El desayuno

Desayuno adobado con un especial sabor.

El Desayuno

La siguiente experiencia me demostró que todo en la vida depende del cristal con el que se le mire, no soy lesbiana, pero esta experiencia me enseño que entre mujeres el sexo es más satisfactorio y menos preocupante que con hombres.

Una tía lesbiana, es muy amiga de mi novio por cierto mas amiga de el que mía, ella nos invito a una finca a las afueras de la ciudad, para pasar un fin de semana diferente, no se si por ser lesbianas o por ser bellas, las tías estas me ponían la piel de gallina, y las veía de una forma diferente a como veía a las demás mujeres.

De pronto estábamos en esta finca, llegamos a media mañana, y nos desplazamos inmediatamente a la piscina, había dos cuartos, nuestro cuarto, y el de ellas, al salir a la piscina lo primero que note fue el cuerpo de nuestras acompañantes:

Araceli, la mas joven de todos, tendría 25 años, 1.60 metros de altura y 60 kilos de peso, un cuerpo menudo, pero muy bien formado con unos senos muy adecuados, era muy sensual, se veía que sus senos estaban muy levantados y claramente atentaban contra la gravedad, no tenia nada de nalgas, pero sus senos, sus senos, poseía además un hermoso rostro y noté por la forma como se horma la pantaleta de su bikini que no había depilado totalmente conejito, por lo menos para este fin de semana.

Adriana blanca la mayor de los cuatro, 29 años, blanca, muy blanca, casi transparente, alérgica al contacto directo con el sol, 1.57 metros de altura, 70 kilos de peso, robusta, redonda, y con las tetas mas grandes que he conocido en mi vida, son inmensas, que digo inmensas son gigantes, su talla de sostén es 40 D, son muy difíciles de conseguir, al igual que su amiga no se había depilado para este paseo, me molestan los vellos púbicos, es mas a mi novio lo obligo a depilarse esta delicada zona.

Inmediatamente llegue a la piscina note en su mirada que me desnudaba, pero esto no me incomodaba en lo mas mínimo, me sentía cómoda, segura, empezamos a tomar el sol y beber, en la tarde después del almuerzo y cuando el sol se ponía, empezamos a jugar y de pronto Adriana se quito su sostén, no lo podía creer, mi novio detrás mío se quito su bañador, y quedo desnudo en la piscina, me abrazó, besó; Araceli se quito su sostén y sin detenerse mas se quito la parte baja de este, mire a Adriana a ver que me decía y ella también estaba desnuda, no sabia que pensar, ni novio salio por mas cervezas:

Estas dos son lesbianas, a mi no me importa desnudarme, pero ¿tu? De pronto te comen la raja estas tías.

No sabia que hacer, por lo tanto salí de la piscina, disimulé ayudarlo con las cervezas y mire que actitud ellas tomaban y, por primera vez las vi besarse, se abstrajeron del mundo que las rodeaba, y se besaban allí, mi novio volvió con dos cervezas en la mano, se tomo la suya, yo solo pensaba que me parecían muy hermosas ellas demostrando su amor allí sin importarles un carajo el resto del mundo, cuando terminaron de besarse Araceli me miró mientras su amiga se sumergía en la piscina y me guiñó el ojo de una manera sexy, me quede estática, pensé en mi novio, me voltee inmediatamente a ver su reacción, pero el se había acostado rendido en una cama playera al borde de la piscina y descansaba completamente, se había quedado rendido, estaba cansado, tomado y comido, cayo como piedra, me parecía hasta oírlo roncar, esto creo que le dio fuerzas a Araceli para guiñarme el ojo de esta manera tan descarada, me dio miedo, me aleje tome un sorbo de cerveza y fui por la comida, un plato de con carnes blancas, ellas salieron de la piscina, Araceli se dirigió a mi y Adriana fue a buscar comida para las dos.

Hola

Hola

Me siento mal

¿Por qué?

Estoy con mi amiga pero, tengo deseos de besar a otra tía en este preciso momento

Eso esta muy mal, no deberías desear eso. (exclame asustada)

¿Y tú?

¿Yo que?

No tienes deseos reprimidos

Si pero me dan miedo y pienso que reprimidos se deben quedar.

Eso esta muy, mal tía, por que el día menos pensado, esos deseos se reprimen tanto, que no tienes donde guárdalos, por tanto explotan y hacéis cosas peores que si los dejáis libres, míranos a nosotros, creéis que si nosotras estuviéramos reprimidas, seriamos tan felices.

