El despertar de Karina 4

Karina cuenta a sus sorprendidas amigas su aventura. Los relatos anteriores han recibido pocos comentarios, aunque son muy favorables me gustaría que opinaran más.

Les platicó el encuentro que tuvo con Carlos y Mario, de la forma en que estaban cazando a las chicas para filmar bajo su falda, de las sensaciones que la hicieron acercarse a ellos para que también espiaran bajo su falda y de cómo la abordaron para platicar hasta que la convencieron de quitarse el sostén y la tanga mientras la filmaban, (aunque se guardó el hecho de que lo hizo a cambio de dinero), y la forma en que se paseó por el Centro Comercial mientras se levantaba la falda o enseñaba sus pechos y las sensaciones placenteras que recorrieron su cuerpo a causa de la situación.

-- Que bárbara Karina, tú que no querías usar blusas escotadas nos resultas una exhibicionista --,

-- No creas, ayer en la mañana no tenía idea de lo que iba a pasar ni de lo que habría de hacer al terminar el día --.

-- ¿Pues es que hay más?.—

-- Sí …, hay mucho más, mucho más de lo que nunca imaginé aún después de leer las páginas de relatos eróticos --.

-- ¿Relatos eróticos?, ¿Tuuu?, siempre te creí recataba y remilgosa y resulta que te gustan ese tipo de cosas –

-- La verdad no solo leerlas, a veces también veo videos porno en Internet, y … y … también me gusta imaginar que yo … que yo … soy la protagonista …–

-- Vaya Karina si que nos sorprendes, por que si tienes esos gustos te has negado a ir con nosotras a divertirnos con los chicos, incluso hasta nos llegaste a tachar de  facilonas --.

-- Ahora creo que era por miedo a no poder detenerme . –

-- Bueno luego nos explicas eso, dices que hay mucho mas, ¿Qué pasó?.

Habló acerca de la forma en que la envolvieron con bromas y halagos hasta que le convencieron de tener relaciones sexuales con ellos (nuevamente omitió mencionar el dinero que le ofrecieron), de la llegada de Jorge y cómo la desnudaron en la camioneta mientras la manoseaban a su gusto, de cómo se fue desinhibiendo poco a poco y del placer que sintió mientras la fueron poseyendo uno por uno mientras le metían la verga por todos lados.

Sus amigas escuchaban asombradas y excitadas.

--¿Entonces tuviste relaciones en una camioneta mientras circulaban por la calle?—

-- Supongo que no se podía ver nada desde afuera, o sí --.

-- En realidad se podía ver todo, sobre todo cuando me sentaba sobre las piernas de los chicos, mis pechos quedaban sobre el nivel de la ventanilla y era evidente que todos podían verme sin problemas --

-- Este … ¿para qué te sentabas en las piernas de ellos?—

-- Pues … para ensartarme en sus vergas, cuando me sentaba de frente a ellos aprovechaban para chupar y morder mis pechos mientras se bamboleaban para todos lados y si me sentaba dándoles la espalda me abrazaban desde atrás e igual me estrujaban los pechos y me pellizcaban los pezones; por eso los traigo tan sensibles –

Las amigas quedaron asombradas y por momentos no supieron que decir, mientras se excitaban cada ves más con el relato.

-- dices que te la metieron por todos lados, ¿quieres decir que también te dieron por el … este ...--,

--¿por … el culo?, sí, el tercer chico me la metió por … ahí –

-- ¿y por la boca? –

-- ehhh … pues sí, los tres me metieron la verga por la boca o he de decir que yo me la metí, no sé, al principio me dio asco, pero conforme se las fui chupando me gustó la sensación de estar haciendo algo así como prohibido, luego su sabor y su olor me fueron gustando hasta que ya no me podía detener, aun ahora se me hace agua la boca nada mas pensar en mamárselas de nuevo –

-- a ellos o … a cualquier otro hombre?—

-- pues … a cualquiera ---

-- ¡¡¡Karina!!! –

-- pues … sí, me da pena reconocerlo, pero es la verdad --

-- bueno, he de confesarles que también a mi me da asco al principio, pero luego como que le agarro el gusto de hacérselo a mi novio –

-- ustedes están locas, ¿cómo se les ocurre meterse “eso” en la boca? –

-- ¿nunca se lo has hecho a tu novio? –

-- nooo, el quiere pero yo no, siempre terminamos peleando por eso –

-- pues te diré que hasta ayer yo pensaba que era algo asqueroso y que tenía mucho que ver con humillar a la mujer, pero ayer me sentí … tan especial que ,,, ahora sé que lo haré con gusto la próxima ves que esté con un hombre --

-- eehhh,.. ¿y … que se siente…? –

-- pues, al principio el sabor es raro y te llega a lastimar la campanilla si te la metes muy adentro y …--

-- noooo, esteee … estaba pensando en otra cosa, quiero decir, ¿Qué sentiste cuando te la metieron por el … este .. el culo?--

