El despegue
Uno y una para todos y todos para una.
EL DESPEGUE.
Saludos a todos/as los lectores/as de esta sección. Comienzo presentándome me llamo José y tengo 32 años. No soy muy alto (1.75m.) pero debido a circunstancias personales debo de cuidarme mucho y tengo un gran físico. Llevo visitando esta web desde hace varios años pero nunca me he decidido a escribir, cosa que voy a remediar a partir de ahora si consigo excitaros con mi relato. Mi mujer se llama Tania, es morena, tiene 30 años, mide 1.69m., siempre ha sido bastante delgada y tiene un cuerpo de impresión, sobre todo tiene un culo de órdago, las tetas son pequeñas pero tiene unos pezones muy salidos cuando se excita, de esos que te dan ganas de chupárselos continuamente. Siempre hemos estado muy bien compenetrados en el tema del sexo; llevamos muchos años juntos, por lo que cuando la conocí ella no había tenido relaciones sexuales, lo más que había hecho era darse algunos morreos con sus anteriores novios pero nada más que eso. Yo también era virgen cuando la conocí pero sí que había tenido otro tipo de relaciones antes de conocerla.
Supongo que como todas las parejas hemos ido decreciendo el número de veces que follamos al mes, pero éstas cada vez se han vuelto más morbosas y con un nivel erótico mayor. Varias etapas hemos pasado, desde follar en la intimidad, el exhibicionismo, hasta llegar a hacerlo sabiendo que alguien nos mira. Esta es en la etapa en la que se había quedado Tania. La verdad es que yo por unas circunstancias y otras soy una persona muy activa sexualmente y no paro de imaginar formas y situaciones nuevas para disfrutar. En la etapa que yo me había quedado es en la que te apetece experimentar con otras personas pero ella ya de antemano se había cerrado en banda y no había manera de que transigiera, lo más que había conseguido era contarle mis fantasías y cuando follábamos me seguía la corriente. Había veces que la fantasía la proponía ella y me dejaba perdido porque la planteaba como si realmente quisiera realizar un trío o una orgía con uno o varios chicos. Decía que le daba asco hacerlo o imaginarse haciéndolo con otra chica. Esto hizo girar mi vida sexual ya que las fantasías que pudiera tener eran sólo relacionadas con tríos, orgías con hombres para ella.
A partir de aquí, le ponía películas de orgías, de dobles o triples penetraciones, , y descubrí que le encanta ver a hombres teniendo relaciones entre sí, por lo que en nuestras fantasías incluíamos relaciones bisexuales de hombres con hombres y con mujeres. Yo no soy gay, ni bisexual pero cuando estás en situación parece que todo te gusta. Tanto es así que otra de sus fantasías era darme por el culo, por lo que le compré un doble consolador con el que lo pasamos de miedo.
Un día, al llamarla al trabajo, me dice que tiene una sorpresa de las que a mí me gustan y que me la iba a enseñar cuando llegara a casa. Al llegar me recibió sólo con el sujetador puesto y con el coño prácticamente depilado. Tan caliente me puso que no tuve otra opción que hacerla una comida de coño brutal, cosa que me encanta, sobre todo cuando consigo que se ponga tan cachonda como para que sea ella la que lleve la iniciativa y la que empiece a inventarse una fantasía mientras follamos. Después de estar un rato degustando tan delicioso manjar terminó cachonda perdida y me tiró al suelo para follarme en la postura que a ella más le gusta (ella arriba y yo abajo). Empezó a ponerme cachondo perdido inventándose una fantasía en la que quería follar con otros hombres
A que te gustaría ver como me follo a otros tíos.
Pues ya sabes tú que sí, le respondí.
A quién, me preguntó.
Quiero que te folles a los 4 charcuteros (trabajan en el mismo centro comercial que ella, en una charcutería que hay al lado del almacén donde Tania y sus compañeras se cambian de ropa, y tontean de vez en cuando con ellas).
Y cómo te gustaría me los tirara.