Por supuesto que no

Yo se mucho de esto he visto muchas tías como tu, se creen muy modernas, pero que va cuando llega la hora de dejar su yo interno salir, se reprimen igual que todo mundo.

Sabias que las hembras son más sexuales que los machos, pero esto no lo reprime la educación sin la cual fuimos creadas, por eso es más fácil que una hembra tenga experiencias, fantasías y deseos, sobre estar con mujeres que los machos.

No lo sabia, es muy interesante

Deberías de pensar en eso, tal vez la vida se te arregle

Llego su amiga, la conversación giro en otro sentido, Adriana es más intelectual, hablamos de varios temas, mi novio dormía como un lirón, el viaje, la comida, bebida y agitada noche anterior lo habían dominado, estaba profundo, ellas me ofrecieron mas licor, había llegado a mi limite, no me quería emborrachar, perder mi lucidez, ni mi cordura, las palabras de Araceli rondaban por mi cabeza, seria cierto, la verdad es que mi fantasía sexual reprimida siempre había sido estar con otra mujer, no se si será por educación, muchas pelis porno (que me excitan al máximo también), tenerlas a ellas cerca, no se, tome un descanso fui al baño a orinar, a organizar mis ideas, había pasado un buen rato y estábamos hablando como si nada, el tema sexual no fue tocado, no sé por que, ahora me surgió la idea de irnos al sauna, ya me había decidido desnudarme pero no sabia como, debía buscar una excusa, quería ver su reacción al verme sin ropa, siendo humilde sin lugar a dudas el mío era el mejor cuerpo de la finca, con ganas de sudar para sacar de mi cuerpo los restos de licor recordé el sauna, Adriana lo encendió entramos al sauna, yo fui la ultima y deje mi bañador en la entrada de este, sus caras de admiración lo decían todo, me sentí deseada, me sentí linda, me sentí sensual, me sentí sexual, mi cabeza se empezó a dañar con esta situación, nunca en mi vida había sentido tal atmósfera de sexo, sin lugar a dudas mi vagina reacciono de acuerdo a la situación y se humedeció toda, se saborearon al verme, se besaron y su lenguaje corporal decía que me querían entre sus labios inmediatamente.

Ahora retomamos la conversación que teníamos antes de ingresar al turco, mi primera impresión, de ser deseada se borro, no se por que pero me pareció que rápidamente ellas ignoraron el hecho de yo estar desnuda, esto me molesto y me dirigí al tema sexual, quería saber que opinaban de mi, la opinión de ellas mucho importaba para mi en este momento.

¿Que opino de ti?, vamos tía vos sabéis que eres hermosa, con solo de hecho de verte aquí desnuda nos excitamos y me vi en la imperiosa necesidad de besar a Araceli, para aplacar los fuegos internos, el calor de este sitio y tu cuerpo pondrían cachonda a la mas virgen de todas. Te has desnudado para ¿provocarnos?

Yo, no creéis eso.

Me pareció, muy raro que te quitaras el bañador, así no mas

No se ustedes me inspiraron confianza, seguridad

Nos has puesto cachondas tía, una mujer como tú no se ven todos los días, mi concha esta mojada, mi raja pide a gritos ser chupada y como veis, estoy empezando a tocarme el clítoris.

Todo lo racional acabo allí, Adriana comenzó a masturbase, se tocaba su clítoris con una suavidad y dulzura que no me esperaba, Araceli se dirigió inmediatamente a ella, y comenzó a besarle el clítoris, lamía y chupaba su botón de placer, al primer gemido de ella, esta se detuvo, se dirigió a mi y me beso en la boca, me beso repetidamente en la boca, sentí mis pezones erectos, era Adriana chapándolos, me tomaron de la mano y me sacaron del sauna, nos duchamos, ellas enjabonaron toda mi humanidad, con sus manos untadas de jabón, me tocaron toda, ahora tenía un deseo de ser poseída por ellas, inmediatamente, quería que me besaran, chuparan, lamieran y tocaran toda ya, mi raja no podía estar mas grande, mojada, abierta y mi cachondez era notoria, y cuando nos dirigíamos a la piscina, nos desviamos a la cocina, no se creo que la pasión nos llevo a este mágico lugar.