-- pues … rico, cuando me empezó a acariciar el culo con las dedos yo traté de apartarme, pero me dio una nalgada muy fuerte, que me dolió mucho pero también me hizo sentir emociones que no se describir, me gustó mucho la sensación de estar siendo obligada, empezó a usar el semen que me salía de la vagina a modo de lubricante, primero fue un dedo, luego dos, me empezó a gustar cuando sus dedos entraban y salían con facilidad y cuando me los sacó yo hasta protesté, fue entonces que me la empezó a meter por el culo, al principio le costó trabajo y a mí me dolió mucho y me quise zafar, me dio mas nalgadas para que me quedara quieta, poco a poco me entró hasta llegar a una especie de tope, después de estar entrando y saliendo como que agarró fuerza y pudo traspasar ese tope, me dolió mucho, pero conforme se fue moviendo empecé a sentir mas y mas rico, llegó un momento en que me perdí, recuerdo que me agarró del cabello y me lo jaló hasta que de estar arrodillada termine sentada encima de él mientras yo misma me ensartaba la verga tan fuerte y tan adentro como podía, sentí tanto placer que me moje toda y casi me desmaye, solo recuerdo que terminé acostada encima de el con la verga todavía adentro.—

-- woooww, y yo que no me querido dejar, jajaja, pero aunque me dices que te gustó yo le tengo miedo a que me duela--.

-- De que te va a doler, te va a doler, pero después es más fácil y más rico–

-- ¿Cómo sabes que es más facil, ¿Qué?, a poco te la metieron por el culo mas de una vez?. –

--Si, en realidad cada uno de los chicos me la metió por donde quiso varias veces.—

-- Entonces siguieron … divirtiéndose en la camioneta …--

-- No, en la camioneta sólo lo hicimos tres veces. –

-- entonces fueron a otro lado –

-- Pues … si –

-- Dudaste, Karina, ¿pasó algo raro? –

-- Si les dijera que me baje varias veces de la camioneta estando desnuda, ¿me creerían? –

-- ¿Cómo es eso, Karina, te atreviste a bajar de la camioneta? –

-- supongo que no había nadie cerca ¡¡¡¿o sí?!!!.

-- Pues … cuando terminé con el primer chico no estaba tan sudorosa pues no fui tan activa y mi orgasmo no fue tan intenso, pero con el segundo chico me moví mas por lo que sudé mucho, además tuve un orgasmo más intenso y me moje –

-- ¿cómo que te mojaste? —

-- yo no tenía idea de que la mujer se moja cuando tiene un orgasmo fuerte, yo creí que me había orinado, pero el olor y consistencia del líquido que te sale es diferente, y a Mario que es el que me … cogió le gustó mucho e incluso lo presumió a sus amigos diciéndoles que había hecho que me “viniera”.—

-- ya había escuchado algo de eso, de “venirse” pero no lo había entendido. –

-- bueno, bueno, pero no entiendo que relación tiene eso de “venirse” con salir desnuda de la camioneta.—

--lo que pasa es que cuando me … “vine” yo estaba debajo de Mario mientras me metía la verga a un ritmo muy fuerte y rápido, con cada metida me iba salpicando de mis flujos, además cuando el también se empezó a “venir” me la sacó y me regó con su líquido desde la vulva hasta la cara y al final me la metió en la boca, por eso quede toda sucia.—

-- pero eso que tiene que ver con salir de la camioneta –

--a eso voy, entramos a una gasolinería para ir al baño, me sentía tan sucia que no me quise poner la ropa, así que me decidí y bajé desnuda para ir al baño, ¡¡hubieran visto el revuelo que hicieron los encargados¡¡, me quería lavar pero no había agua y regresé toda sucia a la camioneta y Jorge me manoseaba pero como que le daba asco, entonces pasamos cerca de unos chicos que lavaban un carro a manguerasos, pedí que me dejaran bajar y a los chicos que me prestaran la manguera, pero no quisieron, sino que “galantemente” se ofrecieron a darme ellos el baño, me metieron mano por todos lados, especialmente en las nalgas y la vulva—

-- jajaja, ya me parece verte, mientras te bañan en plena calle—

-- ¿y como fue la siguiente vez?—

-- Después de que nos subimos a la camioneta me entregué en brazos de Jorge diciéndole que me cogiera como quisiera … --

--¡¡¡Karina!!, ¿tu diciendo esas cosas …?—

-- sé que puede sonar fuerte pero así lo sentí –

-- bueno, bueno, sigue contando—

-- bueno, les decía, Ya estaba entregada y con las piernas abiertas esperando que me la metiera cuando le pedí que me pusiera lubricante pero ya no había, Jorge se enojó mucho pero aceptó esperar a que encontráramos una farmacia, pero cuando encontramos una no se quiso vestir y me aventó su camiseta para que me la pusiera y yo fuera a comprar el gel, así lo hice pero me quedó corta, apenas me tapaba la mitad de las nalgas y por enfrente se me veía todo, para mi fue muy excitante bajarme así para comprar eso, tuve que esperar la luz del semáforo para cruzar la avenida en medio de la gente y luego regresar, apenas podía controlar el temblor de mis piernas mientras escuchaba cómo me silbaban y gritaban de cosas, fue muy emocionante. –

-- ¡¡¡qué bárbara Karina!!!, si no lo estuvieras contando nunca lo hubiera creído de ti –