En una de las veces que vas al almacén pide ayuda a Agustín (es el que mejor se lleva con ella) para mover alguna caja pesada y haz que te caes para que se preocupe por ti. Cuando lo hayas hecho busca alguna excusa para que enseñarle las bragas o el sujetador.
Sigue , me estás poniendo muy cachonda.
Cuando veas que se fija en lo que le estás enseñando aprovecha para dejarle bien claro que quieres follar, tócale la polla y dile que llame a sus compañeros para que te llenen de rabo. Cuando vengan tira al suelo a Pedro (chico joven, alto y fuerte con una polla que calculamos sería de 20cms) para follártele y aprovecha la postura para que Agustín (de unos 35 años, bajo y delgado con una polla que calculamos pequeña y fina) para que te la meta por el culo. A la vez intenta tener contento a Santiago ( de uno 45 años, bajo y gordo pero calculamos tendría la polla mas gruesa y sabría trabajar mejor a Tania) y a Carlos (jovencito, poquita cosa e inexperto con una polla media) chupándoles el rabo alternativamente.
Tania estaba ya muy cachonda, creo que porque en esta fantasía estábamos poniendo por primera vez nombres y caras a los personajes a los que se estaba follando. Creo también que ella debe de tener cierta atracción hacia alguno de ellos o hacia todos ya que en cuestión de muy poco tiempo de estar follando y de meterla en el culo un par de dedos para hacer más semejante la situación empezó a correrse.
No los deseo -me decía-, pero me estoy corriendo continuamente, ahhhhhhh, no paro de correrme, ahhhhhhhhhh. Cuéntame más, José, donde se corren
Pues Pedro en tu coño, llenándote de semen para que después le entre mejor a Santiago, Agustín en tu culo, Carlos, por ser inexperto, en tu boca obligándote a comer gran parte de la lefa, y Santiago en tu coño también dejándotelo muy abierto y chorreando de leche.
Ahhhhh, no puedo parar de correrme.
¿A quién le vas a regalar las bragas como recuerdo?, le pregunté.
A ti, te las voy a traer empapaditas de semen de los charcuteros para que te hagas una paja mientras te cuento como se las he chupado y como me los he follado.
No pude aguantar más y me corrí en su coño, que para aquel entonces lo tenía muy lubricado debido a las abundantes veces que se había corrido. Después nos levantamos, aseamos y vestimos sin comentar nada de lo ocurrido, pero a mí en los días siguientes me hizo reflexionar que quizás hay que dárselo hecho con alguien conocido para que dé el siguiente paso.
Se me ocurrió ir un día a la piscina, en concreto a una piscina municipal que posee un apartado nudista con la intención de que le picara la curiosidad y así fue. Para la ocasión ella llevaba un biquini rojo muy ajustado que le levantaba el pecho, haciéndole un canalillo muy atractivo, con una braga muy pequeña que con el movimiento se le metía por el culo y le hacía marcar descaradamente la raja del chocho, ya que como he mencionado antes lo llevaba prácticamente depilado. Según íbamos avanzando en la piscina se nos quedaban mirando tanto los chicos como las chicas, ya que yo llevaba un bañador tipo nadador que me queda bastante bien. Nosotros nos fijábamos también en que en la zona normal de la piscina había mucha gente que estaba en tanga, en top-less, vamos que también había mucha gente ligerita de ropa. Al ver a una pareja (él de unos 50 años y ella de unos 35) ambos en tanga, Tania dijo:
Hoy creo que me lo voy a pasar bien.