En la cocina ya refrescadas, Adriana tomo el aceite lo derramo sobre su cuerpo, empezó por su hombro derecho y lentamente lo esparció por sus senos, luego de tener todo su pecho bañado en aceite, procedió a untarlo en su culo, Araceli me besaba el cuello mientras todo esto ocurría, Adriana se termino de ungir el aceite por sus partes intimas y se dirigió a nosotras, Araceli solo me besaba los pechos y el cuello, ella nos tumbo calmadamente y quedo encima de mi, ahora ella me besaba los senos, la concha de Araceli quedo en mi cara, era la primera vez que le haría oral a una mujer, pero mis hormonas me dominaban, me imagine lo que ella, quería y practiqué lo que a mí me gustaba, me lamieran desde el nacimiento de la raja hasta el clítoris y lentamente le dieran círculos al botón de placer, eso hice y el gemido que Araceli emitió me dijo que todo estaba bien, sentí sus piernas temblar y su conejo me bañaba en sus jugos, las lamidas eran lentas y me detengo con cuidado y amor en su clítoris para hacerla mía, mientras tanto Adriana olio mis pechos, lentamente me dejo sentir su aliento en mis tetas, los oía solo los olía y suspiraba por tenerlos con sus senos me tocaba la vagina y sentía un cosquilleo por todo mi cuerpo, la parte superior por los jugos y el placer de Araceli, los pechos por el aliento de Adriana y mi parte baja por las tetas de Adriana, por fin Adriana posó su lengua en mi, me besó el coño, pero fue un beso suave y corto no era lo que esperaba yo en este momento de pasión quería más, pero sentirla allí ya tocándome me excito, Araceli, gemía ya muy duro y se derrumbo en mis hombros al alcanzar su orgasmo, fue intenso, fue impresionante sentir como su abdomen se hinchaba, sus muslos temblaban, su panocha se mojaba, su cuca se abría y sus senos se erectaban, su respiración era cortada y sus gemidos me decían que ella estaba en el cielo y yo la había llevado allí, cayo sobre mi pesadamente.

Adriana me beso la entrepierna, me beso la unión de la cadera con mis muslos, me puso a temblar, al caer Araceli sobre mi, ella me beso de nuevo otro beso corto, esta vez mas fuerte y mojado, pero corto, con su dedo índice de la mano derecha procedió a verificar si yo estaba mojada, para su alegría así era, no podía estar yo mas mojada, junto a estas dos tía haciendo el amor y sabiendo que había llevado a una de ellas expertas en esto al clímax, un clímax que me había empapado toda la cara, el dedo se introducía lenta y suavemente en mi raja, estaba lubricándome para lo que venia, no se que mas hacer, estaba desesperaba quería acción y Adriana iba muy lenta, mis manos le guiarían el camino me empecé a tocar el clítoris y ella entendió lo que yo le quería decir, para mi sorpresa Araceli también.

Ya dame placer ya, te deseo hazlo ya

Te besare lentamente tía, goza esto, lento, ahora estas en nuestras manos tía, tu tranquila, disfruta de esto, no te desesperes.

Estoy muy húmeda quiero sentiros ya

Mis suplicas fueron escuchadas por Araceli quien llego a la escena con un salchichón cervecero, de esos largos y gruesos, como de 15 centímetros de diámetro, y 15 de largo, Araceli lamió lo que pudo e imaginaos lo que paso, Adriana me beso (en la boca), para que el miedo desapareciera y coño a dentro se fue el salchichón, solo sentí placer, mis deseos se estaban calmando y mi placer se dirigía en la misma ruta que el de Araceli, rumbo a lo mas alto del cielo, mis piernas ahora temblaban y mi respiración se entrecortaba, mis pezones no podían estar mas duros, la vagina de Adriana se poso en mi boca, sentir ese enorme pedazo de carne dentro de mi me excitaba, me sentía realizada, mi placer no se detenía, estaba rompiendo todas las barreras del placer, estaba desaforada y las emociones iba y venían una tras otra, mi cuerpo no pudo y mas y estallo, un enorme baño de mis jugos salio por mi concha y la de Adriana, bañada dos veces en la cara por dos mujeres termino con la acción de la noche y nos despedimos.

La mañana siguiente cual seria mi sorpresa al ver que el plato del desayuno que estas tías nos habían preparado eran unos huevos con rodajas de salchichón, si el mismo salchichón de la noche anterior y sazonado por mis entrañas, mi novio me dijo que el salchichón tenia un sabor raro pero rico, se comió toda su porción, es más se comió mi porción también por que yo no fui capaz, las lesbianas se comieron el suyo con gusto.