-- me tienes asombrada … y ya estoy mojando mi tanga,  jajaja –

-- yo también estoy mojada--

--Después de que Jorge me cogió a su gusto volví a quedar toda sudorosa y embarrada de mis fluidos y del semen de él, veníamos por una avenida muy transitada y con mucha gente caminando en las banqueta, cuando a lo lejos vi el letrero de Baños Públicos y entonces me decidí a cumplir una fantasía que siempre había tenido, ¡¡caminar desnuda entre mucha gente!!—

-- ¡¡¡¿en serio lo hiciste?!!! –

-- si, caminé como cuatro cuadras entre la gente hasta llegar a los baños –

-- ¡¡vaya que te desconozco Karina!! –

-- si, si, pero sigue contando –

-- bueno, después de un rato me hablaron por teléfono y me invitaron a comer –

-- supongo que ya te habías puesto la ropa –

-- claro que si, ¿se imaginan?, yo entrando a un restaurante completamente desnuda, jajaja, capaz que me sacan a escobazos, jajaja –

-- oye, y ¿cómo fue que terminaste con este vestido?—

-- saliendo del restaurante empezamos a caminar viendo escaparates hasta que llegamos a una zona donde hay varios locales en donde venden ropa, juguetes y otros artículos  para fantasías de adultos, entre bromas entramos a ver, ahí hay ropa muy pequeña y sugerente, Jorge comentó que era ropa para putas, en fin, estábamos viendo cuando el encargado de uno de los locales nos dijo que me podía probar lo que quisiera sin compromiso, yo me negué pero los chicos se entusiasmaron y me insistieron en que me probara ropa para ellos … --

-- ¿Cómo que ya eran buenos amigos, no? –

-- pues sí, son muy agradables –

-- jajaja, tanto que bien que te cogieron –

-- si, si, sigue contando, ¿Qué hiciste? –

-- terminé probándome todo tipo de disfraces, de sirvienta, de enfermera, de policía, biquinis de fantasía, de látex, y de todos me tomaron fotografías –

-- ¿alguno te gustó en especial? –

-- me gustaron todos, pero los que mas me excitaron fue un traje de vaquerita con sus perneras y un chalequito tan pequeño que no me cubria los pechos pero no incluía tanga y así salí a modelarlo; para entonces ya había varios mirones alrededor del local y chiflaban y gritaban cada ves que salía a modelarlos, no tienen idea de lo rico que se siente, una micro faldita de colegiala que sólo me tapaba la mitad de las nalgas por supuesto sin tanga y un vestido plateadito que no alcanzaba a cubrir mis pechos y tan corto que me llegaba a la mitad de las nalgas … --

-- o sea, más pequeño que el que traes puesto –

-- si –

-- este fue el último que me probé, pero entonces me quedaba más ajustado de los pechos y me cubría mejor, además también me puse un juego de mini tanga y sostén transparentes con medias y liguero muy bonitos también en color rojo y que apenas me cubría lo indispensable, a los chicos les gustó cómo me lucía y lo compraron para mí, no se cómo pero me convencieron de salir con esta ropa del local –

-- vaya, si entonces te pusiste sostén y tanga, ¿Cómo es que los perdiste?. –

-- si, ¿que paso entonces? –

-- la verdad no recuerdo cómo fue que los perdí; pero les sigo contando: pusieron mi ropa en una bolsa y salimos de ahí, seguimos viendo escaparates mientras me chuleaban por lo bien que me veía, ya para entonces me sentía excitada y disfrutaba de estarme luciendo para ellos, pasamos frente a una tienda de zapatos y me hicieron entrar a probarme zapatos; hubieran visto la cara del dependiente cada vez que me ayudaba con los zapatos, lo que mas risa me daba era la forma en que le temblaban las manos, los zapatos que elegí me hacen contonearme más de lo que acostumbro.

Seguimos paseando por el Centro Comercial mientras me seguía luciendo para ellos, de ves en cuando levantaba el vestido para enseñarles la tanguita o me sacaban los pechos del vestido, me abrazaban, me besaban y me manoseaban a cada rato, entramos a un antro y pidieron un reservado, empezamos a beber y entre trago y trago seguí pasando de los brazos de uno a otro, al poco rato ya estaba con los pechos afuera del vestido y sin sostén, después les empecé a mamar la verga uno a uno mientras me empezaban a coger desde atrás, cuando me dí cuenta ya estaba desnuda, y cuando uno de ellos me empezó a dar por el culo, alcancé a ver el vestido tirado en el suelo, apenas recuerdo que salimos del bar pero no sé si me puse el vestido o no ya que ya estaba muy mareada, sé que seguimos nuestra “fiesta” en un hotel, también recuerdo que mientras uno me cogía por la vagina otro me cogía por el culo y que se fueron alternando para cogerme así, ya estaba tan cansada que estaba casi dormida, lo último que recuerdo es que Carlos y Mario se quedaron dormidos en otra cama mientras Jorge seguía dándome por el culo, cuando terminó me la dejó adentro y como me abrazó nos quedamos dormidos.  Cuando desperté estaba sola y lo primero que sentí fue un dolorcillo en la vagina y el culo y ahora también me duelen las piernas y tengo una sensación extraña en el vientre –