No sé con qué intención lo dijo, o porque el hombre tenía un aspecto ridículo o porque le podía ver todo prácticamente ya que la polla se le intuía. El caso es que sabía que con el biquini rojo llamaba la atención y me hizo dar una vuelta a toda la piscina con el pretexto de encontrar el lugar adecuado. Cuando le dije que en esta piscina había un espacio para los nudistas me dijo que fuéramos a indagar, y al preguntar que qué es lo que quería ver me dijo que nunca había ido a una playa nudista y que le daba morbo. Fuimos a ver donde estaba pero lo tenían cerrado con unas vallas tipo de caña. No se podía ver nada desde fuera y al preguntarle que si pasábamos me contestó que sólo quería actuar de voyeur. Seguí picándola diciéndole que me la imaginaba tumbada tomando el sol en pelotas con el coño depilado como lo llevaba rodeada de mirones también desnudos con la polla dura alrededor de ella. Le dije que sólo con pensarlo se me estaba poniendo dura, y era verdad me tuve que poner boca abajo para que no se me saliera la picha del bañador. Le dije que si eso lo hubiera visto de verdad me podría correr con sólo mirarlo. Ella se empezó a reír pero la muy cabrona ya no me seguía la corriente porque sabía que lo decía de verdad, en numerosas ocasiones me preguntó por si yo sería capaz de dejar que otros se la cepillaran y sin la calentura de estar follando le dije que sí, incluso le confesé que tuve un par de sueños eróticos en los que ella se tiraba a dos hombres en presencia mía mientras me masturbaba disfrutando de la escena y que me había gustado la experiencia. Continué con mi ataque diciéndola que el siguiente día que fuéramos a esa piscina entraría yo por lo menos para ver que se sentía estando desnudo delante de los demás y para ver el percal. Ella al ser un poco celosa me dijo que ya podía tardar poco porque sino entraría a buscarme, a lo que me eché a reír.
Eso fue lo que hice, la siguiente vez fui sólo aprovechando que ella trabajaba todo el día. Fue una sensación extraña pero placentera el estar desnudo delante de otras mujeres, ya que la sensación de estar desnudo delante de otros hombres ya la conocía por el gimnasio y no era algo que me entusiasmara. Por la tarde, al ir a recogerla, le conté lo sucedido y no le sentó nada bien, me dijo que el siguiente día entraríamos cada uno por nuestro lado. A mí me vino mejor porque sino no hubiera podido entrar debido a la excitación.
Primero entré yo. Me situé en la zona más alejada de la puerta, entre varios hombres y alguna mujer, para que tuviera que exhibirse ante todos. Por un momento pensé que no se iba a atrever ya que tardaba mucho, pero pasados unos 10 minutos allí estaba ella; desnuda por completo con el coño prácticamente depilado, su pelo largo moreno suelto, andando con esa picardía que tienen las mujeres cuando quieren provocar al personal. Las tetas le bailaban a cada paso que daba y tenía los pezones erectos debido a la excitación. La muy zorra se puso en una zona rodeada de machos donde yo podía ver todo lo que hacía. Empezó tendiendo su toalla asegurando mantener el culo y el coño a la vista de ellos para provocarles lo suficiente. Al tumbarse tanto boca arriba como boca abajo se dedicaba a abrir lo suficientemente las piernas para que se le vieran sus dos maravillosos agujeros. Estaba muy cachonda, se le veían los labios del coño brillantes y eso sólo quería decir que estaba caldosa. Aun así yo sabia que ella sólo quería calentar algunas pollas, aunque no sabía hasta qué extremo. Se dedicó a darse crema pero como no llegaba a ciertos sitios de su cuerpo pidió ayuda a un hombretón que estaba a su lado. La guarra eligió bien, éste era alto, moreno, corpulento, llevaba el torso depilado como yo y mostraba en ese momento una pequeña erección. Según le iba repartiendo la crema y al llegar al culo la erección era completa, la tenía más grande que la mía, le debía de medir los 20 cm seguro. Tania se dio cuenta y sonriendo se la agarró con la mano derecha moviéndola como cuando estrechas la mano a alguien que conoces. Al contemplar como Tania tocaba por primera vez otra polla que no fuera la mía me tuve que dar la vuelta porque estaba a punto de correrme.
