El deseo de lo prohibido (1)

EL DESEO DE LO PROHIBIDO (1)

Nos conocemos hace más de 8 años, trabajamos en la misma empresa, ambos estamos casados y me inquietaba el sentirme atraída por él. A pesar que opté por huir jugábamos con las miradas, con sus preciosos ojos verdes que me volvían loca y me miraban con interés y curiosidad.

Las reuniones de fin de año eran las más esperadas, pues era el día en que podíamos estar más tiempo juntos, conversar y por supuesto la oportunidad de bailar era el momento en que podía estar más cerca de él. En cuanto se decidía a bailar me jalaba de la cintura y podía sentir su cuerpo junto al mío, poniéndome extremadamente nerviosa, pues la atracción y la química eran fuertísimas.

Lo que en esos momentos sentía no lo había experimentado antes y me gustaba la sensación de tener su cuerpo cerca al mío con sus manos tocándome, hasta que en una de las reuniones de fin de año la atracción y el deseo nos lleva a jugar y a buscarnos con más ganas. Encontró el momento apropiado y me sacó a bailar. Mirándome intensamente, sus piernas rozaban las mías, su deseo de poseerme conseguía que moviera mis pechos al son de su mirada llena de deseo, los nervios me hacían temblar pero el deseo que me provocaba me hacía arder de pasión. Mi vagina comenzaba a humedecerse con tan solo sentir su mirada y su cuerpo. Parecía que el tiempo se había detenido…… fue increíble.

La noche se terminaba y tocó la hora de partir. Salimos juntos, el se fue al tocador, me propuso ir con él y yo no accedí. Sin embargo, me quedé cerca al tocador donde había un salón de recepciones vacío. Cuando salió lo vió y sin pensarlo me jaló y entró. De inmediato me besó suavemente, lentamente, hasta besarnos con locura, pasión y deseo. Sus labios me quemaban, sus manos recorrían mi cuerpo. Poco a poco me levantaba el vestido, sus dedos recorrían mis piernas, mis glúteos, hasta que llegó a mi vagina.

El me dijo: tócame el pájaro. Yo ardía, así que no dudé y acaricié su pene por fuera del pantalón. Estaba tremendamente duro, la verdad los nervios y el miedo me dominaban, pero era súper excitante. El seguía acariciándome, sus manos bordeaban mis pechos e intentaba chupármelos. En ese momento lo único que deseaba era ser suya, que me haga su mujer, ansiaba el calor de su piel…. pero alguien tenia que tener algo de cordura, así que lo besé y salí corriendo.

Al día siguiente no podía olvidar la pasión desbordada que en ese momento nos dominó, las huellas de sus dedos y caricias que estaban impregnadas en mi piel, no podía dormir, sus labios y su olor permanecían en mí. El deseo me dominaba y lo único que quería era verlo y envolverme nuevamente entre sus brazos, mi cuerpo necesitaba de su piel, su cuerpo, su respiración, sus besos y caricias, el deseo prohibido.

En la oficina seguíamos jugando con las miradas e indirectas y por ahí un beso robado acompañado de caricias, sus manos nuevamente tocaban mis pechos y las mías recorrían su pene grande y duro. Después de algún tiempo de sentir esta pasión desbordante llegó el día en que me propuso EL ENCUENTRO.

Se imaginarán todas estas semanas de incertidumbre, deseo, dudas y miedos que me atormentaban, era una situación complicada, trabajando juntos y con el temor de que yo no fuera lo que el esperaba, pues soy una mujer sin mucha experiencia, proveniente de un hogar muy conservador.

Mi personalidad y forma de ser rechazan los vacilones, los agarres etc. Dedicada al estudio, al trabajo y a salir adelante con mi hijo fruto de la inexperiencia, de la inocencia…. enfrentando el abandono de mi actual esposo…..con quien solo he podido tener UN ORGASMO!!!! en todos los años que llevamos juntos. Pero esa es otra historia.

Llegó el día. Era a principios de Mayo, comenzando la tarde de un día de trabajo. Me citó en un discreto hotel. Por los nervios, un día antes no concilié el sueño, no sabía como vestirme, si tenía que depilarme el contorno de mi vagina, como llegaría al hotel…… La vergüenza me agobiaba, a tal extremo que estuve a punto de NO ASISTIR!!! Pero lo deseaba y lo único que quería era estar con él. Tenía que decidirme y dejarme llevar.

Al llegar me asombré de verlo bien dispuesto y ya en ropa interior. La verdad, no me lo esperaba. Sin embargo, el deseo de besarnos y las ganas que le provocaba devorarme a besos eran muy fuertes. El fuego era imparable y me consumía por lo peligroso y prohibido. Estaba totalmente excitada, mi vagina estaba sumamente humedecida y eso que recién empezábamos.

Mi respiración se aceleraba, mi cuerpo temblaba. Sentí una punzada entre mis piernas, el calor recorría todo mi cuerpo, era fuego viviente, era increíble como lograba que todo mi cuerpo se estremeciera. Poco a poco me desnudaba, sus labios recorrían mi cuello y hombros, sus manos recorrían mi culo y piernas, nuestros besos se tornaban más apasionados.