-- bueeeeeno, por lo que cuentas no es extraño que te duelan la vagina y el culo, bien que te dieron por ahí, jajaja --

-- y las piernas, a de ser por tenerlas abiertas tanto tiempo, jajaja –-

-- o por lo mucho que cabalgaste, jajaja –

-- como serán, no se burlen de mí—

-- no nos burlamos, pero no es de extrañar que te duela donde ya sabes, jajaja --

--bueeeno síguenos contando, así que esa es la historia del vestido, ¿pero y tu ropa, digo, con la que saliste de tu casa y luego lo que te pusiste con el vestido? –

-- ellos se quedaron con el sostén y la tanga que me quité en el bar, no sé si la blusa y la falda se me perdieron o se quedaron en la camioneta que para el caso es lo mismo y supongo que lo demás se debe haber quedado en el reservado de bar, por más que busque en el cuarto sólo encontré el vestido y mis zapatos, ah y mi bolsa, que por cierto no me falta nada --.

-- ahí sí que tuviste suerte, te pudieron dejar abandonada, sin dinero y hasta sin ropa –

-- si tenías dinero, ¿Por qué no tomaste un taxi? –

-- pues … no se me ocurrió, me sentía muy desorientada, y me dolía la cabeza—

-- y como que luego te gustó andar con tan poca ropa ¿no? –

-- pueees … la verdad … si, cuando estaba en el hotel busqué la manera de que me cubriera más, pero evidentemente no lo logré y cuando me avisaron que se había vencido la habitación me sentí aterrada, pero conforme fui caminando en la calle fui sintiendo un cálido hormigueo en todo el cuerpo, al empezar a llamar la atención me empezaron a chiflar y a gritar de cosas, el hormigueo fue aumentando y se convirtió en sensaciones placenteras que recorrían mi cuerpo y me empecé a sentir más y mas enardecida, lo que sentía me empezó a gustar más y más y aunque después tuve la oportunidad de comprar algo que me cubriera más ya estaba envuelta en las sensaciones y decidí seguir usando este vestido para así seguir mostrando mi cuerpo casi desnudo –

-- vaya que me asombras Karina, tanto tiempo que llevo de conocerte y siempre pensé que te pasabas de recatada –

-- yo pienso lo mismo, ahora resulta que hay una … exhibicionista dentro de ti, por decir lo menos …--

-- Por más que lo pienso no entiendo cómo es que mis barreras morales cayeron tan fácilmente, eso si realmente existieron esas barreras o es que dentro de mí siempre ha existido una puta y nunca lo quise reconocer –

-- no entiendo porqué dices eso –

-- nunca se los dije pero desde hace mucho tiempo he fantaseado con usar ropa muy sugerente e incluso andar desnuda en la calle y en lo que se sentiría tener sexo con varios chicos a la vez, por eso empecé a leer relatos eróticos y ver videos porno, el vestirme tan recatadamente era mi forma de alejar esas ideas de mí, ahora pienso que por eso cedí tan fácilmente a los deseos de los chicos de ayer—

-- Oye Karina, este … ya que estamos hablando de deseos y … como se presta la situación … me gustaría pedirte algo –

-- ¿Qué es? –

-- esteeee… , ayyy, no sé , me da pena pedirlo, pero es queee ... siempre he tenido ganas de ver … tus pechos al desnudo –

-- ¡¡Sofía!!, ¿tu también?, digo ¿cómo se te ocurre? –

-- ¿qué les puedo decir?, siempre he deseado tener unos pechos como los de Karina, ¡a su lado me siento una tabla! –

-- Ay Sofía, pero tu eres muy delgadita, tus pechos son acordes a tu cuerpo y te ves muy bién –

-- La verdad, no te verías bien con unos pechos del tamaño de los míos, más bien te verías rara y hasta exagerada --

-- Lo sé chicas, pero siempre he admirado el cuerpo de Karina y … bueno, ahora tengo la oportunidad de verla … --

-- bueno, bueno, no discutan, por mi no hay inconveniente, digo he estado enseñando los pechos todo el día …

Karina miro en su rededor y luego descubrió lentamente sus pechos proyectándolos al frente mientras le decía a sus amigas –pueden tocarlos—

Sofía dudó al principio, pero luego de mirar a su rededor estiró sus manos para empezar a acariciar suavemente los pechos de Karina, quien emitió un suave gemido de placer, lo que la animó a ser mas atrevida y apoderarse de los pezones para darles un apretón que hizo que Karina gimiera fuerte .

--perdón, ¿te dolió? –

-- No, no me dolió, sentí muy rico ese apretón que me diste … --

-- esteee …, ¿también te puedo tocar? –

-- pueees … si … Lety, adelante –

-- dime la verdad Karina, ¿son naturales o te operaste en secreto? –

-- ¡Ay noo…!, ¿cómo crees eso …? Son naturalitas y a decir verdad siempre he sentido vergüenza de su tamaño–

-- yo sólo pregunto, siempre he tenido esa curiosidad –

-- a decir verdad yo también he pensado lo mismo, son tan grandes y bonitos --

Por unos momentos Karina disfrutó de las caricias de sus amigas, hasta que notaron que una mesera se acercaba a ellas, por lo que Karina se cubrió los pechos discretamente, en cuanto se retiró siguieron platicando.