Salió airosa del primer envite porque ambos ya más relajados se dedicaron a hablar hasta que vino un amigo de César, que es como se llamaba el primer amigo. Este segundo se llamaba Villa, era rubio con el pelo lacio y largo, cara aniñada con un cuerpo atlético y un rabo más largo que César pero menos grueso. Siguieron hablando y cada cierto tiempo Tania tenía que volver a echarse crema protectora, a lo que los nuevos amigos la ayudaban, la repartían crema por todas las partes del cuerpo, incluido el coño. Supe en ese momento que Tania estaba fuera de sí y que todo podía pasar porque ella cuando se pone es una bomba de relojería. No paraba de mirarles el rabo y aprovechó también para dales crema a ellos en pollas, culos,
En cierto momento se giraron mirándome, parece ser que les contó que yo era su marido y que por darme celos entro en este recinto, les contó la fantasía que yo tenía y que con lo caliente que estaba lo iba a llevar a la práctica con ellos si no les importaba. Se levantaron y se dirigieron hacia mí. Tania me los presentó y me dijo al oído:
¿Quieres que haga realidad tu fantasía y me tire a estos tíos buenos?.
Sííííííííííííí, le respondí.
Si lo hago hoy, ¿me dejarás que haga realidad también una fantasía que yo tengo?.
¿Cuál es?.
Estos dos amigos a parte de estar muy buenos como puedes ver, son bisexuales y les gustas.
A buen entendedor pocas palabras bastan, esa noche terminaría con el culo un poco escocido. Quedamos a las 11 para cenar en un restaurante cercano a nuestra casa, no sin antes despedirse de Tania con un morreo con lengua en toda regla. Se puso su vestido y salimos de la piscina parra coger el coche y dirigirnos a casa a prepararnos. En el trayecto le toque el chocho y descubrí que lo tenía completamente encharcado de flujos vaginales.
Nos duchamos y nos dispusimos a vestirnos para acudir a la cita. Tania se puso muy agresiva, un vestido blanco largo que la queda muy bien, el defecto o la virtud de este vestido es que se transparenta lo que lleva debajo siempre que no sea color carne. Se puso un tanga blanco de encaje que me encanta y no se puso sujetador, por lo que se le transparentaban y marcaban los pezones y el tanga tan agresivo que llevaba. Estaba realmente sexy.
Al llegar, ya nos estaban esperando dentro tomando una copa, y cuando la vieron se les caía la baba al igual que a los 2 camareros que nos habían dejado pasar y nos acompañaron a la mesa respectivamente. La cena transcurría un poco sosa y los temas se habían desviado del tema sexual. Bebimos bastante y acabamos bastante tarde. La última o la penúltima copa decidimos tomarla en casa como estaba dispuesto. Les pedimos que se comportaran como amigos hasta entrar en nuestra casa para preservar un poco nuestra intimidad de cara a los vecinos. Al llegar a casa nos lo tomamos con un poco de tranquilidad. Después de la primera copa, fue cuando empezó la sesión. Tania me pidió que pusiera una película bisexual que le compré a la par que el doble consolador. Parecía interesada en el tema y les empezó a hacer preguntas como:
¿Quién os la pone más dura un hombre o una mujer?, ¿Quién lo hace mejor un hombre o una mujer?, ¿Quién la come mejor,..
La cosa se calentó demasiado y en una escena en la que un matrimonio hacía un trío con otro hombre se decidió a dar el paso siguiente y me dijo:
Si se la chupas a nuestros invitados bien chupada me los follo ahora mismo.
Dicho y hecho les baje los pantalones y comencé a tocárselas por encima de los gayumbos, tomé sendas pollas con cada mano y comencé a mamárselas como si en ello me fuera la vida. Ellos supieron apreciarlo porque se les puso muy dura y parecía gustarles. Me sentía raro comiendo una polla pero no sé si fue la excitación o que de veras me gustaba pero no podía dejar de chupárselas. Tania me dio el alto y comenzó su espectáculo. Se quitó el vestido y sólo con el tanga se acercó a proseguir ella con la faena. Se la empezó a chupar a Villa, momento que aprovechó César para apartarle en tanga por detrás, comerle la almeja a placer y sobarla por todos los lados, al igual que hacía su amigo. La escena era muy excitante y me comencé a masturbar. La película que estábamos viendo era ya como un cuento de niños porque Tania se dio la vuelta para chupársela a César ahora, Villa no perdió comba y aprovechó para metérsela por detrás en el coño aprovechando la postura de perra viciosa que Tania conservaba. No se la consiguió meter entera porque esta postura no le agrada demasiado pero poco a poco le fue gustando más y más hasta que se la ensartó prácticamente toda. Villa la agarraba de las tetas en cada embestida y César la agarraba de la cabeza para asegurar que Tania siguiera con la mamada.
