que ser buena.

Intente escaquearme de nuevo, Manu no suele preguntarme dos veces si ve que no quiero hablar del tema, pero realmente Yara despertaba la curiosidad de cualquiera.

-Oye Manu no soy de hablar de estas cosas así, y menos con gente conocida de por medio.

• Dime como fue todo, venga tío, es la tía más morbosa de la que he oído hablar nunca. Te prometo que nunca contare nada de todo esto a nadie. Solo quiero saberlo por esta tía. ¡¡Venga tío¡¡

• ¡¡Pero solo por esta vez¡¡ ¡Prométeme que no se lo dirás a nadie bajo ninguna circunstancia¡

-¡¡Te lo prometo¡¡ ¡Si lo casco puedes contar lo de aquella vez que me lie con Rosana la gorda¡

-Está bien. Lo has prometido. Pues como sabes me quede con Lara cuando os fuisteis, y al cabo de un rato la llamaron sus amigas para saber donde estaba. Después fuimos a casa de Yara. Allí las conocí a  todas, y entre una cerveza y otra empezamos a echarnos unas risas y tal. Lara y las otras  nos terminaron dejando solos, y una vez solos pues al cabo de un rato se lío la cosa.

• ¿Es guapa la tía?

• Pues tiene unos ojos negros preciosos y una mirada con mucho morbo.

• ¿Que tal besa?

• Pues tiene los labios un tanto carnosos, y besa como una diosa.

• ¿Y que tal es su cuerpo?

• Pues es algo pequeña pero tiene buenas curvas. Además su piel es muy suave y olía a perfume de jazmín.

• ¿Cómo tiene los pechos?

• Pues son redondos y grandes. Los pezones también les tiene algo grandes.

• Tiene que tener mucho morbo esa tía. ¿Es verdad que para empezar le gusta empezar a chuparte la polla sin desnudarte?

• Sí, bueno. Me desabrochó los pantacas y me la saco. Me la cogió y me empezó a dar lametones en la punta mientras me pajeaba un poco. Pero también se bajo el vestido para que la tocara bien las tetas.

• ¿Y se depila ahí abajo?

• Pues si que está bien depilada, no tiene un solo pelo ahí abajo.

• ¿Y eso? ¿Se lo comiste?

• Me lo pidió. Después del favor que ella me había hecho como para decir que no, además así depiladita si que daba gusto empezar a comérselo. No fue difícil empezar a hacer que se calentara.

• ¿Cuántas veces lo hicisteis? Esa no se conformara con una vez.

• Pues 2 veces.

• ¿Conseguiste que se corriera?

• Pues la primera vez no. Y eso que había esta un rato chupandole el coño a buen ritmo. Pensaba que se correría en mi cara. Pero la tía aguantaba más de lo que pensaba. Estuvimos un rato dándole pero es que me ponía mucho y acabe corriéndome.

• ¿Se puso ella encima?

• Pues si. Se vuelve loca dando botes. ¡Y como se le mueven las tetas¡ Se puso a darme un beso en la boca, y con el roce de sus tetas en mi pecho no pude evitar correrme.

• ¿Algo especial para acabar?

• Pues que al final del primer polvo me quito el condón y se puso a lamerme la polla con todo el semen y todo. La verdad es que lo hizo con mucha dedicación. Pensé que me la volvería a poner dura y todo.

• ¿Y cómo fue el segundo?

• Después me llevo al baño y nos duchamos juntos.

• ¿Os duchasteis?

• Si, ella empezó a frotarme la espalda lentamente de arriba a abajo. Después nos frotamos el pecho mutuamente, y a ella le dio por pasarme la esponja en mis partes.

• ¿No te empalmaste?

• ¡Pues claro¡ Además ella me dejaba meterle mano por todas partes, se notaba que ella quería aun mas.

• ¿Y que hicisteis?

• Empecé a jugar con la esponja en su coño mientras nos besábamos mientras que ella me empezaba a pajear lentamente para que se me volviera a poner bien dura. Después la puse contra la pared y la empecé a follar otra vez. Después de un rato cambiamos de postura porque me estaba cansando, y ella se puso a cuatro patas, con el chorro del agua en mitad de todo el tema.

• ¡¡¡Joder que tía mas calentorra¡¡¡

• Pos es lo que tiene que sea adicta al sexo. Supongo. ¡¡Esa fama tiene¡¡

• ¿Y ya esta?

• Después yo me seque con una toalla, mientras que ella hacía lo mismo, pero seguía mirándome con ganas de más.

• ¿Y no lo volvisteis a hacer?

• No sé. Era tarde y ya después de dos veces ya no tenía tantas ganas de volver a repetir.

• Mira no se si creerme la mitad de lo que me has contado, pero como se trata de esa piba y de que me han contado ya alguna de las que ha liado me lo intentare creer.

• Es lo que hay. Pero no se le digas nada a nadie y menos a Laura. Esto es como si tú no supieras nada de nada. Yara me ha dicho que esta un poco cansada de habladurías, que le he gustado y que quiere ver si esto puede ir a alguna parte, ¿vale?

• Lo que tú quieras tío. Te lo he prometido. Ya has quedado con ella hoy, ¿no?

• Pues si tío. Iré a su casa a eso de las 7. Así que ya quedaremos otro día  para hablar del tema, y no se lo digas a nadie.

• Tu tranquilo que no se lo cuento a nadie.

• Mira a ver si tú también encuentras a alguna para esta noche.

• ¡Hasta luego picha brava¡