Su piel suave y bronceada me fascinaba. Al acariciarlo podía disfrutar de su cuerpo tonificado y cuidado. Es un hombre alto con porte, atractivo, con labios delgados, cabello suave claro y canoso.

Continuaba acariciándome, su pene estaba tremendamente erecto y duro, me excitaba deseoso de penetrarme y estar dentro de mí, me descubría por completo. Sus manos acariciaban mis pechos, mis pezones totalmente erectos, su lengua recorría suavemente mis pechos, lamía mis pezones, me chupaba y me excitaba aún más.

Me llevó al espejo para que me vea mientras me tomaba por detrás acariciándome mis senos, mi barriguita, mi entrepierna. El temor no me permitía abrir los ojos. Sin embargo él me alentó a que me mirara a través del espejo y eso me excitó aún más. Por primera vez veía detenidamente mi cuerpo completamente desnudo formado por el ejercicio, mis pechos medianos y firmes con los pezones ahora más grandes estimulados por sus perfectas chupadas y lamidas, mis glúteos grandes, lo que se diría un buen culo, en realidad es mi aspecto más distintivo. Mi cabello negro azabache y largo hace contraste con mi piel súper blanca, mis labios carnosos preparados para recorrer su cuerpo, lista para ser suya.

La pasión era más fuerte, no se detenía, que gran excitación…… la sensación era deliciosa, cada milímetro de mi piel estaba siendo acariciada por sus dedos ardientes. Sus caricias eran apasionadas, el deseo nos dominaba, no necesitábamos hablar, los ojos lo decían todo.

Comencé a estremecerme, el calor de su cuerpo me dominaba, hasta que me puso en la cama boca arriba, colocando su glande en la puerta de mi vagina. La punta de su pene me rozaba una y otra vez, deseaba que ya me penetrara. La pasión me había dominado y solo quería que me haga suya, hasta que en el momento menos pensado introduce su pene grande y duro en lo más profundo.

Los orgasmos se sucedían uno tras otro y me estaban llevando a la locura. Descubrir por primera vez que podía tener constantes orgasmos me producía una sensación nueva y extraña que me invadía de lujuria. Una y otra vez me penetraba, cada vez más fuerte, hasta que sentí su orgasmo y cómo me llenaba, su semen estaba totalmente dentro de mí, deseaba que me llenara por completo, no quería que su pene saliera de mi vagina.

Ver como se estremecía me excitaba, fue maravilloso y ardiente, una mezcla de pasión y ternura que nunca había experimentado. Las palabras que escribo no pueden expresar las nuevas sensaciones que él logró que mi cuerpo descubriera. Aparte de ser un hombre maravilloso, inteligente, justo, noble, excelente amigo……... es el amante perfecto, que me hizo sentir mujer, su mujer, fue ESPECTACULAR!!!!

Pero la historia de esta primera cita aún no termina. Antes de levantarnos me dio un beso en la mejilla y la verdad me derritió!!! Como puede ser tan apasionado, ardiente y a su vez tan tierno. ¿No es PERFECTO??? Bueno, decidimos comer unos sandwiches y tomar un vino para reponer fuerzas, que él había traído. Por cierto cuida hasta el último detalle y me enamora, me encanta !!!.

Nos relajamos un buen rato en el jacuzzi para luego regresar a la cama y ¡que creen!, hubo una mala interpretación de palabras. Entre caricias me dijo: QUE BUEN CULO QUE TIENES!!!. No sabía lo que se venía, solo le dije: ES TODO TUYO. Comenzó a acariciarme, me colocó boca abajo en el borde de la cama y se puso detrás de mí. Su pene nuevamente estaba grande y duro, mi vagina humedecida, yo estaba completamente excitada y comencé a sentir el calor de su pene cómo me penetraba.

La punta de su pene jugaba indistintamente con mi vagina y con mi ano y a su vez sus manos acariciaban mis pechos poniendo nuevamente mis pezones erectos. Finalmente la sacó de mi vagina e intentó penetrarme por el culo. Comencé a sentir dolor, pero el no se detenía, no sabía que era virgen por all텅 NO SE LO HABÍA DICHO. Poco a poco sentía su pene penetrarme, el dolor me invadía pero a la vez que me sentía violada, lo prohibido me excitaba. Me cogió de las dos manos por detrás y jalando logró penetrarme totalmente.

Sentía claramente como llegaba hasta el fondo de mi culo. Entraba y salía, no se detenía, estaba adentro totalmente y yo me contorsionaba de placer y de dolor. Experimentaba un placer desconocido, el orificio de mi culo estaba siendo violado y penetrado por primera vez.

Su pene se movía entre mis nalgas, rozándome con sus huevos, lo que me producía un gran placer. Su respiración agitada me enloquecía, él lo disfrutaba, me llenaba de fuego y no quería que pare, solo quería satisfacerlo. Notar como su pene entraba y salía me estremecía de placer, estaba en sus manos, me dejaba llevar por el instinto, el me dominaba y eso me gustaba.

Había perdido mi virginidad por detrás, había sido completamente suya y todo en forma natural, sin reparos, en la primera sesión.

Esto es solo el comienzo, lo que sigue es interesante, excitante y ardiente. A pesar de nuestra diferencia de edades 30….. y 50….. nos entendemos perfectamente, es el complemento HOMBRE-AMANTE PERFECTO!!!!