-- que curioso, sabía que eres de pechos grandes pero ahora que los veo me perecen más … voluminosos –

-- a de ser por el tipo se blusa tan holgada que usas --

-- son muy bonitos y firmes tus pechos, resaltan mucho tus aureolas y tus pezones –

-- si, aunque tengo la impresión que hoy están mas obscuros y duros que otros días –

-- ¡Ayyy Karina!, me llama mucho la atención tantos moretones que tienes por todo el cuerpo –

-- sssii…, esteee … es que … se dieron vuelo chupándome y mordiéndome mientras teníamos sexo –

-- esteee … ya que mencionas sexo, esteee … ¿me dejas ver el tuyo? –

-- ¿qué pasó Lety, ahora eres tú la curiosa? –

-- si, lo que pasa es que yo nunca he visto el sexo de otra mujer y ya que Karina lo trae casi a la vista … pues …--

-- okey, okey, por mi no hay problema –

Karina volteó a su rededor y acercó su cadera al borde de la silla para luego levantar el borde del vestido mientras separaba sus piernas y se recostaba sobre el respaldo, -- puedes mirar y tocar –

Lety se acercó lentamente y fue acercando su mano hasta que empezó a tocar los húmedos labios del sexo de Karina.

-- estas mojada –

-- si, por una u otra razón todo el día he estado mojada –

-- ¿tus labios son así de gruesos o están hinchados? –

-- están hinchados, me mordieron y chuparon mucho –

-- o los usaron mucho, jajaja –

-- ayyy Sofía ¿cómo eres?, pero sí, me los usaron mucho, jajajaja –

-- tu olor es fuerte, ¿siempre hueles así? –

-- no, cuando desperté noté ese olor y aunque me lavé no se me ha quitado, pero a decir verdad me gusta, me excita –

-- mira, te sale un flujo blanco, ¿qué será? –

Después de llevar sus dedos a su vulva y olerlos y chuparlos les respondió … -- esteee … creo que es semen –

-- ¿semen?, ¿todavía?, creí que te habías lavado antes de salir del hotel –

-- lo hice … pero … ay …, no se cómo … decirlo –

-- pues como es, cuéntanos, ¿Qué pasó?—

-- es que cuando venía en el tren ligero alguien meee … cogió desde atrás –

-- ¿cómo desde atrás? –

-- alguien se dio cuenta que no traía calzones y entre tanta gente me abrazó por la espalda y me empezó a manosear, sentí muy rico,  cuando separé las piernas y me incliné un poco hacia delante me metió la verga, al principio traté de no moverme y quedarme callada pero terminé agachada, con los pechos y las nalgas de fuera y gritando como una loca mientras me metía la verga enfrente de todos, cuando terminó simplemente se alejó de mi mientras los demás se reían de mí o me insultaban por ser tan puta –

-- ¿y que hiciste?—

-- ¿te gustó?

-- lo único que podía hacer, cubrirme y cuando llegamos a la Terminal buscar un baño para lavarme nuevamente  y sí, me gustó, me gustó mucho la sensación de vergüenza, el saber que me cogían enfrente de otros me excitó mucho y tuve un delicioso orgasmo—

-- ayy Karina, cada vez me sorprendes más –

-- si, a mi también—

-- ahora que se los cuento yo también me siento sorprendida y como ya les dije, no se en que momento empezaron a caer mis barreras morales, si ayer o desde antes de intentar tener relaciones con mi primer y único novio –

-- ¿intentar?—

-- apenas tenía 16 años cuando me empecé a interesar en el sexo, sentía mucha curiosidad y cuando se apareció Rodrigo lo acepté como novio aunque la verdad no me gustaba, pronto nos dejamos llevar por las caricias y terminamos en la cama, por el nerviosismo de ambos fue un desastre, me dolió mucho y en cuanto vio la sangre se espantó y se fue dejándome sola, después ya no me quiso hablar, decepcionada ya no quise tener mas novios –

-- esteee … una pregunta ¿con cuantos chicos has estado? –

-- esteee, no entiendo tu pregunta –

-- Ay Karina, que con cuantos hombres has tenido sexo --

-- pues si cuento a mi primer novio …, con… cinco –

-- entonces, hasta el día de ayer, eras prácticamente virgen –

-- si, así lo dijo Mario antes de carcajearse, no sé si burlándose de mí o gozando de la situación, estuve a punto de echarme a correr pero sentía tan rico el manoseo que no tuve fuerzas … --

--¡No me había dado cuenta de la hora!, casi son las diez, si nos apuramos tal vez alcancemos a comprar algo de ropa –

-- ¿ropa?, ¿para qué? –

-- ¿cómo que para qué Karina?, ¿pues para que te cambies! –

-- la verdad no le veo caso, ¡todo el día me la he pasado con este vestido! Un rato más y llego a mi casa … --

