El Deseo

Mensaje que me envió una chica por internet

Este es mi primer relato y no lo he escrito yo sino una chica que me lo envió pero es lo mejor que hasta ahora me han dicho... El mensaje era así:

Diría que llevo bastante tiempo tentando, quizá tentandome, e incluso puede que tentandote.

Y es que para serte sincera, ganas de ti no faltan, sobran.

Llevo mucho, pero mucho tiempo planteándome cómo sería volver a sentirte dentro, o bueno,

quizá ya no solo se trate de ti. Más bien me planteo cómo sería volver a sentir un hombre,

fuese quién fuese. Y si te soy sincera, solo de pensarlo, estremezco.

Quisiera poder sentir como entras, tan suave, casi imperceptible por un momento. Y a la vez

tan duro, que sacies todas ganas que en mi encuentres. Y es que solo de pensar cómo podrías

, o podrían tocarme, mis ropas humedecen.

Que lástima, que verdadera lástima no tenerte aquí, ahora, cerca de mí, tan cerca que

pudiéramos ser solo uno.

Por favor,ven, te lo suplico, hazme tuya.

Quisiera sentir como tu boca muerde la mía y como tus dedos desean de mí.

De todo lo que es mio. Al igual que podría desear de ti, de todo lo que es tuyo.

Y es que quisiera temblar mientras te siento dentro, muy dentro. Tan adentro que me hagas

correrme como nunca.

¿Tan difícil es? Hacer que tus labios se pierdan entre mis piernas.

En realidad, sabes que lo deseas tanto como yo.

Mi lengua quiere encontrarte, lo desea. Desea acariciar suavemente la punta de tu pene.

Mis manos quieren encontrarte, lo ansían.

Ansían poder tenerte entre ellas.

Pero lástima, lástima que lo que sienta adentro sean solo mis dedos...

Húmedos y calientes, rozando mi clítoris, entrando suavemente.

Lástima, lástima que lo que sienta sean mis dedos pellizcando mis pezones, deslizando por mi

cuello, mordiéndome los labios. De las ganas, de las ganas que te tengo, de las ganas que

tengo de sentirlo dentro.

Lástima, lástima que mis gemidos, sean solitarios.

Lástima, que quien me folle, no seas tú.