Mira José, que te parece lo que estás viendo. Fóllame cabrón, le decía a Villa mientras alternaba la follada con la mamada. Ahora fóllame tú César.
Invirtieron los papeles y César era ahora el que la follaba por el coño pero en la postura que a ella le gusta (ella encima). Yo no podía dejar de masturbarme, esto era infinitamente mejor de lo que había soñado, aproveche la postura para metérsela en la boca y así obligarla a comérmela como ella sabe. Villa entonces se dedicó a chupar todo lo que podía, a veces los huevos de su amigo, a veces el culo de éste, el coño de Tania o el culo también, cosa que pareció gustarle más porque es a lo que más tiempo dedicó. Yo ya lo veía venir, Tania parece que no, pero la intención de Villa era llenarla de rabo el culo. Cuando noto el glande de Villa en el culo trató de resistirse pero al final se dejó ir y después de varios minutos consiguió encularla. Nosotros en nuestra vida sexual lo habíamos hecho en contadas ocasiones ya que su culo es estrecho y mi polla es bastante gorda. Esto era maravilloso, tenía 3 pollas metidas en su cuerpo. En la mayoría de nuestras fantasías Tania decía que no quería nada más que chupar y follar por el chocho, pero en esta situación, creo que por el morbo, se atrevió a todo. Tania no quería que se corrieran pero era evidente que tarde o temprano iba a suceder y yo no me lo quería perder, por lo que se la saqué de la boca y me senté en una silla a observar el espectáculo y a masturbarme como el que está viendo una peli porno. Ambos la llenaron de crema como si de una napolitana se tratara, corriéndose en el coño y en el culo, respectivamente. Cuando se la sacaron, sus dos agujeros estaban encharcados de semen y comenzaron a caerla borbotones, siendo esto el detonante para correrme derramando mi leche en mi propio torso.
Ellos seguían con el miembro erecto y Tania con un calentón de campeonato, fue entonces cuando decidió realizar su fantasía y era que ambos hicieran un bocadillo conmigo. César sería el encargado de encularme mientras yo debía hacer lo mismo con Villa. Antes de esto y para que me entrara mejor el trabuco de César y me recuperara de la paja, me lubricó el ano y me follo con el doble consolador durante varios minutos, cosa que la hizo correrse de gusto. Cuando se la metí a Villa se veía que le habían follado el culo con anterioridad porque no me costó metérsela entera aunque mi polla como he dicho antes es bastante gruesa. Tenía el cuerpo también depilado y la verdad que me estaba gustando. César comenzó con la penetración. Parecía que me iba a romper el culo, poco a poco me la iba metiendo hasta que sus huevos toparon con mis nalgas. El mete y saca y el morbo de que estuviera viendo Tania hizo que disfrutara enormemente. Cuando nos íbamos a correr nos fuimos los tres hacia Tania y se lo echamos en la boca, cara, tetas, , la llenamos de lefa. Parecía una auténtica puta y no pude más que darle un gran beso y compartir el sabor de la leche con ella. Después de haber follado nos dimos una ducha reparadora, dejando a Tania que disfrutara de ellos por última vez en la ducha (quien sabe si volverá a realizar alguna experiencia de este tipo). Nuestros amigos se marcharon después de darle un soberbio morreo a Tania y con una sonrisa en la boca.
Fin. Saludos a todos/as los lectores/as de esta sección. Espero que este relato os haya excitado como mínimo la que a mí mientras lo he estado escribiendo y halláis disfrutado de él echando un buen polvo o con una paja soberana. Espero que alguien me haga algún comentario para saber si os ha gustado a la dirección de correo electrónico " jose12371@ozu.es ".
Autor: joseleitor . jose12371@ozu.es