-- ¿Cómo crees que te vamos a dejar ir “vestida” así? –

-- Sofía tiene razón, no te podemos dejar ir así –

-- en serio, no tiene caso, además como ya les dije, de haberme querido cambiar lo hubiera hecho desde temprano, me gustó estar así y a decir verdad, quiero terminar el día con este vestido, además es algo que nunca volveré a hacer –

-- nooo, no te puedes seguir con esa ropa y menos a esta hora –

-- ¿por qué no Lety?, además ¿Qué podría pasarme?, ¿Qué me violen?, jajaja, --

-- si que estás loca, ¡claro que te puede suceder algo!, ya es muy tarde y llamas mucho la atención –

-- miren, por mi no se preocupen, ya saben que estoy acostumbrada a estar hasta tarde en la calle, se cuidarme, de veras –

-- ¡andando decentemente vestida, no semidesnuda! –

-- semidesnuda o no, es mi decisión, de veras, no se preocupen --

--bueno, tu ganas, ¡pero eso sí!, nosotras te llevamos a tu casa –

-- no es necesario, créanme, además vivimos en polos opuestos de la ciudad y el camino sería muy largo para ustedes –

-- bueno Karina, ¿Qué pasa contigo?, a todo dices que no –

-- bueno hoy dice que no, pero ayer dijo que si a todo, jajajaja—

-- ¡Sofía!, no es para reirse! –

-- ya ya no se enojen, mejor paguemos la cuenta y salgamos de aquí --

Cuando Karina abrió su bolsa para pagar su parte no se dio cuenta que la tarjeta que le dejaron los chicos cayó al piso, después se ausentó para ir al baño, Sofía vio la tarjeta y la recogió, al leerla quedó asombrada y se la mostró a Leticia mientras le decía:

-- no puedo creer esto –-

-- ¿cómo puede ser? – al tiempo que cubría su boca con la mano

-- ¡esto quiere decir que todo lo que nos platicó lo hizo por dinero! –

-- ¡Karina se ha convertido en una puta! –

-- en serio que sí, por eso prefiere andar enseñando las nalgas a ponerse otra cosa –

-- ¡y ella misma a reconocido que le gusta ¡ --

-- ¿y ahora que hacemos? –

-- nada, dejar que ella se sincere con nosotras –

-- ¿y si no lo hace? –

-- ya llegará la ocasión, ahí viene, no le digas nada – mientras guardaba la tarjeta en su bolsa.

Mientras caminaba hacia el baño Karina se preguntaba a sí misma si en verdad sería la única vez que se vestiría así, pues a su pesar y con cierto asombro admitía que nunca se había sentido tan excitada, tan deseada, y que realmente había disfrutado mucho al exhibirse como lo estaba haciendo, todo el día había sentido cómo su cuerpo hormigueaba por la excitación, disfrutaba de la sensibilidad de su vulva y sus pechos, se sentía húmeda, mientras se arreglaba ante el espejo observo la forma en que se marcaban sus pezones a través del vestido, no resistió la tentación y los sacó por el escote y mientras se veía a si misma de un modo diferente al de siempre apretó sus pezones enviando oleadas de placer por su cuerpo, luego se levantó ligeramente el vestido para ver su sexo, acarició sus labios y su clítoris notándolos hinchados y disfrutando de su sensibilidad, ya estaba cerca del orgasmo cuando escuchó que se abría la puerta y se ocultó rápidamente en un gabinete mientras sentía una sensación de insatisfacción, nerviosa se terminó de arreglar y salió.

Notaron que Karina había tratado de acomodarse la ropa pero seguía enseñando demasiado, también se había maquillado de una forma muy llamativa, muy diferente al maquillaje discreto que solía usar, sus carnosos labios llamaban mucho la atención, sus amigas sólo intercambiaron una significativa mirada, notaron que traía un sobre en la mano que les extendió cuando llegó junto a ellas.

-- ¿me podrían guardar este sobre?, no quisiera llevármelo en la bolsa a ésta hora, por favor me lo dan el lunes—

-- ¿Qué es? –

-- Esteee, es dinero, iba a pagar unas cuentas y comprar algunas cosas que necesito--

-- Haber ¿cuánto es? – Sofía estiró la mano y sacó el dinero antes de que Karina pudiera reaccionar-

-- ¡Karina! Son mas de diez mil pesos, ¿cómo se te ocurre traer tanto dinero?, tuviste suerte de que tus … amigos no te lo robaran. –

--pueees … si, lo sé, pero no tenía idea de que haría … nuevos amigos –

-- ni de lo que harías con ellos --.

Cuando Karina se dio la vuelta, sus dos amigas intercambiaron miradas mientras veían el sobre.

Salieron del café, la Plaza Comercial estaba casi vacía y al menos en apariencia nadie notó la escasa vestimenta de Karina, al llegar a la calle les preguntó:

-- ¿Dónde dejaron el coche?—

-- En estacionamiento que está a dos cuadras de aquí –

Caminaron en silencio, aunque había poca gente no faltaron los chiflidos y piropos soeces dedicados a Karina que gozaba al escucharlos quién sin darse cuenta contoneaba sus caderas, cuando llegaron pidieron que les entregaran el carro, los acomodadores del lugar no quitaron la vista de Karina, quien sintió cómo su insatisfecho cuerpo reaccionaba ante las miradas de lujuria, cuando les entregaron el carro le preguntaron que cómo pensaba irse e insistieron en llevarla.

-- no se apuren, ya les dije que me voy sola, miren allá enfrente hay un sitio de taxis, ya los he usado en otras ocasiones –

-- ¿estas segura?—

-- Si, las veo mañana –

Se despidió dándoles un beso en la mejilla y empezó a caminar hacia los taxis, pero tenía que llegar a la esquina para poder cruzar la calle, por ir disfrutando las reacciones de su cuerpo no noto que un hombre estaba parado junto a un árbol y hasta que llegó junto a el se dio cuenta de que estaba con la verga de fuera mientras orinaba, por la sorpresa no supo que hacer y deteniéndose se quedó viéndole la verga, el hombre al darse cuenta se la mostró con descaro y la preguntó …

-- te gusta la verga ¿verdad? –

-- ¿ehhh? … , este … no – mientras trataba de alejarse

El hombre la detuvo de la cintura al tiempo que le decía

-- ¿a donde vas preciosa?, si bien que vi que te gustó mi verga –

-- Eeestás equivocado – mientras trataba de alejarse

-- No te hagas, con este vestido lo único que puedes hacer en la calle es buscar cliente – al tiempo que empezaba a acariciar sus pechos

-- No te hagas del rogar y dime ¿Cuánto cobras? –

Esas palabras hicieron que el cuerpo de Karina se estremeciera de placer, pero siguió tratando de alejarse

-- no, suéltame, me siento muy cansada –

-- no te hagas, cuando menos dame una mamada, ¿Cuánto por una mamada? – al tiempo que ponía la mano de ella sobre su verga, ella sin más empezó a acariciarla -- vamos, se ve que te gusta la verga –

Karina se sentía cada ves mas excitada y mientras acariciaba la verga que tenía en la mano sentía que se le hacía agua la boca, finalmente le dijo -- quinientos pesos –

-- ¿no se te hace muy caro? –

-- Eres tu el que quiere la mamada –

-- Mmm, te doy trecientos pesos –

Karina asintió con la cabeza y después de recibir el dinero le preguntó:

-- ¿a donde podemos ir? –

-- Aquí mismo, putita, ponte de rodillas y empieza a mamármela –

-- No, aquí no, nos pueden ver –

-- A poco te importa que te vean, si vienes casi encuerada –

-- Vayamos a otro lado o no te doy tu mamada—

-- Esta bién, aquí a la vuelta hay un lugar oscurito – empezó a caminar al tiempo que metía la mano bajo el vestido y le acariciaba el culo.

Mientras caminaban, Karina sentía cómo se encharcaba su vagina y no podía evitar que se le hiciera agua la boca con sólo pensar en el momento de tener la boca llena de verga.

El lugar oscurito estaba entre dos puestos metálicos al lado de un camión grande, aunque todavía pasaba gente a Karina ya no le importó y poniéndose de rodillas empezó a mamar con ansia la verga mientras trataba de ver a los ojos del hombre, pronto notó las contracciones que anteceden a la eyaculación y cuando el hombre se empezó a correr entre gemidos de placer ella chupó con mas ansiedad tratando de evitar que el semen escapara de su boca, lo saboreó y luego se lo tragó.

El hombre quedó recargado en uno de los puestos mientras le decía – mamas muy rico putita –

-- gracias, que bueno que te gustó – alejándose del lugar sintiéndose satisfecha de lo que acababa de hacer..

Pronto se dio cuenta de que había tomado el camino equivocado, al ver una avenida con tránsito caminó hacia ella, en cuanto se orientó caminó hacia la estación del metro, el suave contoneo de sus caderas y lo corto del vestido llamó la atención de los que pasaban en su auto cerca de ella haciendo sonar la bocina, pronto alguien se detuvo junto a ella y sin más le pregunto: -- ¿Cuánto? --, Karina sorprendida, no entendió la pregunta y acercándose al auto respondió:

-- ¿perdón? –

-- ¿Qué cuanto cobras? –

-- Esteee …, ya me voy –

-- no te estoy preguntando si ya te vas, te pregunto que cuanto cobras por coger –

Desconcertada al principio, pero sintiéndose excitada respondió después de pensarlo un momento …

-- dos mil pesos –

-- ¿Por qué tanto preciosa? –

-- Esteee … ese es mi precio –

-- ¿y los vales?, haber enséñame las chiches –

Karina volteó a su rededor antes de sacar sus pechos del vestido y ofrecerlos a la vista del hombre, -- ¿te gustan? --, el hombre puso cara de satisfacción al tiempo que la decía:

-- ahora enséñame las nalgas --, Karina se dio la vuelta, separó un poco sus piernas y se inclinó al tiempo que levantó el vestido, luego separándose las nalgas con las manos le preguntó al hombre: -- ¿están buenas mis nalgas? –

-- si preciosa, estas muy buena, ¡súbete! --.

Karina dudó por un momento y luego de voltear en rededor abrió la puerta y subió al auto; después de iniciar la marcha el hombre empezó a acariciarle los muslos para luego llegar a su vulva, después de acariciar por unos momentos su vulva le pregunto:

-- ¡por qué no traes calzones? –

-- ¿para qué?, de todos modos me los van a quitar, además ustedes se aceleran en cuanto se dan cuenta que no los traigo y a mi me encanta andar sin ellos y que los demás se den cuenta, mmm … que rico sentir las caricias de un hombre en mi sexo – en su interior Karina se sintió asombrada de sus palabras y pensó para sí – en verdad me está gustando esto de ser una puta –

-- eres una chica muy bonita, ¿por qué andas de puta? –

-- pueees … porque me gusta y … de paso obtengo dinero para algunos gastos que tengo –

-- así que te gusta ser puta, mm está bién, ¿y tienes mucho tiempo en esto? –

-- eeeh ,,, no, esteee … apenas me estoy iniciando –

-- okey, veamos que tal coges --

-- ¿a dónde vamos? –

-- busco una calle aislada para estacionarme –

-- ¿lo vamos a hacer en la calle? –

-- si, a mi me gusta la emoción de saber que nos pueden ver –

-- mmm a mi también me excitan ese tipo de cosas --

Karina estiró la mano y empezó a acariciar el bulto que ya asomaba en la entrepierna del hombre para luego empezar a soltar el cinturón y abrir el pantalón …

-- has el asiento para atrás --, en cuanto lo hizo Karina se quitó el vestido quedando completamente desnuda ante el sorprendido y excitado hombre, terminó de sacar la verga y arrodillándose sobre el asiento empezó a mamarle la verga

El hombre ya no se preocupó por encontrar un lugar aislado y se estacionó en donde pudo pues el placer y el morbo que sentía casi le hacía perder el control del coche; en cuanto pudo con una mano empezó a estrujarle los pechos mientras la otra la estiraba para acariciarle las nalgas, separó a Karina y reclinando el asiento hizo que se recostara boca arriba, puso las piernas de la hembra sobre sus hombros y luego se la empezó a coger con entusiasmo, Karina gimió y gritó de dolor y placer animándolo a darle mas duro mientras apretaba con fuerza sus músculos vaginales, el hombre no tardo en correrse por primera ves, después de bombear unas veces más se retiró y se recostó resoplando por el esfuerzo.

Karina todavía quería mas y nuevamente empezó a mamarle la verga con frenesí, haciendo que poco a poco recuperara la erección, para luego ella ponerse a horcajas sobre el hombre y ensartarse con ansia la verga, el hombre sorprendido solo acertaba a gemir de placer mientras estrujaba y mordía los pechos de Karina y ponía las manos en las nalgas de ella para ayudarla a ensartarse con fuerza en su verga; nuevamente llegaron al climax entre gritos y gemidos de placer, Karina se vino abundantemente sobre el hombre, luego lentamente se separó para recostarse en el asiento mientras resoplaban por el esfuerzo; afuera se escucharon gritos y aplausos de  mirones que presenciaron lo ocurrido.

-- ¡qué bárbara, me acabas de dar la mejor cogida de mi vida ¡ --

-- ¿te gustó? –

-- ¡me encantó preciosa, coges bien rico ¡, en serio que te ganaste tu dinero, ¿Dónde y a que hora te puedo encontrar otro día? –

-- eeeeste … no tengo horario –

-- entonces dame tu teléfono y yo me comunico contigo –

-- mmm esteee … no  tengo --

-- ¿qué, tu no tienes celular? –

-- eerr … no esteee … se me perdió –

-- de acuerdo, este es mi número,  llámame mañana, tal vez te pueda conectar con alguien–

-- ¿conectarme?, ¿con quién? –

-- tú llámame, te conviene --

Guardó la tarjeta en su bolsa, y sacó pañuelos desechables para limpiar su vulva y luego para sorpresa del hombre y de los mirones abrió la puerta y después de enviarle en beso volado le dijo – adios – y salío del coche con el vestido en la mano y empezó a caminar mientras sonreía por su atrevimiento, disfrutando de los chiflidos y gritos obcenos que le dedicaron llegó hasta el metro, el sorprendido vigilante le indicó que no podía entrar desnuda por lo que simplemente se puso el vestido, el vigilante le permitió el paso mientras contemplaba con deseo a la hembrita semidesnuda y le decía que se apurara porque estaba por terminar el servicio del metro.

Karina corrió para alcanzar el tren y subió al vagón semivacío, sentándose sin preocuparse en cubrir la desnudez de su sexo, cuando llegó a su destino salió de la estación buscando abordar un transporte que la acercara a su casa; tuvo suerte y subió a un camión que ya no tenía lugares libres, por lo que se fue de pié, a la vista de todos; pese a su cansancio seguía disfrutando de saberse  observada con deseo; cuando llegó a su parada bajó y caminó lentamente hacia su casa; entro al edificio sin darse cuenta que alguien la observaba con sorpresa y deleite, entró a su departamento y fue directamente a su recámara y no supo en que momento se quedó profundamente dormida.